Las consecuencias, para bien o para mal, de la decisión de Laura, le van a llevar a descubrir que todo lo que ha sucedido, tenía un propósito.
Laura se ve entre al espada y la pared, tras una súbita perdida de control de su vida, o de lo que la rodea, deberá afrontar una decisión que pueda por fin hacerla feliz para siempre, o no.
Lidiar con todo empieza a pesar sobre los hombros de Laura, que tiene que compaginar una relación con Javier con la situación de su hijo.
Tras un nuevo revés para Laura, y la revelación a su hijo, debe acostumbrarse a una época convulsa y dura, esperando saber a lo que atenerse.
La felicidad ha llegado a la vida de Laura, que junto a Javier, tratan de proseguir su relación amorosa en secreto, disfrutando por fin de un poco de paz.
Laura al fin ha logrado lo que tanto deseaba, ahora toca lidiar con las consecuencias de ello, desatando una pasión que la arrastrará sin remedio.
Los acontecimientos ocurridos hacen que Laura se suma en una espiral decadente, un estado caótico y devastador, en el que los problemas no dejan de llegar, hasta llevarla al límite.
La realidad y la ilusión se mezclan en un fin de semana completo que hará que Laura se cuestione todo su mundo, y la dirección que su relación con el joven Javier ha tomado.
Los días junto a Javier son un descenso a los infiernos para Laura, que cada día quiere profundizar más en la extraña y morbosa relación con el joven.
Laura disfruta todo lo que puede de Javier, estrechando la relación entre ellos a niveles que no creía posibles.
Laura ha tomado una decisión, tras retomar las riendas de lo que quiere, va a divertirse todo lo que pueda.
El regreso del joven hace que Laura se prepare a conciencia para pasar unas semanas junto a él, a solas y tratando de sentirse viva de nuevo, sin saber hacia dónde le llevará la situación.
Tras la explosión de emociones negativas, Laura se prepara para un verano largo y soporífero. Nada parece presagiar todo lo que va a ocurrir.
Una vez que Laura ayudó a Javier para encontrar pareja, ahora debe lidiar con esa decisión, afrontando las consecuencias que ello ha derivado en su relación con él.
Tras asustarse de la dirección que toman las cosas, Laura debe decidir qué rumbo tomar, y qué es lo que desea y quiere para sí misma.
La relación con el joven se vuelve cada vez más intensa para una Laura que se deja arrastrar por un juego que ella misma ha iniciado.
Laura comienza a sentirse cómoda en una situación extraña, y las sensaciones que tiene la hacen seguir el juego.
Las vivencias de Laura, una mujer espectacular, atascada en una existencia sin motivaciones ni futuro, cuando algo extraño cambia su vida para siempre.
Relato perteneciente al ejercicio, que ahora vuelvo a subir arreglado en mi cuenta personal.
Un pequeño regalo para mis ansiosos fans, que andan preocupados por que no sale nada nuevo. Os pido paciencia, por ahora, disfrutad de este material exclusivo complementario de "La casa en la playa."
Versión extendida y completa de mi segunda historia, de como la lujuria y la pasión nublan el juicio o la moralidad, y de como en medio de ese caos destructivo y devastador, en mitad de las peores condiciones posibles, brota una semilla, y de ella nace una flor tan bella como inquebrantable.
Final de la serie, quizá el más complicado que he escrito hasta ahora, y solo por costumbre lo ubico en Filial.
Lo raro de todo, es que sin querer que pasara, pasó.
Llegó el momento en el que me di cuenta del desmadre que había montado, y quise pararlo, ¿pero como?
Cada cambio, por ínfimo que sea, provoca una reacción en cadena incontrolable, que aumenta exponencialmente hasta terminar en unas consecuencias inesperadas.