Soy una mujer sensual, me gusta la sensualidad y me gusta verme sensual, y muy en especial ponerme sensual para los hombres y sobretodo al que quiero enganchar. Me gusta el sexo y lo he practicado tanto con hombre como con mujeres. Me gustan ambos, cada uno tiene su particularidad. Entre las mujeres nos conocemos mejor y ponemos más dulzura y cariño, pero el hombre nos entrega su fuerza y su deseo animal. Ase poco me convidaron a una swinger, a las que no había asistido nunca, había que ir en pareja, dispuestas a compartir y sobretodo vestidas muy sexies. Que me han dicho. Sexo y sensualidad mis objetivos.
Siempre me ha gustado prepararme cuando voy a una fiesta, y a esta había que ir sexy. Me recorrí algunas tiendas, mire algunas revistas, me colgué de internet y al final decidí inventar Yo.
Tengo una calza de seda dorada (media imitando metálica) elasticada, con grandes calados a ambos lados, que me cuesta un triunfo ponérmela por lo ajustada que me queda. Son muy sexies, ya que dejan mucha carne que ver, delinean todo mi cuerpo, se meten entre mis cachetes de la cola, moldeándolos y deseándolo agarrar, como también adelante denotan el contorno de ella. Cubren pero insinúan todo Como top me conseguí un pequeñísimo sostén de un bikini del mismo material y color que la calza, tiene forma de triangulitos que con fuerza tapan el pezón y un poco más, mis senos quedan al descubierto y de amarras solo tienen delgadísimas tiritas que se atan con un nudo. Lo lindo y que a mi me gusta mucho el top deja ver el contorno de mis pechos, y se puede apreciar lo grande, firme y naturales que son. Lo encuentro sumamente sexy. Para ese día me prepare y me fui a una sesión de solarium que salí como un carboncito. La ropa dorada no puede ir sobre una piel blanca.
Ese día me prepare con anticipación, quería ser la reina de la fiesta, fornicar y que me fornicarán todos los hombres y mujeres que estuvieran presente esa noche, para eso iba. Temprano me di un baño de aceites perfumados, cosa que mi piel se impregnara, quedara bella y perfumada. Para su suavidad y sensación de humedad, me coloque un aceite con unos polvitos brillantes, que quemada da brillo y reflejos. Para continuar con la sensación de humedad utilice un gel que me mantiene el cabello como si recién estuviera saliendo de la ducha, pero no da rigidez. Me maquille para resaltar mis ojos y boca. Me puse mis prendas elegidas, me mire al espejo y pensé altaneramente "esta noche matas".
Me pasaron a buscar alrededor de las 22:00 horas, mi compañero al verme me pregunto te pones algo para bajar y Yo le conteste no. El portero todavía no puede cerrar la boca, pobre. Fuimos en auto y llegamos a una parcela en las afueras de Santiago maravillosa, de grandes murallas cosa que no se viera para adentro, de jardín iluminado. Todo muy ad-hoc y lindo. Mujeres y hombres de todos los tipo y características. Había de todo. Caminamos por los alrededores con mi amigo buscando compañía de agrado para los dos, ya que no pensábamos tener sexo entre nosotros, aunque lo hemos hecho y disfrutado mutuamente ambos. Encontramos un grupo de tres parejas muy del gusto de nosotros y nos acoplamos. Ellos estaban en una entretenida conversa sobre la sexualidad y casi eran novatos en la materia, conversábamos de cómo nos íbamos a iniciar y otras tonteras típicas de novatos. Estábamos en la conversa cuando una chica que llamaré "Sonía" se me sentó al lado y me ofreció un trago, Yo le dije que no podía tomar alcohol porque tomaba unos medicamentos y los nombre.
Ella me contesto esos medicamentos te hacen producir leche y Yo siempre he querido mamar de unos bellos pechos, la pareja le contesto esta es tu oportunidad. Ella se sonrojo. Al rato pregunte si alguien sabía donde quedaba el baño, Sonia me contesto Yo te llevo, se donde esta. Me llevo y me espero afuera, las calzas no son fácil de sacarme y me demore. Ya había terminado y en esos momentos estaba media agachada lavándome las manos en el lavatorio cuando ella viene por detrás mi me toma de los pechos. Al sentir sus manos en mi desnudes y sus labios en mi cuello, sentí un cosquilleo en mi espalda. Acercando su boca a mi oído me dice: "Te deseo". No soy lesbiana, pero me gusta ser deseada, tanto por mujeres como por hombres, y sí me lo dicen me excita mucho. Yo la mira por el espejo y ella era bien agradable y sus manos suavemente apretaban mis senos y sentía su calor en mi nuca. Me estaba excitando y le conteste soy bisexual. Acto seguido me da vuelta su boca busca la mía, la encuentra y comienza a besarme con fuerza y deseo hasta que penetra su lengua ardiente y mojada por el deseo en mi boca. Su lengua giraba dentro de mi poca despertando placer y deseo. Mientras sus manos recorrían mi cuerpo y desnudaban mis senos. Su boca iba a ellos con deseo, empezó a mamar y cuando mi leche ingreso a su boca, me miro diciendo con su mirada; "esta noche serás mía". Termino de besar mis pechos, me arreglo mi top, me miro y me dijo; Volvamos.
Llevándome tomada de la mano volvimos al grupo, sin soltarme me hizo sentarme y ella se coloco detrás de mí. Su compañero la miraba sin decir nada, al resto no le importábamos. Mientras continuábamos con la conversación sus manos volvieron a tomarme de la cintura, pero esta vez ella abrió sus piernas y se encajo detrás de mí lo que nos permitía estar bien juntas. Yo delante y ella atrás. Sentía su cuerpo pegado al mío. Comenzó a besarme el cuello y a decirme cosas, mientras sus manos comenzaban a recorrer mis muslos y entre mis piernas. Nuestra actitud ya era apreciada por los demás del grupo y comenzaron a soltarse. Ya sus manos recorrían mis pechos, Yo estaba apoyada en ella con mi cabeza reposando sobre uno de sus hombros, lo que hacia mi cara estar al nivel de ella. Su boca buscaba la mía y Yo se la entregaba. De repente sentí una boca en unos de mis pechos, era firme, no podía ser ella ya que nos estábamos besando. Era uno del grupo que se había acercado a besar uno de mis pechos, mientras ella seguía besándome y jugando sobre mi calza con mi clítoris. Sentía mucho placer al sentirme deseada por dos personas, al poco rato sentí que mi pecho libre estaba siendo besado y comenzaban a mamar, era un segundo tipo.
Mi cuerpo era recorrido por un calor indescriptible, lleno de placer y deseos de ser poseída. Ella no aflojaba y ellos tampoco. Manos recorrían mi cuerpo, mi top ya estaba fuera ahora trataban de sacar mi calza. Mis deseos y el de mi compañera y compañeros fueron más grande y por primera vez, la calza salió rápidamente y Yo estaba desnuda, ella besándome, uno de los muchachos jugando con mis senos y el otro buscando con su lengua entre las manos de mi amiga mi clítoris hasta que lo encontró y comenzó a succionarlo con fuerza. Yo presa de un gozo indescriptible. Al rato pararon al mismo tiempo se levantaron los tres, me levantaron y nos fuimos a una sala donde estuviéramos más cómodo. Iba llena de deseos, quería llegar luego para continuar, entramos a un dormitorio, me acostaron en una cama, uno de ellos me tomo de las manos y el otro de los pies, me abrieron los brazos y me los amarraron al respaldo de la cama, lo mismo me hicieron con los pies. Estaba tan excitada que no me importo.
Mi amiga se subió sobre mi y comenzó a recorrer mi cuerpo con su boca me besaba y pasaba su lengua por mi cuerpo. Mientras podía ver por medio de un espejo en el techo que los tipos se masturbaban mirándonos a nosotras, ese cuadro me daba más placer, quería ser poseída, quería chupar ambas bergas, quería una delante y la otra por detrás, pero no podía hacer nada estaba amarrada. Solo gemía de placer y quería más. Mi amiga llego con su boca a mi clítoris y comenzó a mamarlo, mientras cada uno de los tipos se arrodillo al lado de la cama a la altura de mis pechos y comenzaron a mamarlos. Yo solo gemía de placer y trataba de soltarme de las amarras para poder agarrar uno de esos pene y mamarlo. Mi amiga seguía sin darme tregua, me llevaba arriba y paraba, y volvía hacerlo. Así me tenía. Mi cuerpo tiritaba, trataba de soltarse, rogaba, pedía por favor que me soltarán. Sólo me daban sexo. Era su objeto. Pero a mi me gustaba. En realidad todo lo que pedía no lo quería. No quería que me soltaran. No quería que pararan.
Quería más. Mi amiga me hizo llegar, pegue un grito tan grande de placer, que me hicieron callar, ambos machos se pararon y se masturbaron dejando caer su semen en mi cara. Yo desesperada abría mi boca para que cayera dentro de ella. Algo pude agarrar. Mi amiga me besaba con frenesí y entre ambas peleábamos por ese semen que caí. Después de unos segundos veo que mi amiga deja el lugar y sube uno de los muchachos y comienza a introducir su miembro en mi vagina. Que placer, era lo que había deseado. Como Yo estaba tan húmeda entro rápidamente. Mientras ella y el otro seguían jugando con mis pechos.
El macho sobre mi me hizo llegar en más de dos oportunidades. Gritaba como un barraco en camino al matadero, no me dejaban descansar, se cambiaban entre ellos y no me dejaban respirar. Pero Yo quería más, quería más. Pedía que no más, pero mis suplicas eran débiles, y creo que ellos las palpaban, porque más me daban. Se intercambiaban entre los varones, ella sólo me besaba y mamaba el semen que ellos chorreaban sobre mi. Fue un placer duro pero deseable, gozable. Literalmente puedo decir que me dieron las veces que quisieron, cuanto quisieron y como quisieron. Creo que no estoy dispuesta para otra vez. Pero si diré que me gusto ser violada, porque eso fue. Una violación. Estaba amarrada. No me preguntaron, sino que me dieron, las veces que quisieron. Sí debo reconocer que una vez que me soltaron, me dijeron que les había dado un gran placer, y que era una mujer maravillosa. Les conteste que ellos a mi también, que el placer que había recibido era indescriptible, pero si no estaba segura de querer ser violada nuevamente.
Me vestí, una vez que encontré mi ropa, me arregle y salí en busca de mi amigo. Lo encontré vistiéndose, termino y nos fuimos. En el camino me pregunto y Yo le conté, el me contesto; "eso te pasa por ser una mina rica", vamos hacer el amor. Mi respuesta fue; andate a la mierda.