... -!Que haces te has corrido sin mi permiso puta¡

      Tirando de la correa con toda energía me arrastra hasta el corral donde de otra patada me introduce cerrando la puerta. Pasaron las horas, una eternidad para mi, al no poder disfrutar de la presencia de mi señora y servirla. Amanecía el sol asomaba por el horizonte se presentaba un día caluroso, cuando el sol estaba en todo su esplendor, apareció ella mi ama con su escultural cuerpo con un bañador también negro que realzaba toda su figura, extendiendo su toalla en el césped y dirigiéndose al borde de su piscina se lanzó como al agua una sirena yo la miraba paso tiempo donde está me preguntaba hasta que asomó, mi madre, pensé ,hizo todo el largo de la piscina sumergida.

       Se tumba en la toalla las gotas de agua se deslizaban por todo su cuerpo, de repente me mira y me ordena

 -Prepárate para que me traigas el desayuno , y ponte la ropa

        Me dirigí hacia donde la ropa , el ansia pudo más conmigo, el pensar que mi ama me esperaba me puse la ropa con toda rapidez . me presenté y me miro

 -¿Donde están los zapatos cerda?

 No los tenía puestos, me dio un fuerte golpe en la cara y me dijo

 -Así te he enseñado puta vete y ponte los zapatos

       Yo sin dudarlo lo hice, me sentía incomodo eran de tacón alto y al caminar tropezaba pero hice un esfuerzo y me presenté ante mi ama como me había ordenado.