Dentro del club, un tío cachondísimo bailaba con su novia, tuve que aprovechar la oportunidad que iba al baño para verle la polla y comérsela escondidos.
- Me están diciendo que hagamos un skype guarro con ellas. Tragué saliva y pensé: Joder, le voy a ver los 23cm de pollón y a lo mejor le podré magrear. Una vez en su habitación me tuve que sentar encima de él, que iba solo en shorts, tremendo paquete se gastaba. Nos íbamos a ligar a estas tías ya.
Yo estaba disfrutando como un animal comiéndome el pedazo de polla al novio hetero de mi hermana. Que gorda y rica era. Me encantaba comérsela mientras él jugaba a la play, aunque él intentase apartarme todo el tiempo llamándome maricón.
- Mira macho, y esta es la foto que le he mandado yo. Y aparece una foto de un pollón todo empalmado. Mis ojos se abrieron como platos. - Joder tío, que pollaco que tienes ¿no? - Le suelto disimulando mis babas por ver más.
Sale de follarse a mi hermana en su habitación y aparece desnudo en la cocina. Me quedo embobado con su polla y él se pone a hablar conmigo. Esta situación se convierte en tradición. Es un exhibicionista.
Lo mejor de compartir tiempo con él es su exhibicionismo, no se corta ni un pelo. La primera noche ya comenzó el espectáculo. Se bajó el calzoncillo gris y salió disparada una polla enorme y gorda que olía muchísimo desde mi cama.
Me estaba pegando una ducha cuando se abre la puerta y aparece Marco, se baja el calzoncillo y entra. -Oye, te importa si me meto, en 10 min sale el bus. Se me puso dura al instante. Él no tardó en darse cuenta.
- ¿Puedo hacerte una pregunta sobre los gays? ¿A ti qué te mola? - Soy pasivo, dije sin dudar. ¿Tú alguna vez te has planteado hacer algo con un tío? - No, que va. Me gustan las tías.
Le acompañé a mear por lo borracho que iba, en esto se saca la polla aún morcillona y empieza a salir su tremendo chorrazo. - Marco, tío, apunta mejor. - Ayúdame anda, pero sin mariconadas.
Él no miraba hacia donde estaba yo, lo que me permitía contemplar la escena sin molestias mientras alargaba el tiempo de cepillar los dientes. - Creo que voy a necesitar que me eches un cable para depilármela ¿te importa? - me soltó