DE AQUELLOS COMPAÑERITOS INOCENTES QUE ÉRAMOS…

YA NO QUEDA NADA (5)

        Rosenda nunca había hecho la limpieza con tanto esmero, era feliz sintiendo las vibración del pulg dentro de su culo, siempre la usaba en la velocidad mayor, solo cuando estaba la señora no lo ponía en vibración, porque hacía un pequeño ruidito que podía delatarla, pero caminaba, trotaba y corría por toda la casa sintiendo olas de placer, lo que más le gustaba era subir gradas, como que sus nalgas abrazaban mejor al pequeño aparatito.

        Llegó Jimmy, como siempre, hecho un asco cada vez que volvía del Club, preguntó por sus padres y Rosenda le dijo que su papá estaba trabajando y aún no había vuelto y que su mamá se había ido a un entierro.

JIMMY: Enterrarte la verga es lo que quiero.

ROSENDA: ¿No le da pena decirme eso? Su papá puede regresar y nos va agarrar así como usted nos vio.

JIMMY: ¿Qué es ese ruidito que se oye bajo tu uniforme?

ROSENDA: Es un regalo que su papá me dio. ¿Quiere ver?

JIMMY: ¿Qué es esa mierda?

ROSENDA: Se llama plus anal.

JIMMY: ¡Plug anal!, animal… solo en  las películas había visto esa babosada… ¿Y qué, sentís rico?

ROSENDA: Es la pura gloria, joven Jimmy, ¿Quiere probarlo?

JIMMY: ¡Comé mierda! ¿Acaso soy hueco pues?

ROSENDA: Noooo, si ya averigüé en internet que también lo pueden usar los hombres.

JIMMY: ¿Y vos desde cuando sabés usar internet?

ROSENDA: Su papá me enseño, mirábamos unas películas bien sabrosas, con un montón de gente en cueros y como yo quería seguir viendo me regaló su lap top viejita y así aprendí.

JIMMY: Venite, vamos a bañarnos que vengo caliente.

ROSENDA: ¿Y con el agua no me voy a electrocutar toda?

JIMMY: Pues te quitás el plug.

ROSENDA: Ay, joven Jimmy ¿Y perderme esta ricura?

JIMMY: Hay vas a ver que te va a gustar más mi verga.

ROSENDA: No joven, usted hágame lo que quiera por mi panocha peluda, pero por mi culo no me va a caber.

JIMMY: Probemos, metámonos a la tina.

ROSENDA: Espéreme pues, solo me saco mi regalito y me encuero.

JIMMY: Que chichotas tenés, Rosenda.

ROSENDA: ¿Le gustan? Dice mi marido que le gusta más mi culo pero a su papá le gusto toda.

JIMMY: Enjaboname y yo te enjabono a vos.

ROSENDA: Pero enjabóneme todo el cuerpo, no solo mis hoyos.

JIMMY: Callate y mamame la verga.

ROSENDA: Vaya, solo le quito el jabón… cada vez se le pone más grandota, cuando sea grande va ser tan vergudo como su papá.

JIMMY: Ya vas a ver que te va gustar más la mía cuando te la meta por el culo… mirá vos, Rosenda… yo me he estado haciendo el loco con mi pa desde que los agarré cogiendo… yo creo que él también porque no me ha dicho nada.

ROSENDA: Es que yo le dije que usted ya nos había visto… que usted también me cogía…  yo creo que es muy feo que padre e hijo hablen de que se cogen a la misma mujer.

JIMMY: ¿A vos te gusta coger con padre e hijo?

ROSENDA: Yo feliz, pero si me dio pena que usted nos viera, así como si papá nos encontrara ahorita.

JIMMY: Esta cabrón… salgamos y vamos a la cama.

ROSENDA: Pero antes tengo que lavar el plus.

JIMMY: Apurate pues… ponete de culumbrón.

ROSENDA: ¿Así? Pero póngase un condón.

JIMMY: Ya me lo puse… que rico se te ve el culo.

ROSENDA: Ay, Joven, ese hoyo se hizo para otra cosa ¿Por qué a los hombres les gusta tanto por donde sale la caca?

JIMMY: Dejá de decir cochinadas y abrite las nalgas… así, Rosenda… ahora prepárate que te voy a desvirgar el culo.

ROSENDA: Tengo miedo.

JIMMY: Flojita y cooperando…

        Jimmy le puso la punta de la verga en su orificio anal y presionó hasta que la cabeza perforó su anillo, lentamente se la fue metiendo toda hasta el fondo y Rosenda sintió la verdadera gloria.

        Parecían animales desesperados dándose placer, Rosenda paraba más el culo para recibir todo aquel tolete que la trastornaba, Jimmy la bombeaba como taladro en el asfalto, ella gritaba hasta que le vino su primer gran orgasmo por el culo.

JIMMY: ¿Te gustó?

ROSENDA: Fue riquísimo… sentí que me cagaba para adentro… se me acalambraron hasta las patas… ¿Usted no puede hacer que le vibre la verga como el plus ese?

JIMMY: No, pero si querés te lo metés por la pusa y así cuando te chime el culo vas a sentir como si mi verga te vibrara.

ROSENDA: Pero otro día… porque me dejó muerta… ¿quiere que se la mame?

JIMMY: Pero apurate que puede venir mi viejo.

ROSENDA: Que rica se le ve, joven Jimmy ¿Quiere que le chupe su culito?

JIMMY: ¡¿Qué?!

ROSENDA: A su papá le gusta.

JIMMY: ¡¿De verdad?! Si a mi viejo le gusta ha de ser rico, él tiene más experiencia… va, probemos pues… pero no le vayás a decir a nadie porque van a pensar que soy hueco.

ROSENDA: Pero póngase de lado con la pierna doblada… así merito… hum…

        Rosenda le chupó el culo con devoción, Jimmy no sabía si eso estaba bien pero le estaba encantando, le pidió permiso para meterle un dedito por su hoyo trasero, al principio se negó pero sentía tan rica le lengua de Rosenda que paró aceptando, ella le fue metiendo poco a poco su dedo índice y Jimmy retrocedía más su trasero para perforarse más hondo el dedo de su violadora, ella le metió dos dedos, luego tres y a Jimmy la cabeceaba la verga sin voluntad.

        Ella, perversa, quería que Jimmy sintiera lo mismo que tanto disfrutaba… el plug dentro de su culo, al principio se resistió, pero con la mamada de verga y sus dedos entrando y saliendo de su culo, lo convenció, así que lubricó en plug y lo introdujo completo en el ano del joven Jimmy, le chupó las bolas y en un espasmo involuntario, descargó una buena cantidad de semen sobre la cama… estaba exhausto pero feliz, había descubierto una nueva forma de recibir placer… solo le atormentaba la idea de que le fuera a gustar recibir una verga por el culo.

        Después de los actos protocolarios que el Gobierno le hizo al difunto político, July y Sol fueron a la mansión de la viuda y conversaron como dos viejas amigas:

JULY: Quiero disculparme contigo, no tengo perdón, solo prometo no volver a entrometerme en tu vida.

SOL: Estás perdonada, pero con una condición.

JULY: ¿Cuál?

SOL: Quiero que me digas toda la verdad sobre cómo te enteraste que Jimmy es hijo de Alex.

JULY: Fue sin querer, luego de que Alex me dejara por tu culpa, me dieron unos celos terribles y empecé a salir con varios hombres, así me convertí en dama de compañía de lujo, hice una clientela prominente de políticos, curas, profesionales y entre ellos… tu esposo requirió mis servicios, nos reconocimos y me contó toda su vida.

SOL: ¡¿Te acostaste con mi marido?!... a estas alturas hasta eso te perdono… ¿Él mismo te lo contó?

JULY: Exactamente y aprovechando la información y la invitación del Chino a la reunión de los ex compañeros del colegio, planifiqué mi venganza, perdóname de nuevo Solange.

SOL: Ya te dije que estás perdonada

JULY: Gracias, tú siempre me caíste mal, pero no precisamente tú, sino lo que significabas, primero quedé en segundo lugar en el concurso y tú fuiste la reina, luego fui segundo lugar en la clase y tú la abanderada y por último fue a ti a la que eligió Alex para ser su novia, yo me tuve que conformar con las sobras hasta que nos descubriste, yo creí que se iba a casar conmigo… pero nunca ha dejado de amarte.

SOL: Tú también me caías mal y no por lo que significabas, simplemente me caías mal, pero debo reconocer que era esa imagen sexy que yo nunca tuve… por eso te odiaba, esa manera tan obscena que tienes al caminar, esa boca que vuelve locos a los hombres, toda tú eres un canto sensual, en cambio yo soy la frágil muñequita Barbie.

JULY: Yo sé que no podemos ser amigas, pero ¿qué te parece si por lo menos nos tratamos como ex compañeritas del colegio? Aquellas que jugaban al amor y se enamoraron del mismo hombre, aquellas envidiositas que fuimos… que somos… o ¿Qué seguiremos siendo?

SOL: Con una condición…

JULY: ¿Otra? Está bien, ¿Cuál?

SOL: …

        La reunión en casa de Estuardo fue todo un éxito, Paco les cocinó, les sirvió los tragos, lavó los platos, todo vestido de mujer, nos reímos como nunca.

        La siguiente reunión fue en casa del Chino y Karlita, para competir por el éxito de la anterior reunión, Karlita se vistió de hombre y el Chino de mujer, todos bromeábamos con él diciéndole que si hubiera nacido mujer moriría virgen… realmente se miraba espantosa.

        Así fuimos llegando a principios del siguiente año, la próxima reunión sería en la casa de Alex ¿Qué nos tendría preparado?

        Los chicos y chicas en el colegio estaban emocionados conociendo a sus nuevos compañeros, los chicos al recreo se ubicaron bajo las gradas del gimnasio para verle los calzones a sus compañeritas, la nueva sensación para los chicos era Vicky, la prima de George, era tan cuidadosa para sentarse que solo le miraban los muslos, Al Hipo se le ocurrió una brillante idea, fueron a comprar cuetes y al quemarlos todas las chicas abrieron las piernas y salieron corriendo, los amigos se destornillaban de la risa y luego comentaban que Carol había llevado una tanga rosa, Cindy una negra, Rita una azul, del calzón de Tita nadie hizo alusión, pero ese hilo blanco entre las piernas de Vicky se les quedaría grabado para el resto de sus vidas.

        El problema fue que el Director pidió que se presentara el culpable de haber quemado lo cuetes y como nadie dio un paso al frente, el primer día de clase lo pasaron todos de plantón y bajo el sol… que importaba… había valido la pena.

        Al salir del colegio Jimmy abordó a su novia, George a la suya y el Hipo a Rita, las convencieron de ir a tomar algo a la casa de George, ellas aceptaron bajo protesta, pero fueron.

        Se disculparon por los cuetes, ellas creían que se iban a disculpar por la orgía y ellos negaron ser culpables de su comportamiento, prometiendo no volver a repetir esa experiencia si ellas los perdonaban, George desapareció abrazado a Cindy hacia su habitación, Jimmy se despidió y se llevó a Carol a un motel… el Hipo se comía con la mirada a la frágil Rita.

HIPO: Ya sé que metimos la pata… perdoname… es que me gustás mucho y… bueno ya sé que fuiste novia de la gorda, pero… me gustaría salir con vos… ¿por qué no hablas?... ¿Es que no te gusto?... Rita, por favor, decime algo…

RITA: Callate y besame,

        Las tres parejas esa tarde cogieron en señal de reconciliación, del Pálido no se supo nada y de Tita… seguramente estaba cogiendo…  nadie sabía con quién… pero de que estaba cogiendo… estaba cogiendo.

        Richard andaba desesperado por ver de nuevo a Ruth, pero ella se negaba a recibirlo, le confesó que lo deseaba, pero que se sentía terrible cada vez que Sol la buscaba, así que creía que la vez que se fueron a la cama en obscuras sería debut y despedida.

        Rosenda parecía niña con juguete nuevo, se la pasaba cantando todo el día, antes de salir al Club el joven Jimmy le había dado una culeada deliciosa.

Ese sábado le tocó servir el almuerzo, se respiraba una tensión inaudita, Richard leía el periódico y Sol hojeaba una revista de modas, almorzaban sin hablar, Richard intentó hacer conversación pero Sol contestaba con monosílabos, le preguntó que qué diablos le pasaba, ella somató la revista sobre la mesa, tomó su bolso y salió dando un portazo.

        Richard sabía que la mejor forma de descargar su ira era desquitándose sexualmente con Rosenda a falta de su Ruth tan querida.

RICHARD: ¡Rosenda!... cuándo tu marido está como la gran puta ¿Qué te pide?

ROSENDA: Guaro.

RICHARD: ¿Y cuando está borracho?

ROSENDA: Cama.

RICHARD: ¿Para coger?

ROSENDA: No, para dormir.

RICHARD: ¿Y entonces cuando te pide coger?

ROSENDA: Eso era antes, ahora solo le gusta el guaro y dormir.

RICHARD: Pues yo estoy como la gran puta y te quiero coger.

ROSENDA: Ay que raros son aquí en la capital, en mi aldea cuando los hombres están enojados se agarran a machetazos.

RICHARD: Pero como estás en la capital te voy a coger.

ROSENDA: Pues yo siempre tengo ganas después que me regaló el juguetito.

RICHARD: Empelotate entonces y chúpame la pija.

ROSENDA: Yo feliz, tal vez entre su enojo y mi alegría se le equilibre lo emputado que está.

RICHARD: ¿Cómo está ese culito virgen?

ROSENDA: Ay, patrón, ya no tan virgen.

RICHARD: Ya sé que el juguetito te quitó la virginidad, pero te estoy hablando de verga.

ROSENDA: Yo también, patrón… el joven Jimmy se le adelantó y ya me rompió el aniceto.

RICHARD: ¡Que dé a huevo? Yo te compro el juguetito y el patojo te estrena el culo.

ROSENDA: Perdóneme, patrón, pero como dice el Padrino: me hizo una oferta que no pude rechazar.

RICHARD: Puta, ahora hasta de cine sabés.

ROSENDA: Ya por que la ven a una humilde no quiere decir que no tenga mis conocimientos, hasta inglés estoy aprendiendo, le recomiendo ver esa serie: Games of Thrones, en HBO.

RICHARD: Sos cabrona vos, Rosenda, cuando viniste a la casa eras una analfabeta desmirriada y ahora aprendiste a coger, computación y  ahora inglés…

ROSENDA: Y sé otras cositas que le van a gustar.

RICHARD: ¿Vos me vas a enseñar a mí?… ja, ja, ja… sí que saliste respondona ¿Qué me vas a enseñar que yo no sepa?

ROSENDA: ¿Quiere que le chupe el culo?

RICHARD: ¿Dónde aprendiste eso?

ROSENDA: El joven Jimmy me lo enseñó… usted sabe que la juventud de ahora sabe más que nosotros sobre la cogedera.

RICHARD: ¿Y le gustó?

ROSENDA: Se volvió loco, patrón, con decirle que se vino sin siquiera que yo le tocara su verga.

RICHARD: ¿Tan rico será? Haceme lo que le hiciste al patojo, vamos a ver si es cierto.

        Rosenda colocó a su patrón de culumbrón, le chupó primero su orificio trasero, le metió la lengua y luego un dedito, cuando Richard iba a protestar le mamó la tranca y se dejó, le metió dos dedos y le chupó los huevos, Richard ante tanto estímulo estaba entregado a las porquerías de Rosenda, le metió tres dedos y Richard trabó los ojos de gusto, le echó lubricante al juguetito y le fue metiendo la puntita, Richard protestó, pero la gran mamada de verga que recibió y el plug entrando y saliendo de su culo lo vencieron, Rosenda, poderosa se lo hundió de una sola estocada, Richard sintió que Rosenda iba a ser su dueña de ahora en adelante.

RICHARD: Esperate, te quiero coger el culo.

ROSENDA: Pero le voy a enseñar cómo va a sentir más rico como me instruyó el joven Jimmy.

RICHARD: ¿Dónde habrá aprendido ese cabrón tantas mierdas ricas?

ROSENDA: Yo me pongo así de ladito para que me coja.

RICHARD: Ahí  te voy, ¿sentís cómo te entró la cabecita?

ROSENDA: Ay… ¿La cabecita? Siento como si fuera la de Goliat, me duele pero me gusta.

RICHARD: Ahora me vas a resultar literata.

ROSENDA: No digo pues… el hecho de que sea de pueblo no quiere decir que no haya leído a Moliere… ay, qué grande la tiene patrón.

RICHARD: ¡¿También sabes francés?!

ROSENDA: Voila.

RICHARD: Te la voy a meter toda.

ROSENDA: Vous le vou cousher avec moi.

RICHARD: Sos toda una políglota.

ROSENDA: No me insulte, patrón, que solo me meto con el Chepe, su hijo y con usted.

RICHARD: No seas bruta, políglota quiere decir que hablás varios idiomas… te la zampo toda… ay que rico culo.

ROSENDA: Yo creí que quería decir… poli: muchos… glota: eso me sonó a puta, perdón por mi falta de sapiencia, ya iré aprendiendo esos conceptos tan rebuscados… que rico…se me fue la respiración… me tiene asfixiada… la siento más rica que la del joven Jimmy… que grandota… me llega hasta los ovarios… hum… que rico

RICHRAD: ¿Y qué era eso nuevo que me ibas a enseñar?

ROSENDA: Solo me meto el juguetito por la cuca peluda y usted va a sentir como si le vibrara la verga… ¿Siente?

RICHARD: ¡Puta… que rico!... No puedo aguantar… me vengo en tu culo, Rosenda… que delicia… ese patojo es un genio.

        La reunión en la casa de Alex estuvo llena de sorpresas, la primera fue que Sol invitó a July y llegaron juntas como si fueran las mejores amigas del mundo, fueron recibidas en medio de grandes aplausos, la segunda: el Chino y Alex, había fabricado un extraño  aparato parecido al polígrafo, que se conectaban a las muñecas de la víctima de turno, esa noche se iban a enterar de muchas cositas y la tercera fue que María la culoncita llegó acompañada de su hija (Silvia) y su segundo marido (Juan)

        Nadie sabía por qué pero se respiraba cierta incomodidad en el ambiente, Alex les contó que ese aparato ya lo habían comprobado con el Chino y que quería demostrárselo a sus invitados, advirtiendo que los inventores no iban a participar en el juego, como nadie quería pasar de primero lo hicieron por sorteo, la primer víctima fue Karlita, todos le fueron haciendo preguntas, el aparato presentaba una luz verde si había dicho la verdad y una roja si mentía, todas las luces salieron verdes, le tocó el último turno de preguntar a:

ESTUARDO: ¿Alguna vez estuviste de manera impropia con algún profesor del colegio?

KARLITA: No.

CHINO: ¿Entonces por qué salió roja?

KARLITA: Ha de ser un error.

MARÍA: Yo creo que es mejor abandonar el juego.

JULY: Para nada, esto apenas empieza ¿Quién sigue?

        Hicieron el sorteo y fue el turno de Paco, todas las preguntas salieron en verde, la última la hacía:

SOL: ¿Alguna vez estuviste con una mujer?

PACO: … me da vergüenza reconocerlo… pero: sí.

        La luz dio verde y todos rieron de su triste confesión. Así fueron pasando todos y nos fuimos enterando de algunos secretos terribles, estaba visto que después de esa reunión nada sería igual, solo quedaban Solange y July. Le tocó el turno a Solange y la última pregunta la hizo:

KARLITA: ¿Alguna vez has tenido relaciones sexuales con otra mujer?

SOL: No.

        La luz roja se encendió, Sol indignada dijo que ese aparato no servía para nada y casi todos apoyaron a Sol, era imposible que la niña buena de la clase hubiese estado con otra mujer… July, sin que nadie se lo pidiera se puso los sensores en sus muñecas:

MARÍA: ¿Con cuántos hombres de los presentes te has acostado?

JULY: Con todos.

        La algarabía fue tremenda, María le reclamó de manera airada a su esposo y él protestó que ese aparato tenía error, moción que fue aprobada por el Chino, hubo que suspender el juego por varios minutos porque el Chino y Karlita discutían a gritos al igual que María con Juan.

PACO: ¿Has tenido relaciones sexuales con alguna mujer de las presentes?

JULY: Sí.

ESTUARDO: ¿Fue con Sol?

JULY: No.

         Todas se miraban con desconfianza.

JUAN: ¿Con cuántos hombres te has acostado?

JULY: 117.

        La luz roja se encendió.

JULY: Perdón, me había olvidado de mi cuñado… 118

        La luz verde se encendió, nadie podía creer la promiscuidad de July, pero  ella orgullosa cruzó la pierna.

SILVIA: ¿Estás triste por la muerte de tu esposo?

JULY: No.

        Nadie dijo nada, pero todos quedaron sorprendidos de la honestidad perversa de July, las dos últimas preguntas se avecinaban y eso desataría la locura de los inocentes compañeritos

KARLITA: ¿Has hecho alguna vez un trío con algunos de los presentes?

JULY: Si.

SOL: ¿Con quiénes?

JULY: Con Juan y Silvia

CONTINUARÁ…