Llegamos a la casa destapamos el vino y brindamos, llegan los amigos y comienza la fiesta, las felicitaciones no cesan, mí alegría es contagiosa, de pronto llega un amigo que tenía años sin ver, en nuestra adolescencia fuimos novios, al vernos un corrientazo recorre nuestros cuerpos, el abrazo es intenso y al oído me dice lo que sintió confirmándole que sentí lo mismo; al darme el beso nuestras bocas se buscan sin importarme estaba a la mitad de la sala de mi casa rodeada de amigos y familia, nos fundimos en un beso apasionado, siento me tocan el hombro, es mi hermana que nos trae a la realidad, nos separamos lo tomo de la mano dirigiéndome con él a la cocina en busca de mis padres, ellos al verlo lo saludan afectuosamente, al igual mis hermanos y demás conocidos.
Al salir nuevamente a la sala me encuentro con mi esposo e hijos y también se los presento, menos mal no se habían dado cuenta de los sucedido en la sala, sigo atendiendo a los invitados, comienzo a bailar con un amigo y la mirada de Eduardo no me abandona, a cada momento nuestros ojos se encuentran y un temblor recorre mi piel, termina la pieza, voy a mi cuarto para tratarme de calmar un poco, mi sexo húmedo y caliente, el calor de su beso me tiene perturbada.
Salgo y escucho me están llamando el llegar a la sala nuevamente uno de mis amigos me dice para bailar pero veo a Eduardo acercarse con la misma intensión, ya Gerardo me lleva de la cintura, al pasar al lado de Eduardo le sonrío y siento su mano tocar mi nalga, me volteo y la picardía en su rostro por lo que acaba de hacer me excita, estoy bailando con Gerardo, este me aprieta contra su cuerpo, trato de zafarme pero no me deja y abiertamente me dice que le gusto desde hace tiempo y que se molesto porque me vio besar al tipo ese, no contesto nada al terminar la pieza me separo de él dándole la espalda.
Eduardo se me acerca y me dice si no le permitiré bailar ni una sola pieza con él, comienza un merengue de Fernandito Villalona y nuestros recuerdos vuelven mientras bailamos, el roce de nuestros cuerpos comienzan a excitarnos, nos pegamos él uno del otro, siento su miembro endurecerse y mi sexo se humedece, mientras bailamos me dice que arde en deseos por poseerme, le digo que el deseo es compartido, comienzo a pensar que hacer, deseo disfrutar estar con él así sea un momento, pienso una locura y le contesto que aprovechemos y me siga, con tanta gente en la casa nadie notara mi ausencia un rato.
Entramos a mi habitación, allí desesperado me empuja suavemente a la cama y se monta encima de mi besándome apasionadamente, su miembro duro me hace estremecer, al igual que sus besos, abre mi blusa, la quita no cargo sostén y su boca deseosa se apodera de mis pechos, los besa, comienza a lamerlos y chuparlos, cierro los ojos y disfruto; le digo cuanto lo deseo que es una locura lo que estoy haciendo, el riesgo que estamos corriendo, afuera las risas de mi familia me hacen reaccionar, el baja rápidamente sube mi falda quita mi hilo y por primera vez disfruto lo que tanto soñé cuando adolescente, su lengua entra en mi sexo húmedo, caliente, muerdo mis labios para no gritar, un orgasmo me estremece y siento mis jugos bajar calientes.
Él se mueve dentro de mi sexo como jamás lo había hecho mi esposo, mis orgasmos me estremecen uno tras otro, él se separa de mi sexo y yo rápidamente me siento y bajo su cierre, libero su miembro y lo meto en mi boca, de un solo golpe lo llego hasta mi garganta, chupo ansiosa ese miembro deseado durante más de 27 años, mi amor de adolescente, por fin suya; lo siento estremecer con cada chupada, cada lamida que doy llena de deseo, pasión, lujuria por ese miembro, mientras él continua acariciando mi sexo, metiendo dos de sus dedos dentro masturbándome rico, muevo mis caderas y una vez más mi cuerpo se estremece ante un nuevo orgasmo acabando en sus dedos, los saca y mete un dedo en mi culo , el placer aumenta para mí y siento explotar nuevamente.
No aguanto y lo empujo contra la cama, poseída por el momento me monto sobre su miembro, lo meto en mi sexo estoy tan mojada que entra completo, el placer es inmenso, me muevo desesperada, mis pechos bailan al ritmo de mis caderas, él los sujeta y comienza a chuparlos de pronto los muerde suavemente haciéndome explotar en un orgasmo múltiple y un fuerte gemido escapa de mi garganta, me da la vuelta dejándome debajo de él, alza mis piernas y me dice que desea hacerme completamente suya, como lo ha deseado desde que éramos novios, alza mis piernas y comienza a meter su miembro bañado en mis jugos dentro de mi culo, un grito mezcla de dolor y placer se escapa de mi garganta.
Él acaricia mis pechos lo sujeto con mis piernas empujándolo para que termine de entrar, siento como mi culo se abre forzadamente, nos movemos al mismo ritmo acelerado a cada instante y chorros de leche comienzan a salir, saca su miembro mientras aun sale la leche y la deja caer sobre mi sexo, quedamos abrazados besándonos dulcemente, arreglamos nuestras ropas y salimos de la habitación con cuidado, cada uno toma hacia un sitio diferente, yo me dirijo a la cocina necesito tomar algo, él va hacia el baño, mi esposo me pregunta donde estaba y le contesto hablando en el pasillo.
Salgo de nuevo a la sala y están bailando la hora loca mi hija me hala y comienzo a bailar con ellos, termina y de nuevo colocan salsa siento me sujetan por la cintura de espalda creo es Eduardo o mi esposo y mi sorpresa al girar es Gerardo nuevamente quien me tiene sujeta, iniciamos el baile y me dice que me vio y grabo todo lo que había pasado hacia un momento en la habitación, no puedo creerlo y sacando su celular me muestra la grabación, amenazándome ó tiro con él o lo enseña a mi esposo e hijos, le pido lo borre que lo hare, quedando en el momento que este conmigo el me dará el celular para que yo misma elimine todo, nos perdemos entre la gente, entro al baño privado del cuarto de mis padres con él, allí como un loco desesperado comienza a besarme, quita mi blusa y besa mis pechos me siento usada más nada puedo hacer.
Se me ocurre y le digo que antes de chupar mi sexo me de el celular para borrar todo así yo estar segura, contestándome que le de un oral primero, me agacho y bajo su cierre sacando su miembro duro, baboso como veneno de serpiente, paso mi lengua y el sabor me excita, me dejo llevar y cierro mis ojos y limpio todo aquello con mi lengua, lo meto en mi boca y se pierde allí, no lo tiene muy grande así que logro meterlo completamente en mi boca, lo chupo mientras acaricio sus testículos, saco su miembro de mi boca y le digo me de el celular para borrar el video.
Él esta desesperado y me lo entrega sigo mamando mientras veo el video del momento delicioso que acabo de pasar con Eduardo excitándome nuevamente, chupo con ganas el miembro de Gerardo recordando el de Eduardo, él siente se correrá y saca su miembro de mi boca sentándome sobre la tapa de la poceta colocando mis piernas separadas y comienza a lamer mi sexo que aún esta bañada con la leche de Eduardo, el morbo de saber que está limpiando el semen del otro me hace tener un orgasmo delicioso, él mete sus dedos en mi sexo haciendo que nuevamente otro orgasmo se apodere de mí mientras su lengua sigue disfrutando de mi clítoris, le pido se ponga el condón y trata de no hacerlo contestándole que ya borre toda evidencia sino lo hace me saldré y así se quedara.
Lo coloca mientras yo me coloco de espalda sujetándome al tanque de la poceta para adoptar la posición en 4 patas, él se mete entre mis piernas y coloca su miembro en la entrada de mi sexo metiéndolo de un golpe, yo empujo mis caderas hacia atrás para que entre completamente, comienzo a moverme como una perra recordando como acaba de limpiar el semen de Eduardo con su lengua y mis caderas se mueven en círculos mientras él bombea fuerte dentro de mí, mis orgasmos son seguidos mientras lo escucho decir soy un sueño echo realidad, no me importa solo me concentro en disfrutar de mi propio placer, meto y saco su miembro que chorrea con mis jugos por la excitación y el morbo, recordando acabo de estar con el amor de mi adolescencia y mi ritmo aumenta sintiendo como chorros de leche salen del miembro de Gerardo dentro de mi sexo, lo saca al terminar quita el condón y mientras yo arreglo mi ropa de nuevo él me pide limpie su miembro con mi lengua a lo que le contesto no lo hare por chantajearme.
Salgo del cuarto de mis padres y una vez más regreso a la fiesta con los invitados, estoy nuevamente bailando y riendo mientras disfruto del morbo que siento al saber que me tire dos hombres diferentes la misma noche en mi propia fiesta de graduación.
Traviesaygeorge