Era una tarde verano calurosa, estaba en casa totalmente aburrido...mi mujer llevaba toda la semana turno de tarde, así que tenía toda la tardes libres, estaba tirado en sofá y me debatía entre hacerme un paja o simplemente dormitar en el sofá, como hacemos todos los tíos cuando nos quedamos solos.

Pero de repente el timbre me despertó de mis pensamientos, no esperaba a nadie así que fui hacia la puerta con cierta curiosidad, pero al abrir la puerta vi a una gitana vendiendo ajos, vaya decepción!!!

Sin ni siquiera mirarla, le dije que no quería comprar nada y comencé a cerrar la puerta...pero ella me lo impidió:

-Cariño cómprame unos ajos pa tu mujer, que ella te lo agradecerá.

-No gracias.

-Le vas a decir que no a una mujer como yo, venga mi niño cómprame unos ajitos???

Aquellas palabras consiguieron llamar mi atención y aunque no pensaba comprar los ajos si repase con la mirada a aquella mujer: Era una gitana alta mejor dicho grande, con unas contundentes tetas y unas grandes nalgas, llevaba falda a media altura y una camiseta elástica que todavía remarcaban más sus curvas.

Aunque era más bien rellenita como todas las gitanas que rondan los 45 años, sus grandes curvas dejaban entrever un cuerpazo y además era bastante guapa…el problema era que se podía apreciar una higiene bastante descuidada, lo que la hacía poco atractiva. En sus dedos negros y sucios destacaban un par de anillos de oro, y en su camiseta podían apreciarse los roldes del sudor, que a primera vista parecían bastante antiguos.

A pesar de todo ello, quede prácticamente hipnotizado por su escote y por sus palabras "le vas a decir que no a una mujer como yo" aquellas palabras me hicieron pensar si sería capaz de follar con una mujer tan sucia como aquella??? Volvía a mirar al escote y vi que estaba excitado...mi polla había respondido a la pregunta. Seguía fantaseando con aquello cuando ella me despertó de mis pensamientos diciendo:

-Que payo compras mis ajos y dejas de mirar mi tetas o tengo que llamar a mi marido???

Yo me quede paralizado sin saber que decir, muerto de vergüenza y de miedo porque se cómo se las gastan los gitanos con estos temas.

-Si si claro perdona, pasa un momento, cuánto valen???

-Tranquilo chiquillo, no tengas miedo que no voy a decir nada a mi marido, son 10€

Fui a buscar el dinero y compre aquellos ajos, pero ya solo podía pensar en aquel escote, en aquellas nalgas...

-Muchas gracias, te importaría darme un vaso de agua?? Hace muchísimo calor y solo hago que sudar.

Si si claro, siéntate y si quieres descansa un poco que a estas horas hace mucha calor.

La gitana se sentó en mi sillón y tomo el vaso de agua que le di, yo me quede frente a ella, seguía hipnotizado por su cuerpo y extrañamente excitado. No sabía como aquella gitana sucia y sudada podía excitarme de aquella manera.

-Que te pasa nunca has visto una gitana beber agua?? Y abriéndose mas el escote me dijo, o es que nunca habías visto unas tetas como esta??

Yo no sabía que decir, estaba totalmente avergonzado...y solo dije: NO NO perdóname otra vez.

-No disimules, vaya bulto llevas en el pantalón, mi chico.

Yo puse cara tonto y seguí sin decir nada, hasta que ella me dijo:

-Venga mi niño, si me das otro vaso de agua, te enseño las tetas.

-Claro claro, un vaso de agua y lo que tu quieras.

Traje el vaso de agua y ella bajo su escote y me dejo contemplar sus tetas por unos segundos, eran enormes con un pezones competentemente negros y prominentes que dejaban entrever que habían amantado varios hijos. Pero antes de que pudiera recrearme me dijo sonriendo:

-Ya te vale que solo es un vaso de agua, me bebo el agua y me voy aunque me duelen tanto los pies que no sé ni si podre levantarme de este sillón.

No podía dejar que se fuera, estaba fuera de mi tenía que hacer o decir cualquier cosa, así que mientras ella apuraba el vaso de agua, me arrodille ante ella, la descalce y sin decir nada comencé a masajear sus pies

En seguida pensé que no había sido una buena idea porque al sacarle sus zapatillas note sus pies totalmente sudados, olían que tiraban para detrás.... Pero aquello funciono, ya que ella se recostó en el sillón y se dejo hacer

-Tu sí que sabes tratar una mujer payo!!!, la verdad que no tengo prisa y donde voy a estar mejor que aquí. Dijo riendo.

Seguí masajeando aquellos pies que estaban tan sudados que relvaban en mis manos, puede ver como ella disfrutaba con aquello tenía a un payo a sus pies...y lo mejor es que yo poco a poco tambien fui excitándome al pensar las guarrerias que era capaz de hacer. Así que mirándola a la cara me lleve uno de sus pies a la boca y comencé a besarlo y a lamerlo.

Ella no dijo nada, cerró los ojos y se recostó más...poco a poco se fue relajando y apoyo su otro pie en mi pene majeándolo yo ya estaba a mil. Seguí lamiéndolos tenían un sabor salado, pero ya no pensaba en lo sucios que estaban… estaba disfrutando con aquello!!! Los lamí como si se trataran de los pies de una princesa y aproveche que ella también se estaba excitando para subir mis manos por sus nalgas e intentar subir poco a poco lamiendo sus piernas… pero cuando llegue a su entrepierna ella me lo impidió...así que probé con sus tetas y me abalance sobre su escote.

-Frena mi niño tocar las tetas de la gitana te costara algo más que un vaso de agua.

Yo para entonces ya estaba loco, hubiera hecho cualquier cosa:

 -Vamos dime qué quieres???

-Cómprame 5 ristas de ajos, son 50€ y dejare que las toques y las chupes igual que has chupado mis pies.

Estaba tan excitado que me levante como un rayo hacia mi cartera y le di los 50€. No podía creerlo, estaba pagando solo por chupar y tocar unos pies sucios y unas simples tetas

Solo darle los 50€ ella misma se bajo la camiseta dejando de nuevo sus tetas a mi alcance...me abalance sobre ellas. Sabían saldas por el sudor pero me daba igual, ella empujaba mi cabeza contra su escote y casi no me dejaba respirar...yo chupaba y chupaba. Succionaba aquellos pezones grandes y negros y lamia todo su escote...disfrutaba como un niño y podía notar como ella también se estaba excitando ya que los pezones están duros como piedras y además se frotaba el coño con la mano por encima de la faltada.

Cuando me acerba a sus asilas podía notar el olor a sudor agrio pero aquello no solo no frenaba mi ímpetu, sino que todavía me excitaba más, aquel olor era pura excitación, sabia a hembra, a mujer, a sexo!!!

Hasta la fecha había hecho sexo oral con mi mujer, pero siempre con una higiene muy cuidada, lamer aquel coño iba a ser una experiencia muy diferente…deje de lamer sus tetas y comencé a besar su cuello, bese sus tetas y poco a poco a baje por su pecho, por su tripa hasta llegar hasta su falda...pero ella me freno:

-Tranquilo mi chico, déjame ver como esta tu polla,

Mi polla estaba ya a punto de estallar y hacía rato que chorreaba liquido preseminal, nos levantamos y sin que yo pudiera hacer nada ella metió sus sucias manos debajo de mi pantalón y me agarro la polla.

Me abrió el pantalón y poniendo su cara frente a la mía, comenzó a pajearme, no me besaba, solo me pajeaba...parecía que me estaba ordeñando intente acércame para besarla pero me rechazo...seguimos frente a frente.

Entonces yo intente hacer lo mismo e intente poner mi mano debajo de su falda pero ella me freno de nuevo y además me dio una bofetada. Yo me quede paralizado, que coño quería aquella gitana, que se había creído!!!...se acerco de nuevo y siguió pajeandome, yo no podía mas y no tarde ni un minuto en córreme, fue una corrida descomunal, manche todo el sillón.

Sin decir nada ella metió mi polla dentro del pantalón y me subió la bragueta, se dio media vuelta y sonriendo burlonamente me dijo:

-Pasado mañana volveré por esta zona, dile a tu mujer si quiere más ajos.

Se levanto y se fue.

Continuara....

Si os ha excitado podéis dejar vuestro comentario o escribirme a [email protected]