miprimita.com

Infidelidad temprana

en Hetero: Infidelidad

INFIDELIDAD TEMPRANA

Relato 1 (Infidelidad)

 

Somos un matrimonio ya en los cincuenta, y desde que nos conocimos con apenas quince años, siempre hemos estado muy unidos compartiendo ilusiones, gustos, deseos, fantasias, lo que es disfrutar de la vida lo mejor y mas feliz posible. Y respecto al sexo siempre a sido un pilar muy importante y fundamental en nuestra relación como pareja. Y es lo que pretendo irlo contando y compartir parte de nuestra vida con vosotros y esperando sea de vuestro agrado y por que no saber vuestras opiniones.

 

Todo empezó en una tarde de verano, mis tíos tenia una casa en una urbanización de montaña, como segunda residencia para fines de semana y vacaciones. En uno de los chalets se iba a celebrar la verbena de San Juan, costumbre muy arraigada en Barcelona, ciudad de donde procedemos.

 

Llegado el momento, junto mi primo, nos dirigimos hacia la fiesta, los dos acicalados como mandaba la ocasión. Mi primo me fue presentando al grupo de chicas y de chicos de la pandilla, casi todos de nuestra edad mas o menos, entre los quince y veinte años casi todos. Los padres también estaban al acecho controlando que nadie se desmadrara, aunque poco a poco se iban marchando a su celebración que tenían en la casa contigua.

 

Al poco aparecía ella, Eva, bajando las escaleras acompañada de su hermana, me impacto su belleza, pelo rubio casi por cintura, con un vestido negro floreado con margaritas grandes amarillas y un escote en V, unas sandalias con un poco de tacón de color negro. Pese a su edad adolescente, su cuerpo totalmente formado como el de una mujer veinteañera.

 

Al entrar saludo a todos, se acerco a saludar a mi primo, quien me la presento. Quedándome embobado con su belleza y sus ojos verdes cautivadores, me miro, me sonrió, dándonos dos besos castos en cada mejilla y siguió saludando al resto de amigos y acercándose al grupo de chicos de mas edad con los que estuvo charlando y riendo con mucha complicidad, lo que me llamo la atención. Y mas cuando observe que uno de ellos, un tal Juan, le paso su mano por la cintura atrayéndola hacia el, susurrándole algo al oído, separándose ella de el diciéndole algo y viniéndose hacia donde estabamos nosotros, algo alterada.

 

Le ofrecí un refresco, acompañándome a la mesa de bebidas y le pregunte que si habia ocurrido algo con ese chico, a lo que me respondió que no, que era el hermano de su mejor amiga y era un pesado y un golfo.

 

Juan era un chico que casi nos doblaba la edad y ¡Si! Tenia pinta de lo que ella me habia dicho. Pero la noche y la fiesta fue transcurriendo y lo cierto que Eva y yo apenas nos separamos charlando, bailando tanto canciones rápidas como lentas. En estas poco a poco nos íbamos agarrando mas y mas cerca. ¡ Y que bien olía! Jamas olvidare esa fragancia que todabía hoy recuerdo y me estremece.

 

Al terminarse la verbena ya a altas horas de la madrugada quedamos en ir por la mañana a las piscinas del pueblo. Después de dormir un poco bajamos al pueblo, entramos en las instalaciones y poco a poco fueron llegando todos. Eva me sorprendió de nuevo al verla aparecer con un bikini color azul muy escotado y una braguita brasileña con su cuerpo espectacular, nada que ver con las demás chicas del grupo. No es muy alta, un cuerpo contorneado, su melena rubia a media espalda, cintura estrecha y pecho terso y grande y su culo redondo perfecto o sea un cuerpo deseado por todos.

 

Después de ese día y esa noche decidí que todos los fines de semana iría de visita a casa de mis tíos y por eso el grupo me acojio sin problema. Les caí muy bien por mi forma de ser. Eva y yo poco a poco nos fuimos uniendo cada vez mas, proponiéndole que nos siguiéramos viendo después del verano, respondiéndome ella, que yo le gustaba pero que sus padres no le dejaban salir si no era con la pandilla o su hermana, lo que no me importo, le respondí. Quedamos en seguir saliendo en pandilla los fines de semana ya por Barcelona.

 

Empezamos a quedar y salir juntos pero en grupo, solíamos ir los sábados por la tarde a un par de discotecas donde pese a la edad, no habia inconveniente nuestra entrada. También organizábamos excursiones, lo cierto que habia muy buen ambiente muy ameno y divertido. El salir con la pandilla para nosotros fue una tapadera, aunque no salíamos oficialmente.

 

Pasado el invierno nos fuimos apartando del grupo y ya de vez en cuando salíamos solos, ya no solo iba a verla los fines de semana si no casi a diario. Ya para entonces trabajábamos los dos. Ella tenia jornada continua por lo que terminaba al medio día y por las tardes aprovecho para ir a una academia de peluquería. Yo en cambio salia de trabajar a las siete de la tarde y como mi trabajo estaba cerca de su academia solía ir a buscarla cuando terminaba las clases y nos íbamos a dar paseos como dos tortolitos. Me sentía feliz y afortunado de ir con una joven tan bonita y como si fuera un diamante en bruto que cada vez era mas mio, eso si una joya deseada por los hombres, que la miraban con deseo y a veces obscenas lo que tengo que reconocer que me molestaba.

 

A ella le gustaba ya vestir sexy y provocativa con ropa ceñidas y escotes con los que a si lucir sus precioso escote, con su caminar de contoneo por sus altos tacones. Pretendientes no le faltaban lo que me hacia sentir orgulloso y feliz de que aquel pivon saliera conmigo y se hubiera fijado en mi. Entonces sin sospechar que poco después descubriría lo que habia maquinado a costa mía.

 

Llegado el buen tiempo de nuevo y los fines de semana volvimos a subir a la urbanización y me decidí a pedirle de salir regalándole un anillo de plata, a lo que ella accedió haciéndome totalmente feliz y de nuevo empezamos a salir como pareja. El verano transcurrió fenomenal divirtiéndonos junto con la pandilla ir a la piscina, las fiestas e ir al merendero por las tardes noche.

 

 

En este, una de esas ocasiones que estabamos tomando una cerveza, volvió a aparecer el tal Juan, se nos acerco con la escusa de preguntar por su hermana y acercándose a Eva susurrándole algo al oído, percibí que entre ellos habia alguna complicidad. El algo enojado la increpo, lo que hizo que a ella le cambiara el semblante de su cara levantándose y bajando las escaleras del bar y quedándose muy pensativa con cara de preocupación. Le seguí y le pregunte…

 

 

Yo- ¿Que pasa?

 

Eva- No ¡ Es un gilipollas! Dejalo …

 

Estaba claro que algo ocultaba y me molesto que no me lo contara y no confiara en mi.

 

Al sábado de la semana siguiente, por la tarde decidimos ir a la discoteca del pueblo. Una vez en ella fuimos a pedir unas copas, mi primo y yo, a ella la vi rara se distancio un poco de nosotros lo que me enfado y decidí que lo mejor seria hacerme el tío duro con ella, pensando que podría atraer mas su atención. Por lo que me dedique a disfrutar de la tarde de disco con el resto de chicas del grupo bailando y tomando copas. Llego el momento de las canciones lentas, viendo a Eva bailar con Juan muy acaramelados,ella iba preciosa, como siempre, con un vestido blanco de gasa tipo ibicenco con su escote y tirantes muy estrechos, a juego unas sandalias de plataforma blancas de esparto. Bailaban muy juntos, el susurrándole al oído con sus manos en las caderas. Su hermana se les acerco y algo le recrimino, pero ella paso de todo. El agarrándole la mano estiro de Eva y desaparecieron de la pista de baile. Me acerque a su hermana preguntándole que ocurría, a lo que me respondió que no quería que se juntara con Juan, pues no era una buena persona y si sus padres se enteraban lo pagarían las dos.

 

Cierto que después de la discusión con su hermana no sabíamos donde se habían metido. De mi se apodero un sentimiento de decepción y cabreo. Ya casi a la hora de irnos apareció Eva, se le veía algo aturdida pero bien, termino la sesión de discoteca y salimos a la calle, ahí estaba Juan, en su coche, ella se subió en el asiento delantero justo a el, ofreciéndonos a su hermana, mi primo ya mi el que nos subiéramos para subirnos a la urbanización. Durante el camino nadie dijo una palabra, solo el le miraba con una sonrisa prepotente. Llegamos a la casa de mis tíos nos bajamos del coche, Eva me miro seria desendemonie con un movimiento de mano.

 

Llegando el lunes decidí ir a verla, espere que me llamara, pero esa llamada no llego por lo que volví a mi rutina anterior que era ir a mis entrenos de fútbol y volver con mis antiguos amigos. Tampoco volví a la urbanización, en mi mente solo la tenia a ella. Pasado un par de meses, un día al salir de mi trabajo decidí ir a buscarla a la academia. Mi sorpresa fue que al salir se quedo sorprendida al verme, se me acerco y me dijo…

 

Eva- ¡Hola Manu! ¿Que tal estas?

 

Yo- Bien algo dolido, creía que teníamos algo entre tu y yo.

 

Eva- Tenemos que hablar.

 

Estaba preciosa con su melena rubia recogida en una coleta, una camisa blanca con su escote embaucador, falda estrecha por la rodilla y sus botas de tacón alto.

 

Yo- Bien vamos a tomar algo y hablamos.

 

Eva- No, hoy no puedo.

 

Yo- ¿Por?

 

Eva- Hoy no puedo, tengo que irme, me esperan.

 

Me dio dos besos en la mejilla, cruzo la calle y a mitad de la calle vi que se subía en el coche de Juan. En ese momento decidí pasar ya de ella, si algo quería decirme ella ya me llamaría. Estaba claro con quien quería salir, dirigiéndome a la entrada del metro e riéndome a mi casa.

 

Pasadas una par de semanas estaba en casa, sonó el teléfono, descolgué y era ella…

 

Eva- Hola Manu

 

Yo- Dime

 

Eva- ¿Podemos quedar? Tenemos que hablar y tengo que contarte algo.

 

Yo- Bien. Si quieres mañana puedo ir a buscarte a la academia.

 

Eva- Pues entonces asta mañana.

 

A la tarde siguiente como quede con ella, a su salida de la academia estaba esperándole en la puerta, la vi bajar por la escalera junto a sus compañeras charlando, iba con un pantalón tejano ceñido, un suéter de cuello alto, una cazadora tejana y sus tacones de costumbre. Dirigiéndose hacia mi, dándonos un par de besos en las mejillas.

 

Eva- Vamos a un sitio tranquilo que podamos hablar.

 

Yo- Vamos a los jardines del parque.

 

Eva- Bien.

 

Nos dirigimos al metro, durante el camino no me dijo nada se le veía muy nerviosa, me agarro de la mano mirándome a los ojos, llegamos a nuestra estación, bajamos , nos dirigimos hacia el parque, buscamos un banco en el jardín que estuviera discreto.

 

Yo- Bueno ¿Que me tienes que contar?

 

Eva- Se que te va a doler lo que te voy a decir y te enfadaras solo quiero que me escuches.

 

Yo- ¡Dime! Ya veremos.

 

Eva- No quiero hacerte daño, por eso quiero ser sincera contigo. Empece salir contigo para utilizarte de tapadera, pero en este tiempo me he enamorado de ti y por eso entenderé lo que hagas después que te cuente lo que tengo que decirte.

 

Yo- ¿ Me utilizaste?

 

Eva- Si Manu. Perdoname. Quiero primero que sepas que no soy Virgen.

 

Yo- ¿Como?¿ Me has engañado? Creía que lo nuestro era algo serio, tus padres ya me conocen, me siento muy jodido, creo que no tenemos nada mas que hablar.

 

Se puso a llorar, encomendado la mano, soltándosela yo bruscamente.

 

Eva- Por favor dejame que te cuente necesito que me ayudes.

 

Yo- ¿Con quien a sido?

 

Eva- Juan.

 

Yo- Lo sabia. ¡VETE CON EL!

 

Levantándome riéndome, ella quedándose llorando en aquel banco del jardín. Llegue a mi casa encerrándome enfadadísimo en mi habitación, mi madre me pregunto que me pasaba, contándole que habia discutido con Eva. Yo seguí de nuevo a mi rutina de nuevo. Haciendo el esfuerzo por olvidarme de ella pero era prácticamente imposible. Me llamo varias veces pero no estaba yo en casa, mi madre me dejaba los recados pero yo no le devolví las llamadas. Pero un sábado al medio día sonó el teléfono de casa, descolgué…

 

Yo- ¿Dígame?

 

Teléfono- Manu soy Eva

 

Yo- ¡Hola! Dime.

 

Eva- Tenemos que hablar, te quiero, perdoname.

 

Yo también seguía enamorado de ella y la verdad que no me la podía quitar de la cabeza, aquella mujer me tenia loco, y después de esos días de alejamiento con ella pensando en lo ocurrido me di cuenta que podríamos superarlo, pese a estar muy dolido y algo de desconfianza con ella.

 

Eva- ¿Manu? ¿Me has oído?

 

Yo- Si. ¿ Y que quieres ahora?

 

Eva- Quedemos, quiero que me perdones, te contestare a todo, no es lo que tu crees, me he dado cuenta que tu eres el hombre que quiero.

 

yo- ¿ Otra vez me quieres para que te haga de tapadera?

 

Eva- (Llorando) No por favor, te necesito, ayudame, te quiero.

 

Yo- ¡Bien! Mañana por la tarde a las cinco paso a buscarte por tu casa.

 

Eva- Gracias Manu, asta mañana.

 

Tal como quedamos fui a su casa, mi recibimiento tengo que reconocer que fue frio, dijimos de ir a un pub y hablar tranquilos. Al llegar buscamos un rincón tranquilo sentándonos pidiendo una copas y le pedí a Eva que le escuchaba.

 

Eva- ¡Bien! Hace ya casi dos años que nos conocimos en la verbena y lo que te dije es cierto, al principio no me interesabas ni sentía nada por ti, pero poco a poco te ido conociendo y me has ido enamorando siendo como eres, tu físico y sobre todo tu carácter. Pero antes que nos conociéramos Juan ya iba tras de mi. Yo no quería nada con el, pero al ser el hermano de mi mejor amiga cada vez que iba a su casa, el siempre estaba por ahí. ¡Es un hijo de puta! Se aprovecho de mi , tiene mucho mundo corrido, ten en cuenta que el entonces tenia doce años mayor que yo. Sabe perfectamente seducir a las mujeres, siempre diciendo cosas bonitas amables que me gustaban, poco a poco caías en sus intenciones, me decía que que estaba enamorado de mi, me fue ganando. Hasta que consiguió lo que quería.

Yo- ¿Cuando ocurrió?

 

Eva- La tarde que fuimos al pueblo el verano pasado, a la discoteca, que mi hermana me regaño por estar con el.

 

Yo- Recuerdo perfectamente esa tarde

 

Eva- Fuimos con su coche al cauce del rio.

 

Yo- Cuéntame lo que ocurrió.

 

Eva- ¡Por favor! Ya te lo contare, ¡Pero ahora no! Y no es que no quiera contártelo, entiéndeme. Yo te utilice para que mis padre creyeran que salia contigo. Perdoname no quería hacerte daño, pero me he dado cuenta que el me tenia engañada y me chantajeaba con que si le dejaba se lo contaría a mis padres.

 

Yo- ¿ Y por que seguías con el? ¿ Y ya se termino?

 

Eva- Si se ha terminado, me asusto mucho amenazándome con lo de mis padres, me propuso de fugarnos, me asusto mucho y nos ese lo que pretendía conmigo a parte de follarme. Con sus antecedentes podría ser cual quier cosa y no buena.

 

De nuevo se hizo el silencio, yo no sabia que pensar…

 

Yo- Bueno, si es que quieres podemos volver a intentarlo, pero entenderás que en un tiempo desconfié, de ti depende que eso cambie.

 

Eva- Gracias Manu, eres una buena persona (Sollozando) se me acerco y nos dimos un largo beso como nunca nos habíamos dado, jugo en mi boca con su lengua, no era aquella muchacha que me besaba, ¡Era una mujer !

 

Desde ese día empezamos a salir solos ya con el consentimiento de sus padres, quedando el tema de su devirgamiénto y aventura por Juan, como un tema tabú que no nos decidíamos a hablarlo en profundidad.

 

Tal vez por ese motivo, nuestra relación se hizo muy ardiente, entre nosotros conseguimos tener mucha complicidad y nos unimos mucho, lo que dura todabía ahora casi cuarenta años después. El sexo se convirtió a ser, y es, muy importante en nuestra relación. Nos gustaba disfrutar de la vida, nos hicimos una joven pareja muy morbosa. Nos gustaba experimentar nuevas y excitantes situaciones, solíamos ir a Montjuich a sus jardines, sin importarnos que nos vieran, en ocasiones nos gustaba ir al cine Arenas, un antiguo teatro, que proyectaban películas clasificadas S, cine erótico. Siempre subíamos a los palcos, donde nos gustaba acariciarnos, besarnos, masturbarnos ella me comía la polla. Se oían gemidos, susurros y jadeos de algún palco cercano y se mezclaban con los de las películas, muy muy morboso.

 

El tiempo fue transcurriendo iban pasando los meses y como una pareja como otra cualquiera pero sexualmente mas predispuestos y con ganas de experimentar nuevas cosas.

Como no teníamos donde follar nos íbamos a los moubles, que en Barcelona siempre han sido conocidos, hoteles surgidos a finales del siglo diecinueve, destinados a infidelidades y parejas de cual quier condición sexual, con un total anonimato y a si poder disfrutar los oscuros deseos del placer, decorados algunos de de forma ro coco, como la Casita Blanca que lo hacia muy morboso. Ahora estos tipos de hoteles ya muy habituales en casi todas las ciudades. Ya llegada la mayoría de edad y con coche, nos permitió a tener mucha mas libertad y fue cuando nos aficionamos a ir a playas nudistas, habitual actualmente pero no a finales de los años setenta.

 

Ya casados pasados unos años, un día después de tener una noche de sexo y fantaseando surgió de nuevo “ El Tema” Y me dijo que lo que mas le dolía que yo no hubiera a quien le hubiera entregado su virginidad…

 

Yo- No te preocupes, pero la verdad si deso que me cuentes todo, con todo tipo de detalles.

 

Diciéndole eso mientras mis labios besaban lo largo de su nuca, acariciando con las yemas de mi mano uno de sus pezones duros como un garbanzo y ella rozaba con su mano mi pene ya algo flácido después de haber terminado de follarle. Eva se acomodo dispuesta a contarme lo ocurrido hacia casi diez años que para nosotros siempre habia sido como un fantasma que nos seguía y ninguno queríamos enfrentarnos a el. Nos tapamos con las sabanas de raso blanco…

 

Eva- ¡Bueno! Juan desde que lo conocí siempre ha ido detrás mio, nos conocimos poco mas de una año antes de conocerte a ti, mis padres y los suyos hicieron buena amistad. Y la semana antes de la fiesta, mis padres tuvieron que bajar a Barcelona y volverían al día siguiente. Mi amiga convenció a mi madre para que me quedara con ellos esa noche, lo que le pareció bien. Bea, mi amiga, dormía con su hermana pequeña en una habitación y yo en otra habitación sola. Al rato de acostarnos y ya todos dormidos, alguien abrió mis sabanas y se metía en mi cama, notaba como se arrimaba a mi, empece a sollozar, el me pedía que estuviera tranquila que ya se iba, que solo quería decirme lo bonita que era y que me deseaba. Se me acerco mas y note su polla dura en mi costado al estar el a mi espalda tumbado. Me giro la cara y me morreo sintiendo su lengua dentro de mi boca, quedándome como una estatua de mármol. Era la primera vez que me besaban a si, asta ese momento mi experiencia era algún beso con un chico del instituto, pero dándome cuenta lo que era un morreo con un hombre y mi inexperiencia total. Se levanto y se marcho, toda la noche me la pase sollozando sin poder dormir, ya habia dado un paso mas y no me atreví a decir nada. Al día siguiente por temor de que se enteraran y pese a lo mal que me sentí, me gusto ser deseada y lo zalamero que era conmigo como me piropeaba y las cosas que me decía.

 

Mientras me contaba me sentí dolido por que un cabrón de mierda se aprovechara de la inocencia de una joven inocente. Siguiendo Eva su relato.

 

Eva- Por eso el día que nos conocimos en la fiesta tenia yo esa actitud con el, me dijo que después cuando el me dijera le siguiera. Al no fiarme vi contigo la oportunidad de protegerme de el. Pero el sábado que fuimos a la discoteca yo baje al pueblo con el en su coche junto a su hermana Bea y Rosa otra amiga de la pandilla. Mi sorpresa fue cuando vi que el también entro con nosotras. Se junto a mi, me dio a beber un poco de su copa y siguiendo con sus piropos diciéndome lo que sentía por mi. La verdad que me embauco me fue ganando como una tonta. Cuando empezaron las canciones lentas me dijo de bailar. Que fue cuando mi hermana se nos acerco y me increpo, pase de ella, me sentía bien con el, seguimos bailando el se me pego, bajaba cada vez mas sus manos hacia mi culo, no me importaba, me besaba el cuello mientras seguía con sus elogios hacia mi. Note en mi vientre de nuevo la dureza de su pene. Me pidió que fuéramos a la zona de sofás, a lo que con un movimiento afirmativo con la cabeza. Nos dirigimos a la zona mas solitaria. Trajo unas copas y empezamos a charlar contándome los planes que tenia para los dos. Me rodeo con su brazo por mis hombros atrayéndome hacia el, empezándome a besar en los labios, yo no le correspondía, pero poco a poco fui cediendo, percatándose de mi inexperiencia, diciéndome que tranquila que el me enseñaría a ser una mujer y amante. Pasando a un morreo intenso, sabia besar muy bien, jugaba con mi lengua, sintiendo sensaciones que nunca habia sentido.

 

Mi actitud de lo que me estaba contando cambio, me empezó a gustar y se apoderaba de envidia , morbo y deseo.

 

Eva- ¿Te estas poniendo cachondo?

 

Me pregunto al sentir mi polla ponerse morcillona al estar rozándole con ella en sus nalgas, por tenerla abrazada por detrás y acariciándole sus pezones tiesos mientras seguía contándome.

 

Yo- La verdad que si, me estoy poniendo cachondo, pero sigue por favor.

 

Eva- Seguía besándome y empezó a meter su mano bajo mi vestido, intente evitarlo pero estaba entregada a el, me sentía mojada como nunca, Siguió avanzando con su mano por mi muslo, tengo que reconocer que le facilite su progresión abriendo un poco las piernas, llego a mi sexo, era el primer hombre que me tocaba ahí, y claro noto que estaba mojada. Susurrándome…

 

Juan- ¡UUUUUMMMM! Estas muy húmeda ¿ Estas cachonda?

 

Eva- ¡Si, me gusta!

 

Juan- ¡Mira!

 

Eva- Agarro mi mano acercándoselo a su paquete, tenia la polla dura y se le notaba un buen bulto. Bajo la cremallera de su pantalón y me hizo que metiera mi mano, no llevaba slip y acaricie su polla torpemente. Estaba duro como una piedra, pero enseguida la retire diciéndole que nos podían ver.

 

Juan-¡Tranquila! Yo te voy a enseñare todo lo que tienes que saber y hacer. ¿Quieres que salgamos y vayamos a un lugar mas tranquilos.

 

Eva- Yo accedí y salimos de la discoteca con el cuidado que nadie se diera cuenta y fuimos a buscar el coche con el que nos fuimos a la zona de la ribera del rio.

 

Yo- ¿ Por que quisiste ir?

 

Eva- Estaba cosas nuevas, me gustaba, mi experiencia era algún beso inocente en los labios con algún chico o contigo y en mi intimidad alguna caricia en la ducha pero poco mas, y eso podía mas que nada.

 

Yo- ¡Ya! Que estabas cachondísima.

 

Eva- ¡Si! Al llegar aparco bajo unos sauces para camuflar algo el coche, por si pasaba alguien, pero ya era tarde anocheciendo y no habia nadie por la zona, algún otro coche con otras parejas. Volvió a rodearme con su brazo, echo los asientos hacia tras y reclino los respaldos, estaba claro que no era la primera vez que lo hacia. Empezó a besarme de nuevo por mi cuello, pero esa vez ya fue mas al grano, morreandome intensamente metiendo su lengua jugando con la miá, me mordía los labios y poniendo sus manos en mis tetas, estaba entregada a su juego. Me retiro los tirantes a la vez que me besaba mis hombros, no tardo en sacármelas y lamerme los pezones duros, el ya se habia desabrochado los pantalones, agarro de nuevo mi mano y haciendo que le agarrara su polla, no podía rodearla con mi mano era muy grande y dura como una piedra notando sus venas.

 

Juan- ¡ Agarrámela, y meneamela!

 

Eva- A si lo hice, empece con torpeza a pajearle, , era mi primer rabo de un tío que tenia en mi mano. El gemía de gusto, aviá avanzado, ya habia metido su mano bajo mi braguita, yo le pedí que no siguiera, pero lo tenia fácil para convencerme. Mi vestido estaba enrollado en mi cintura, mis tetas y mi coño al aire, seguía jugando con sus dedos en mi rajita, mientras yo seguía masturbándolo ya con mas calidad lo sabia por sus gemidos.

 

Juan- ¿Estas cachonda? Ves en el fondo eres una buena zorrita, se te nota.

 

Eva- No se pero me gusta.

 

Eva- EL abrió los labios de mi coño, estaba empapada, empezó a meterme un dedo a la vez que con otro acariciaba mi clítoris haciéndome gemir.¡Ummmmm! Me gusta sigue, le decía. No sabia que me estaba pasando, notaba como se me erizaba el vello y algo ocurría en el interior de mi cuerpo, que hacia que me retorciera como una descarga eléctrica por mi espalda, y no pude reprimir un grito acompañado de unos suspiros prolongados y notando como si me orinara. ¡Ummm! Que bueno, le decía, Estaba teniendo mi primer orgasmo. Notaba su pollón en mi mano como se contraía y como una barra de hierro.

 

Yo- ¿Como seria de grande?

 

Eva- No se calculo que mas de veinte centímetros,¡Si claro mas de veinte seguro! Y gorda mínimo como un vaso de tubo con un capullo brillante poco mas gordo.

 

Yo- ¡ Joder! Que cabronazo. ¿Notas como tengo mi polla?

 

Eva- ¡ Eres un cabronazo! Te has puesto cachondo. ¡Bueno! El se quito el pantalón y se coloco encima mio, se agarro el rabo y empezó a jugar con su capullo en los labios de mi coño. Yo le pedí que no, eso que pretendía que no. El era un buen cabrón, sabia convencerme con sus dulces palabras, empezó a besarme dulcemente y poco a poco me la fue metiendo. Me tenia metido poco mas que el capullo y sentí como no entraba mas, pero siguió moviéndose y cada vez golpeaba mas fuerte y de pronto dio un golpe mas fuerte, sentí un dolor y se me saltaron las lagrimas, siguió besándome y follándome cada vez mas rápidos y rítmicos, sabia que hacia, me metió mas de media polla y tuve otro orgasmo, agarrándome a sus hombres con fuerza mientras curvaba mi cuerpo a la vez que seguía gimiendo de gusto. Saco su pollón de mi coño, algo manchada de sangre, y soltó su corrida en mi vientre, chorreando y bajando por mis labios hacia mis ingles. Se aparto cogiéndome con sus manos la cara, besándome en los labios diciéndome que le tenia loco.

 

Yo- No se que pensaras que este tan cachondo.

 

Eva- No pienso nada, me gusta es lo que puedo decirte.

 

Nos miramos con cara de deseo y nos fundimos en un morreo intenso.

 

Eva- Nos quedamos exhaustos, con mis braguitas me limpie y tirándolas a los zarzales, nos vestimos y volvimos a la discoteca. De regreso solo hacia que pensar lo que habia ocurrido, estaba aturdida y un sentimiento entre vergüenza temor y deseo.

 

Yo- ¡ Pero según me dijiste os estuvisteis viendo mas veces, en aquellos mese que al sentirme rechazado pase de ti asta que me llamaste! ¡ Que zorra!

 

Eva- Si, la verdad que al principio creo que me gustaba esa relación, como si estuviera en una nube, pero me di cuenta que era un cabrón , que lo que solo seria era follarme amenazándome con que si se enteraban mis padres, pero me hacia sentir follándome una mujer madura y me hacia gozar mucho, sabia follar muy bien, era muy buen amante. Peo un hijo de puta manipulador y mala persona.

 

Yo- O sea te encoñastes de el.

 

Eva- Si, en un principio si, ya te digo estaba encantada. Por las mañanas me iba a buscar al trabajo antes e entrar y al principio follábamos en el coche o al chalet de sus padres, pero dejamos de ir por temor que nos viera algún vecino, y claro a el no le interesaba. Yo le decía que mi madre se iba a dar cuenta, pues cobraba por semanas y el día que no iba no me lo pagaban y el me daba el dinero. Me hacia ir vestida con minifaldas, camisas o blusas muy escotadas y tacones, por lo que me las ingenie para poder llevar ropa sin que mi madre se diera cuenta y me cambiaba donde podía para que cuando me viniera a buscar estuviera a su gusto, me tenia totalmente sumisa.

 

Esa ultima frase se me quedo grabada en mi cabeza incluso en la actualidad siempre la tengo presente en mi mente e imaginación.

 

Eva- Pasado un mes aproximadamente le dije que lo teníamos que dejar , que era una relación imposible. Y me amenazaba que si lo dejaba no podría vivir sin mi y que seria capaz de hacer cualquier cosa y se me ponía a llorar, ¡Que hijo de puta! Para entonces habíamos follado un par de veces en el coche y la vez que fuimos a su chalet.

 

Yo- Sabia como aprovecharse.

 

Eva- Estuvo una semana sin aparecer, pero una mañana se presento. Y me dijo...

 

Juan- ¡Vamos!

 

Eva- Y te dije que que lo teníamos que dejar. Le dije.

 

Juan- Sube y lo hablamos. Por favor el ultimo día hoy.

 

Eva- Tonta de mi subí al coche.

 

Juan- Hoy no vas vestida como te dije.

 

Eva- ¡Ya! Le conteste molesta. Me agarro e la coleta, me giro la cabeza y me beso metiendo su lengua en mi boca de forma agresiva para después decirme que tenia que complacerlo y el me haría feliz. Vi que tomaba otro camino, preguntándole que donde íbamos diciéndome que a casa de un amigo. Me asuste, no sabia de que seria capaz.

Llegamos a Cornellá, una población del extrarradio de Barcelona. Bajamos del coche me cogió la mano y entramos en un bloque de pisos, recuerdo que era un quinto, abrió la puerta. Yo tenia el temor que hubiera alguien mas y lo que me iban a hacer, pero no habia nadie, no paramos hasta el dormitorio, entramos estaba todo todo desordenado y la cama deshecha mandándome que me desnudara, no haciéndole caso, el mientras se desnudo, el ahí frente a mi con su pollón colgando flácido, se me acerco empezando a besarme como me gusta, por mi nuca a la vez que me fue desnudando morreándome tan bien como el sabia hacerlo.

 

Yo estaba completamente cachondo, mi mujer me contaba su infidelidad y me excitaba era una sensación placentera para mi. Y para ella también pues sus pezones estaban duros.

 

 

Eva. Prácticamente en un plis plas ya me tenia desnuda. Me dijo que era ya el momento de enseñarme como hacer disfrutar bien a un hombre, de nuevo me cogió la mano acercándonos a la cama, se sentó a los pies de la cama, abrió sus piernas quedando colgando su polla, mandándome que me arrodillara entre ellas, me mando que le agarrara su rabo quería mostrarme como a los tíos le gusta que le se la coman. Yo sumisa a si lo hice le agarre aquel pene flácido y me ordeno que le pajeara, no tardo en ponerse morcillón y diciéndome que lo lamiera desde los cojonés asta su gordo capullo, yo hacia lo que me decía. Lo hacia bien pues gemía y yo ya estaba húmeda, tengo que reconocerlo, asta ahora el sexo oral que le habia hecho fue poco mas de pajear y meterme en mi boca poco mas que el capullo.

 

Yo- Esta claro que te ponía mucho.

 

Eva- Si ya te digo era un cerdo, pero con el tiempo me he dado cuenta que experimentado y buen amante. ¿Sigo?

 

Yo- ¡Si claro!

 

Eva- Estaba recostado hacia tras, apoyado con sus manos sobre la cama, se incorporo mandándome que me la metiera en la boca, lo intente pero no me cabía mucho mas que la mitad y me agarro de la coleta del pelo y cojiéndome de la nuca empujo mi cabeza hacia su pollón, diciéndome…

 

Juan- Pon tus manos en la espalda ¡Zorra!

 

Eva- A si lo hice, empezó entonces a follarme la boca, me la metía tanto que me daban arcadas y sin poder tragármela entera todabía.

 

Yo- ¡Joder eso no me lo esperaba de ti! Eras su sumisa. Me tienes a reventar.

 

Eva- Me encanta que te pongas tan cachondo pero espera que termine.

 

Me volvió a dar un morreo para seguir con su relato. Contándome lo que le dijo el.

 

Juan- ¡Así es como una buena zorra se come una polla! ¡Salibamela bien golfa!

 

Eva- Seguía follándome la boca cada vez me entraba mas en mi boca, pero era tan grande que me era imposible tragar mas, seguí sumisa con mis manos a mi espalda, el me magreaba mis tetas, con su dedos jugaba con mis pezones que me los pellizcaba. El ya tenia su polla durisima y sin aviso empezó a correrse, atragantándome saliendo semen por mi nariz, retirándome hacia tras escupiendo su corrida, insultándolo muy cabreada.

 

Juan- ¡Calla puta, se que te gusta! No has terminado cogémela y limpiámela bien con tu lengua.

 

Eva- De nuevo me agarro del pelo haciendo que le limpiara el rabo chorreoso, una vez que el ya creía que estaba bien limpia me mando tumbarme en la cama, abriéndome las piernas e inclinándose hacia mi lamiéndome recogió todas las gotas de su corrida que habia por mis pezones y bajando con su lengua por mi vientre y hacia mis muslos y de ahí a mi sexo, jugando con su boca con mis labios externos y seguir con mi clítoris que estaba duro ya, mientras me introdujo dos dedos en mi coño, el cabrón supo desde el primer día pillarme el punto, e retorcía de gusto gimiendo y consiguiendo que tuviera un orgasmo.

 

Yo- Sigue contándome ¡Golfa! Mientras me lames la polla y me la comes como se lo hacías al perro de Juan.

 

Eva- ¡UMMMMMMM! Que dura la tienes ¿Te pone verdad que sea tan zorra?

 

Yo- ¡Si sigue contándome!

 

Eva- Me hizo correrme de nuevo con otro gran orgasmo, me puso a cuatro patas, se coloco un condón, empezó agarrándome las tetas desde atrás mientras rozaba su verga dura y tiesa como una piedra por mi coño, me dio un azote fuerte en mi culo, me queje y me mando callar, de nuevo me agarro de mi coleta y dándome mas azotes, mas fuerte que el anterior. Gire mi cabeza quedándome mirándole y vi la cara de un tío con cara de degenerado azotándome, se agarro su pollón y empezó a follarme, penetrándome con aquel trozo de carne duro y venoso, cada vez empujaba mas, le pedía que no me metiera mas que era muy grande, y me respondió…

 

Juan- ¡Calla, te la voy a meter asta los huevos! Ademas zorra te gusta mira las veces que te has corrido, eres una buena mujer multiorgásmica y eso me pone muy cerdo.

 

Eva- Siguió follándome de nuevo tuve otro orgasmo, y tenia razón era una viciosa multiorgásmica, acelero su ritmo a ver mi nueva corrida, me hacia gritar de placer que me oirían los vecinos. Sentí como sus cojonés me golpeaban en mi culo, el cabrón me la habia metido entera, corriéndose al momento llenando el condón de semen, se lo quito y ordenándome de nuevo que le limpiara la polla. Nos quedamos tumbados exhaustos, el al poco quedo dormido y yo acurrucada pensando echa un lio, habia descubierto el sexo y con un hombre experto. Pero esa relación no la quería.

 

Yo- Joder me estas dejando de piedra, esa puta que llevas dentro la quiero también para mi.

 

Eva- Cuando despertó volvimos a follar, pero fue un polvo que el fue a lo suyo y solo para satisfacerse el para nada preocupándose de mi. ¡Si! Volví a correrme pero su indiferencia me hizo tenerlo mas claro. Saco su polla se corrió en mis tetas, se levanto se fue al baño y al poco salio ya vestido, yo me limpie me vestí y nos fuimos, sin una palabra. De regreso en el coche le volví a repetir que se habia terminado, que quería que me fuera a buscar mas y me amenazo con que haría una locura si le dejaba me asusto y me calle.

 

Yo- ¡Ven comeme la polla tengo ganas de correrme en tu cara!

 

Eva me agarro la polla y me hizo una mamada genial, toque su coño y estaba muy mojada y dilatada la historia nos habia puesto a tope.

 

Eva- ¡Espera! Quiero que me folles duro, pero deja que termine.

 

Yo- ¡UFFFFFFF! No se si puedo aguantar, sabia que eras muy guarra pero veo que me tienes engañado, lo eres mucho mas.

 

Eva- El viernes, antes del Sábado que te llame, el me dijo que vendría a buscarme, pero en vez de negarme o hacer algo para evitarlo, ese día salí de casa con una camisa que me iba un poco estrecha por lo cual iba con un escote sorprendente con la mitad de mis pechos al aire y una mini falda muy corta y un conjunto de sujetador de encaje de media copa y un tanga brasileña a juego, mis zapatos con taconazos con un chaquetón de piel que me iba por las rodillas por lo que mi madre no sospecho nada, realmente parecía una fulana.

 

Yo- ¡No me jodas! O sea que otra vez me liaste. No me creo que como decías que no quisieras esa relación.¡ Me dejas alucinando! Te habías convertido en una sumisa de ese mal parido. Pero se lo ponías fácil.

 

Eva- No se que decirte, solo puedo darte la razón, pero no sabia ni lo que quería, no se si seria por mi juventud.

 

Yo- ¡En el fondo tenias ganas de polla!

 

Le dije bastante enojado,después de varios años vi que no habia sido tampoco totalmente sincera, asta ese momento. Siguió contándome pero su semblante con cara de arrepentimiento.

 

Eva- Cuando llegue ya me estaba esperando para evitar que entrara en la empresa, subía a su coche y lo primero que me dijo…

 

Juan- Vamos a casa de mi amigo Pablo.

 

Eva- ¡Me mosqueo! Hoy sera el ultimo, que lo sepas, le dije.

 

Juan- No lo voy a consentir, estoy enamorado de ti. Quiero que nos fuguemos.

 

Eva- todabía me asuste mas. Llegamos a casa de su amigo, subimos, y estaba Pablo y Mario otro de sus amigos. ¡Me temía lo peor! Me mando a la habitación. Le obedecí y me senté en la cama y a los pocos minutos entro el, dejando la puerta abierta. Pidiéndole que cerrara la puerta.

 

Juan. Esta mejor a si.

 

Eva- Me dijo eso mientras se quedo desnudo…

 

Juan- ¡Desnudate! ¡ A que esperas! No quiero que esto termine Eva.

 

Eva- ¿Por que están esos?

 

Juan- Pasa de ellos, ahora se irán, tenemos un par de horas.

 

Eva- Lo que haces es solo aprovecharte de mi, solo quieres una imbécil como yo para follar, con mentiras y abusas de nuestra diferencia de edad y tus chantajes. No quiero mas esto. Quiero a otro.

 

Juan- Si a Manu ¿No? Ese niñato como le pille le doy una paliza.

 

Eva- ¡Eres un cabrón! No serias capaz, si le pasa algo te denuncio. Yo quería irme pero el se me acerco empezó a acariciarme y besarme, me resistir y me dijo...

 

Juan- ¡Si me rechazas soy capaz de saltar por la ventana! Hizo que me pusiera de pie frente a el. Te deseo, me tienes loquito, luego hablamos….

 

Eva- Siguió con sus carantoñas besos y caricias, y ya me tenia medio desnuda, me desabrocho el sujetador dejando al aire mis tetas, me bajo la cremallera de la falda cayendo al suelo cayendo al suelo y quitándome el tanga. Yo me deje hacer no sabia si sus amigos estaban todabía y lo que podría ocurrir.

Me tumbo en la cama, ya totalmente desnuda. Empezó a comerme el coño, no pude evitarlo me puso muy cachonda, no tarde en primer mi primer orgasmo, el ya estaba todo empalmado, me abro las piernas se coloco un condón y encima lubricante, nunca lo habia utilizado, apunto con su rabo en mi coño empezando a joderme no tardo en meterme la mitad de su gordo nabo, me derretía cada centímetro que entraba. No podía evitarlo, No tarde en tenerla entera dentro de mi sexo golpeándome con sus cojones en mis nalgas de lo fuerte que me daba, creía que me reventaba, volví a tener otro orgasmo mientras me agarre con mis manos en su cuello, sin el parar de follarme duro.

Mire hacia la puerta y estaba Pablo mirándonos con su pene en la mano pajeándose y Juan no tardo en correrse. quito el condón, esperaba como siempre que me pidiera que le limpiara el rabo, pero no se tumbo a mi lado y comiéndome las tetas pellizcándome los pezones, yo estaba con una respiración muy agitada después del polvazo que me pego, estaba muy cachonda y el lo sabia susurrándome al oído…

 

Juan- ¿Quieres que le diga a Pablo que entre y sabrás lo que es follar con dos pollas? Es un buen amigo y le encantaría una buena mamada de una zorra como tu y lo experta que te has vuelto.

 

Eva- Yo me negué, lógicamente. Me levante enfadada y cerré la puerta de un portazo, en las narices de su amigo.

 

Pablo- ! PUTAAA! Me chillo.

 

Eva- Al volver a la cama se sentó a los pies, ya sabia lo que quería decir eso, me arrodille me coloque las manos atrás y empece a comerle la polla sintiendo como se agrandaba y endurecía entre mis labios ya tenia casi la mitad metida en mi boca. Cuando la tenia bien dura me mando ponerme a cuatro patas y mese puso detrás, me abrió los cachetes del culo empezando a lamérmelo recorriendo con su lengua hacia mi coño, eso era algo nuevo para mi, me gustaba fue muy bueno. Agarro su rabo duro a reventar y con el acariciaba los labios de mi sexo que estaba chorreando y entre la raja de mi culo, se lo embadurno de lubricante y por mi agujero del culo también empezando a masajearmelo e introduciéndome un dedo, después otro, me tenia muy cerda, Se lo agarro con su mano tieso y me lo clavo de un golpe en mi coño, entraba como un cuchillo en mantequilla caliente, me hizo correrme de nuevo, siguió con sus envestidas duras empotrándome mi cabeza sobre el colchón de la cama, no pude aguantar un gemido de placer. Paro en su ritmo sacándola de mi chorreoso coño. Quitándose el condón, volvió a agarrársela volvió a lubricársela y de pronto sentí como apunto con su capullo en el agujero de mi ano empezando a apretar, yo le rogué que no por favor, pero ni caso el a lo suyo sin pensarlo empujo introduciéndome aquella tea dura venosa dentro de mi culo, me cogió del pelo diciéndome que…

 

Juan- ¡Calla, ZORRA! Vas a ser miá de todas formas, te he convertido en una viciosa no me engañas te encanta que te den duro.

 

Eva- Siguió metiendo aquel trozo de rabo duro en mi culo, me dolía creía que me partiría en dos, pidiendo que parara, pero seguía metiéndomela, al poco el dolor se convirtió en placer empezó a masturbar mi clítoris erecto y siguió metiendo sus dedos en mi coño jugando con las puntas de sus dedos dentro de mi en el punto , que el cabrón bien sabia que me derretía de gusto, volví a tener otro orgasmo estaba llegando al máximo de placer al tiempo que me clavo entero su rabo en mis entrañas y notando como se corría y me llenaba de su leche caliente, cayendo los dos sobre la cama, sacándomela una vez que se le quedo flácida, saliendo por mi agujero toda su corrida.

 

Juan- Que buena puta te he hecho. Quiero que nos larguemos los dos ¡Ya!

 

Eva- ¿Que dices? Ni loca, estas como una cabra.

 

Juan- Si no quieres, no se que haré, una locura, te lo juro.

 

Eva- ¡Llevame a casa! Por el camino intento convencerme yo decidí darle la razón, deseaba llegar a casa, me despedí de el que no volvería mas con el y empuje la puerta cerrándose de un portazo.

 

Estaba muy cachondo y tuve a Eva en la cama besándole comiéndole sus pechos y diciéndole que no podía aguantar mas y follamos como locos. Después de corrernos y quedarnos abrazados acurrucados desprendiendo olor a vicio ella me dijo…

 

Eva- Tienes que agradecerle a ese cabrón el que el me convirtiera en la zorra viciosa que soy y que creo que mucho lo vamos a disfrutar.