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Notas de amor

en Erotismo y Amor

                        NOTAS DE AMOR

 

        El siniestro Thork tiene razón. ¡Hay diez fornidos guerreros por cada uno de nuestros amigos! ¡y pronto!...

- ¡ah canallas!, gritaba el capitán trueno mientras atizaba con su espada a los enemigos.

- ¡soltadme y no vengáis todos a la vez!, les arengaba blandiendo su arma.

- ¡tira tu arma o remato al muchacho!, le contestó el siniestro poniendo la punta del cuchillo en el cuello de Crispín.

- ¡un noble corazón!, ¡Jo, Jo, Jo!, reía Thork ante la rendición del capitán.

- ¡antes de recoger el botín atarles fuerte y tiradles al mar!, ordenó a sus hombres.

    La lectura de este comic se convirtió hace años en una tradición para el día de su cumpleaños, fue un regalo de su madre cuando cumplió los nueve y aún lo conservaba como nuevo.

- Kaixo Miguel, me pones el diario y un pan por favor.

- por supuesto Gema, dijo tendiéndole lo que ya tenía preparado para ella.

- ah, se me olvidaba, te he traído este pequeño opari por tu cumple. Zorionak.

El inesperado detalle le emociono y no supo que decir. Salió del mostrador y le dio un par de besos a su clienta.

-es una bomba de crema, ¡espero que te guste!

-mucho, pero lo que más agradezco es que te has acordado …Gracias.

    Siguió con la rutina diaria de su negocio. Aún era temprano y todavía no acudirían muchos clientes. Quito los precintos a periódicos y revistas y las colocó en su sitio, a continuación, saco la correspondencia del buzón y empezó a mirarla. Albaranes de proveedores, cartas de los bancos y un extraño sobre de color rosa palo que no tenía dirección ni remitente, le llamó mucho la atención y lo abrió.

                                          Querido Miguel: me gustaría mucho tener un encuentro con el amor de mi vida que eres tú. Te quiero dar todo lo que soy, mi cuerpo y alma es para ti. Acude hoy a las 21pm al paseo Colon 200 5d y te lo demostraré.

                                                                                                                                            Cloe

 Esto tiene que ser una broma de mis amigos, pensó mientras marcaba el teléfono de Txema.

-dime. Sonó su amigo al otro lado de la línea.

- ¡esta vez os habéis pasado mucho! ¿cómo os podéis plantear este tipo de bromas?

- no sé a qué te refieres Miguel, ¿de qué estamos hablando?

Dudo un poco antes de contarle lo de la nota, pero tenía que hacerlo para saber si era cómplice de la cruel hazaña.

-no, yo no tengo nada que ver y dudo mucho que el resto se haya planteado reírse de ti de esta forma.

      Colgó el teléfono y siguió pensando en posibles candidatos. No encontró ninguno y pensó en no acudir a la cita.

     La mañana se pasó rápido con el ajetreo normal para un sábado. La tarde fue otra cosa, considerando la procedencia de acudir a la cita, colocando sobre una hipotética mesa en su cabeza los pros y contras de cada situación. Al final decidió no acudir.

  Estaba cansado por subir los escalones de los cinco pisos de dos en dos, llegaba 10 minutos tarde y era inevitable. Pulso el timbre de la letra d, a continuación, sonó como una vibración interna y la puerta se abrió. Entro en una estancia grande muy iluminada decorada con muebles de época. Le llamó la atención la música sensual que se escuchaba bajita. De repente unas manos pequeñas le cogieron   la cintura por detrás.

- ¡no te des la vuelta por favor!, gracias por acudir a la cita Miguel.

- soy Cloe, te voy a poner una máscara sobre los ojos, ¡no te asustes, es parte del juego!...

No estaba asustado, pero rechazaba tener los ojos cubiertos. La chica le llevó hasta una estancia más fría.

-estamos en el cuarto de baño, te voy a ayudar a desnudar y duchar, ¿de acuerdo?

-sí. dijo pensando que tal vez la repuesta era no. Por dios, ¿cómo podía permitir que una mujer a la que no había visto la cara le desnudara?

-mientras te ducho iniciaremos un juego. Yo te haré cinco preguntas y tú me contestaras, dependiendo de si las repuestas me convencen te quitaré la máscara. ¿Aceptas?

Miguel se quedó pensativo.

- ¿qué vas a valorar en las respuestas?

-tú sinceridad. dijo Cloe con voz suave.

-acepto….

    Se colocó frente a Miguel y empezó a desabrochar su camisa lentamente, moviendo los dedos de un botón a otro con sensualidad, se la quito entera y empezó a frotar las palmas de sus manos contra los pezones. Bajo hasta los zapatos y se los quito, también le saco el pantalón y empezó a masajear su miembro por encima de su bóxer a cuadros.

- ¡menudo zipote más rico tienes!, le comento al oído. ¿me dejas verlo campeón?

Él ya estaba preparado para todo y no le importaba nada.

-claro, por supuesto.

  Se lo bajó y encontró un enorme miembro empalmado.

- ¡aaalaa, es grande!, ¡que rico!

Se acercó hasta el monomando de la ducha y mezcló el agua hasta conseguir una temperatura agradable.

-venga campeón te puedes meter, dijo ayudándole a entrar en la ducha.

Miguel notó una grata sensación cuando su cuerpo entro en contacto con el agua. Ella ajustó el chorro para que no salpicara mucho y empezó a enjabonándole el cuerpo. Aunque tenía algo de tripa a Cloe le gustó mucho su culete, pero lo que verdaderamente la volvió loca fue la largura y firmeza de su pene.

-bueno empecemos con el juego…Cloe tenía la alcachofa de la ducha en sus manos y estaba enjuagando el jabón en cuerpo del chico.

- ¿Cómo te gusta que las chicas tengan el pelo, corto o largo?

-corto.

Cloe llevo el chorro hasta la cara de Miguel y subió la fuerza del agua.

- ¡que pasa!, he fallado la respuesta. comento Miguel desconcertado.

-no tranquilo, son cosas mías.

-segunda pregunta, ¿las tetas te gustan, grandes, pequeñas o medianas?

-medianas.

Esta vez el chorro lo puso por debajo de su pene, además de la fuerza subió temperatura.

- ¡ehhh, que me vas a escaldar las pelotas!

- ¡perdoona!, se me ha ido un poco la mano.

Ella se dio cuenta de que el juego le estaba afectando, pero tenía que seguir con él.

-y el culo, ¿Cómo te gusta el culo de una chica, grande, pequeño o mediano?

-mediano.

  Ya se había pasado bastante y esta vez se guardó las ganas de hervirle las nalgas. Este tío no estaba acertando ninguna de las repuestas que ella quería

-vamos con la cuarta, es una respuesta libre. ¿qué valoras más en una mujer?

Tardó tiempo en responder. -En todas las personas para mí es primordial la sinceridad.

 Anda pero que tío más ñoño. Mira que no tienen cosas bonitas las mujeres para valorar.

- ¿y la última es?,¿crees que has encontrado la mujer de tu vida?

-yo sí, pero aún no me he atrevido a decírselo.

 Esta vez Cloe no se cortó un pelo. Se subió encima de un taburete y le puso el chorro por encima a tope de presión y temperatura mientras decía para sí, es tonto del culo.

-uhhff,¡ me vas a quemar entero!. ¿que eres alguna torturadora profesional?, dijo haciendo ademan de quitarse la máscara.

-no te la puedes quitar todavía, son normas del juego. le dijo mientras le ponía un albornoz y le ayudaba a calzarse unas zapatillas de andar por casa.

   Salieron del cuarto de baño y entraron en otra estancia más iluminada.

-espera un momento, por favor.

 Ella se dirigió a una mesita, abrió un cajón y saco un sobre en el que se leía la inscripción:

                                Repuestas a las primeras 5 preguntas

    Cloe abrió el sobre leyendo el contenido para sí:

1-       Corto

2-       Medianas

3-       Mediano

4-       Honestidad y sinceridad

5-       Sí, pero no se lo he dicho

 

Pleno al cinco. Lo tenía que reconocer, tenía las cosas bien claras.

                     La chica se acercó Miguel, se puso de puntillas y le propino un suave beso en la boca. A continuación, le dijo al oído:

-me voy a poner muy guapa para ti porque te lo mereces, eres un encanto. Cuando salga de la habitación te puedes quitar la máscara. Para finalizar levanto el albornoz por detrás y le propinó un cachete en el culo.

   Él estaba muy caliente. Cuando sintió la puerta cerrarse se quitó la máscara.

     Hera un dormitorio muy lujoso. Grande, bien iluminado y con muchos detalles. En el centro una cama alta presidía la estancia y hacía un lado le llamó la atención una pequeña estatua de mármol sobre un pedestal de madera redondo. Se trataba de una mujer horonda sobre un caballo gordito, pensó que se traba de alguna replica sobre la obra de Botero.

 La puerta del cuarto se abrió y él giro la vista.

   En el marco Cloe estaba sonriendo. Era una chica menuda bastante delgada, con media melena de pelo muy negro y ojos marrones vivos, cejas finas y nariz un poco achatada. Su piel blanca estaba envuelta por un top negro que empezaba en sus hombros, transparente y con bordados de flores negras, cerrado con un lazo por encima del escote que dejaba entrever sus senos desnudos. La prenda se ajustaba bastante a su cintura y le llegaba justito por debajo del tanga negro que también se apreciaba entre el encaje. Las piernas desnudas y unos zapatos oscuros de tacón muy alto que se ataban a sus pies con dos tiras completaban la estampa.

- ¿te gusta lo que ves? dijo con una sonrisa mientras le giñaba el ojo derecho.

   Miguel estaba extasiado, aunque tenía 38 años era la primera vez que se encontraba con una mujer en esta tesitura.  Francamente, estaba muyyy buena.

-bufff. balbuceo Miguel.

 Ella se dio la vuelta lentamente, moviendo su cuerpo con sensualidad.

-Mira que culete chaval. Le dijo levantando un poco el top para que pudiera ver las preciosas nalguitas de las que estaba tan orgullosa.

   Cloe se estaba empezando a poner muy bruta con las miradas del chico. Decidió saltarse todos los pasos y atacarle. Se acercó hasta Miguel y lo abrazó con fuerza, diciéndole al oído:

-a una amiga mía le gusta mucho repetir este refrán. Al pan, pan. Al vino, vino. Y tu cipote para mi chomino.

  Ambos estallaron a carcajadas durante un rato. Después se enredaron besándose con más sinceridad unidos por el excelente recurso que ella había utilizado para romper el hielo.

   Quería aquella fuerza entre sus piernas, le quito el albornoz para sentir mejor el formidable falo. El notaba los dulces besos de la chica, se agarró a su culo y la atrajo con energía, sintiendo en su pecho los pezones duros de Cloe que estaba empezando a apretar mucho los labios sobre la boca y le metía la lengua rozándole los labios. Ella se apartó quitándose el top, dejando al aire sus pechos medianos de pezones pequeñitos. Miguel se agachó para meterse el derecho en la boca, pero de forma extraña Cloe no le dejo y se apartó.

-¿Qué pasa? Pregunto él.

  Estaba pensativa, pero reacciono rápido.

-nada, estoy incomoda en esta posición. Siéntate en la esquina de la cama, por favor.

  Se sentó y ella se subió, poniéndose en cuclillas sobre él. Le metió su teta derecha en la boca consciente de que estaba infligiendo las reglas de su contrato. Pero le daba igual, solo pensaba en disfrutar el momento.

  Del derecho pasó al izquierdo y vuelta a empezar de nuevo. Le encantaba la suave sensación de lamer y chupar las ricas formas de la mujer, besar sus finos labios y agarrar con sus manos las nalgas redonditas. Estaba loco de pasión.

 Ella no dejaba de moverse de abajo hacia arriba, apretando y rozando el clítoris contra la verga de Miguel. De repente paró.

-uhmmm. Agarró la tira derecha de su tanga y la arrancó, hizo lo mismo con la izquierda y levantándose un poco la sacó por delante, se agacho de nuevo y siguió frotando su vulva húmeda contra el miembro del chico. Al rato no podía más, se levantó un poco y cogió el pene del chico para enseñarle la posición de su coñito. Lo notaba muy grande y empezó a metérselo poco a poco, muy despacio mientras le susurraba al oído:

-ahh. Ósea que te gustan con el pelo cortito.

-sii. dijo sintiendo como la puntita de su falo se abría paso en la raja de la chica.

-y medianitas. Cloe presiono un poco más. ¿no te gustann, ahhh. Las tetorras?

-las tuyas chiquitinas me encantan. pero lo que más me gusta es tu ….culoooo.

  Ella presionó su cuerpo un poco más, pero aún no le había entrado toda la punta y estaba empezando a notar que le iba a hacer daño. Se levantó un poco sacándose el miembro, se bajó de encima del chico y cogió su bolso. Revolvió dentro y sacó un frasco de plástico, aplico el gel con las manos en la polla de Miguel y a continuación extendió un poco en su vagina. Se subió de nuevo encima del chico y empezó a ensartarse el pene.

- ¿sabes que me gusta a mí?

-mi raaabo. noto que entraba casi toda la punta.

-tu hermoso naaavo. empujó ella para que entrara más.

 Cloe sabía que esto para salir bien tendría su tiempo. Se besaron y manosearon durante unos diez minutos en los que ella hizo pequeñas presiones para ir entrando. Cuando notaba mucha dureza se lo sacaba un poco y volvía a intentarlo de nuevo hasta que consiguió lo quería, tenerlo todo dentro. Empujó a Miguel obligándole a tumbarse, se echó encima de él restregándole sus tetas sin parar de morrear su boca como una Loca. Cuando notó un poco de humedad en su vagina paro de moverse y empezó a besarle suavemente, sin separarse de su boca. Poco a poco fue cambiando las caricias de los labios por intercambios de exhalaciones. Ella se desprendía de todo el aire de su cuerpo en la boca de él que al rato respondía de la misma forma.

Estuvieron así durante veinte cortitos minutos en los que sus miembros se habían acoplado a la perfección hasta que Miguel decidió soltar la mano derecha de su nalga y llevó el dedo índice a la raja de ella por encima de la entrada de su verga. Le pasó la punta del dedo por el tenso labio de su coño masajeándolo delicadamente mientras sentía ascender las palpitaciones en el corazón de la chica. Lo hizo hasta encontrar restos del gel con los que pringo su dedo. Cuando lo empezó a meter en el agujero de su culo ella relajó el esfínter para facilitar la entrada.

A Cloe le vino de repente. Empezó notando una suave palpitación y se corrió como una loca una, dos y tres veces. Fue fantástico sentirlo tan de golpe, no le dio tiempo a gemir, tan solo pudo exhalar de nuevo el aire.

El sí noto como le llegaba el primer orgasmo. Sintió como las alocadas palpitaciones en las paredes de la vagina le provocaban una explosión de semen.  Gritó dentro de la boca de ella cuando noto la frescura del agua derramada por la chica en la punta de su falo.

Ambos estaban exhaustos. Sin abandonar la posición que habían mantenido desde el principio descansaron hasta que la vista de Cloe se fijó en el reloj de la mesilla.

-Jodeee. ¡Es muy tarde!, nos tenemos que ir.

Él se levantó con la chica, agarrándola por el trasero. Ella hizo ademán de desenroscar la pierdas de la cintura del chico para sacar lo que tenía dentro, miro la estupenda alfombra blanca y fijando sus ojos en los de Miguel negó con la cabeza.

-llévame hasta en cuarto de baño, si no vamos a machar la alfombra.

El obedeció de buen grado. Mas cuando noto que ella se agarraba muy fuerte, pegando con pasión sus formidables curvas.

Llegaron al cuarto de baño y ella decidió darle el besó de despedida. El la acorraló contra la pared, busco la posición y empezó de nuevo a follársela.

-No, no hay tiemmmpo. Es muyy tarde. Noo, ahhh. Si, siii, otra vez hasta dentro.

No paro de mover el culo hasta que ella empezó a gritar como una loca. Los dos gritaron de placer y se corrieron varias veces más. Cuando Cloe se sacó el Pene del chico notó como los fluidos de ambos resbalan por su entrepierna haciendo un charco en el suelo. Se ducharon juntos y mientras ella se cambiaba en el cuarto, el fregó y limpio el baño. Salieron juntos de la casa. Tras ella Miguel admiro por última vez el precioso culo enfundado en unos ajustados vaqueros.

El despertar del día siguiente fue fantástico, Miguel estaba totalmente relajado y se sentía con muchas fuerzas.  Su espíritu estaba renovado, así como su estima estaba al máximo. Decidió desayunar y dar un paseo. Cuando entró casa escucho el sonido de una llamada en su móvil.

-Kaixo peque.  ¿qué te pasa?, he mandado varios mensajes y no has contestado.

Le alegró mucho escuchar la voz de su amiga Patricia.

-es que he estado liado, ya te contaré.

-claro que me lo vas a contar hoy. Venga Miguel, es tu único día libre salgamos a dar un paseo. ¿te paso a buscar en media hora?

-echo, te espero en casa.

Le pasó a recoger cinco minutos antes de lo previsto. Como siempre la puntualidad era uno de sus dones y su forma de vestir descuidada con unas bermudas super anchas y una camiseta rosa enorme que no dejaba apreciar para nada su cuerpo, su desgracia. Tenía una cara risueña bien formada, ojos verdes claros, nariz pequeña redondeada y unos preciosos labios pequeñitos que él estaba deseando besar, pero  su enrome mata de pelo no dejaba verla con claridad.

   Pasaron todo el centro de Irún hasta el barrio de amute y por la carretera del aeropuerto hasta la rotonda de gabarrari kalea desviándose por minasoroeta hasta otra rotonda desde donde tomaron  la cuesta de subida a Jaizkibel. Desde el monte en días limpios como el de hoy se podía contemplar toda la bahía de Txingudi.

- ¿se te ve muy feliz?

- lo estoy, ayer lo pasé bien.

- ¿alguna chica?

-sí, pero no son cosas para contar a una dama como tú.

 Patricia sonrió contenta al comprobar la felicidad de su amigo. Pasearon disfrutando del hermoso día que la naturaleza les regalaba.

   El sábado siguiente Miguel recibió otro sobre idéntico al anterior. Lo abrió desconcertado:

                                              Querido Miguel:  la vida sigue y el juego también, acude hoy

                                 a la misma hora y en el mismo sitio.

                                                                                                                                     Jazmín

 

 

 

Llegó puntual a la cita, llamo al timbre y se abrió la puerta. Al entrar encontró una nota que le indicaba la ubicación de un ordenador en la sala, se sentó frente a la pantalla en la que había un Chad abierto de telegram.

Hola Miguel

Buenas

el juego continua, vamos a divertirnos otro ratito.

Antes me gustaría saber de que va todo esto

De amor y sexo, ¿no te gustó lo que hiciste con Cloe.

Si mucho. ¿que ha sido de ella.?

Sigue bien, pero esta es otra escala del juego y nos tenemos que olvidar de Cloe

Pues sigamos jugando

Hoy solo me tienes que contestar si o no

Venga, vamos a empezar

¿te gustaría una mujer madura?

si

¿te gustaría hacerle sexo vaginal?

si

¿te gustaría hacerle sexo oral?

si

¿te gustaría hacerle sexo anal?

si

 Te contaré un secreto. Soy la persona que ha creado este juego para ti. Jazmín te está esperando en la habitación de al lado y le he hecho las mismas preguntas que a ti, solo podrás entrar en la habitación si tu preferencia de sexo hoy coincide con la que ella ha elegido.

Pero ¿Quién eres?

Yo todavía no importo. Ahora lo importante eres tú, Por favor elige una opción

Sexo anal

.  .  . 

 Biennn…. Pasa a la habitación. Jazmín te espera

Según abrió la puerta la vio al lado de la cama, estaba sentada de espaldas a la entrada en una silla blanca de madera con un respaldo al que tenía agarradas sus manos. Hera una señora rubia de media melena vestida con un sujetador blanco y tanga del mismo color tan pequeño que dejaba ver con claridad su imponente culo, estaba sentada justo a la esquina de la silla en posición de ofrecerle aquel esplendoroso regalo. A Miguel le encanto el trozo de piel   que el bañador había defendido tiempo atrás del sol provocando el contraste de unas nalgas blanquecinas  contra el resto de su cuerpo con un suave dorado, recalcaba las bonitas formas de aquella piel tan suave.

 Al entrar en la habitación ella giró su cara y él pudo apreciar los ojos verdes de la chica.

-holo, soy Jazmín. Hablo poco spagñolo.

-yo soy miguel.

 Cuando ella se puso en pie pudo apreciar el cuerpo de aquella cuarentona culona con cintura de avispa. Vio su rostro hermoso y la sonrisa en su cara cuando empezó a aproximarse a él quitándose el sujetador.

-me dijierón no te gustan tetas grandes. las mías son hermosas.

 Lo dijo cuando acabó de sacárselo dejando a la luz unos pechos blancos de buen tamaño, bordeados también por la marca del bikini.

 -pero da igual, solo pudes tocar de cintura para abajo.

- ¡no entiendo!, Contestó Miguel

 Jazmín se dio la vuelta arreándose un cachete en la nalga derecha con la mano izquierda mientras ponía el culete   un poco en pompa hacia los ojos del chico.

-essto. Es regla del juego.

-bueno es bastante. Dijo él aproximando las manos a la suave piel de la chica por debajo de la cintura

 Se recreó durante un rato tocándole las curvas del culo, disfrutando de aquella hermosa magnitud física, sintiendo la dulce sensación de tocar un rico trasero.

-quiero ver tu pitxa, me han dicho que es grande.

Miguel se desnudó entero frente a Jazmín que miró su pene con admiración.

-osstras, vaya rabo.

Ella le entregó una nota antes de subirse al borde de la cama y colocarse en la posición del perrito.

-es lista de instrucciones para hacer bien, tienes que leer en alto para que yo también entere.

El cogió la nota y empezó a leer.

                       

                           Antes de empezar ten en cuenta que la chica se ha limpiado muy

                        bien    y que es importante seguir todos los pasos a rajatabla para

                        que los dos disfrutéis al máximo.

 

-si, es verdad. Afirmo Jazmín con la cabeza,

                             Déjate aconsejar por ella que conoce muy bien la técnica.

-ja, ja, ja. a mi gusta mucho. Dijo volviendo el rostro hacia la cara de miguel que dé pie siguió leyendo.

            Es importante antes de empezar que relajes bien su esfínter. Para ello te recomiendo utilizar la lengua.

Miguel se puso frente al culo de Jazmín y le ayudo a quitarse el tanga, metió la nariz y nutrió su olfato del suave olor a flores en el culo de la chica .Empezó dándole besitos en las nalgas y acabó succionando la suave piel. Lamio la raja de su culo de arriba abajo sintiendo sus contracciones.

-así,asssí. Mi gusta mucho

Cuando metió la lengua en el agujero ella dio un respingo más grande .Miguel soltó la hoja de papel que aún tenía entre sus manos agarrándose con las dos a las imponentes nalgas de la moza , presiono con su cabeza para que la punta de su lengua llegará bien a la entrada del ojete , lamiéndoselo durante un buen rato. A continuación, ella después de comprobar el estado de las uñas del chico le proporcionó un gel lubricante y tomo de nuevo posición de culo en pompa hacia él que se aplicó gel en el dedo índice de la mano derecha y empezó a introducirlo suavemente en el agujero de su trasero.

-despacio.

Al rato tenía dos dedos dentro y estaba bastante dilatado. Jamín estaba disfrutando mucho, pero aún quería más.

-méteme la polla, cabrón.

Miguel no lo dudo ni un momento, aplicó una buena cantidad de gel a su pene y empezó a metérselo con suavidad, ella separaba sus nalgas temblorosas con ambas manos.

-despacio, por favor.

Le llevó un tiempo hacerse con el agujero, pero al rato la tenía casi toda dentro.

-ufff, déjala momento sin mover.

 Notó como jazmín hacía contracciones para dilatar   su ano que masajeaban también su pene, al rato le pidió que la sacará un poco y volviera a meter, le comentó que hiciera varios movimientos y a cada uno la sacara más .Cuando Miguel lentamente empezó a meterla y sacarla casi entera , ella soltó sus manos para apoyarlas delante irguió un poco su espalda y levanto algo el culo.

-ahora empiza, dame más deprisa.

Con la subida del ritmo Miguel noto mucho gusto en su pene, el roce le volvió loco.

-aahh, como me gusta tu culo.

-pues follatelo, más rápido y más fuerte, veennnga.

 Subió más la marcha golpeando con su pelvis el culo de la chica que de repente inclinó su cuerpo dejando que la verga entrara más en el agujero, llevó las manos otra vez hacia atrás para estirar sus nalgas mientras gritaba como una loca.

-dame, dame, dame mucho más.

 Miguel utilizó todas sus fuerzas para metérsela con fuerza y rapidez, no podía creer el gusto que sentía en su pene estaba a punto de correrse cuando Jazmín aumento sus gritos.

-uhhh,uhhh.ahhhh

   Noto entre sus piernas el chorro caliente del líquido que la chica expulsaba con presión por su raja sin parar de gritar, descansó un poco para dar un beso en su espalda.

-no te pares tío, sigue follándote mi culo.

Cuando el pene de Miguel reventó llenado de leche el culo de Jazmín, ella ya había llegado al éxtasis en tres ocasiones  dejando la colcha de la cama empapada.

-ahhh, que gustazo.

Miguel sacó el pene de la chica y se tumbó en la cama extasiado, ella se tumbó a su lado. Al rato se montó encima del chico y consciente de que posiblemente no cobraría se lo follo un par de veces disfrutando como una loca de aquella preciada verga mientras él le comía las tetas con pasión.

En toda la semana no había visto a Patricia y le extraño lo bastante como para comentarlo con Txema que le dijo como había cambiado de casa y lo liada que estaba, le extraño que no le comentara nada pero no le dio mayor importancia sabiendo lo especial que era su amiga.

Pasó toda la semana esperando a que llegar el sábado y la carta correspondiente, no llegó y le decepciono. Cuando estaba cerrando la verja de la tienda se le acercó un mensajero y le entregó la carta:

                                                  Querido Miguel: disculpa el retraso, pero es que esta es la última carta

Y quería darle un poco de emoción. Ya sabes, en el mismo sitio y a la misma hora.

Llegó antes de la hora y cuando llamó al timbre no se abrió la puerta de forma automática, oyó los pasos de unos tacones y cuando se abrió sus ojos no podían dar crédito a la visión de una tía buena con la cara de su amiga patricia.

-kaixo Peque, ¿te ha gustado mí regalo de cumple?

No pudo responder a la pregunta. Al otro lado tenía a su amiga sonriente, estaba fabulosa con el pelo pelirrojo oscuro, corto y en punta sobre la cabeza por efecto de la laca, con un mechón que cubría la parte derecha de la frente hasta su oreja. Su carita bien maquillada y los preciosos ojos verdes que siempre le gustaron habían perdido protagonismo ante unos esplendorosos labios pintados de un rosa muy suave. Por encima cubría su cuerpo con una camiseta verde de tiras muy ajustada que dejaba ver unos hombros morenos delicados y bien formados, por debajo del escote redondo se podía ver la forma de unos pechos medianos que se marcaban contra la camiseta un poco subida por encima de una cintura bien dibujada dejando ver su precioso ombliguito.  Debajo de la camiseta unos pantalones vaqueros pitillo se ajustaban a su cuerpo remarcando una figura no excesivamente delgada y bien formada. Los zapatos de tacón estaban pensados para poner los ojos de ambos a la misma altura.

Patricia se acercó a su amigo y le propino dos besos en la mejilla. Él se embriagó con el suave olor a té del perfume que portaba.

-no me habías comentado que te mudabas de casa.

-Nooo. ¡que mala memoria tienes! Te lo comenté hace un año, cuando cenamos por tu cumple y yo puse en marcha mi plan.

-ehhh,¿de que hablas?

-venga entra que te cuento.

Entró y ella cerró la puerta. Esperó a que pasara para guiarle poniéndole delante la espalda descubierta por debajo de la camiseta, en un vistazo rápido pudo apreciar la tira superior de un tanga morado oscuro un poco por encima de la cintura ajustada del pantalón que remarcaba un imponente trasero en forma de pera. Ella lo miro de reojo y ando despacio forzando el contoneo de su culo para que lo apreciara mejor.

-tengo que andar con cuidado, la madera se marca con facilidad. Le dijo sonriendo.

Se sentaron en el sofá y ella empezó a hablar

-Bueno, ha llegado el gran momento. Patricia empezó fijando sus ojos en los del chico.

-Siempre he sido muy indecisa con las cosas que considero importantes, para mí compartir la vida con una pareja lo es, pero prefiero estar sola a tener alguien a mi lado que no llene mi vida. Cuando hablo de llenar mi vida quiero decir alguien que me quiera, que sea mi amigo y a la vez podamos cubrir entre ambos las necesidades de nuestros cuerpos, cuando hablo de esto no solo me refiero a la alimentación.

Miguel la escuchaba alelado.

-Cuando empecé a notar que me estabas gustando me planteé como podía ser mi vida contigo. Me surgieron preguntas a las que busqué respuestas en nuestras conversaciones sobre la vida, a casi todas encontré solución, pe tuve algún, pero en torno a la poca experiencia sexual que yo tenía, no he estado con muchos hombres. Pensé en que igual podíamos paliar el problema con la tuya, y nos vas a perdonar a mí y tus amigos por haber hablado varias veces del tema.

-jo, no entiendo nada

   Ella le puso la mano en la boca.

-tranquilo yo te explico. Nadie te conocía ninguna pareja, estabas peor que yo. Empecé a darle vueltas al asunto y llegué a la conclusión que antes de plantearme la relación tenías que tener algo de experiencia con otras chicas. Le    di vueltas al asunto y pensé en la experiencia sexual que yo había tenido, de ellas me quede con dos siendo las que más me han gustado y organicé un plan para regalarte algo parecido por tu cumple.

-coomo. él no podía creer lo que le contaba.

-hace varios años tuve mi primera experiencia con un chico. Fue en unas vacaciones de verano en el pueblo de mis padres. Hera un chico delgado y muy moreno, me llevó a un parque y tras un matorral nos desnudamos y él me enseño que era el sexo. Me lo hizo bien y disfrutamos mucho hasta que él se empeñó en darme por detrás y lo fastidio todo, yo todavía era un poco mojigata no conocía alguna de las lindezas de la vida. Hace tres años, poco antes de conocerte, estuve de Vacaciones en Cuba y conocí a un señor de medina edad que me convenció para hacer sexo anal. Fue una de las experiencias más placenteras de mi vida y me juré que no la repetiría hasta tener al hombre de mí vida.

Miguel se estaba acojonando por tiempos. Esta tía estaba un poco loca.

-Lo maduré durante un tiempo y busqué a las mujeres que podían recrear las historias, Cloe y Jazmín me parecieron perfectas y empecé a elaborar el plan.

-es una locura. Miguel habló desconcertado.

- ¿Qué es una locura?, ¿Qué tú me gustes?, ¿mis gustos sexuales?

Patricia arrimo su cara y sus labios a los del chico.

- ¿todavía no me has dicho si te gusto?, ¿me quieres?

Unas lagrimitas empezaron a brotar de los ojos de la chica

-si, siempre me has gustado.

Ella pegó los labios a los de él que sintió el sabor amargo de sus lágrimas. Se besaron con pasión y entre ambos se quitaron las ropas. Miguel alucino con el formidable cuerpo de su pareja, le gustó mucho la mancha que al igual que jazmín un pequeño biquini había dejado en sus ingles tatuadas con estrellas, en su culo terso de suaves formas y sus pechos ricos de pezones erectos. Empezó comiéndole la rajita depilada y acabó metiéndosela con cuidado y amor.

El verano fue fantástico para los dos disfrutando de sus vidas y de sus cuerpos. Los primeros días llegaron al acuerdo de solo hacerlo por delante y a partir de ahí el coito anal fue un invitado de honor en sus relaciones. Gozaron mucho y tan solo les agobiaba un poco las miradas de los vecinos cansados de los gritos inevitables de Patricia cuando Miguel le hacia el amor.

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