(No empezad a desesperarse si las acciones de sexo tardan en aparecer. Este es el capítulo donde se desarrolla toda la acción del relato.)

A pesar de que tanto Knuckles como Rouge no tenían fama de chistosos, por esta vez se le veía al uno de rodillas dando puñetazos en el suelo de la risa y la otra doblada ,riendo más serena, con la mano en la boca y mirando a aquellos dos pollos que de esta forma cortaron bruscamente lo que estaban haciendo. Sonic se fue para ellos e intentó quitarle hierro al asunto, mientras Tails sólo quería se lo tragara la tierra.

- Bueno, vale ya vosotros dos, ¿no? ¿Qué pasa, que no follais o qué?

- Pues mira, algo hemos hecho…

Pasaron varios minutos hasta que se pudo serenar la situación, sólo entonces decidieron olvidarlo todo y Rouge le explicó a Sonic que hacía por allí, como le encontró Knuckles y cómo éste le hizo una oferta que no pudo rechazar. Aclarado todo, los cuatro reemprendieron camino a la Central, llegaron al edificio casi en seguida; no se había topado con robots vigilantes por la ruta que cogieron, y tampoco había por allí. Esto escamaba a Sonic.

-Puede que nos estén acechando… mejor dividámonos en parejas.

-De acuerdo.

Sonic y Tails fueron por un lado y Knuckles y Rouge por otro. La primera pareja entró sigilosamente por los conductos de aire acondicionado, mientras Rouge llevó en volandas a Knuckles hasta un balcón, abrieron la ventana y se colaron dentro.

Dentro del edificio sí que había robots. Pero Knuckles aprovechaba el factor sorpresa, y se lanzaba y los destrozaba a puñetazos antes de que éstos pudieran asimilar qué era aquél intruso, cómo ha entrado o qué hacía allí. De esta forma consiguió liquidar a cuantos había por aquella sala, y después un pasillo; tuvieron tiempo hasta de perderse por la Central, buscando el ordenador principal que tele controlaba a los robots, y ni que decir que para entonces se había dado Alarma General en la Central. Las sirenas sonaban.

- ¿Has oído, Sonic?- decía Tails- ¡Nos han descubierto!

- Es Knuckles, está teniendo juerga con los robots de Eggman… ¿no escuchas sus golpes?

- Espero que no les pase nada.

-Bah, no te preocupes… pero terminemos lo de antes, ¿no?

-¿Qué? ¡No quiero! N….¡¡No es el momento!!

-Nos quedamos cuando te estaba dando por detrás… ¿acaso piensas que se me iba a olvidar? Aquí estaremos tranquilos, todos los robots van como borregos adonde está Knuckles.

En un instante, Tails se vio de nuevo a cuatro patas y con Sonic enchufado detrás, que empezó a bombear con su ritmo rápido como él sabe. Y Tails, sólo cerraba los ojos y no paraba de pensar "aguanta aguanta aguanta ay aya diooossss aaaay"…

Mientras Sonic y Tails se dedicaban a esta labor, Rouge por fin encontró el ordenador principal.

-¡Aquí, en esta sala!

Entraron y se situaron, pero justo cuando iban a proceder a la desactivación de los robots, se encendió una pantalla.

-¡JA JA JA! ¡Saludos, tortolitos!

-¡Es Eggman!

- Por fin voy a poder deshacerme de vosotros de una vez por todas, y en especial de Sonic. Habéis cumplido con el plan según lo previsto.

-¿A qué te refieres, huevo duro?

- A mi coartada. Una isla productora de diamantes y dominada por robots de tornillo y medio sin mi aparente control, era la coartada perfecta para que Sonic viniera a liberarla, y entonces… ¡La sorpresa!

- ¿Sorpresa? ¿Algún otro robotito?

- Jeje, no precisamente…

En esto, se derrumbó la pared y tras ella apareció nada menos que Chaos, hecho una furia.

- ¡E…es Chaos!!

- ¡JAJAJA! ¡El mismo y en persona! ¡Lo he traído gracias a mi máquina del tiempo y lo he cabreado!¡Y hasta parece que es más fuerte y todo! ¡JAJA!

Chaos empezó a atacar a Rouge y Knuckles, que a duras penas esquivaban los golpes.

- ¡Tenemos que hacer algo!- decía Rouge, apartándose a tiempo de una acometida de Chaos, que destrozó el ordenador principal, dejando inertes los robots de la isla. El objetivo se había cumplido, sin embargo ahora sus vidas peligraban. En esto aparecieron Sonic y Tails, este último casi no podía andar; Sonic le había dado fuerte por detrás.

- ¿Qué pasa aquí?

- ¡Es Eggman! Ha traído a Chaos hasta nuestro tiempo y lo ha lanzado contra nosotros!¡Y está muy fuerte!

- ¡Ataquémosle!

Sonic se lanzó hecho una bola contra Chaos y le golpeó fuertemente. Chaos rugió de dolor pero inmediatamente le respondió golpeándole duramente, que salió para atrás, se golpeó contra una viga, y cayó sobre un panel de mandos que lo hizo añicos, recibió una descarga eléctrica y quedó inconsciente.

- ¡¡Sonic!!- gritó Tails.

Poco más pudo decir. Aprovechando que el zorro estaba poco ágil, Chaos lo agarró, le dio unas vueltas y lo lanzó con gran violencia sobre Rouge, ambos impactaron contra la pared y cayeron al suelo. Rouge quedó inconsciente, no así Tails, que yacía doliéndose. Sólo quedaba Knuckles.

- ¡JAJA, tus amigos han caído y tú también caerás!- decía Eggman.

- ¡No tan rápido!- saltó una voz.

Knuckles se volvió, incluso Chaos se detuvo; era la princesa Tikal.

- ¡Eggman! ¡He venido a llevarme a Chaos, ladronzuelo!

- ¡JAJA, está incontrolado! ¡No puedes retenerlo! Está furioso de veras, de eso me encargué yo, sometiéndole a torturas, y eso le ha hecho muy fuerte!

- ¿Y qué me dices de esto?- respondió la princesa, mostrándole las siete Chaos Emeralds que había traído.

- ¡Las Chaos Emeralds!- exclamó Knuckles.

- ¡Las Chaos Emeralds! –repitió Eggman- ¡Perfecto! ¡Cuando las tome Chaos, será todavía más fuerte!

Al ver las esmeraldas, Chaos reemprendió el ataque, sin darse cuenta siquiera que se trataba de Tikal. Esta le esquivó y se las lanzó a Knuckles.

- ¡Sonic está incosciente, pero tú también puedes transformarte y derrotar a Chaos!

- ¡¡¿¿Q…Qu…QUE DICES??!!¡Chaos es demasiado fuerte para mí, no puedo derrotarle ni aun por ésas!

- ¡Confía en tus posibilidades! ¡Cuidado!

Knuckles esquivó a tiempo un nuevo ataque de Chaos.

- ¿Y tú no puedes hacer nada?

- ¡No puedo luchar! ¡Tengo… tengo la regla!

- ¿Qué? ¿¿LA REGLA??

- No puedo combatir en mi estado. ¡Tienes que hacerlo tú solo!

- ¡No puedo hacerlo! ¡Es demasiado!

- ¡Claro que puedes, tonto! ¡Eres el Guardián de la Master Emerald! ¡Venga!

- E… ¡¡ESTÁ BIEN!!

Las esmeraldas giraron en torno a Knuckles, convirtiéndole en Super Knuckles. Espoleado por el optimismo de Tikal, Knuckles sacudió primero, y Chaos le devolvió el golpe. Volvió a pegar Knuckles, pero Chaos le propinó dos zurriagazos consecutivos que dieron con Knuckles en el suelo.

- ¡Vamos, Knuckles, arriba!

- Va a matarme, Tikal. Sólo Sonic pudo vencerlo…

- ¡Ya estoy harta! ¡Sonic. Sonic, y siempre Sonic! ¡Me avergüenzas! ¿Pero qué clase descendencia he tenido? ¿Para cuándo vas a sacar la verdadera garra que llevas en tu sangre? ¿O es que siempre serás un segundón, por detrás de ese erizo azul?

La estrategia de Tikal funcionó. Knuckles, furioso consigo mismo y por las duras palabras, se levantó, y murmurando "me cago en tu puta madre" (nunca se supo a quién se refería) comenzó a girar rápidamente en torno a Chaos, cada vez más rápido, hasta que Chaos perdió la orientación, entonces Knuckles lo embistió y lo hizo caer, e inmediatamente volvió a embestirlo, Chaos intentó golpear pero Knuckles lo esquivó para aparecer rápidamente por el otro lado y golpearlo de nuevo. Chaos ya no sabía que hacer, hasta que en el enésimo golpe a Knuckles dio con su adversario en el suelo, derrotado.

- Arf…arf…Joder… Lo he… lo he conseguido…- decía Knuckles, recuperando el aliento.

Se volvió adonde estaba Tikal, pero ella ya no estaba allí.

Eggman, viendo que increíblemente Knuckles estaba ganando, se había acercado por detrás a Tikal, que no se lo esperaba, la ató, la amordazó y se la llevó de allí, rumbo a su vehículo. Antes, se paró en una habitación, y en ella estaba Charmy Bee, encadenado de manos en la pared, y una bomba sobre una mesa que Eggman activó.

- ¡Maldito huevo, suéltame!- decía Charmy.

- Tranquilo abejito, que sólo venía a activar esta bomba de aquí. En 5 minutos, volarás junto con esos pazguatos de Sonic y sus amigos. Es mi plan B…

- ¡Pues qué bien! ¿Y la princesa Tikal que llevas como un saco de patatas? ¿Es tu plan C? Porque el B te va a fallar…

- A Tikal me la llevo, ella sabe mucho sobre Chaos y poderes superiores, si adquiero lo que sabe seré el amo del mundo!

- Mmmmmmm…

- ¡Suéltala!- insistió la abeja, dándole un patadón a Eggman en el trasero.

Con la patada, la llave de las cadenas que le mantenían cautivo salió del bolsillo de Eggman, para caer sin hacer ruido en el suelo moquetado. Charmy la vio y se calló. Eggman no se dio cuenta ni tampoco prestó atención a la patada.

- Será tu último puntapié, enano… ¡Adiós!- y se fue llevándose a Tikal.

No sin mayores esfuerzos, Charmy consiguió remontarse en el pie la llave, se la lanzó a la boca y abrió su candado. Ya libre, lo primero que pensó fue en salir a buscar a sus amigos, así que los buscó a toda prisa hasta que dio con ellos.

-¡¡EY!! ¡Menos mal que os encuentro!

- ¡¡Charmy!! ¿Pero qué haces tú aquí?

-Es una larga historia… ¡No hay tiempo! ¡Eggman va a huir en su vehículo, y se lleva a la princesa Tikal! ¡Y todo esto va a saltar por los aires en 3 minutos!

-¡Vale! ¡Poneos a salvo! ¡Yo me las entenderé con Eggman!- dijo Knuckles. Sonic estaba celoso.

- Habría que verte sin las chaos emeralds…

-Vamos Sonic, lleva a esta gente a un sitio seguro, ¿podrás, o aun te duele la cabeza?

-¡Claro que puedo! ¡Ve y no pierdas tiempo!

Knuckles salió pitando y alcanzó a Eggman justo cuando estaba ya montado y con el vehículo en marcha.

- ¡Toma esto!- dijo el equidna, sacudiendo el vehículo, a tiempo que le arrebataba a Tikal. Eggman trató de virar para evitarlo, pero Knuckles le arreó otro puñetazo al vehículo, solo entonces Eggman se dio a la retirada.

- ¡AAAAG MALDITO, ESTO NO ACABA AQUÍ, VOLVERÉEEEE!!!- dijo, mientras se alejaba con su vehículo medio averiado.

No había tiempo para ocuparse de Eggman. Knuckles cogió a Tikal, que continuaba atada y amordazada, se la echó a los hombros y apretó a correr. Estaban en la última planta del edificio, de modo que no tenía tiempo de bajar las escaleras, así que de un salto se lanzó desde el balcón al vacío. Justo a tiempo, porque nada mas saltar, el edificio explosionó con un ensordecedor estruendo y saltó por los aires sacudiendo a toda la isla. Knuckles se las apañó bien para caer con cuidado, y ya en el suelo pudo desatar a Tikal. Los demás venían a su encuentro, saltando de júbilo.

- ¡HURRA POR KNUCKLES!

- ¡VIVA EL HÉROE DEL DÍA!

El único que no lo celebraba demasiado era Sonic, que no encajaba que Knuckles hubiera podido derrotar a Chaos al igual que él, ni que hubiera rescatado a Tikal.

"Bueno…" pensó "dejemos que tenga su momento de gloria".

Aquél día en la Isla de los Diamantes hubo muchos cambios. Sally volvería a poseer tan preciada ínsula, tras un tiempo dominada por los robots de Eggman, que ahora eran chatarra inerte. El júbilo de los habitantes de la isla era tal, que rápidamente organizaron una fiesta para aquella noche, al aire libre, cerca de los restos de la Central. Por supuesto, Sonic, Tails, Knuckles, Rouge, Tikal y Charmy Bee fueron invitados, y se sumó Sally, que llegó en su nave cuando la fiesta estaba comenzando.

La fiesta avanzaba aquella noche con bastante comida, bebida y algarabía, pero Knuckles no podía dejar de apreciar que Tikal, sentada frente a él, le miraba de una forma especial. En una de estas ocasiones, Tikal le guiñó un ojo, se levantó y, dirigiéndose hacia la maleza, se volvió a mirarlo de nuevo. Knuckles se quedó extrañado, pero se levantó igualmente y la siguió. Ya solos en mitad del follaje, un poco alejados de la fiesta, Tikal le dijo:

- Te agradezco que me hayas salvado, Knuckles. Lamento haber sido un estorbo a última hora.

- ¿Qué? ¿Un estorbo? ¡Que va! Si no fuera por que trajiste las siete esmeraldas…

- Es cierto. Eggman se me había llevado a Chaos y comprendí que lo querría para acabar con vosotros. Por eso las busqué. Me costó trabajo, pero pude llegar a tiempo, al menos cuando sólo tu estabas en pie…

- Y yo no confiaba demasiado en derrotarle, aun con las esmeraldas. Pero saqué… eso que dijiste… garra, jeje.

- Espero que no te haya molestado las palabras que te decía mientras luchabas con Chaos.

-¿Molestarme? ¡Qué va! Bueno, a fin de cuentas, tienes la regla y eso os pone ariscas a las mujeres, ¿no?

- Mmmm… tengo que ser sincera contigo, Knuckles. No tengo la regla.

- ¿¿?? ¿Entonces, por qué lo dijiste?

- No quería combatir en contra de Chaos… adoro a Chaos, no me gusta la violencia y menos aún, no podía asumir luchar contra él… por eso te dejé solo con él.

- Lo comprendo… ¿te lo llevarás de vuelta a casa?

- Sí, procuraré que nadie lo vuelva a perturbar ni llevárselo. Conmigo es feliz, puede decirse. Pero yo sin embargo no estoy tan feliz…

- ¿Y eso?

- Es que… verás… como te lo digo…

-¿…?

-Tengo ya una cierta edad… bueno, en mi tiempo… debería esperar a ser más

mayor, pero…

- ¿Pero que?

Tikal suspiró.

- Aún soy virgen…

- ¡…!

- Quisiera hacerlo… y sólo me atrevo a decírtelo a ti. Me gustaría que… que copuláramos… si… si no te importa, claro… más o menos, se lo que hay que hacer…

- A…a ver si entiendo… ¿quieres follar?

- ¿Así se dice en estos tiempos? Sí, tú y yo… ya sabes…

-¡Ejem! Pero… ¡PERO TIKAL! Tú… ¡Tú eres mil años más antigua que yo! ¡Tú… tú eres de otra era! YO…YO…

- Vamos, tómame- dijo, enseñando sus senos.

-YO…YO…yo creo que… que…

-Que quiero saber qué es eso. ¿O te falta suficiente… garra?

- N…¡¡No!! Está bien, vas a saber lo que es follar.

Suavemente, le fue tocando aquellos senos, aunque por un momento se quedó parado.

-¿Knuckles?

-No es que… bah, me pareció haber oído algo por ahí, olvídalo.

Dicho esto, empezó a sobarle los pechos a Tikal, que comenzaba a respirar fuerte. Tikal rodeó con sus brazos el cuerpo de Knuckles y se dejó llevar. Knuckles le desvistió de cintura para arriba y continuó manoseando cuidadosamente aquellas tetas mientras acercaba sus labios a los de Tikal.

- ¿Qué haces?

- Besarte.

-¿En los labios? ¡Me parece muy asqueroso!

- Primero experiméntalo- le dijo Knuckles, mientras le propinaba un french kiss de película, durante un minuto largo estuvieron pegados por la boca. Luego Knuckles separó sus labios para posarse en los pechos de Tikal, mientras ésta aun saboreaba el beso.

-Eso ha sido fantástico…

-Eso sólo es el principio- le respondió Knuckles, mientras empezaba a lamer la pechuga de su compañera, lo que provocó que Tikal volviera a respirar fuerte y a ceñir más sus brazos sobre la espalda de su amante. Así que poco a poco fue bajando hasta el ombligo y luego más abajo, Knuckles le bajó la falda y esas medias tan raras que llevaba, tumbó a Tikal en el suelo y le metió el dedo en la vagina, metiéndolo y sacándolo. Tikal había empezado a jadear, no entendía muy bien por qué Knuckles le estaba metiendo el dedo, cuando sabía que debía ser otra cosa, pero le gustaba.

-No pares, por favor.

-Tranquila, relájate.

-Eso intento…

Knuckles acercó su lengua hasta la hendidura, y empezó a recorrerla lentamente de abajo a arriba. A medida que los jadeos de Tikal aumentaban de tono, la lengua de Knuckles iba cada vez más para adentro, y al cabo de un rato, Tikal iba a experimentar algo nuevo para ella.

- ¡AH AAA-AAA-AAAAAAAAAAAHHHHHHHHH!!!!¡¡QUÉ SENSACIOOOON!!

- Eso que has tenido es una corrida.

-¿Corrida?

-Sí, y luego vienen dos o tres más en las mujeres por cada coito. Suele ser así.

-¿Y los hombres también tenéis corrida?

- Jeje, también, y son más espectaculares.

Pero Knuckles prefirió dejar de hablar para seguir empleando la lengua de otra forma más útil, así que prosiguió en comerle el coño a Tikal, que se retorcía de gusto con cada embestida de su amante. Realmente estaba gozando la princesa.

Knuckles supuso que ya estaba lo suficientemente caldeada como para proceder a penetrarla.

- Ven, ponte así…

- ¿Así, de rodillas?

-Sí, pero con las manos también... así, a cuatro patas.

Knuckles encaró su polla con la vagina de la princesa y la encajó dentro.

-AAAAH

-Perdona si te ha dolido, la primera suele ser la menos agradable.

Knuckles empezó el vaivén de rigor que ya nos tiene acostumbrado. Con las manos agarrando los pechos de Tikal, Knuckles bombeaba aquella vulva a ritmo de jadeos de Tikal, que de vez en cuando intercalaba entre los de placer uno de dolor.

-AHHH AH AH AH AH AYY AH AH AH AYYY SI SI SIGUE SIGUEYYY

Knuckles también suspiraba, pero de cansancio. Había tenido un día completo, pero resistía.

Mientras se la follaba, Knuckles le iba metiendo la yema de los dedos en el culo, a fin de ensanchárselo. Primero sólo la yemas, hasta que poco a poco, cabían tres dedos en el orificio. Mientras Tikal no le prestaba atención a eso, ni quería saber por qué estaba haciendo eso, ella tenía bastante disfrutando con la polla de Knuckles.

-AAAAH AH K K KNU CLEEES, CREO QUE VOY A AHH VOLVER A CORREER

-Venga, novata, CORRETEEH

-AH SI AH SI AH SIIIII… IIIIH, KNUCKLES ME CORROOOOOOO

- ¡YO TAMBIÉN ME VOY A CORREEEEEEEEEEER…!

Tikal, que había cerrado los ojos mientras sentía el vaivén del pene en su interior, los abrió y notó que una especie de líquido caliente y espeso salía del mismo y le inundaba su vagina, a tiempo que Knuckles se la sacaba y se la pajeaba en la abertura.

-¿Qué es eso?

- Es cuando nos corremos los machos.

-Ah… ¿Y con eso se acaba todo?

- En muchas parejas sí, pero… yo todavía tengo algo más que enseñarte.

-Sorpréndeme.

Knuckles abrió de piernas a Tikal y encaró su polla al otro orificio.

-Tal vez por aquí te duela un poco más que por el otro lado. Te lo he ido ensanchado un poco para que no te duela tanto ¿Estás preparada?

-Sí.

-Allá va.

Knuckles la embistió suavemente, y Tikal soltó un leve quejido. A partir de ahí, Knuckles fue poco a poco metiéndola y sacándola, a cada vez que la metía, un nuevo quejido de Tikal, mientras iba suspirando, suspiros que poco a poco fueron más fuertes y rápidos; Knuckles estaba aumentando el ritmo.

- AAAAH AY AY AAAH AAAH AYAYAYAYA AYYY VE CON MAAAAH CUIDADDDOUUUY.

Knuckles sólo jadeaba a medida que aumentaba el ritmo "por fin lo hago con una equidna",pensaba. Llegado un momento, Knuckles estaba bombeando a Tikal de forma frenética, olvidándose de que era la primera vez que Tikal follaba, de forma que los jadeos de placer pasó a los del dolor.

-AAAAH AAAAY AYA AY AY PARA AY PARA KNUCKLES AY AY AYYYY

Knuckles paró, pero para tomarse un respiro. Tikal estaba sollozando. Sentía como si se le hubiera metido un tren dentro.

- Vas aprendiendo muy rápido, Tikal.

- Por favor, Knuckles para- gimoteaba Tikal- No me siento el culo. Te lo ruego. Esto último no me ha gustado nada.

- Jejeje, pues te voy a follar hasta que me vuelva a correr de gusto. Ahora me toca disfrutar a mí… ¿Qué te pensabas? ¿Qué esto era jauja?

- ¡¡Knuckles, no, por fa… AAAH AAAAAAAAAH AAAH AAAH AAAYYYYYY!!

- Arf arf VAMOOOOS AGUANTA UN POQUITOOOO…

-¡¡¡AAAY AAAY BASTA BASTAAAY AY AY BASTAAAAAA…!!!

-¡¡YA… YA… ME CORROOOOO…!!

Knuckles sacó a toda prisa el pene el culo de Tikal, para gran alivio de la princesa, pero se sorprendió cuando Knuckles le apuntó el capullo a la cara a quemarropa. Antes de preguntárselo, una vía de semen salió del capullo para impactarle en la cara y la boca.

-AAAAH… vamos, abre la boca…

Confusa, Tikal la abrió y Knuckles le metió la polla en ella, "sabe como a yogurt" pensó la equidna, y sin saber muy bien por qué lo hacía, le pasó la lengua por el miembro viril, se la sacó de la boca y se la restregó por la cara, y aun estaba manando semen. Cuando acabó, Knuckles levantó a Tikal, le limpió la cara de semen y la besó de nuevo.

- Bien, ¿qué te ha parecido?

- Su… sublime… Sólo que se te fue la mano cuando me dabas por detrás… aun me duele.

-No te preocupes, eso es normal. Pero será mejor que te vistas y volvamos con los demás, pueden echarnos en falta.

-Sí, es verdad.

De vuelta para la fiesta, Tikal le dio una palmada al trasero de Knuckles.

- ¿Y tú sueles hacerlo mucho?

- Pues hasta hace dos días no, pero ya llevo una racha que…EEESTOOOO… a veces, Tikal, a veces nada más.

- Ajá. Pues, me ha gustado eso de… de… ¿Cómo se decía?

-¿Follar?

-Eso, follar. Tal vez algún día vuelva a viajar en el tiempo para volver a repetir la experiencia contigo. Er… quitando lo de darme por culo… y si quieres.

-Tú misma, tú mandas. Estoy disponible para otra vez, cuando y como quieras.

-Gracias, Knuckles.

Knuckles y Tikal volvieron al lugar de la fiesta, que siguió sin más cosas raras que contar. Bueno, sí, que Sonic se volvió a emborrachar, con el consiguiente enfado de Sally, que esta vez tampoco se lo podría cepillar.

(BUENO, PUES SI PIENSAS QUE ÉSTE HA SIDO EL ÚLTIMO CAPÍTULO PORQUE HA SIDO EL MÁS LARGO O PORQUE CREES QUE YA HA TERMINADO TODO, VAS LISTO, PORQUE CONTINUARÁ.)