Hola amigos, para los que han preguntado, volví a visitar a don Manuel. Gracias por sus comentarios, me inspiriran a contar mis historias, que a mis 36 años son muchas, porque soy muy caliente.

Ese día fui al edificio donde vive mi amiga, sabia que ella no estaba, llegue a la consejería y ahí estaba don Manuel, conversando con Jorge, un vecino del edificio de  50 años apróximadamente.

Cuando me vío se puso feliz, viene a ver a su amiga, me dijo. Si, le respondí, también le traigo un vino de regalo, por lo amable que fue el otro día conmigo. El me sonrió y me dió un fuerte abrazo.  Luego llamó al piso de mi amiga, pero nadie respondió. Jorge, dijo que la habia visto salir. Que lastima, dije, tendré que volver otro día.

Pero mi niña, dijo don Manuel, tengo la tarde libre, si quiere sube a almorzar conmigo y probamos este rico vino que me trajo. Jorge, que estaba atento a la conversación, dijo, que entretenido, yo tengo otra botella en mi departamento, los puedo acompañar?

Pero claro, le dijo don Manuel, usted siempre es bien recibido, además le debo unos favores, así que hoy es buena oportunidad para ponerme al día.

Los dos hombres se miraron, luego me miraron con picardía y sonrieron. Yo estaba un poco confundida, porque andaba muy caliente y esperaba tener sexo con don Manuel. Pero acepte la invitación, igual sería entretenido compartir con esos dos maduros y calentar un poco sus vidas, aunque no tuvieramos sexo.  La siuación me dió morbo, y decidí estar de lo más coqueta.

Don Manuel me dijo que subiera, usted ya conoce donde es, me pasó las llaves. Jorge se ofreció a subir conmigo. Paramos antes en el piso de el, para pasar a buscar el vino. Conversamos animadamente. 

Yo venia del gimnasio, así que andaba con calzas blancas, sin nada abajo, por lo que se marcaban mis gluteos y mis labios vaginales. Para arriba un top corto, como brasier, que se abrochaba adelante con un cierre, el que obviamente tenia un poco abierto. Era blanco, por lo que se marcaban mis pezones. LLevaba un poleron con cierre abierto. El que me saque cuando subimos al ascensor, por el calor que hacia.

Joge me mostro su departamento, salimos al balcón a ver la vista. Mientras me mostraba algunas partes de la ciudad, me tenia tomada de la cintura. Sentía su mano caliente sobre mi piel. Le dije que estaba un poco adolorida en mi cuello, por la actividad del gimnasio y se ofreció para darme un masaje. Yo le dije que bueno, pero cuando estuvieramos en el depa de don Manuel. Que seguramente nos estaba esperando.

Al llegar donde don Manuel, el ya tenia servidas 3 copas de vino, hicimos un salud, por ese encuentro, por conocernos, por la vida. Hay que vivir cada día como si fuese el último, dijo Jorge. Es verdad, dijo don Manuel,  aprovechar las oportunidades y arriesgarse. Salud!! dijimos todos y seguimos con el segundo vaso.

La conversa estaba muy entretenida, yo puse mi mano sobre el hombro, en ese momento Jorge dijo, don Manuel nuestra amiga está adolorida del gimnasio, le duele un poco el cuello, yo me ofrecí para hacerle un masaje, se lo puedo hacer acá en su cama? 

Si, le dije yo, no solo el cuello, la verdad que el gimnasio estuvo intenso hoy y me duele todo el cuerpo.

Pero ningún problema, dijo don Manuel, si es para que se sienta mejor, obvio que pueden ocupar mi cama, si quiere yo le hago masaje en las piernas mientras Jorge le ayuda con su cuello y espalda.

Encantada don Manuel, pero ando solo con la calza, no me la puedo sacar. Pero mi niña, no se preocupe, nosotros somos dos maduros, ya hemos visto algunas mujeres desnudas, así que con confianza, somos unos caballeros.

Bueno, le dije, con actitud de verguenza, aunque por dentro estaba ardiendo.

Don Manuel trajo un aceite para masajes, si no le molesta me sacaré la ropa para no mancharla. Usted debería hacer lo mismo Jorge. Todos nos reimos. Jorge abrió la segunda botella e hicimos un nuevo brindis por la vida, antes de desvestirnos.

Yo me acoste boca abajo en la cama, desnuda, para disfrutar de mi masaje. Don Manuel puso música suave. En eso sentí las manos de Jorge sobre mi espalda, estaba de rodillas delante mio, solo con boxer masajeando mi espalda desde el cuello hasta casi mis gluteos. Por el otro lado don Manuel tambien de rodillas, solo con slip, masajeaba mis piernas desde abajo hasta el inicio de mis gluteos.

Sentía la respiración agitada de esos hombres, sus manos calientes sobre mi cuerpo, también sentía como mi concha se mojaba cada vez más, don Manuel seguro ya veía mis jugos apareciendo. En un momento dijo, abra un poco sus piernas para masajear  mejor por dentro de sus muslos. Yo muy obediente, las abrí bastante y al mismo tiempo paré mi cola. Escuché dos suspiros.

Los hombres seguian con el masaje, acercandose cada vez más a mis gluteos al subir uno y bajar el otro, hasta que estaban casí tomandose  de las manos sobre mis nalgas, apretandolas y deteniendose cuando estaban sobre ellas. Cuando hacien eso yo paraba mi cola.

En un momento, don  Manuel habló a Jorge, miré Jorge venga para acá, nuestra amiga tiene un nudo por aca, necesito que me ayude. Jorge fue al lado de don Manuel, y los dos hombres masajearon mis piernas, uno cada uno, subiendo hasta mis nalgas, y rozando mis labios vaginales al pasar. Yo me incorporé, levanté mi cabeza, abrí un poco más mis piernas y levante mi cola, dejando a su mirada toda mi cola y vagina. Los miré sonriendo, estaban embelezados mirando mis agujeros, estaban colorados y sudorosos. Mi vagina estaba completamente mojada, por lo que ellos podían ver mis jugos y darse cuenta que yo estaba muy caliente.

Que pasa amigos, les dije, por que no siguen ese masaje que esta tan rico. Estoy un poco mojada, me pueden ayudar?

Los dos hombres sonrieron, posupuesto respondieron y se lanzaron a lamerme, sentí sus lenguas calientes. Una en mi clitoris y vagina, la otra en mi ano. Estuvieron chupando por algunos minutos, mientras yo jadeaba de placer. Luego me dieron vuelta, mientra uno seguía chupando mi vagina y metiendo un dedo en mi ano, el otro chupaba mis tetas, las amasaba, mordía mis pezones. Yo no aguante más, las bocas de esos hombres me hicieron llegar a un intenso y largo orgasmo. Ellos se turnaron para beber mis jugos. 

Don Manuel se acercó a mi, me besó apasionadamente, me abrazo y me subió sobre él, sentí su pene penetrar mi vagina. Te han culiado doble mi niña?, me preguntó. No don Manuel, nunca he tenido dos machos al mismo tiempo. Bueno, entonces, está será la primera vez. Venga Jorge, acerquese, este ano necesita polla, decia, mientras metia dos dedos en mi ano, haciendome gritar.

Sentí como Jorge se ponía en posición, sentí su pene en la entrada de mi ano, Jorge se acercó a mi oido, lo chupo, lo beso y mordió, luego dió vuelta mi cara y me beso, metió su lengua hasta el fondo, mientras su pene iba entrando lentamente en mi ano. Ahora gritaras como puta, me dijo, dando un empujón y metiendo su polla hasta el fondo. Yo grité, pero no de dolor, estaba tan lubricada que su pene se rebaló dentro de mi ano.

Ya estaba penetrada por esos dos machos, estaba ardiendo, como perra en celo, yo gemía de placer. Ellos se movian tratando de tomar el mismo ritmo, hasta que lo lograron, era una imagen genial, los dos machos culenadome al mismo tiempo, al mismo compaz, sus manos recorrian mis tetas, las pellizcaban y amasaban. Era un sexo lujurioso y desesperado, todos gemiamos, era delecioso, yo sentía un placer máximo.

Mi placer fue tanto, que explote en un orgasmos intenso, largo y salvaje, mis machos no aguantaron mis movimientos y gritos, se vinieron al mismo tiempo dentro de mi. Sus leches calientes, hicieron que mi orgasmo se prolongara más, pareciendo nunca acabar. Yo bramaba, chorreando jugos sin parar.

Todo quedo en silencio, solo la música se escuchaba. Sentí como Jorge sacaba su pene de mi ano, tirandose en la cama, yo me desmonté de don Manuel, quedando en medio de esos dos machos. Me abrazaron y les dí a cada uno un largo beso. Así abrazados nos dormimos.

Desperté después de unas horas. Jorge y don Manuel se habian bañado y estaban desnudos, tomando vino en la mesa. Al verme despertar, se acercaron, Jorge me levanto, tomo mi cabeza y metió su pene en mi boca. Que bueno que despertaste amiga, tengo muchas ganas  de que te tragues toda mi leche, me dijo, mientras metia y sacaba su pene de mi boca.

Yo estaba de rodillas sobre la cama, mamando la polla de Jorge, cuando sentí que don Manuel se ponía atrás mio. Se acercó a mi oido y me dijo, recuerda que te dije que siempre que vinieras te llenaria de leche ese culo, bueno amiga, ya estoy listo para abrirte el culo.

Don Manuel me agarró de las caderas y de un golpe metió toda su polla en mi culo. Así estaba nuevamente siendo perforada por el culo y por mi boca. La polla de Jorge era larga, más delgada que la de don Manuel, blanca y venosa. Su sabor era muy rico, estaba muy dura y mojada con mi saliva. Yo la chupaba con ansias, con pasión, quería pobrar la leche de Jorge, quien me tenia agarrada la cabeza y empujaba suavemente su polla hacia dentro.

Don Manuel seguía en mi culo, diciendo groserias empujaba y metia muy adentro su polla, se pegaba a mis nalgas. Yo con mis manos jugaba con mi clitoris y metia 2 dedos en mi vagina. Eso perra, disfruta a tus machos me decia, cometela toda por el culo, mama sin parar la polla de Jorge. Dale puta, muevete, así , así, mmm que rico perra, no pares , te llenaré de leche ese culo abierto que tienes, dale putita, te gusta que te metan la polla por el ano, mira que rico y suavecito lo tienes, mmm, hay, hay, me voy, mmmm, mmmm aaaaaaaaa.

Así don Manuel acabó dentro de mi culo, sus palabras grosera me provocaron mucho morbo y calentura, lo que hizo que chupara con fuerza la polla de Jorge, él me miro, tomo mi cabeza y comenzó a gemir, aaaa aaaa mmmm aaaaa aaaaa, que rico, chupa perra, cometelo todo, tragate toda mi lechita, mmm aaaa aaa aaa aaa.

Sentí el semen caliente de Jorge en mi boca, lo trague todo y seguí chupando hasta sacar hasta la última gota.

Mis machos me tiraron sobre la cama, abrieron mis piernas, don Manuel metió 2 dedos en mi vagina y Jorge 2 dedos en mi ano, y comenzaron a masturbarme. Eso, asiiii, oooo siiii, que rico, delen mis amigos, mmmm siiiii, quiero acabar, saquenme todos mis jugos, siiii, siiii mmmmm aaaa aaa aaa, ooo siiii, asii, aaa aaa aaa aaa, ufff que rico.

Así terminó nuestra tarde de sexo, una tarde distinta, con Jorge como gran sorpresa, mi culo y vagina se fueron llenitos de semen, no me bañé, solo me vestí y salí así a la calle, con olor a macho y a sexo, provocando las miradas lascivas de los hombres y algunas palabras soeces de los más atrevisdos.

Mi amiga nunca se enteró de estas visitas a la azotea de su edificio. Pero los vecinos más amigos de Jorge y don Manuel si, porque la siguiente vez que fui, me tenian una gran sorpresa. Otro día se las contaré. Besos

Gracias por leerme, espero sus cometarios

Pily