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Los inicios (2)

en Voyerismo

Los Inicios

Daré un salto en el tiempo. Nos casamos al regreso de mi compromiso con el ejercito. Formando un hogar, con la esperanza de encontrar una estabilidad tanto en lo laboral y lo familiar. Al poco tuvimos nuestro primer hijo y unos años mas tarde el segundo. En esta labor forjar y fortaleces todos los pilares de nuestra familia, nuestras obligaciones para nuestros hijos y hogar, seguíamos igual que los años anteriores con la pasión, morbo, fantasías y deseos. El sexo se había convertido y es actualmente el pilar mas fuerte de nuestra relación y vida. Cuando podíamos nos montábamos nuestras historias en la habitación luz tenue, velas, aromas, etc. Me gustaba ir sex shops y empece a comprar juguetes o aceites para darnos masajes excitantes, juegos que duraban toda una noche, incluso nos ponía salir a la terraza, vivamos entonces en una avenida grande de Barcelona, desnudos y follar con el morbo que alguien pudiera vernos. ¡Uuuufff! Nos excitaba muchísimo.

No podía quitar de mis pensamientos recordar e imaginar los momentos que Eva me había contado de la perdida de su virginidad y fantaseaba con situaciones morbosas pero ya no solo en lugares, si no también con alguien mas y no ella y yo solos, pero pese a nuestra sinceridad y complicidad no me atrevía a pedirle nada. Para entonces el tema de Internet ya empezaba ser común en los hogares pues eran los inicios de los años noventa entonces nosotros teníamos treinta y tres años. Empece a visitar paginas de artículos donde pudiera recabar información sobre todo aquello del sexo liberal que me rondaba por la cabeza, descubrí las paginas de contactos donde habían foros, chats, etc. Cada vez nis deseos eran mayores, que compartiéramos nuestra sexualidad con mas personas, pero seguía sin comentárselo aunque empezamos a tener fantasías con eso.

Una tarde de primavera volvíamos solos hacia casa por una carretera solitaria ya el sol estaba ocultándose, íbamos en nuestro nuevo coche, un monovolumen amplio y muy cómodo, de repente y pillándome sorprendido mi mujer me dijo:

Eva- Todavía no hemos estrenado el coche.

Mirándome con cara perversa y sonrisa picarona.

Yo- No es un gran problema, puedo parar en algún lugar tranquilo y lo estrenamos.

Eva- ¡Vale! Busca un sitio

Entre por un camino y recorrimos uno quinientos metros saliendo explanada en el que había uno pequeño grupo de chopos junto a unos viñedos en un lado y en el lado opuesto un pequeño balate de piedra. Situé el coche junto a los arboles, y frente al pequeño muro

y prácticamente sin parar sin parar el motor Eva me agarro por la entrepierna empezando a besarnos intensamente como si fuera la primera cita de unos amantes. Hacia un poco de calor a pesar que el Sol ya estaba muy. bajo, abrimos todas las ventanillas, gire los asientos delanteros, quedando un espacio muy amplio, sentándome en el asiento del copiloto, claro esta mirando hacia la parte trasera al verle dado la vuelta. Ella se quito la blusa quedándose en sujetador que era blanco transparente, podía ver como sus pezones estaban de punta de lo excitada que estaba. Me desabrocho el cinturón, bajándome la cremallera y sacándome la polla a la vez que me miraba con esa sonrisa que siempre tiene cuando esta cachonda, besándonos con pasión. Inclinándose hacia mi verga que estaba ya poniéndose dura, Metiendolsela entre su boca en un principio con suavidad, intercalando lamidas desde mis huevos a la punta de glande y pajeándose. Desabrochándome la camisa, con lo que ella podía acariciarme mi pecho mientras seguís con mi rabo, ya duro, en su boca cada vez con mayor ansiedad, ¡¡Uuuufff!! Como me ponía esa situación y que cachondo estaba, me gustaba ver a Eva en esa actitud de zorra caliente. Le desabroche el sujetador , quitándoselo. Soltándose su pechos, grandes, una talla 100B, con unos pezones duros, rodeados por unas aureolas que cuando esta caliente, como era la situación, se le encojen, pero son como una pequeña galleta dorada. Me tenia muy cachondo, en ese momento dispuesto a todo, seguía con sus lamidas, tragándosela entera, una y otra vez, ayudándome a bajarme el pantalón y quedándome mucho mas cómodo y mejor para que ella me cojiéra con una mano mis pelotas y con la otra seguía masturbándome sin sacar de su boca mis diecisiete centímetros de polla como una piedra. Pase mi mano por debajo de su falda y buscando con mis dedos su sexo entre su tanga.

Una vez conseguido pude apreciar,normal en Eva, estaba empapada y soltando pequeños gemidos de gusto al sentir las yemas de mis dedos por su vagina, intentando con mis dedos hacerme paso entre sus labios. Le quite el tanga blanco transparente a juego con su sujetador. Recline el asiento que tenia frente a mi, recostándola sobre el. Poniendo, Eva, su pies sobre el asiento en el que estaba yo, abriendo sus piernas lo suficiente para que yo pudiera situarme entre ellas, ofreciéndome su coño depilado totalmente que brillaba por la excitación, con su mirada de picara zorrita. Y me incline empezando pasándole la lengua por su labios externos.

Eva- ¡¡Ummmmm!! ¡¡Siiiiii!! ¡¡Siiguee cabrón me gusta!! Estoy muy cachonda.

A si lo hoce, con mi lengua fui jugueteando con su rajita, y ella acariciaba su clítoris con suspiros de placer. Mientras yo estaba por el tema ella se detuvo un instante.

Eva- ¡Creo haber visto a alguien! Para, para.

Mire pero sin ver a nadie.

Eva- Serán cosas de lo caliente que me tienes, sigue comiéndome el coño como estabas haciéndomelo.

Seguí con mi lengua abriéndome sitio entre sus labios, absorbiendo su néctar que brotaba… Pasando unos minutos que ella estaba derritiéndose con su primer orgasmo, volvió a detenerse…

Eva- ¡Sii! Hay alguien ahí fuera.

Mire

Yo- Si tranquila he visto a alguien.

Eva- Vámonos

A unos quince metros había un chico, árabe, agazapado mirándonos muy atentamente sin perder detalle. Yo creí que en ese momento se iba a terminar nuestra pasión en la que estábamos entregados. Pero Eva y yo estábamos tan calientes que no nos importo. Volví a inclinarme hacia aquel manjar que un poco antes tenia en mi boca, entreteniéndome con su clítoris metiéndole un par de dedos en su coño, dirigiéndolos hacia su punto que bien lo tenia localizado, soltando grandes gemidos, de nuevo teniendo otro orgasmo.

Eva- ¡¡Cabrón, como sabes y como me conoces!! ¡¡Aaaggg!!

Su cuerpo que contrajo y dejando mi mano totalmente mojada, incorporándome de pie frente a ella con polla tiesa frente a su cara, agarrándole yo de la cabeza metiéndosela en su boca follándole. Se retiro de nuevo.

Eva- El chico se ha acercado.

Yo- ¿Lo dejamos?

Eva-¡No! Me da morbo, estoy muy cachonda. Me da morbo que tengamos un mirón.

Me puso a mil por hora si no lo estaba lo suficiente, esa situación y ver a mi mujer tan desinhibida.

Eva- ¡Mira cariño se ha sacado la polla y joder que polla!

Volvió a agarrarme el rabo y siguió con su mamada repasando con su lengua mi capullo, lamiendo mi tronco y absorbiendo mis huevos, mirada de lujuria y vicio pero no la dirigía hacia mi si no al morito que estaba junto a la ventana del coche a poco mas de dos metros.

Ciertamente me incorpore un poco, observando que estaba exhausto mirándonos muy atentamente a la vez que se meneaba su polla, se veía larga y dura como me había dicho Eva. Seguía con su paja, la tenia agarrada con su mano y le sobresalía por encima tanta polla como agarrada tenia.

Con esa situación no pude evitar en imaginarme todas las fantasías que desde hacia tanto tiempo me rondaba por la cabeza de compartir a mi mujer y verla disfrutar, y vi que ella con lo salida que estaba podría ser una oportunidad que se o me ofrecía.

Yo- ¿Te gustaría tener ese pollón

Eva- Por que no

Yo- ¿Le llamo?

Eva- ¡No! ¡Quiero que me folles ya! El cabrón del morito me ha puesto mas cachonda.

Se arrodillo en el asiento, abriendo sus piernas ofreciéndome su coño abierto y muy mojado, pidiendo que algo duro le entrara. Me situé detrás de ella agarrando mi verga dura apuntando a su agujero e ir introduciéndosela sin resistencia, pues Eva al ser multiorgásmica su coño se dilata algo mas que el resto de mujeres, lo que le hace ser mas receptiva e exigente, o se aque cuanto mas tiene mas quiere, se vuelve insaciable.

Seguí empotrándomela , su cabeza golpeaba en el respaldo del asiento, arqueándose corriéndose de nuevo.

Eva- ¡Mas fuerte cariño! ¡Dame mas fuerte! ¡Aaaaaaaagggg! ¡Que gusto cabrón!…

El chaval estaba ya junto a nosotros, con su cabeza casi dentro del coche. Eva mientras recibía mis envestidas con mi polla, solo que hacia que mirar al morito y su larga herramienta ya roja de tanto pajeo. Mire hacia el y vía que había cojido el tanga de Eva que, estaba en el suelo del coche, pajeándose con el lo que nos dio mucho morbo y fue lo que nos falto para estar al limite, no aguante mas.

Yo- ¡Me corro cariño! ¡Voy a reventar!

Solté toda mi lefa dentro de sus entrañas de su cueva de placer, brotando de el sus flujos de lujuria y retorciéndose como si hubiera recibido una descarga eléctrica. Y el morito soltó varios chorros de leche que impacto sobre la puerta del coche, mirando fijamente a mi mujer con ojos de perverso. Y uuuuufffff Fue la culminación de un gran polvo en un estado de morbo total.

Quedándonos relajados cada uno en uno de los asientos, ella con las piernas abiertas y saliendo de su coño las esencias del placer y yo con mi polla ya casi flácida, exhausto. Pasaron unos minutos ya se había hecho de noche prácticamente y nos incorporamos aseándonos un poco como pudimos, miramos pero el chaval había desaparecido con el tanga de Eva. Colocamos el vehículo en condiciones para seguir nuestro corto viaje y llegar a casa donde pudimos darnos una buena ducha y poder pegar un polvo recordando lo ocurrido y Eva sin olvidar el largo falo del árabe.

Creo que volvimos a subir otro escalón hacia nuestro cambio de rumbo hacia el mundo del vicio y la perversidad.