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Confesion perversa

en Hetero: General

Esto sucedió hace apenas 2 días, es un anécdota rara pero a la ves satisfactoria y todo gira alrededor de Raquel, la hija de Doña Paquita (la sirvienta), Raquel contaba con apenas 18 añitos pero a la vez contaba con unas piernas hermosas, y el mejor trasero de la colonia, no tenia casi busto, pero por todos los santos con ese culo ¿Quién se podía quejar? Es morena con el cabello negro hasta la cintura sumamente sexy

Esta historia se desenvuelve en el estado de Jalisco, la mañana del viernes 30 de marzo, para ser precisos a las 7:00am, bueno sin mas preámbulos ese día por la mañana, me levante como cualquier día, y me dispuse a ingerir el desayuno, al llegar ala cocina me encontré con Raquel, tenia puesto un camisón color blanco, estaba de espaldas a mi en la estufa cocinando huevos revueltos, así que lo primero que vi, fue un fabuloso trasero acompañado de dos enormes y carnosas piernas

_ Buenos días Raquel

_ Buenos días Daniel ¿vas a querer que te haga el desayuno?

_ Si por favor

Ella seguía en lo suyo, no pude desprender mí vista de esas delicias de piernas para percatarme que debajo no tenía ropa interior, lo que me provocó una erección inmediata

Medio un poco de vergüenza así que me retire, pidiéndole que me llevara el desayuno al cuarto, ella dijo que no había problema.

Entre a mi habitación me recosté sobre la cama y me comencé ha ejecutar una pajita, recordando ese precioso culo ya estaba a mil cuando Raquel entro a mi cuarto con el desayuno al ver lo que estaba haciendo se dio vuelta para salir del recinto, en eso me levante como rayo y la tome de la mano y le dije

_Espera lo que estoy haciendo no es nada malo ¿tu te has dado placer sola?

_ Si muchas veces

_ ¿Te importaría si nos ayudamos para sentir rico?

Ella sólo se quedo parada sin saber que decir, yo me pare junto a ella y seguí tocando mi pija ella voltio a ver mi paquete con cierta inocencia así que no hice otra cosa que tomar su mano y ponerla sobre mi verga, ella comenzó a masturbarme mientras yo la tomaba de la cintura, la jale hacia mi y le pase las manos por la espalda bese su cuello, la hice que levantara una pierna para frotar mi verga sobre su carnosa pierna, y con mi otra mano le alcé un poco el camisón para acariciar su curvatura, que me condujo a sus sabrosas nalgas, suavecitas, duras y bien paraditas, las manosee con firmeza, le levante un poco más el camisón, la tome por detrás dejando juntas sus nalgas con mi pelvis, frotando mi verga con su trasero, le quite por completo el camisón y desde atrás le apretaba los senos y besaba su nuca, cabellera larga hasta la cintura tenia un aroma exquisito, quede abrazándola de la cintura disfrutando de su aroma.

Después la senté sobre la cama la abrí de piernas y empecé a jugar con su monte de Venus le introduje el dedo índice en su conchita y con el dedo anular toque su clítoris ella tomo mi mano queriéndola alejar de su raja.

¿Que sucede Raquel?

_ tengo una sensación extraña

_ relájate confía en mi _ le dije al momento que la abrasé

Una ves que ella se relajo me dieron ganas de verla masturbarse además que eso le ayudaría a controlar la ansiedad, así tome su mano y se la puse en su monte de Venus y le indique empezara a frotarse, ella ya sin mas temor se comenzó a masturbar, al cabo de unos minutos ella tenia la mirada en blanco estimulándome su clítoris y metiéndose un dedo en su raja, de pronto vi. que las sabanas de mi cama estaban húmedas, Raquel se mordía los labios, se poso un poco colorada, era evidente que tubo un orgasmo. Quedo tendida sobre la cama. Me acerque a ella y acariciando su rostro le dije:

_Lo que vamos a hacer a hora no lo puedes hacer tu sola

_ ¿Que me vas a hacer?

_ Cierra los ojos_ le dije al momento que le tapaba la boca con la mano

Baje a su vagina y metí mi lengua en sus paredes vaginales. Para más tarde mover mi lengua más y más rápido, Raquel me tomo de la cabeza accediendo a que tomara su chocho , cuando llegue a su clítoris lo tome con delicadeza con la punta de la lengua, ella me lanzo arañazos de desesperación en los brazos, eso me excitaba sentir su excitación escuchar sus gemidos, y sentir cada ves mas sus fluidos en mi lengua, solo estaba estimulando su clítoris tratándolo como a una joya, hasta que lanzo la ultima gota.

_ ¿Harías algo por mi? _ pregunte

_ Lo que sea_ contesto Raquel

_ Quiero que me hagas oral

_ No tengo practica pero por algo se empieza_ dijo Raquel con una picara sonrisa

por su corta edad, sus encuentros no eran muchos, bueno eso creía yo, le acerque la verga al rostro y primero con un poco d desconfianza me empezó lamer con la punta de lengua, luego chupo solo la cabeza de mi pene, hasta que agarro un poco de mas confianza se iba metiendo poco a poco la verga en su boca, hasta que llego al fondo, la tome de la cabeza y cuando llego al fondo le presione la cabeza con fuerza para que quedara unos segundos con la verga hasta el fondo, siguió chapándomela y al mismo tiempo me masturbaba con su mano, al cabo de nos minutos, la volví a presionar de la cabeza, para que no soltara mi verga y terminar en su boca, en instantes me dio remordimiento era una jovencita y la estaba tratando como una ramera así que la solté, saque mi pene de su boca para lanzar chorros de semen sobre su cuerpo, me recosté tendido a un lado de ella y le dije

_ Te debo una disculpa por ser tan brusco

_ No te preocupes yo también quería darte el mismo placer que tu me diste a mi

_ ¿Te gusto lo que hicimos? _ pregunte

_ Si nunca había sentido algo así _ contesto Raquel

_ Ya ves que no es malo tocarse

_ Si pero acompañado es mejor _ dijo Raquel secándose el semen con su camisón

_ Si tienes toda la razón_ concluí

 

Ella se levanto de la cama, en lo que la sujete y la tumbe a la cama boca abajo ella sorprendida decía:

_ ¿que vas a hacer?

_ Tú no preguntes

_ ¿me vas a penetrar?

_ Posiblemente

le pase mi lengua por su espalda de arriba abajo, en la parte baja de la espalda hice círculos con la lengua y mis manos pasaron sobre sus muy potables piernas, para que después fueran devoradas por mi lengua que complació hasta los dedos del pie, pasando unos minutos di un riguroso masaje a sus glúteos eran encantadores, no resistí mas la tentación,

_ Levanta un poco más las nalgas y abre un poco tus pies y los vas a cerrar cuando yo te diga.

_ Estoy asustada

_ Tranquila no pasa nada

Raquel levanto un poco el trasero y abrió sus piernas .yo por mi parte encaje mi verga en la raja y ya cuando entro le indique que cerrara las piernas. Por mi parte era grandioso tener contacto directo con esa delicia de nalgas, al moverme se escuchaban los golpeteos, su rajita estaba como nueva y apretaba riquísimo me moví en círculos, me estaba volviendo loco, estar montado en ese trasero era algo único, por su parte Raquel solo apretaba la boca y se agarraba de los barrotes de la cabecera, nos seguíamos moviendo sin durar mucho, me recosté totalmente sobre ella, de pronto sentí ganas de terminar y me salí de ella, lanzando semen sobre las sabanas.

_ ¿esto también te gusto? Le pregunte a Raquel

_ Necesito acostumbrarme fue un poco incomodo

_ así es al principio – conteste al momento que tomaba el desayuno

Disimuladamente Raquel se puso el camisón y salio del cuarto, este parece ser el principio de varias experiencias, haber que pasa mas adelante.