Una alba paloma posó en mi ventana,
con una romántica epístola en su pico;
a ese dulce mensaje, que traía consigo,
lo colocó sobre mi palma
y de nuevo echó a volar.
Esa misteriosa ave - que sólo una vez aparece
y que con su visita une corazones -
es el popular Cupido, quien viste como paloma
y se hace llamar: Mensajera del amor.
Si un día tú llegas a verla
circundar la ventana de tu casa
alégrate, pues tu hora ha llegado,
y la dicha ha de llamar a tu puerta.