El Ave Fénix

Esta es una historia que habla sobre Lucas, un chico de 23 años que llevaba toda su vida reprimiendo su forma de ser, evitando sus verdaderos gustos y sin encontrar a nadie con el que realmente quisiese compartir su vida, pero todo cambió aquel día de Halloween donde pasaron cosas que no pudo controlar.

Ese miércoles 31 de Octubre, Lucas había quedado con Sonia y Marcos, dos amigos, para salir a la noche y se encontraba preparando su disfraz de Joker, así que empezó por teñirse su pelo castaño con spray verde, maquilló su cara con pintura blanca y se dibujo una enorme sonrisa que contrastaba con sus ojos verdes. Fue al armario a por su camisa blanca, su chaleco verde y su traje Morado. Se quito la ropa frente al espejo y se podía ver a un chico de 1.78 con un cuerpo atlético y marcado pero sin exagerar (Que su duro trabajo en el gimnasio le había llevado) y se puso la ropa del disfraz. La verdad es que se veía increíblemente sexy, casi una copia del Joker de Heath Ledger pero con una cara mas angelical.

Eran las 23:50 y quedaban 10 minutos para reunirse con sus amigos en la boca de metro y dirigirse a la zona de botellón de la ciudad, recogió las botellas de Vodka y Fanta de Limón y se dispuso a salir de casa.

Puntuales aparecieron Sonia y Marcos disfrazados los dos de Zombies y ella se quedo mirando a Lucas con la boca abierta.

-Cierra la boca que te va a entrar una mosca nena- Le dijo Marcos a su novia riéndose y guiñandole un ojo a Lucas.

-Es que lo has clavado tío- Le dijo ella a Lucas

Lucas se sonrojó un poco y le dio dos besos – Vosotros también estáis terroríficos parejita.

Cogieron el metro y fueron hasta la zona de botellón abarrotada de gente.

Estuvieron bebiendo hasta las 2 de la madrugada y decidieron ir a la discoteca de moda de la zona. La entrada estaba llena de gente y el segurata pedía los DNI a la gente para entrar, su cara era de agobio con la complicación de distinguir a la gente con los disfraces que llevaban, al cabo de 15 minutos consiguieron entrar, se pidieron sus respectivas copas y se fueron al centro de la pista de baile.

Sonia y Marcos empezaron a bailar y dejaron algo olvidado a Lucas el cual empezó a observar el ambiente, a su derecha se podía ver a un grupo de chicas disfrazadas de terroríficas chicas japonesas, en frente a varias parejas bailando al ritmo de la música y a lo lejos en la parte de arriba de la discoteca se fijó en unas siluetas, una era un chico disfrazado de Venom discutiendo con una chica disfrazada de Gata Negra. Lucas vio como el chico salia corriendo apartando a la chica bruscamente pero le perdió la pista al bajar las escaleras.

Tras varios minutos decidió ir a pedir otra copa pero cuando se estaba acercando a la barra se tropezó con el chico disfrazado de Venom y este le tiró la mitad de la copa por encima.

-Mira por donde vas imbécil- Le espetó en la cara y se fue sin volver la mirada atrás.

Vaya payaso pensó Lucas.

Eran ya las 4:30 de la noche y decidió decirle a sus amigos que ya quería irse.

-Chicos yo me voy a ir que ya es tarde, pasadlo bien y nos vemos otro día- Dijo sonriendo

-Quédate un poco mas tío que todavía es pronto- le dijo Marcos

- Que va, estoy reventado y además llevo varios días durmiendo fatal es mejor que me vaya a descansar- Intento excusarse, viendo la mierda de noche que estaba pasando.

-Bueno pues dame dos besazos y avisa cuando llegues a casa- le dijo Sonia y acto seguido le dio dos besos a Lucas.

Lucas se despidió y le choco el puño a Marcos y encaró la salida de la Discoteca.

Una vez fuera cogió los Auriculares de su bolsillo y los conectó al móvil, puso una lista de reproducción que tenia guardada en Spotify y se dirigió a la entrada del metro que quedaba a 15 min andando.

Su cabeza no paraba de darle vueltas a su mierda de vida, a su mierda de noche y al imbécil que le tiró el cubata por encima. Solo se distrajo un momento cuando sonó su canción preferida “LP- Lost On You” le subió el volumen y se dispuso a bajar las escaleras del metro, saco su ticket y se monto en el vagón que tenia delante. Segundos después entró corriendo ¿a que no adivináis quien? Exacto el chico disfrazado de Venom, se sentó unos asientos mas adelante de Lucas mirando hacia el y se quitó la mascara.

Lucas miró la cara del chico disimuladamente, estaba cubierta por lágrimas que brotaban de unos ojos azules hipnotizantes casi tapados por la melena rubia del chico. El chico levanto la cabeza y se quedo mirando a Lucas fijamente y le soltó:

-Perdón por lo de antes, llevo una noche de mierda- y bajo la cabeza.

-No te preocupes, no eres el único- Le contesto Lucas con una sonrisa que derretiría hasta al Iceberg del Titanic.

El tren paro y ambos chicos se bajaron en la misma parada.

Se podía ver al chico disfrazado de Venom algo borracho, casi tropezándose al salir al anden. Al salir a la calle el chico que iba delante de Lucas se estaba intentado liar un cigarro pero parecía misión imposible.

-¿Quieres uno?- le dijo Lucas sacando un cigarro de su cajetilla de Marlboro.

-Gracias, es que he bebido demasiado hoy- Se quedó mirando a los ojos unos segundos y le dijo- ¿Tu eres Lucas verdad?

-Emm si, ¿como lo sabes?- Le miro sorprendido

-Estuve en tu instituto hace años pero seguro que no te acuerdas de mi, me llamo Alex y iba dos cursos por debajo de ti.

-Dios ahora mismo no caigo tio, ¿alguna pista mas?- le miró con cara de extrañeza.

- Seria porque tenia el pelo negro y no llevaba estos pendientes- Se despeinó un poco el pelo y se tocó la oreja- ¿El chico Emo con las carpetas de dibujos te puede sonar mas?

-¿No jodas? Vaya cambio has pegado, no te hubiese reconocido ni de broma- y le pegó una calada al cigarro.

-Gracias, tu sigues igual de guapo- Le soltó Alex y le tocó el hombro riendose.

-Vale, veo que vas un poco borracho, es mejor que te vayas a casa. ¿Vives Lejos?- y puso cara de indiferencia.

-Perdón no quería molestarte, pero no, vivo justo aquí al lado - y señalo a dos portales de distancia.

-Dame las llaves que te acompaño hasta el portal- dijo Lucas

-Espera- Se tocó los bolsillos y intento buscar las llaves sin fortuna- Mierda, las tiene ella…

-¿Ella quien?¿La chica de la discoteca?- miro con curiosidad.

- Si mi novia, mejor digo ex-novia, la acabo de pillar liándose con otro tipo- Agachó la cabeza

-Lo siento mucho, ¿quieres esperar a que venga ella en mi casa? Vivo cerca de aquí.

Alex levantó la cabeza – Si no te importa.

-Para nada, vamos- le dio una palmada en la espalda.

Se dirigieron a casa de Lucas.

Al estar ya en su casa Lucas invitó a Alex a sentarse en el sofá y se fue a hacer un par de sandwiches de jamón y queso a ver si se le pasaba la borrachera a su inesperado invitado.

Tras 10 minutos volvió al salón y se encontró a Alex tirado en el sofá, sin la parte de arriba del traje (La verdad es que hacia calor en su casa, debió bajar la calefacción) y no pudo evitar mirarle detenidamente.

Verle allí tirado con esa cara de niño bueno, ese cuerpo delgado pero marcado y lo dulce que parecía hizo que se fuese a lavar la cara rápidamente,y de paso se pegaría una ducha para quitar toda la pintura del disfraz.

20 minutos después salió de la ducha se puso unos calzoncillos nuevos y unos pantalones de pijama y se dirigió al salón. Apagó la televisión y llevó a Alex a la única habitación de su piso de soltero y le dejó con sumo cuidado en la cama, le tapó un poco con la sabana y se dispuso apagar la luz cuando la voz de Alex quebró el silencio.

-No tienes porque dormir en el Sofá- dijo Alex apoyándose en la cabecera de la cama y apartando la sabana.

Lucas decidió meterse en la cama con Alex y se colocaron espalda con espalda dejando un pequeño hueco que no permitiría el paso de algo mas grande que un alfiler.

En el ambiente cálido se podía palpar una extraña sensación, en el cuerpo recién duchado de Lucas se podía notar su piel erizada por la situación e intentaba alejarse un poco de Alex, el cual contestaba esos movimientos acercando su cuerpo hacia él.

Tras varios minutos en esa posición Alex se dio la vuelta y pegó su cabeza al hombro del chico moreno, ese contacto hizo que Lucas se estremeciese y pensase en todas esas cosas por las cuales no le había dicho a nadie que era Gay, su familia, sus amigos…

Pero todo se le borró de la cabeza cuando los delicados labios del rubio se posaron en su cuello. No pudo evitar morderse el labio con algo de fuerza lo cual provocó un leve gemido el cual le indicó a Alex que podía seguir con su juego.

Mientras le mordía el cuello, pasó su mano por el cincelado abdomen de Lucas y lo apretó contra su cintura, apenas llevaban un par de minutos en contacto pero sus cuerpos empezaban a sudar.

El moreno se dio la vuelta y se quedo frente a frente ante esos ojos azules que se podían apreciar gracias a la tenue luz que entraba por la ventana, Alex le robó un pequeño beso que ante la inmovilidad de Lucas retiró rápidamente.

Pero esta vez fue el moreno el que buscó con ansia los labios carnosos del rubio, introdujo su lengua la cual no encontró resistencia, saboreó todos los rincones de su boca, pudo notar que el chico estuvo bebiendo vodka también, la mezcla de sabores era indescriptible, su excitación hizo que agarrase de la melena al rubio y lo empujase mas fuerte contra su boca.

Alex agarraba suavemente el cuello de Lucas y decidió apartarle unos centímetros y bajar hacia su pecho, saboreando cada centímetro de su cuerpo. Se entretuvo algo mas de tiempo en sus pezones haciendo pequeños círculos con la lengua.

Lucas solo era capaz de articular pequeños gemidos, los cuales estaban haciendo que el rubio se pusiese muy cachondo. Bajo su boca hacia el limite de los calzoncillos del moreno y los empezó a bajar con las manos.

Estas seguro- dijo Lucas

Solo fue respondido por una sonrisa picara.

Sacó su miembro totalmente erecto y sin dudarlo se lo introdujo en la boca, comenzó a pasar su lengua jugueteando, haciendo que Lucas le agarrase del pelo suplicando algo mas de ritmo.

El éxtasis que sentía el moreno hizo que tras unos pocos minutos se corriese en la boca del rubio sin previo aviso.

-Umm- Soltó Alex mientras se relamía. -Ahora me toca a mi- Dijo tocándose el bulto claramente erecto debajo del pantalón.

-Nunca antes hice esto- Dijo agachando la cabeza

Alex le cogió de la barbilla y le miro a los ojos- No te preocupes, no te quiero obligar-

Lucas le sonrió- Y acto seguido deslizó los boxers del rubio y los tiro al suelo.

Casi temblando empezó a bajar por el vientre de Alex y buscó su mirada, solamente le miró y le guiño un ojo, Lucas cogió el miembro del chico con la mano y empezó a hacerle una paja mientras pasaba su lengua por el vientre, al cabo de unos segundos paso su lengua por la punta del miembro del chico.

El gemido que soltó el rubio indicó a Lucas que estaba haciendo bien las cosas, introdujo totalmente el miembro en su boca lo cual hizo que se escuchasen los jadeos del rubio cada vez mas fuertes, la sensualidad de la escena era propia de las mejores películas de cine erótico.

El chico rubio con cara de Éxtasis agarrando la cabeza de Lucas con su cuerpo sudoroso por el nivel de testosterona del ambiente, y el moreno haciendo su primera mamada hacían de esto un momento que seguro se quedaria grabado en sus mentes para el resto de su vida.

Al poco rato se repitió la situación pero esta vez a la inversa, la cara del moreno se llenó del semen del rubio.

Se paso la punta del dedo por la boca y saboreo todo el aroma del que al principio de la noche era el imbécil del cubata, pero su cabeza no podía parar de pensar en que quizas sea el chico que llevaba tanto tiempo esperando.

Lucas se recostó sobre la cama y Alex se acurrucó sobre su pecho.

El moreno paso el brazo alrededor del cuello del rubito y cerro los ojos mientras sentia el calor de su cuerpo. Y al cabo de un rato ambos se quedaron dormidos.

La tenue luz que entraba por la ventana hizo que Lucas empezase a abrir los ojos, notaba un calor en su cuerpo que nunca había sentido, y miro hacia su lado y Alex estaba en la misma posición acurrucado en el pecho del moreno.

Acercó su mano y empezó a juguetear con la melena del rubio deslizando sus dedos por su sien.

Ese cosquilleo hizo que Alex su estremeciese un poco y empezase a abrir los ojos muy lentamente, su mirada se dirigió hacia arriba viendo los ojos de Lucas mirándole fijamente.

Se Apartó.

-¿Pero que coño ha pasado?- Soltó el Rubio

Lucas sintió en ese momento como su corazón se quebraba en millones de pedazos, su cara era un poema como un ciervo enfrente de un coche sin saber que hacer.

Alex solo soltó una carcajada que se reconocería desde el edificio contiguo.

-Es una broma, solo tenias que ver tu cara- Y continuó riéndose.

-Que hijo d…- Entonces los labios de Lucas se pegaron con los suyos.

Pasaron minutos que parecían segundos hasta que se separaron.

Alex se levantó de la cama totalmente desnudo, y entonces Lucas se quedó mirando, contemplando la sensualidad del chico, esa media melena rubia, ese cuerpo delgado pero un poco marcado, y esos ojos azules mirándole con deseo a esas horas de la mañana.

-¿Debería ducharme no?- Dijo Alex con una sonrisa picara.

-No eres el único y eso que me duché ayer al llegar- Dijo Lucas poniendo cara de situación.

-Venga pues vamos ¿donde esta el baño?- Dijo cogiéndole de la mano y sacándolo de la cama.

Se dirigieron al baño y Lucas llenó la bañera, acto seguido el rubio se metió en ella.

-Date prisa o se quedará el agua fría- dijo mientras el agua caía por su cabeza.

El moreno se entró en la bañera que no era enorme precisamente y se puso enfrente del rubio pasando sus piernas por encima de las suyas. Alex extendió su pie hasta tocar el interior del muslo del inexperto chico, y siguió subiendo hasta su miembro que pegó un pequeño palpito al contacto con su piel.

-Veo que quieres jugar- Dijo el moreno echándose el pelo hacia atrás.

-¿Acaso tu no?- Dijo Alex mientras ponía su pie en el abdomen.

Si quiere jugar se va a enterar- Pensó Lucas mientras se levantaba e indicaba al chico que le dejase hueco para ponerse detrás de él.

Se sentó detrás de él y pegó su entrepierna al trasero del rubio.

-Umm, veo que empiezas bien la mañana- Soltó Alex tras un leve gemido.

Se pegaron lo mas que podían y Lucas bajo su mano hasta el miembro completamente erecto de su compañero, comenzó a acariciarlo a un ritmo lento que poco a poco fue produciendo que el corazón del rubio se acelerase y se apretase mas contra el miembro duro del moreno.

-¿Te atreves con algo más?- Dijo sin pensar Lucas que no iba a desaprovechar esta situación.

Alex simplemente se dio la vuelta y se puso sobre él y acerco su boca a su oreja- Hoy soy todo tuyo- Dijo mientras el moreno se derretía con solo oír esas palabras.

Alex se puso de cuclillas y empezó a introducir sus dedos en su ano dilatando la entrada para algo que llevaba años soñando, pero eso ya se lo explicará a Lucas mas adelante, ahora era el momento de disfrutar.

Cuando ya notó que su ano estaba preparado para los 19 cm que tenia enfrente indicó al moreno que podía empezar, acercándose a su polla.

El rubio empezó a sentarse sobre ella y tras 3 intentos de que entrase consiguió metérsela de golpe lo que produjo un grito de dolor que por algún motivo puso mas cachondo a Lucas que agarró de la cintura al rubio y lo apretó mas hondo, al poco, el dolor paso a ser puro placer y empezó a moverse lentamente arriba y abajo, mientras tanto Lucas masturbaba al mismo ritmo la polla de su compañero.

Sus cuerpos estaban muy agitados y el bao que salia de sus bocas inundaba el ambiente del baño, la velocidad aumentaba junto con sus gemidos casi al unisono.

-No pares por favor- Suplicaba el rubio a escasos centímetros de la boca de Lucas.

Se empezaron a comer la boca, sus lenguas se entrelazaban, inspeccionaban cada rincón de sus bocas. Tras unos minutos la tensión sexual era tan grande que el rubio se corrió sobre el pecho del moreno.

-Yo también me corro- Y sacó soltó todo su semen dentro del pequeño rubio.

Pasaron segundos que parecieron minutos unidos el uno al otro mientras se daban un tierno pero apasionado beso.

-Dios…- Susurró el moreno mientras separaban sus cuerpos.

Tardaron unos minutos en recuperar el aliento y se acabaron de duchar pegados el uno al otro dándose pequeños besos, mordisqueando sus cuellos disfrutando del momento.

Al acabar salieron con las toallas puestas y se dirigieron hacia la habitación.

-¿Quieres que te deje algo de ropa? No vas a ir con el disfraz ¿no?- dijo Lucas

- Vale pero ¿puedo elegir yo?- Contestó Alex.

-Venga va- Dijo señalando el Armario.

Alex cogió sus boxers del suelo y fue al armario, Cogió una camiseta blanca con un dibujo de un lobo y se la puso, la cual le quedaba bastante grande contando que mide algo menos que el dueño y saco unos pantalones negros cortos de deporte se los puso.

-Estas muy guapo con mi ropa- y le dio un pico en la boca.

-Quizá me la debería quedar- Y le guiño un ojo.

-Ya veremos, venga vamos a desayunar nene- le soltó el moreno.

Se dirigieron a la cocina y tras unos minutos Lucas puso sobre la mesa dos cafés y cuatro tostadas de fresa y melocotón y se sentaron a desayunar.

-¿Como es que nunca te había visto por aquí?- Dijo Lucas

-¿Hace unas semanas que me mudé aquí con Lucia?- Contestó

-Tu novia ¿no? A ver como le explicas esto.

-No tengo explicarle nada, ayer lo dejamos , y no pienses que esto lo hubiese echo con cualquiera.-

-Explícate-

Suspiró profundamente- ¿Que es lo que recuerdas de mi en la época del instituto?

-Pues… Que coincidíamos en fútbol en los descansos, y que no se te daba muy bien- Se rió el Moreno.

-Quería jugar por que estabas tú- Miró fijamente al chico de ojos verdes.

-…- Se quedo en total silencio.

-Siempre quise decírtelo pero no sabia que te gustasen los chicos, siempre te veía con tías, aun así no me hubiese atrevido.- dijo mientras se le caía una pequeña lágrima.

Lucas paso su dedo por la húmeda mejilla del rubio- No te preocupes, tienes valor de decirmelo ahora- acarició su suave cara.

-Gracias por entenderlo, me costó mucho olvidarme de ti, después de cortar con Lucia y tras verte en el metro supe que todo había pasado por algo, parecían cosas del destino.

-No, gracias a ti por que eres el primer hombre con el que me comporto como yo soy, sin ninguna mascara.- Dijo mientras le miraba fijamente embelesado en esos ojos cielo.

-Pues espero que esto continué pero creo que tengo que ir a hablar con cierta persona y dejar atadas varias cosas.- Dijo Alex

-Toma mi numero- Cogió el móvil del rubio y apuntó su numero.- Al acabar de hablar con ella avísame si quieres.

- Vale- Cogió el teléfono y le dio un beso a Lucas- Nos vemos mas tarde.

Se dirigió a la salida y tras salir por la puerta solo quedó el silencio, y dentro de la casa un moreno al cual su vida acababa de dar un giro inesperado.

 

 

 

 

 

 

Seis horas habían pasado desde que el rubio salió de su casa dejando restos de su aroma.

Lucas miraba el móvil cada pocos segundos.

¿Cómo puedo estar así por este chico si solamente hemos pasado una noche juntos?- Pensaba para él.

Su cabeza no dejaba de darle vueltas a las palabras del chico, que llevaba pillado por el desde el instituto.

¿Cómo pudo ser tan tonto de no darse cuenta?

¿Cuánto tiempo de sufrimiento se hubiese ahorrado?

Decidió salir a tomar el aire. Ya en la calle empezó a caminar sin rumbo, tampoco lo necesitaba, solo quería evadirse un poco.

Al cabo de un rato dentro de su bolsillo se notó dos pequeñas vibraciones. Sacó el teléfono y vió en la pantalla:

 

Whatsapp

 

Alex Rubito:

Quieres quedar y te cuento? =)

 

Lucas:

Vale, donde estás?

 

Alex Rubito:

En coche te paso a recoger

 

Lucas:

Vale te mando la Ubicación

 

A los pocos minutos apareció en su coche, un BMW E46 de cuatro puertas Negro con aspecto deportivo y paró enfrente suya.

 

¿Necesita que le lleven a algún sitio?-Dijo el rubio riéndose.

 

Lucas se subió al coche y nada mas sentarse el rubio le dio un pequeño pico.

 

¿Qué? aburrido sin mi- dijo vacilando sin saber que era verdad.

 

No estaba pensando para nada en ti la verdad- Mintió Lucas- ¿a donde me vas a llevar?

 

Pues tenia que comentarte una cosa, ¿ves eso de ahí atrás?- Señalo unas maletas y unas cajas sobre el asiento de atrás- Tengo que llevar estas cosas a casa de mis padres, y por si te lo preguntas ya rompí toda relación con ella, dejamos el piso y cada uno por su lado.

 

Y quieres ir ahora a dejarlas ¿Conmigo?- Dijo sorprendido el moreno.

 

No, tu te quedas en el coche.-dijo seriamente mirándole a los ojos- Pues claro que quiero que vengas, además mis padres están de viaje en Hungria y no volverán hasta dentro de unas semanas.

 

Suspiro profundamente el Moreno- ¿Y donde esta la casa de tus padres?

 

-Pues en Asturias… desde que se jubiló vive con su novia allí- Soltó el rubio.

 

-Joder eso son 400 km por lo menos- dijo Lucas.

 

-482 dice el GPS- Y señaló el GPS.

 

-A ver puedes dejar las cosas y quedarte en mi casa hasta que encuentres piso- Dijo el moreno con sinceridad.

 

-Estas ¿seguro?, mira que ronco y no se cocinar nada- Dijo hinchando los mofletes.

 

-Que bobo eres- dijo mientras le pegaba un golpe en el hombro al rubio.

 

-Venga, pero tienes que ver la casa de Asturias algún día te va a encantar- Dijo orgulloso

 

- Ya lo veremos- dijo mientras se ponía el cinturón.

 

Pasó casi una hora y ya solo quedaba por recoger un par de cajas que dejaron apoyadas en el portal, mientras los chicos intentaban explicar a un policía que no les multase que estaban haciendo una mudanza.

 

Funcionó. Se libraron de la multa.

 

Subieron a su casa y se dispusieron a cenar, el rubio pidió dos pizzas medianas y al cabo de un rato se las llevaron a casa y se pusieron a devorarlas, Alex llevaba desde el desayuno sin comer nada.

 

Al acabar de cenar decidieron irse al sofá y buscar una película por Internet.

 

-Que te parece esta de terror- Dijo el rubio.

 

-Si crees que me voy a echar a tus brazos del miedo estas jodido, además ya la he visto.- Dijo guiñando un ojo.

 

Hahahaha- se rió el rubio- Y esta de El Caballero Oscuro que aún no vi.

 

Me la se de memoria pero dale, la vería 1000 veces.- Dijo el Moreno

 

Pasaron unos 20 minutos viendo la película, y Alex miró al moreno y estaban

empezando a caersele los párpados.

 

Recuéstate aquí- Y el rubio señaló sus piernas.

 

Lucas no dijo nada simplemente obedeció y puso su cabeza en las piernas del chico.

 

La mano de Alex jugaba con el pelo del moreno dándole placenteros masajes en la cabeza que hicieron que Lucas se quedase completamente dormido.

 

Lucas se despertó completamente solo en el sofá.

 

Se escuchaba de fondo ruido en la cocina y el rubio apareció con una bandeja, con un zumo de naranja, un café y dos tostadas en dirección a la mesa del salón.

 

Buenos días dormilón- Dijo dejando la bandeja en la mesa y dándole un beso al moreno.

 

Buenos días- dijo estirándose y abriendo la boca.

 

Se puso a desayunar y no dejo ni las migas de las tostadas.

 

Gracias por el manjar nene- le dijo Lucas al rubio mientras este le miraba asombrado con la rapidez que había desaparecido el desayuno.

 

-Gracias las tuyas- y le dio otro beso, esta vez un poco mas largo- por cierto estuve mirando el tiempo para este fin de semana en asturias y no va a hacer malo para la epoca, ¿te animas a venirte este fin de semana?

 

- Valee, pero el Lunes tengo que estar aquí sin falta que tengo que ir a la universidad.-dijo le moreno.

 

- ¿Que estas estudiando?-dijo curioso el rubio.

 

-Derecho Penal- dijo orgulloso.

 

-¿Abogado?, joder a mi padre la vas a encantar- espetó el rubio- fue juez aquí en Madrid muchos años.

 

-Ya tendremos algo en común para hablar en la cena- Sonrió mirando a Alex- ¿Y tu que haces ahora?

 

-Programador, trabajo desde casa y no me quejo la verdad- dijo.

 

-Pues me tienes que arreglar el portátil que no va- dijo señalando el portátil de la mesa del fondo.

 

-Muy buena descripción de lo que le pasa, como defiendas así a la gente pobres de ellos- río a carcajadas el rubio.

 

-Imbécil- masculló Lucas haciéndole la puñeta.

 

-¿Entonces cogemos mas cosas y nos vamos para Asturias?- Preguntó impaciente el rubio.

 

- Preparo la maleta y nos vamos-

 

-Mete bañador- dijo el rubio.

 

-Si en noviembre me voy a meter a la playa, tu flipas.- Dijo el Lucas

 

-Tenemos piscina en casa, climatizada, para que no pases frío princesa- Dijo con voz femenina mientras posaba como una modelo.

 

La imagen hizo que el moreno se riese- Lo que voy a tener que aguantar- le dijo al rubio.

No lo sabes tu bien- Contestó con una sonrisa de lado a lado.

 

 

 

 

Ya listos para el viaje bajaron las maletas al coche, se montaron y salieron dirección Asturias.

Los primeros 45 minutos apenas hicieron 30 Km.

Es horrible conducir por Madrid por eso no me saco el carnet- Dijo Lucas

Te tengo que dar unas clasecitas al llegar al pueblo- Dijo el rubio poniendo una mano sobre la pierna del moreno.

De conducir o de otra cosa- dijo mirando al conductor con una media sonrisa.

De lo que tu me pidas- dijo el rubio guiñándole un ojo.

Lucas se derretía cada vez que el rubito le hacia eso pero intentaba evitar que se le notase.

Pasaron un par de horas y decidieron parar a comer algo cerca de León.

Al acabar de comer volvieron a la ruta y afrontaron los últimos kilómetros

Al fin ya se podía ver la costa.

Ya estamos llegando ¿No?- Dijo el moreno ansioso.

Sii- Dijo con una enorme sonrisa- Esto es Salinas, siempre veníamos aquí de vacaciones te va a encantar.

Se acercaban a una zona residencial con varias casas apartadas de la villa principal, y el rubio saco un mando de la guantera y la puerta metálica de una espectacular casa de 3 plantas al pie de la playa.

Joder- Exclamó Lucas mirando la casa y las vistas de la playa- Vaya casaza.

A mi padre no le ha ido mal la verdad- dijo orgulloso.

Aparcaron el coche en el garaje y subieron los trastos a la habitación de Alex.

Aqui casi entra mi piso entero- dijo Lucas

Y no le faltaba razón, una habitación enorme con posters de varios videojuegos, películas y unas banderas del Atlético de Madrid y al fondo se podía ver una enorme cama al lado de un ventanal en el tercer piso que daba a la playa de Salinas con una vista digna de postal.

¿Eres del Atleti?- Miro con desprecio al rubio- Algo malo tenias que tener.

Cállate merengue, que se te ve a la legua- dijo besando la bufanda que colgaba sobre la esquina de la cama.

Después de dejar todo en la habitación, Alex le estuvo enseñando la casa y decidieron y ir a dar una paseo por la playa aunque no se fuesen a meter al agua.

Bajaron a la playa casi desierta, solo se podía observar a dos abuelos pescando al fondo sentados en unas rocas.

Mira tu y yo de mayores- dijo el rubio señalando a los ancianos.

Mas quisieras- dijo Lucas pegándole un leve empujón al rubio- No creo que te aguante tanto.

Pero si soy un pedazo de pan- y le puso ojitos.

Si, Segu…- fue interrumpido con un beso, un apasionado beso donde no pudo luchar contra la lengua del rubio que inspeccionó cada recoveco de su boca.

Duró minutos hasta que se separaron.

Aún nos van a ver los ancianos- dijo Lucas rojo como un tomate.

Y que, al que me conoces es a mi, además ¿tanto te molesta que te vean conmigo?- Dijo poniendo cara de enfadado.

No es eso, es la primera vez que estoy con un chico dame tiempo- Dijo dándole un pico al rubio.

No te debería preocupar tanto eso, venga ven que te voy a enseñar mi sitio preferido- Y cogió de la mano al moreno y lo llevó hasta unas rocas casi al final de la playa, pasaron por un pequeño camino por detrás de estas y vio una pequeña cueva con arena.

El moreno sacó su móvil y sacó una fotografía del sitio con el rubio mirando hacia el agua.

Se sentó en la arena apoyado en la piedra de la cueva y se quedó observando al rubio durante unos segundos.

El rubio se saco la camiseta y se la tiró al moreno, hizo lo mismo con las zapatillas y el pantalón.

Guárdame esto un momento- y acto seguido se fue corriendo y se zambulló en el agua.

Lucas estaba flipando con el valor que tenia el rubio de meterse al agua, 19º marcaba en el móvil. Está loco pensó para si mismo.

Al cabo de unos minutos el rubio salio del agua. Su cuerpo brillaba por el agua que caía, se podía ver su pelo cayendo sobre su cara, unos pectorales pequeños pero bien formados y se dejaban ver un vientre plano con unos pequeños abdominales.

Era una vista perfecta pensó el moreno.

¿Que, te atreves tú?- dijo el rubio mientras se sacudía el pelo.

Ni de coña- dijo mientras se sacudía las gotas que le acababan de caer.

Ahora necesito que me seques- y sin dejar tiempo al moreno a reaccionar se lanzó sobre el.

Que hac…- El rubio le empezó a comer la boca, devorándolo.

Le quitó la camiseta al moreno .

Lucas sintió el húmedo cuerpo del rubio, al poco empezó a temblar, una mezcla de la excitación y el frío que traía el rubito. En ese momento se estaba dejando hacer de todo por su compañero, este le mordisqueaba los pezones.

Ahhh- Sonó un gemido que puso mas cachondo al rubio que bajó por el vientre del moreno lamiendo sus abdominales.

Lucas no paraba de temblar.

¿Quieres que subamos a casa?- dijo el rubio- estas temblando muchísimo.

Vale, no llevo muy bien el frío y además vamos acabar llenos de arena.

El rubio uso su camiseta para secar al moreno y le puso su camiseta. El se vistió y empezó a frotar al moreno.

Casi llegando a casa el calor que le estaba dando Alex hizo que ya casi no tuviese frío. No quería dejar al rubio con el calentón, ni el tampoco que cojones pensó.

Vamos a la piscina ¿no dijiste que era climatizada?- dijo su oreja y dándole un muerdo en el cuello.

Si vamos- No acertó a decir nada mas el rubio.

Al lado del garaje se podía ver una piscina no muy profunda pero cubría hasta la cabeza, excepto en unas escaleras que se veían al fondo.

Ahora sí, el moreno se quitó la ropa y se lanzo al agua.

Aquí no empezaras a temblar también ¿no?- dijo el rubio mientras se quitaba los pantalones y los boxers.

Ven y compruébalo- dijo desafiante Lucas.

Al momento se lanzo al agua.

Lucas estaba muy cachondo, como nunca antes en su vida.

Cogió al rubio y este abrazo sus piernas al cuerpo del moreno y se agarró a su cuello, Lucas lo empotró contra la pared de la piscina y presionó su miembro contra su trasero.

Fóllame- dijo Alex entre suspiros.

Lucas comenzó a a meter primero dos dedos dilatando el ano del rubio. Podía notar como el corazón de Alex latía a mil por hora, igual que el suyo. Como su interior se contraía, metió un tercer dedo.

El rubio no paraba de gemir- Por favor, métemela ya- le susurró al oído.

Lucas al oír eso y con tal grado de excitación que tenía se la metió completamente. Las uñas del rubio se clavaron en su espalda gimiendo los dos a la vez.

Empezó a mover el cuerpo del rubio hacia arriba, sus pechos se tocaban, el miembro de Alex se frotaba contra los abdominales del moreno.

El rubio devoraba cada centímetro de su boca. Bajaba su cuerpo con fuerza sintiendo como se le clavaba la polla del moreno en su interior, gemía pegado a la boca de Lucas. Lo que hacia que este le siguiese dando mas duro.

Cogió al rubio y lo llevó hasta las escaleras, lo sentó arriba de todo y le levanto las piernas pasándoselas por encima de los hombros. Lubricó un poco su polla con saliva y continuó dándole estocadas al rubito, que tenia una cara de placer que hacía que le diese con más y más fuerza, aumentando el ritmo, acercándose de vez en cuando para darle un morreo y morder el cuello de su extasiado amigo.

Siguieron follando unos minutos mas.

Me voy a correr en nada- Dijo el Rubio exhalando el poco aire que le quedaba.

Se corrió, llenando de leche todo el abdomen del moreno, que paso uno de sus dedos y le lo paso por la boca.

El rubio le miraba absorto. Vaya fiera he desatado pensó.

Lucas al poco, se corrió dentro del rubio, que sintió como su interior se llenaba de semen.

Lucas comenzó a besar al rubio, paso de comerle la boca a darle un beso más tierno, más pausado.

Se volvieron a meter al agua y estuvieron mas de un cuarto de hora hasta que decidieron irse a la cama.

Se recostaron y el rubio se puso detrás de Lucas y le susurró pegando su polla a su culo- Otro día me tocará a mi.

Ni lo sueñes- Dijo el moreno

Ya lo veremos- Y se abrazó con fuerza al cuerpo del moreno.

Hasta mañana rubito- Y se agarro al brazo del Alex.

Hasta mañana temblores- Dijo el rubio dándole un beso en la mejilla- Te quiero- le dijo al pasar por su oído.

Yo a ti también- Contestó casi dormido el moreno.

El reloj marcaba las 12:26 cuando Lucas empezó a abrir los ojos.

Miró hacia un lado y vio al rubio durmiendo como un tronco.

Decidió levantarse, apartó un poco las cortinas y se quedó observando la playa unos minutos, veía a gente paseando por la playa, un señor que entraba a su barca en la orilla y no pudo evitar mirar hacia las rocas donde el rubio se metió al agua el día anterior – Quien me lo iba a decir a mi- Pensó para sus adentros.

Se dio la vuelta y tapó con las sabanas al rubio, que apenas se movió unos centímetros y se fue a la cocina. Rebuscó en los armarios donde podía estar el café y a los pocos minutos ya lo tenia preparado.

Desayunó viendo la televisión y al cabo de un rato el rubio apareció por la puerta con un albornoz, el pelo alborotado y cara de sueño.

¿Llevas mucho tiempo despierto?- dijo bostezando

Que va, media horita- dijo ofreciéndole un poco de café.

Como te portas- y sonrió- te faltaba llevármelo a la cama.

Y si quieres te abanico también- dijo riendo-se- Me voy a duchar.

Vale después me ducho yo y vamos a comer algo por ahí, ¿te parece?

Si, que estoy canino y ayer no cenamos nada- dijo tocándose el estomago.

Venga va- dijo dándole un sorbo al café.

Después de ducharse se fueron al paseo marítimo y caminaron por el.

Aquí se come de maravilla, es de unos amigos mios de aquí-dijo señalando un restaurante justo enfrente de ellos.

Entraron y Alex saludó al chico que estaba detrás de la barra, de unos 25 años, pelo rapado con barba y de mas de 1,80 de altura.

¿Que tal Dani como estas?- el chico se giró y se quedo mirando al rubio.

Joder, buenos ojos te vean tío- Le dió un fuerte abrazo- Y ¿Quien eres tú?

Bueno yo soy…- le interrumpió el rubio- Mi novio

Lucas se empezó a poner rojo, no sabia que decir.

Hacéis buena pareja- le soltó Dani

¿Ves? ya lo sabia yo- dijo Alex agarrando por la cintura al moreno.

Sigues igual de flipado que siempre, no se como le aguantas…- Dijo suspirando el dueño del local

Esta como una cabra la verdad- rió el moreno cogiendo algo mas de confianza.

Estuvieron comiendo durante mas de 2 horas, hablando, contándose como les iba la vida.

Que os parece si nos reunimos unos cuantos a la noche y salimos por aquí que suele haber ambiente-dijo Dani.

Por mi perfecto- dijo Alex.

Y yo igual- dijo Lucas queriendo conocer a los amigos de su “Novio”

Se despidieron y se fueron a comprar algo al supermercado, comida y algo de bebida para esa noche.

Al llegar a casa colocaron todo y se pasaron la tarde viendo unas películas y jugando a la consola.

Cenaron y Alex le dijo a Lucas que si quería ver algo de ropa de su hermano para salir a la noche.

Aceptó.

Lucas cogió unos jeans claros, una camisa blanca abierta por arriba y una chaqueta marrón de cuero.

Se peinó y se echó algo de colonia que encontró en el tocador.

Iba hecho un pincel, la camisa le marcaba todo el contorno de su cuerpo y dejaba ver un poco de su pecho y los jeans apretados resaltaban su trasero.

Bombón- le dijo el rubio desde la puerta del baño.

Tu también vas muy mono- contestó.

Y es verdad, el rubio llevaba una camiseta blanca y una chaqueta vaquera con capucha, y unos jeans a juego.

Después de piropearse salieron de casa y se dirigieron a la zona de ambiente y entraron al Pub donde habían quedado con Dani.

En una mesa estaban sentados Dani, tres chicas y otros dos chicos.

Estuvieron un rato presentando a Lucas a todos.

La chica de al lado de Dani era su novia, Marta de 25 años pelo largo negro y unos potentes ojos verdes.

A su lado Carla y Juan , pareja también, ella rubia con media melena bastante bajita que contrastaba con Juan de 1,86 cabeza rapada y pinta de heavy.

Y quedaban Petra, 175 rubia, pelo largo, parecía una modelo “De hecho lo fue de adolescente” y Adam, su pagafantas personal, con algo de barriguita pelo corto y de la misma altura que Lucas.

Se sentaron juntos a la mesa y pidieron unas copas de vodka.

Cuando se contaron todo lo que no sabían los unos de los otros ya eran las 2 de la mañana con 3 copas encima cada uno, decidieron ir a una discoteca cercana.

Entraron y estaba bastante lleno, pidieron otras copas y se fueron a la pista de baile. Menos Lucas que se quedó con Juan “el heavy” que claramente aborrecía ese tipo de musica.

Nunca le había visto así- comento Juan dándole un sorbo al cubata.

Asi ¿Como?- dijo expectante Lucas.

Feliz-dijo tajante- La ultima vez que le vimos con su ex Lucia hace 2 años lo tenia castrado y amargado- Siguió bebiendo.

No sabia nada- dijo intentando seguir el ritmo con las copas del rapado.

Pues me alegro mucho verle así y que aparezca por aquí- dijo con una sonrisa.

Siguieron hablando un rato mas, sobretodo de musica la cual coincidía bastante con el heavy.

Descubrió que el heavy tocaba la guitarra y Lucas le comento que estuvo en un grupo hace muchos años cantando pero lo dejó.

Eras las 3 y media ya y en la disco empezaron a poner algo de rock. Cuando pasaron unas canciones el heavy entró a la barra y se puso a hablar con el dueño del local. Aviso a Lucas y este le siguió.

Te comento- Le dijo poniendo una mano en su hombro- Lo de que cantabas no es un farol ¿No?

No, por… espera- Le corto el heavy.

Que te parece si tocamos unos temas allí- Señalo una tarima con un micro.- Aqui tengo este juguetito- Señalo una guitarra electrica que estaba colgada en la pared.

Puff delante de todos, no se-dijo bajando la cabeza.

Venga dale unos tragos al cubata y vamos no te lo pienses- dijo empujando al chico hacia la barra.

Todo el mundo estaba bailando, y de repente el DJ fue bajando la musica poco a poco.

Hoy nos van a deleitar con un tema en directo Juan y el chico nuevo, adelante chavales.

Se hizo el silencio y se encendieron las luces de la tarima. Se podía ver a Juan con una bandana de Metallica en la cabeza con la guitarra en la mano y al lado Lucas con la camisa remangada, un poco nervioso, pero el alcohol le estaba dando cierta confianza en ese momento.

Juan comenzó a tocar los primeros acordes de Livin´ On a Player de Bon Jovi

Cuando empezó a cantar Lucas las caras eran de sorpresa, sobretodo la de Alex, nunca se esperó eso del chico timido. Verle cantar era lo mas sexy que había visto en su puta vida, le gustaba todo, como rasgaba su voz para entonar la canción y sobretodo como la cantaba poniéndole todo el empeño posible.

Al acabar la canción la gente estaba desatada, parece ser que querían más.

Cantó un par de temas de AC/DC otros tantos de Nirvana, hasta que al acabar la ultima canción y tomar un poco mas de su copa soltó señalando al rubio:

Esta va para tí- dijo guiñandole un ojo de forma que muchas de las chicas y algún chico se quedaron mirando para el rubio, con envidia.

Empezó a sonar Labios Compartidos de Maná.

Amor mío

Si estoy debajo del vaivén de tus piernas

Si estoy hundido en un vaivén de caderas

Esto es el cielo es mi cielo

Amor fugado

Me tomas, me dejas, me exprimes

Y me tiras a un lado

Te vas a otro cielo

Y regresas como los colibríes

Me tienes como un perro a tus pies

Otra vez

Mi boca insensata vuelve a caer en tu piel

Vuelve a mí tu boca y provoca

Vuelvo a caer de tus pechos a tu par de pies

Labios compartidos

Labios divididos, mi amor

Yo no puedo compartir tus labios

Que comparto el engaño

Y comparto mis días y el dolor

Ya no puedo compartir tus labios

Oh amor, oh amor compartido

Al Acabar la canción se bajo del escenario y le dió un morreo en mitad de la pista al rubio.

Cuando se separaron apareció Juan- De puta madre tío, cantas de puta madre…

Y a ti que te ha parecido le dijo al Rubio.

Que no me lo esperaba, tienes a media sala loquita- dijo poniendo pucheros.

Pero soy todo tuyo-le Dio un beso que sabia a vodka con limón.

Al rato ya ya eran las 5 de la mañana y se despidieron de todos y se dirigieron a casa.

Al llegar a casa se dirigieron a la sala, estaban bebidos pero plenamente conscientes, Lucas se sentó en el sofá y Alex fue a la cocina a buscar algo de beber, tardaba mucho, pero al rato apareció con dos mojitos y le dijo al moreno de subir a la ultima planta, se fueron a un pequeño cuarto con terraza y un par de sofás.

Se sentaron los dos juntos. Se miraban fijamente.

Esta siendo la mejor semana de mi vida- dijo Lucas mirando al rubio a los ojos.

La mía también.

Se fundieron en un beso que parecía durar milenios.

Al separarse estuvieron hablando y tomando el mojito.

Iban algo borrachos por la mezcla pero controlaban lo suficiente para saber lo que iba a pasar ahora.

Se fueron a la cama y esta vez Lucas fue el que empezó a jugar, desvistió al rubio completamente, primero le quito la camiseta, devoró cada rincón del chico acabando en el limite de los pantalones, se los quitó y el boxer también.

Comenzo a lamer el miembro a medio despertar del rubio.

A ver si con lo que he bebido no se me levanta- dijo mirando como el moreno le comía la polla.

No te preocupes que de eso me ocupo yo- le mordió los labios y volvió a bajar hasta la polla del chico.

Pocos segundos hicieron falta para que su polla estuviese totalmente erecta.

El rubio no paraba de gemir agarrando la cabellera de Lucas y empujándola hacia abajo.

Cuando vio que el rubio estaba excitado dijo apretando su culo contra su rabo y acercando su boca dando pequeños mordiscos en su oreja:

¿No era que querías probar esto?- apretaba mas su culo.

Estas segu…- Alex no pudo acabar la frase cuando el moreno empezó a frotar su culo contra la polla del chico.

Quiero que seas tu- dijo en la oreja del rubio.

El rubio no tenia que decir nada más, saco lubricante de la mesilla y se untó varios dedos.

Poco a poco empezó a introducir un dedo mientras que el moreno gemia.

Cuando vio que ya podía introdujo otro dedo, el moreno esta vez dio un pequeño grito de dolor.

Tranquilo, relájate- Empezaron a comerse la boca, el moreno le mordía el labio inferior y buscaba su boca con pasión.

Le metió el tercer dedo.

Ahhhhhh- menos mal que estamos solos pensó el rubio ante el grito del moreno.

Siguió dilatando el culo de Lucas.

Al poco ya estaba lo suficientemente dilatado para intentarlo.

Agarró su polla y la puso en la entrada del chico, empezó a introducir la punta poco a poco, sabia que era lo mas difícil.

Hazlo ya- dijo Lucas suplicando.

Empujó mas su miembro en el trasero del chico. Estaba muy apretado, le iba a doler, pero merecería la pena así que siguió. Metió la punta y el moreno puso cara de dolor pero contuvo el grito mordiéndose los labios. El rubio miraba la cara del chico y no podía evitar ponerse muy caliente viendo que lo tenia sometido suplicando por que le pegase la estocada.

Por fin el miembro entró casi por completo en el trasero del moreno.

Unas pequeñas lágrimas brotaban de los ojos verdes de Lucas.

Los gritos de dolor eran increíbles, pero sexys a la vez, ver como se tensaba cada musculo del moreno, los abdominales se le marcaban de una manera bestial, sus brazos tensos y su culo apretando el miembro del rubio estaban haciendo esa noche un placer digno de la mismísima afrodita. El rubio empezó a empujar el culo del moreno hacia arriba dándole a entender que se empezase a mover.

Al poco la cara de dolor se fue convirtiendo en una cara de placer absoluto. El moreno empezó a coger ritmo y el rubio agarró la polla tiesa del moreno y empezó a pajearla. Lucas sudaba, sudaba mucho estaba al limite del delirio, necesitó bajar la cabeza y mientras estaba totalmente dentro del chico comenzó a besarle, jadeaba en su boca, jugaban con sus lenguas, mordían sus labios sin control alguno.

El rubio volteó al moreno y se puso encima de el, no perdía vista de su cara, de su cuerpo. Empezó a embestir al chico, los gemidos del moreno se mezclaban con gritos de dolor cada vez que el miembro del rubio tocaba lo mas profundo de su ser.

El moreno pajeaba su propia polla y la otra mano la tenia en la nuca de Alex, acercaban sus bocas cada poco mientras el otro le embestía cada vez mas rápido, mas fuerte y mas profundo.

Sin aviso el moreno se corrió sobre su propio abdomen. Y soltó un gemido tan intenso que hizo que el rubio se corriese dentro de él y se derrumbo sobre el pecho del moreno. Este le paso el brazo por detrás apoyándolo en la espalda. La cabeza del rubio que estaba sin aliento se posó al lado del cuello de Lucas respirando con dificultad en el.

Alex se quedó dormido encima de él mientras en moreno pasaba su mano por su pelo.

Estuvo jugando un rato con el sedoso pelo del rubio hasta que cayó rendido.

Continuará