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Alicia 3 por fin me follo a su hija

en Amor filial

Por fin llego el momento después de meses de mucho trabajo que podía tomarme unas semana de vacaciones y pasarla con Alicia en su casa, con Vero su hija y Juan su yerno, a los que hasta el momento solo los conocí brevemente por un encuentro fortuito, me dieron muy buena impresión y después de lo que me conto Alicia sobre las situaciones que habían vivido ambos con Alicia, ardía en deseos de conocerlos, así que prepare mi maleta dispuesto a relajarme y a pasarlo bien.

La bienvenida, fue muy calurosa, Alicia contenta por reunirse con migo, me presento a Juan que me dio un fuerte abrazo y a Vero que me lleno de besos y me dio un abrazo muy intenso, por fin podía sentir el calor de ese cuerpo maravilloso y el contacto de esos pechos enormes y duros, que desafiaban la ley de la gravedad, no pude evitar mi primera erección, que debió ser más notable de lo que creía sin duda, pues mantuvimos el abrazo unos instantes más de lo adecuado e incluso me pareció notar un ligero movimiento pélvico por su parte, creo que Alicia y Juan también se dieron cuenta de lo ocurrido, pero sin comentar nada Alicia nos puso las pilas a todos.

-          Venga muchachos y muchacha a la ducha que empezamos con la cena!

En ese mismo instante Alicia recibió una llamada a su móvil, tras unos minutos de conversación, nos comunicaba que se trataba de Amalia, su mejor amiga nos resumió la conversación diciendo que había tenido problemas con su marido y si podía venir unos días con nosotros, hasta que pasara el disgusto, Como os decía son como hermanas y tienen junto con Vero un trato de mucha complicidad, en una ocasión anterior Alicia me había comentado que Amalia era bisexual y es tan boba e inocente como nosotras vaya trío!  Dijo riendo cuando me lo conto.

-          Aunque estaremos apretados, puesto que sólo hay dos habitaciones, las camas son anchas y para que no nos estorbe en nuestra intimidad, propongo que duerma una noche con cada pareja os parece?

Todos aplaudimos la “sabia” idea de Alicia y nos pusimos a la idea de los preparativos para tenerlo todo dispuesto para cuando llegara no tardó mucho ya que vivía muy cerca. Amalia resulto ser una chica preciosa, muy esbelta delgadísima, pero sin embargo con unos pechos enormes, muy parecidos a los de Vero, el cabello rubio a lo chico con un flequillo que le caía sobre los ojos y rapado corto por la nuca, enseguida disfrutamos de su hermoso cuerpo y de sus tetas ya que vestía un vestido ceñido con un escote generoso en V hasta el ombligo que apenas podía cubrir esos pechos voluminosos y cortísimo, apenas cubriendo su increíble culito, obsequiándonos con unas piernas larguísimas y bien contoneadas.

Alicia fue la primera en darle un intenso abrazo, se besaron en los labios con lagrimas emocionadas de la alegría de estar juntas de nuevo y poder darle acogida en su casa en los momentos difíciles, a continuación Vero aún envuelta en su toalla de baño después de la ducha, se abrazaron con la fuerza del cariño que une a las tres como hermanas y mientras eso ocurría, Juan y yo no perdíamos de vista esas tetas enormes fundidas en un abrazo ninguno de los dos pudimos evitar una erección yo apenas la cubría  con mi albornoz medio abierto y Juan aun peor con la toalla era imposible cubrir su enorme polla  en semejante estado, aun así Amalia le abrazo con muchísima fuerza y por supuesto su polla se restregó sin complejos por la fina tela de su vestido a la altura de el sexo de ella, haciéndole patente su estado, él no perdía de vista los pechos de Amalia que se ofrecían maravillosos a sus ojos, mientras aprovechaba el beso en los labios para humedecérselos con su lengua y sobar al tiempo sus tetas como en un descuido, como era de esperar, su polla salió de la toalla, entrando en contacto directo con el mini vestido, ya bastante subido hacia arriba, con lo cual la polla ya se rozaba intensa pero discretamente con su tanga de hilo. Alicia y Vero reían contentas y divertidas y vero comento.

-          Jaja mi chico es incorregible ya lo veis

Nos reímos todos con el comentario, a continuación era mi turno, me dio un abrazo que resulto engorroso debido a mi erección   me disponía a darle dos discretos besos en la mejilla ella me dio también un intenso beso en la boca provocándome una fuerte descarga eléctrica, que hizo que mi polla se disparada y también quise abusar de la situación disfrutando del roce con sus pechos que aproveche para tocárselos con disimulo, mientras mi verga también se acoplaba sobre su tanguita con toda la discreción de que fui capaz.

Alicia volvió a organizarnos, de nuevo.

-          Amalia date una ducha así te relajas en la cena nos cuentas lo que ha pasado y luego nos divertimos y olvidamos que el mundo existe, mientras nosotros lo preparamos todo.

Mientras Amalia se duchaba Vero y yo nos dedicamos a organizar la mesa, por su lado Alicia y Juan  en la cocina preparaban la comida, nosotros conversábamos animadamente, cuando se inclinaba a poner los platos y los cubiertos, con su toalla de baño puesta no dejaba de gozar con su figura y en especial el espectáculo que me ofrecía de sus maravillosas tetas, aunque en más de una ocasión no pude evitar ser pillado infraganti, pero la gozada de vislumbrar incluso sus grandes pozones erectos, no tenia precio, durante la charla me hacía preguntas sobre mi relación con su mamá incluso algunas picantes con su sonrisa encantadora, que tanto se parecía a la de su madre, por mi parte también le confesé que sabía que habían ocurrido ciertas cosas entre Juan y mi pareja Alicia, pero que consideraba normal que los hombres ante las mujeres hermosas, perdamos  el juicio.

-          Como me está ocurriendo a mi contigo jajaja

Vero rio alegre la ocurrencia un poco ruborizada y vino a darme un abrazo y un beso en toda la boca.

-          Eres un encanto cielo, me encanta que seas tan abierto y comprensivo pocas personas son tan maduras como tu.

Intensifico su abrazo, mientras me miraba a los ojos con su sonrisa amorosa, al hacerlo se dio cuenta de mi intención, no le cupo duda, mi polla que aun estaba a mil, se apretó duro a la altura de su coñito, mientras ella sin querer dejaba caer una porción de su toalla, lo que hizo que su pecho derecho quedara expuesto, ella se dio perfecta cuenta de que no perdía detalle del mismo.

-          Me da mucha ternura tu bondad, y me hace muy feliz tenerte cerca, papá, deja que te llame así, me emocionara mucho que me lo permitas.

Al decir eso, me volvió a besar, en los labios dándome un imperceptible pico con su lengua mientras no quise perder la oportunidad del momento para magrear discretamente su dura nalga.

-          Me encanta que lo hagas, es muy gratificante para mí, mi amor,  pero quizá es mejor que terminemos con la mesa o tu madre nos echara bronca jajaja

-          Si papá, cariño mejor es que sigamos, ufff

 Me dijo guiñándome traviesa un ojo, entretanto mientras realizábamos nuestras tareas, mirábamos de vez en cuando a la cocina que desde nuestra posición podíamos ver sin dificultad, mientras Alicia y Juan preparaban la cena, vimos que Juan no perdía ocasión una y otra vez en rozarse por el culito de Alicia mientras cacharreaba por la cocina, en otros momentos el roce se producía por delante, mientras se movían, con todo ello la pobre Alicia tenia verdaderos problemas para mantener su toalla en su sitio, mientras que Juan no tenía inconveniente en mostrar “distraídamente” su enorme rabo a través de la apertura de la toalla, pude ver su buen tamaño entre las risas y comentarios alegres de ambos, en otro momento, aprovechando que Alicia se agacho para comprobar el horno, Juan la cogió de la nuca sin dejarla levantar, apoyando una mano en su hombro acercándole su fantástica polla de 20 por 4 a la boquita de la pobre Alicia, que ante la sorpresa, instintivamente abrí los labios sorprendida lo cual aprovecho Juan para metérsela con fuerza en la boca mientras bromeando le dijo.

-          Comprueba si esta al dente jajaja

Alicia cuando pudo por fin liberarse de ese enorme instrumento que la llenaba hasta la garganta, le pudo responder con su mirada bondadosa y su sonrisa permanente.

-          Juan por favor! Claro que esta al dente y eso sin mordértela, que bobo eres cariño! Jajaja.

Juan seguía sin dejarla levantar, tiro levemente de la toalla consiguiendo que le callera al suelo, mientras su instrumento paseaba entre sus labios mientras ella hablaba, ya sin toalla Alicia mi pareja, se encontró totalmente expuesta a la voracidad de su yerno, mientras Vero y yo lo veíamos todo con todo detalle embelesados Vero con la misma sonrisa angelical que su madre, no perdía detalle de la escena me miro a los ojos con dulzura diciendo.

-          Son un amor verdad papá?  Resulta muy bello verlos así con todo ese cariño, incluso te reconozco cariño que me siento excitada al verlos, a ti no te pasa mi amor?

Que vero utilizara esas palabras con esa dulzura, me excito de forma salvaje, mi polla estaba a mil con la escena y ya no dude más mi plan estaba trazado. Aprovechando la ocasión la abrace por la espalda, encajando mi polla durísima sobre su trasero, había dejado abierto mi albornoz y solo nos separaba la delgada toalla de baño, en esta posición, la rodee amoroso, introduciendo mi mano, por el corte de la toalla, acariciando su duro vientre, empujándola con suavidad teniendo que apoyarse sobre la mesa, exponiendo su maravilloso culo a mis impulsos, intentando controlarme le dije.

-          Es cierto Vero mi amor, es muy tierno, ver el cariño y la ternura que se demuestran el uno al otro, no sabes cómo me gustaría conseguir este nivel de confianza contigo, porque aun que apenas nos conocemos ya te tengo un cariño sincero y verdadero, también como tu siento una excitación enorme, al verlos así aunque no debería, no he podido evitar una erección, fíjate es maravilloso.

En este punto le subí la toalla dejando expuesto su maravilloso culo, restregando mi polla erecta entre sus nalgas y gracias a su inclinación me resulto fácil acceder a través de sus muslos hasta su coñito depilado, mientras mi mano bajaba por su vientre hasta el mismo punto notando que estaba encharcada.

Ella se dejaba hacer hipnotizada por la escena de su mamá y su hombre que estábamos contemplando que a estas alturas ya le follaba con fuerza la boca con su enorme aparato, mientras mi polla jugaba ya a las puertas del paraíso que tiene mi Vero entre las piernas, mientras avanzaba poco a poco me perdía mirando su maravilloso culo, jurándome a mí mismo que pronto lo haría mío, entre tanto discurría en mis lascivos pensamientos, mi mano presionaba con fuerza ya sus enormes tetas, que por fin había dejado en libertad su toalla Vero me respondió.

-          Claro que sí  mi amor es fantástico  verlos así, sus cuerpos son maravillosos y el tuyo también papá estoy convencida que llegaremos a tenernos esta confianza muy pronto te siento ya como de la familia y quiero que te sientas con toda confianza conmigo, para lo que quieras, tengo muchos deseos de que seas feliz conmigo y hare lo que sea necesario para que te sientas así. Es increíble el ritmo que lleva Juan con tu mujer verdad cariño?

En esos momentos habían cambiado de postura, ahora sostenía en vilo a Alicia mientras su polla extrema le taladraba su pequeño coñito con una fuerza brutal, yo por mi parte ante la falta de oposición de Vero y animado por sus palabras impuse mi polla hasta el fondo de su coñito iniciando inmediatamente el bombeo, lento al principio y frenético al cabo de poco amasando con fuerza y sin piedad sus enormes tetas que se balanceaban con mis sacudidas mientras le susurraba bajito “esto es lo que quiero de ti mi vida” a continuación empezó a gemir excitada….al ver que Juan y su madre llegaban al orgasmo y cuando su marido empezó a eyacular dentro de ella, sacándosela fuera mientras salían sus chorros de lecha, salpicando su carita y su cabello la escena fue brutal yo ya no podía más le di la vuelta a Vero la quería mirar a la cara mientras la follaba, con voz dulcísima me dijo.

-          Ya te lo he dicho amor, haz lo que quieras para sentirte feliz con migo, sois maravillosos los tres, me siento muy feliz de serte útil papá.

Su sonrisa era cándida como la de su mama, mirándome embobada a los ojos, introduje mi lengua con fuerza entre ellos mientras la bombeaba excitadísimo ya con una violencia brutal que me produjeron sus palabras, despertándome mis más bajos instintos, corriéndome poco después salvajemente en su coño, pero quise sentir lo mismo que Juan con Alicia, la retiré de inmediato para repartir mi leche entre sus enormes tetas, su carita y su pelo, volviendo a ponérsela en la boca para que me la limpiara. Como os podéis imaginar fue el orgasmo más fuerte que he tenido, cuando nos dimos cuenta vimos que Juan y Alicia nos miraban sonriendo desde la cocina, él masajeándose la verga, Alicia salió para abrazar a su hija, besándola en los labios, con lo cual la leche de los dos machos se fundió en sus labios, Alicia, le dijo.

-          Oh cariño me encanta que os llevéis también los dos es maravilloso, creo que mi hombre soñaba hace tiempo con este momento, me alegra que lo hayas hecho tan feliz mi amor, pero ten cuidado con él quizá quiera más cosas de ti  jajajaja  .

Apenas se habían recompuesto sus toallas, salía Amalia de la ducha, esplendida con una pequeña toalla que apenas cubría nada (luego supe que el cabron de Juan había escondido las grandes de baño exprofeso) para así poder disfrutar de la exhibición que nos ofrecía Amalia, la cual se dirigió a Alicia para abrazarla intensamente diciéndole.

-          No sabes lo contenta que estoy con vosotras sois mucho más que mis hermanas, no sé qué hacer para compensaros.

Alicia estrecho tiernamente el abrazo, besándola en los labios, sin recordar que aún llevaba restos del semen de Juan en su cara y en la boca así como en su cabello cortito como Amalia ésta debió excitarse al notarlo  porque profundizo en el beso en la boca de Alicia llegando hasta el fondo con su lengua, cogiendo la cabecita de Alicia con ternura, mientras frotaba sus voluminosos pechos contra de los de mi mujer, Juan y yo no perdíamos detalle, por su puesto la toalla de Amalia como estaba previsto no resistió el envite, apareciendo ante nosotros un coñito depilado de ensueño que se rozaba con el de Alicia, dándose cuenta que debía disimular, se dirigió a Vero, para mostrarle su agradecimiento a ella también, reproduciéndose la situación anterior, pero en este caso Vero aún no había cubierto sus tetas llenas aún de mi leche, acerco sus labios a los de Vero que esperaban entreabiertos, Amalia lamio con delicadeza el semen que aún recorría la carita de Vero, recogiendo cuidadosamente mi esperma, mientras la suerte estaba de nuestra parte porque mientras vimos maravillados como por fin los enormes pechos de ambas  se fusionaban embarrándose con el semen que había depositado yo allí hacia unos minutos, nuestras pollas volvían a estar erectas, Juan se exhibía ya sin toalla y mi polla salía de mi albornoz excitadísima, Amalia prosiguió hacia mí, dándome un beso en la boca, sabia a semen, clavándome sus pechos ya erectos, mi polla se acerco sin vergüenza a u coñito quedando a las puertas, avanzando incluso a su interior, el abrazo de semejante hembra me había  puesto de nuevo a mil. El más afortunado fue Juan que recibió su abrazo pero en este caso fue él el que la morreo cogiéndola por la nuca y jugando con su polla en su coñito depilado, forzando con fuerza su entrada en esa pequeña cueva, disimulando un poco con ese abrazo cariñoso, Amalia intento la retirada pero él la tenia fuertemente cogida con sus brazos, entrando ya más de media polla introduciendo sus dedos al mismo tiempo en su fascinante culo, Alicia y vero excitadas, propusieron empezar con la cena, inocentemente para romper un poco aquella excitante situación, Amalia mirando fijamente los ojos de Juan con los suyos fuera de las orbitas puesto que por fin consigui metérsela toda, Amalia  dijo.

-          Es maravilloso sentirse acogida con este amor y cariño…. Es muy emocionante para mi-…sentirme tan querida…por todos, vuestro amor es sincero de verdad….no sé como recompensaros, por vuestra hospita…lidad, de verdad os lo quiero agrade…cer como sea….a todos vosotros.

Estas interrupciones se debían a que Juan, aún la tenia ceñida y mientras hablaba y delante de todos había terminado por introducir su pollón en ese coñito diminuto empezando un discreto vaivén  que Amalia no supo cómo parar, ruborizada intentando disimular como podía, sin dejar de hablar, a los pocos embates la maravillosa verga de Juan con la ayuda de sus dedos clavados profundamente en su culito virgen, se corrió silenciosamente en sus entrañas, Amalia ruborizada poro aún con cara de agradecimiento, no se atrevió a decir nada que pusiera en evidencia a Juan dejándose violar en silencio, debido al agradecimiento que nos tenia, nos dirigimos a la mesa alegres y felicices, viendo que después de recibir semejante verga, Amalia andaba con cierta dificultad, mientras por sus fantásticos muslos resbalaban los restos de semen que caían de su coño.

CONTINUARÁ

Espero vuestra valoración y comentarios.