LA VENDEDORA DE LENCERÍA
Hola amigos, hoy les escribo una nueva historia de cuando una amiga me pide que atienda su negocio de lencería por una semana que ella salía de vacaciones, al hacerlo disfruto de una noche muy caliente de sexo con un cliente.
Ya hacía cinco días que reemplazaba a mi amiga atendiendo su negocio de lencería, ya era viernes por la noche y estaba a punto de cerrar, solo atendía una última clienta, cuando entro un hombre al negocio, saludó muy amablemente y comenzó a mirar algunas prendas, era joven como de mi edad, alto y atlético y se lo veía bastante atractivo, continué atendiendo a la señora y al terminar con ella, me dirigí al hombre
buenas noches señor, ¿puedo ayudarlo?, pregunté
Si, señorita, estoy buscando un regalo para mi novia para una noche especial
Entiendo señor, pero ¿Qué busca, algo sexy, provocativo, excitante?
La verdad, no se muy bien, tal vez un poco de todo eso, disculpe pero no tengo experiencia en comprar este tipo de ropa
Esta bien señor, lo entiendo, entonces me dijo que es para una noche especial.
Si señorita, para sorprender a mi novia y ella a mí, imagino que alguien tan hermosa como usted seguro a vivido noches así, con todo respeto, tal vez usted podría pensar que se pondría una noche así.
Primero gracias por lo de hermosa y segundo que le parece si le traigo tres opciones diferentes, creo que puedo saber lo que necesita.
Fui a la parte de atrás de la tienda y regresé con tres conjuntos diferentes.
Mire acá tiene tres opciones diferentes, entre las cuales creo encontrara la mas adecuada, pero también depende de cómo es su novia.
Bueno en verdad señorita, ella es de figura similar a la suya, aunque sin ofender, usted tiene los senos mas grandes y bonitos
Solo pude reír y decir gracias para luego mostrarle los conjuntos, pero parecía que poco a poco la conversación trataba más de mí que de su novia. Le mostré las opciones, una era un conjunto muy fino de encaje, de sostén y tanga no demasiado pequeña, el otro era muy sexy de corsé con portaligas y una minúscula tanguita y el último una tanguita y un camisón transparente sin sostén.
La verdad señorita los tres se ven muy hermosos y sugerentes
Si, los tres son muy bonitos y cada uno tiene una particularidad distinta, uno más formal, otro más sexy y otro más insinuante.
Me cuesta decidirme, no logro imaginármelos puestos en mi novia, por casualidad no hay una modelo que los pueda modelar para mí
No señor lo siento, ya es tarde casi hora de cerrar y ahora no tengo ninguna modelo.
Le pido un favor señorita, no me llame señor, mi nombre es Gerardo
Esta bien, entonces yo soy Ángela
Ah, un bello nombre, que concuerda con su belleza, entonces que ya estamos un poco mas en confianza, me atrevo a pedirle algo.
Dígame Gerardo
Como le dije mi novia es de formas parecida a usted, ¿no se animaría a modelar para mi los conjuntos?, estoy seguro que ya lo ha hecho antes
Bueno, debo confesarle que fui modelo un tiempo, pero no sé, podría ser al menos el que más le interese comprar.
Mire le soy sincero, yo voy a llevar los tres pero solo si usted me convence de ello con su modelaje, e incluso agregaría una buena propina por su atención.
En verdad la oferta era tentadora, los tres conjuntos eran muy caros, sería una buena comisión y además la propina y después de todo no era algo que no hubiera hecho antes, y debo confesar que la idea de modelar casi desnuda ante este hombre me excitaba un poco.
Déjeme cerrar el local, acomódese en ese sillón de ahí atrás frente a los vestidores y yo ya regresó y le modelo.
Volví con los tres conjuntos y entré al probador, al desnudarme para ponerme el primer conjunto note la humedad de mi conchita, toda la situación me había excitado y ya sabía que esto no terminaría solo acá, y decidí disfrutarlo al máximo, me puse el primer conjunto de encaje y corrí la cortina del probador, al verme salir, Gerardo abrió sus ojos admirado.
Es aún mucho más bella de lo que suponía, me dijo
Yo me paseaba delante de él exhibiendo el conjunto de encaje y su mirada no dejaba e estar fija en mi cuerpo.
Lo hice durante unos cuantos minutos y el solo me elogiaba y no despegaba su mirada de mí
¿te gustaría ver ahora el otro modelo?
Si, me encantaría
Volví al probador y ahora me puse el conjunto de corsé y portaligas, muy sexy y provocativo, al salir y él verme soltó un pequeño grito de admiración y al empezar a modelar junto a él noté como su excitación comenzaba a crecer bajo su pantalón, esto hizo que le modelara aún mas provocativamente
Le enseñaba mi cuerpo voluptuoso, incitándolo y excitándolo, pasando muy cerca de él dejando que apreciara mi cuerpo y el conjunto, él solo me decía lo hermosa que era y cuanto le gustaba verme así, ya notaba su terrible erección y yo tenía mi sexo empapado. Decidí continuar con el espectáculo e ir por el último conjunto.
Al entrar al probador, con cuidado lo espié y pude ver como no resistía y se masajeaba su pene duro por sobre su pantalón, se lo sobaba fuerte y miraba esperando por mí, me cambie al conjunto de camisón y tanga, que dejaba ver mis enormes pechos desnudos y salí, al verme sus ojos se maravillaron y su verga casi revienta el pantalón.
Me acerque a él ahora muy sensualmente, excitándolo, casi rozando su cuerpo, él ya sin pudor, se sobaba su verga por sobre su pantalón y mi conchita se empapaba aún más, me puse sobre él rozando su cuerpo con mis pezones duros que atravesaban la fina tela, sus manos se posaron sobre mis nalgas apretándolas fuerte, moví mis caderas refregando mi sexo sobre el suyo, deslizó sus manos por dentro de mi camisón y las fue subiendo, tomándolo y haciéndolo deslizar por sobre mi cabeza, mis enormes pechos desnudos quedaron frente a su cara, moví mi cuerpo agitándolos, golpeando su cara con ellos, él se abalanzó sobre ellos atrapándolos con sus labios y lengua.
Mientras se devoraba mis pechos, yo no dejaba de refregar mi conchita húmeda sobre su pantalón, notando como su verga ya no soportaba el encierro, me desmonté y arrodille frente a él, quité su cinturón y bajé su cremallera, tomé su pantalón por los lados y los deslicé por sus piernas hasta quitárselos, su enorme verga dura marcaba un tremendo bulto bajo su slip que apenas la contenía, comencé a masajeársela y a recórrela con mi boca por todo su largo, él solo gemía y disfrutaba, tomé su slip y lo bajé, su verga bien dura saltó contra mi cara golpeando fuerte mi mejilla, quite su slip y con su verga en mi mano, se la empecé a pajear despacio al tiempo que mi lengua recorría sus bolas, luego comencé a subir con mi lengua hasta llegar a su cabeza roja e hinchada y recorrerla en círculos con la punta de mi lengua, alternando con pequeñas chupadas de mis labios.
Fui haciendo mi mamada cada vez mas intensa, un poco mas profunda con cada chupada, la notaba cada vez mas dura en mi boca, se la mamé fuerte hasta meterla toda en mi boca, de un gran bocado alojé toda su polla hasta mi garganta, la deje allí un momento y luego la saqué por completo para volver a comérmela completa, él dio un gran gemido de placer y solo tomó mi cabeza como gesto de que siguiera haciéndolo, lo hice por un buen rato, pero lo noté por acabar y no lo quería aún, así que me incorporé un poco y ahora tomando su verga la puse entre mis grandes tetas, la apreté con ellas y comencé a pajearlo, escupí su verga para dejarla deslizarse mejor entre mis suaves pechos, él gozaba y movía un poco sus caderas, cogiendo mis tetas, al salir de entre ellas su enorme verga alcanzaba mi boca y yo la chupaba o lamía, otro tiempo más y ya casi acababa, pero no iba a dejarlo.
Me incorporé y me paré frente a él
es tu turno de comerme, le dije
si, mi amor, voy a devorarte, contestó
Tomo mi tanguita y la quitó deslizándola por mis piernas, pude ver mi pubis depiladito y eso le encantó, se lanzó sobre él, subió una de mis piernas sobre el borde del sillón y eso le dio completo acceso a mi sexo mojado, hundió su lengua penetrándome profundo, haciéndome gozar, empezó a alternar sus lamidas con chupadas sobre mi clítoris y la penetración con sus dedos. Necesitaba ser cogida ya, y él lo notó
móntate en mi verga ahora, me ordenó
Me puse sobre él y fui bajando, al llegar sobre su verga moví mis caderas, dejando que mi conchita mojara su cabeza con mis jugos, lo abracé y hundí mis pechos sobre su cara al mismo tiempo que me dejaba caer, clavándome en su rica verga, que se deslizo sin esfuerzo por mi sexo empapado y comencé a cabalgarlo, fuerte y profundo, sacaba toda su verga y me la enterraba toda hasta que mis nalgas golpearan sus huevos, él se devoraba mis pechos y gozaba con mi cogida, fue intensa y rápida, ambos estábamos muy excitados y rápidamente alcanzamos el orgasmo, yo comencé a acabar montada en su verga y al clavármela toda, él inundó mi conchita con su leche caliente, era abundante y caliente, sentía sus chorros golpear mi interior y mi rajita convulsionada, exprimía su verga vaciándola toda.
Nos quedamos así un momento, quietos con nuestros sexos unidos, convulsionados pero no satisfechos y a pesar de la tremenda acabada, yo deseaba más y su verga aún no perdía del todo su dureza, me desmonté de su verga y comencé a chupársela, saboreando los restos de su semen y mis jugos, esto hizo que casi de inmediato su verga recuperara su firmeza y entonces, se dio vuelta y me puso en cuatro contra el sillón, me tomó por detrás y tomándome por mis caderas, sentí como su polla se apoyaba en la entrada de mi raja y de un empujón me la clavaba entera, hasta el fondo y comenzaba a cogerme fuerte e intensamente, lo hizo como por diez minutos y eso me llevó a un fuerte orgasmo, inundando su verga con mis jugos, dejándola toda mojada, noté como la sacaba de mi conchita y la apoyaba en la entrada de mi culito, mojándolo con mis propios jugos y empujaba un poco, me afirmé al sillón y la presión de su verga hizo ceder mi culito, que se abrió dejando entrar su cabeza, viendo que no me resistía a la intromisión en mi culito, él empujó un poco más, siempre despacio y con cuidado pero sin detenerse
me encanta tu culito, me dijo, te lo voy a coger todo
es todo tuyo papito, quiero sentir toda tu verga adentro
y escuchando esto ya no se detuvo hasta que sus bolas golpearon contra mis nalgas, grité mezcla de dolor y placer, pero enseguida era todo placer, su enorme verga llenaba mi apretado culito que la recibía casi devorándola y ambos gozábamos, sus movimientos eran intensos, él venía muy excitado y no resistió mucho coger mi culito, lo hizo acabar de una manera abundante, su verga se convulsionaba y llenaba de leche mi agujerito posterior, yo lo recibía con gusto y abría y cerraba mi culito, succionando su polla caliente y dura, hasta que me dio hasta la última gota.
Parecía que todo iba a terminar, pero la cogida de mi culo me dejo muy caliente y sin acabar, por lo que no lo iba a dejar así, no le di mucho tiempo y él se recostó en el piso algo extenuado, pero comencé a recorrer su cuerpo con besos y rozándolo con mis tetas y pezones duros, pasando sobre su verga, excitándola, tardó un poco pero el tratamiento dio efecto y su polla comenzó a endurecerse, entonces la llevé a mi boca y allí la hice recuperar todo su esplendor, me monté sobre él de frente y me clavé su verga por mi conchita, lo cabalgué fuerte y duro, subiendo y bajando por todo lo largo de esa polla caliente, mis tetas saltaban con cada clavada, yo gozaba y gemía fuerte y él se esforzaba por satisfacerme, casi acababa pero decidí cambiar un poco y entonces me di vuelta y lo monté de espaldas, y esta vez me monté en su verga por mi culito, él podía ver como su caliente polla desaparecía dentro de mi agujerito, que se la devoraba por completo y luego salía y volvía a entrar hasta el fondo, muy excitada lo cogí así hasta alcanzar un orgasmo tremendo, acabé por mi culito muy fuerte, pero todo mi cuerpo se convulsionó de nuevo y me llegaba otro orgasmo con la salvaje cabalgata que le daba, mi cuerpo explotó y como me pasa a veces en estas situaciones, mi concha acabó muy fuerte y lance un tremendo chorro de jugos y luego otro, estaba acabando y eyaculando, me incorporé un poco y dejé que otro chorro bañara su verga y luego me acomodé sobre su cara
si, acaba en mi cara gritó, dame tus jugos de hembra caliente
No me hice esperar y dos abundantes chorros mas se estrellaron en su cara y boca y me senté sobre su cara, para terminar de acabar por completo sobre él, que con se lengua limpio todo rastro de mis calientes jugos, pero ahora era él el que no había acabado, me recosté en el piso boca arriba, extenuado por el intenso orgasmo, él se subió sobre mí y comenzó a coger mis tetas, lo hacía rápido y fuerte, solo duró unos pocos minutos para que su verga comenzara a escupir abundantes chorros de leche que bañaron mi cara y mis tetas y luego enterró su verga en mi boca para terminar de descargar allí todo lo que le quedaba, para finalmente caer rendido a mi lado, sobre el piso.
Lo disfruté mucho amor, mi hiciste gozar mucho, le dije
Yo también gocé y disfruté como nunca amor, jamás había tenido una cogida así
Vamos, seguro con tu novia también te echas unos buenos polvos como este
En verdad tengo algo que decirte, pero que te parece si primero nos arreglamos un poco
Es verdad los dos estábamos hechos un desastre, llenos de los jugos del otro, fuimos a ducharnos, lo hicimos por separado para no tentarnos de nuevo y luego al volver, me dijo
tengo que confesarte algo, en verdad no tengo novia
y entonces porque esa mentira, le dije
Es que yo pasó todos los días por aquí y al verte el otro día no pude sacarte de mi cabeza y no sabía como entrar aquí y hablarte, así que solo se me ocurrió esa excusa, nunca pensé que llegáramos tan lejos pero en verdad no me arrepiento amor, espero que no estés enojada
No estoy enojada, me hubiera gustado que no mintieras, pero yo también la pasé muy bien, así que esta todo olvidado, lo único que lamento que seguro ahora no me harás la compra
Al contrario amor, me llevo todo, así cuando vayas a mi casa a verme me los puedas modelar de nuevo
Le dediqué una amplia sonrisa, él me dejó el dinero de la compra , una buena propina y una tarjeta con su teléfono y dirección, aún no lo llamo de nuevo pero al recordar los intensos momentos, estoy segura que pronto en su casa sonará el teléfono.
PD : dedicado a Gerardo, mi amigo y compañero de aventuras y fantasías, que me llenan de placer y alegría.
Continuara