Al día siguiente cuando nos despertamos, seguimos con nuestro estado de excitación por las nubes, estuvimos jugando ycalentándonos todo el día.
A la noche mi chica recibió un mensaje a su móvil. Era el chico de la noche anterior (Juan) diciéndole que se lo había pasado muy bien y que tenía muchas ganas de volver a verla. Ella me lo enseñó y entre los dos decidimos (ya que en teoría estábamos en Mallorca) que para no gastar en móvil, hacernos un Hotmail y así poder chatear con Juan. Así que se lo enviamos a Juan y en el mensaje también pusimos que ella se lo había pasado también muy bien y que también quería volver a verlo.
Después, nos pusimos a hablar un rato sobre lo que había pasado y lo que podría pasar. Ella me dejo claro que se quedo con las ganas de más con Juan pero que había aprendido a diferenciar el sexo y el divertirse con su pareja al amor. Me dijo que lo que sentía por mi era muy fuerte y que me amaba, pero que como yo quería ser un cornudo, pues que ella haría un esfuerzo. Después de esto me miró con una sonrisa y yo la besé.
Así que a los 3 o 4 días nos conectamos, después de recibir un mensaje de Juan diciendo que estaba conectado. Ella se quedó hablando con él mientras yo le preparaba la cena. No hablaron nada “importante”, como estas, como te lo pasaste, se contaron un poco de sus vidas y ya está.
No sé porque ella cogió la costumbre de que cuando llegaba de trabajar se ponía a chatear con él 2 o 3 horas cada día hasta que llegaba yo del trabajo. Entonces me dejaba ver lo que habían hablado mientras ella hacia la cena. Después cenábamos los dos juntos y comentábamos el chat y como había ido el día etc.
Así fue durante un mes y medio, hasta que un día, cuando llegué de trabajar me encontré a mi chica muy melosa. Me dijo que no quería enseñarme el chat, que prefería contármelo cara a cara. Yo me asusté y se lo dije, pero me dijo que no me preocupase porque seguro que me iba a gustar. El caso es que nos pusimos a cenar y después me senté en el sofá. Ella vino a mi lado y me abrazo y después me besó. Acto seguido me dijo que ese día se habían puesto la cámara web y se habían visto. Me dijo que no sabía cómo pero que acabó enseñándole los pechos a Juan y que si yo quería, le enseñaría más al día siguiente. Yo le dije que ella podía hacer lo que quisiera siempre que me tuviera informado. Entonces me besó y tuvimos sexo durante un buen rato.
Al día siguiente llegue a casa un poco más temprano de lo normal, estaba nervioso y con ansias de que Laura que contase que había pasado. Entré y me la encontré completamente desnuda. Me besó y me dijo que estaba súper cachonda y fuimos a follar como locos. Mientras lo hacíamos ella me contó que se pusieron la cam, que después de un rato ella le enseñó los pechos y que él le pidió que quería ver más que el día anterior, ya que le había dejado con las ganas, así que mi novia le dijo que vale, aunque con una condición, primero tenía que enseñar él su gran pene. Él sin pensárselo dos veces se lo enseñó y empezó a masturbarse delante de mi chica, entonces ella se quito la parte de arriba y después la de abajo (haciendo un estriptis) y estuvieron un rato diciéndose guarradas hasta que él se corrió. Entonces, 5 minutos después llegué yo a casa. Me dijo que se había puesto mucho y que quería seguir con el juego, yo le dije que adelante.
Siguieron chateando y de vez en cuando poniéndose la cam hasta que al cabo de dos semanas él le dijo que tenía una sorpresa para ella. Dijo que ese fin de semana, si ella quería él vendría a Mallorca a verla (yo pensaba: si viene sobre todo a verte ;) jeje).
Uf vaya lio nos habíamos metido. Ella le puso una escusa que ahora no recuerdo y le dijo que no fuese a Mallorca. Él se pico un poco y para suavizarlo le dijo que toda la familia habíamos pensado que de aquí a tres fines de semana iríamos a pasar un fin de semana a Barcelona (como ya sabéis todo mentira, ya estábamos en Barcelona). Entonces él se puso muy contento y todo siguió igual hasta ese fin de semana.
Cuando lo organizamos todo, ella le dijo que “nuestros padres” le obligaban a llevarme con ella y que sólo quería que se vieran por las noches para que sus padres no se enterasen de nada. Vamos yo ahora lo pienso y menudos rollos le metió al chico este… pero bueno.
Llegó el viernes y “en teoría” llegamos a Barcelona. Mi chica se puso un vestido rojo muy sensual para ver a Juan, unos tacones rojos medias de rejilla y los labios también se los pintó de rojo. A las 22:00 habíamos quedado.
Así que fuimos hacia allí, ella me dijo que hoy sólo se besarían, se tocarían y poca cosa más. Quería comprobar cómo me sentaba a mi verla entregada a otro completamente. Cuando llegamos directamente ellos dos se besaron, con un buen beso en la boca y después él me dio la mano y nos metimos en un restaurante a cenar. Fue una cena agradable, ellos dos tonteando y yo mirando, de vez en cuando mi novia me miraba y me regalaba una sonrisa o un guiño. Después de la cena me dijo mi chica que le había estado metiendo mano toda la noche y que cuando me tiraba un guiño era en los momentos en el que él, le metía mano en el clítoris y la masturbaba, además se ve que esto lo habían hablado antes y ella no me dijo nada para darme una sorpresa. Madre mía yo no me enteré de nada. El caso es que salimos de allí sobre las 00:15 y nos dirigimos a una discoteca de la Vila Olímpica de Barcelona.
Llegamos sobre las 00:45 entramos, nos tomamos un cubata y nos pusimos los tres a bailar, ellos dos parecían novios y yo pues allí empalmado haciéndome todo el rato el despistado. Notaba que sobraba pero no se me ocurría ninguna escusa para salir de allí, sólo ir al baño, pero es que ya había ido 3 veces… entonces de repente les empezó a dar igual que estuviera yo por allí y se besaban apasionadamente mientras se metían mano allí en medio, todos los que estaban alrededor si les miraban les pillaban… hasta que él se separó de ella y le dijo no puedo más… me dio 10€ y me dijo muy amable que si podía ir a buscarle un cubata. Le dije que sí. Eran sobre las 02:00 y la discoteca ya estaba a rebosar. Fui pedí la bebida y volví ¡ostras! No había nadie, se habían ido o los había perdido… llamé a mi novia y me lo colgó, pensé será ZORRA! La volví a llamar y me lo volvió a colgar, entonces volví a llamar y ¡había a pagado el móvil! Aluciné. Estuve por la discoteca dando vueltas a la espera de saber de ellos. Hasta las 03:15 más o menos que los encontré, estaban saliendo del servicio de los hombres con uno de seguridad de la discoteca, este los acompañó hasta la salida, ella me dijo al oído: -Ahora te cuento, espera.
El caso es que salimos de la discoteca y mientras ellos decidían que hacer yo estuve allí expectante en segunda fila… al final decidieron ir a un descampado cerca de la vila olímpica, al lado de un campo de futbol con vistas al mar (vamos, un picadero de Barcelona), me pusieron la excusa de que íbamos allí a hablar un rato etc. Y después no iríamos a casa. Al final fuimos ella y yo en mi coche y él en el suyo.
Una vez ya en el coche de camino al picadero me contó lo ocurrido:
Cuando yo me fui, él la dijo que no podía aguantar más, la cogió de la mano, sin preguntarle nada, se la llevó a los servicios. Una vez dentro se cerraron con pestillo y empezaron como dos desesperados a quitarse la ropa a besarse, etc. Él le empezó dándole besos por el cuello, después bajo a chuparle los pechos, los pezones… para acabar comiéndole el coño hasta que mi chica se corrió retorciéndose en la cara de Juan. Después él se levantó se puso de pie en la taza del WC y mi novia se la mamó hasta que este se corrió, si, dentro de su boca, esto me fastidió ya que a mí nunca me había dejado hacerlo, pero claro al recriminarle me dijo que eso era lo que yo quería y ahora no me hiciese el indignado ya que seguro que eso me había puesto muy cachondo y la verdad es que ella tenía razón.
El caso es que justo después de correrse, un segurata de la discoteca picó a la puerta y les pidió que salieran de allí, se vistieron rápido, salieron. El segurata les dijo que tenían que irse de la discoteca y los acompañó hasta la salida.
Una vez en el picadero, aparqué y el aparcó al lado mío, nos bajamos y estuvimos allí los tres hablando un rato fuera de los coches. Mientras ellos estaban abrazados y seguramente con ganas de que yo no estuviese allí para ponerse a follar.
De golpe y porrazo mi novia dijo que tenía hambre, también preguntó a él si tenía hambre y también contestó afirmativamente. A mí no me preguntó si tenía hambre o no, se limito a decirme si le podía hacer un favor, yo le dije que sí. Entonces me dijo que fuese al Mc Auto del McDonals que habrían las 24h a comprar algo de comer para ellos dos y me dio 15€ me dijo que si sobraba algo que yo también me podía comprar algo. De este modo fue como lograron quedarse completamente solos.
Entonces antes de irme me acerqué a mi chica y le recordé lo que me dijo antes de ir a ver a Juan (sólo besos y tocamientos), ella me miró y me dijo, mira tío, tú has propiciado esto, hoy me lo voy a follar y si no te gusta, a partir de mañana seré la mujer más fiel del mundo, pero hoy sólo te queda resignarte y aceptar lo que pase. Si no quieres ver nada, tarda un rato en volver con la comida. Yo le dije que me perdonase, pero que me estaba pillando todo de sopetón. Entonces ella muy hábil me tocó el pene y noto mi gran erección y me dijo: no hay escusas, esto te gusta. Va cariño pórtate bien. Me di la vuelta y me fui hacia el coche.
Me subí al coche y fui a comprarles la comida (el McAuto está muy cerca, por esto me di una vuelta con el coche antes de ir a comprar y así dejarlos más rato a solas). El caso es que compre, sobró muy poco dinero y yo no pude comprarme nada y fui a llevarles la comida al picadero de la Barceloneta (creo que es ese) se que hay un campo de futbol al lado y está cerca del McAuto. Puse coche al lado del suyo y la imagen que vi me impacto mucho, me entró como un calambre por todo el cuerpo que me paralizo.
Encontré a mi novia votando encima de Juan y besándose a la vez en el asiento de atrás de su coche, vamos claramente estaban echando un polvazo. Una cosa era imaginárselo y otra verlo… sentí celos y un poco de rabia por haber provocado esa situación pero a la vez esta tan empalmado que iba a romper el pantalón. El caso es que ellos pasaron de mí y siguieron a los suyo. Yo desde mi coche la escuchaba gemir, pasó como 45 minutos, tiempo el cual les dio tiempo a cambiar varias veces de postura y a correrse también varias veces, yo también me hice varias pajas y me corrí varias veces en mi coche. Cuando terminaron les llevé la comida y volví a mi coche un poco impactado de lo que acavaba de presenciar. Comieron, se besaron y se despidieron, mi chica bajó del coche y volvió al mío. Juan se fue para su casa, satisfecho después de haberse tirado a mi novia.
Cuando entro ella en el coche tenía una sonrisa de oreja a oreja. Me dijo que se lo había pasado genial y me pregunto qué tal me lo había pasado yo. También le dije que muy bien pero no tanto como ella. Entonces ella me dijo que le sabía mal que ellos habían comido y yo no, que seguro que estaba muerto de hambre, le contesté que sí que tenía mucha hambre. Entonces ella con una cara maliciosa sacó 4 condones, cada uno con su correspondiente corrida. Me dijo que no hablase y después empezó a meter todas las corridas en un solo condón, había mucho, se lleno por lo menos un cuarto del preservativo… Acto seguido me dijo:
-Sabes cariño, he estado mirando por internet y sé que a los cornudos consentidos como tú, les gusta comerse las corridas de los amantes de sus mujeres. Así que si no quieres que me enfade y si quieres seguir siendo un cornudo consentido y que todo vaya bien, quiero que te bebas todas las corridas de Juan. Además quiero dártelas yo, mira hacia arriba y abre la boca del todo.
A mí esto me descolocó y no supe que contestar, sólo abrí la boca y miré hacia arriba. Ella riéndose me metió todo el semen en la boca y acto seguido, empujando mi barbilla me cerró la boca y me dijo no quiero que abras la boca hasta que no te lo tragues todo. Me sentía además de cornudo, me sentía humillado. Después de tragármelo todo no dije nada y mi chica me miró y me dijo que me había portado muy bien. Me sacó la polla y empezó a hacerme una mamada hasta que me corrí yo también en su boca.
Después sin decir nada, encendí el coche y nos fuimos a casa, estábamos cerca ya que vivíamos en Pueblo Nuevo.
Una vez en casa me dio las gracias por haberle dejado pasar una noche tan satisfactoria, me dijo que aún no había acabado y que si me apetecía podíamos tener sexo, le dije que sí y la bese.
El caso es que empezó a sacarme toda la ropa y comenzó a hacerme una mamada, sentía mucho placer pero a pesar de la excitación no conseguí empalmarme, me había corrido un montón de veces y se lo dije. Ella se me enfadó un poco y entonces me dijo que no me preocupase que me iba a comprar un cinturón de castidad para que ella controlase cuando eyaculo y cuando no. Nos besamos y nos fuimos a dormir.
Por favor, me gustaría algún comentarío corto sobre lo que os a parecido el relato y así ir mejorando.
Muchas gracias y hasta el próximo relato ;)