Hace dos semanas que estoy viendo a mi atractivo cliente, un hombre hermoso, con buen porte, agradable, simpático, un poco mayor, pero no me interesa en absoluto, y realmente un toro cuando se trata de la cama…me vuelve loca, saca que me gusta, que es lo que quiero, cuando lo quiero y de qué manera lo quiero, cada vez que me penetra es en el momento justo que más lo deseo, es como si tuviéramos una conexión más allá de lo que se puede explicar.
Un día mis padres me comentan de una fiesta por el bautismo de un primo, a lo que pregunto de manera vergonzosa ya que había pasado mucho tiempo sola, si podía ir acompañad de alguien, mis padres se sorprenden bastante y con alegría me dicen que sí. Intrigados por saber más de esta persona se ponen a hacerme pregunta de todo tipo, ya saben cómo son los padres, que si pudieran hasta las huellas digitales pedirían. Les comento un poco sobre él y le dejó muy en claro que es un hombre algo mayor a mí, para evitar sorpresas. A lo que ambos solo acotan que no les importa si es mayor o menor a mí, que lo importante es que yo sea feliz y que él me haga sentir bien, mi cara delataba mi gran felicidad.
Llegado el día, yo ya había hecho todos mis preparativos, me había puesto un vestido rosa, sin nada de roa interior, tenía ideas muy fijas para ese día. En la casa de mis padres teníamos un gran patio que se extendía por alrededor de 200 metros, teníamos todo tipos de árboles y plantas, hasta una pequeña casita de madera escondida en el fondo que solía usar cuando era niña como escondite, al entrar en mi adolescencia lo usaba para escaparme de noche y coger sin fin con mi novio…y ese día ya había preparado todo para coger con mi cliente en esa casita cuando nadie se diera cuenta.
Cuando sonó el timbre salí corriendo como si fuera una adolescente lujuriosa a atenderlo, lo recibí con un beso muy apasionado y mojado, él está muy atractivo como siempre, con un perfume muy seductor y delicioso, siempre con ese bien porte de presencia y elegancia…ese beso me volvió loca de manera tal que mi vagina cosquilleaba y pude notar como un bulto se comenzaba a asomar de su pantalón…me contuve mordiendo mis labios porque mis ideas ya estaban alborotadas por semejante beso y al ver ese bulto quise arrodillarme y chupársela hasta que acabara en mi cara…pero aun no era el momento, ya íbamos a tener tiempo de eso.
No dirigimos al patio donde estaba el festejo, comencé a presentárselo a algunos de mis parientes, primos, tíos, etc. Cuando llegue hasta mi padre, él se sorprendió un poco porque noto la diferencia de edad, pero su semblante y su apariencia lo hacían lucir ms joven y al verme tan feliz, mi padre se sintió bien y atraído por conocer más de él. Ellos quedaron en una charla amistosa y agradable mientras buscaba a mi madre para presentárselo. Cuando por fin la encontré, mi madre estaba pálida, como si hubiera visto un fantasma, me acerque para saber que le pasaba y me dijo:
-Qu…..quien trajo a ese hombre?
-De quien hablas mamá?
-De…de MARCUS…
-Él es mi novio mamá. El que dije que iba a presentarlos, pero porque te pones así, de donde lo conoces?
-Él….él supo ser mi novio hace mucho tiempo…y….él….él es…
Mi padre interrumpió la escena hablándonos y presentando a Marcus con mi madre, a lo que él solo se limitó a saludar y decir que se conocían de hace muchos años atrás, en la universidad. Un pequeño silencio nos cubrió y mi madre rápidamente nos dirigió a la mesa para que comencemos el almuerzo.
Quede intrigada con lo que mi madre me quería decir, pero la emoción y la excitación de querer llevar a Marcus a mi escondite me hicieron olvidar todo rápidamente. En el momento más oportuno, cuando todos disfrutaban y charlaban, tome a Marcus de la mano y a escondidas no fuimos hacia mi casita de madera.
Siendo él tan correcto aconsejo que eso no era correcto estando ahí todos mi familiares y en especial mis padres, pero le dije que no importaba, que nadie sabía de ese escondite y que yo ya había preparado todo desde hace unos días, me subí el vestido para que vea que no llevaba nada de ropa interior, pero no solo eso deje ver, también mis piernas estaban todas mojadas, mi vagina no daba más de calentura y excitación que había comenzado a soltar mis jugos de manera incontrolable. Me arrodille ante él y le suplique que me diera su dura, carnosa y jugosa verga, que quería sentir su semen en mi boca, mi cara de desesperación y de excitación eran realmente únicas, a lo que Marcus solo se dignó a sacar su gran verga de su pantalón y ponerla delante de mí, comencé a chupar su cabeza, lento, sintiendo como de a poco sus jugos pre seminales iban saliendo y yo los succionaba con gran placer, luego lo metí en mi boca solo hasta la mitad, para darle emocio0n al momento, pero la excitación de Marcus también estaba al límite, así que el agarro mi cabeza y me hizo metérmela de golpe a toda en mi boca, haciendo que llegue al fondo de mi garganta, haciéndome saltar las lágrimas de mis ojos por sentirme atragantada, pero se sentía realmente excitante, era la primera vez que lo sentía así y realmente me gustaba, mi vagina palpitaba desesperada por sentir esa gran verga en ella, me levante rápidamente, lo acorrale contra la pared y me agarre de su cuello para subirme en sus caderas y ser penetrada de una buena vez, apenas sentí como entraba en mí, mis piernas temblaron de placer dejándome al descubierto de que había tenido un orgasmo en ese preciso momento, él no se contuvo y siguió moviéndose, penetrándome de manera dura, firme y compulsiva, se dio media vuelta poniéndome a mi contra la pared y golpeando sus caderas aún más fuerte contra mí, besándome y mordiendo mis pezones como siempre me encantaba, agarro con fuerza mi culo, haciéndome saber de esa manera que estaba a punto de soltar todo su semen, le dije que lo hiciera tranquilo que ya había comenzado a tomar pastillas porque quería sentir siempre como acababa mi sucia vagina sedienta de semen, eso lo volvió más efusivo y loco, me besaba con gran pasión y golpeaba muy fuerte sus caderas contra las mías, hasta que pude sentirlo…su gran pene palpitaba dentro de mí, expulsando todo su semen, rebalsando mi útero y haciendo que salga de mi vagina aun penetrada por él…nos quedamos unos momentos así juntos, compenetrados, disfrutando del momento. Luego de un rato nos besamos cariñosamente, y nos separamos para poder limpiarnos y volver a la fiesta.
Mientras Marcus hablaba con mis parientes y entablaba muy buen relación con ellos, me dispuse a buscar a mi madre para continuar nuestra plática. Cuando por fin la encontré, tenía una mirada entre desorientada y confundida….sin poderle preguntar nada y aprovechando que estábamos solas, dijo:
-Marcus era mi novio en la universidad, estuve 5 años con él…cuando nos separamos al mes supe que estaba embarazada….de ti…Marcus es tu padre…pero él jamás lo supo…
Mi cara estaba pálida, tiesa, mis pensamientos en blanco…no sabía cómo reaccionar…si bien sabía que mi padre no era mi padre biológico, jamás pensé que la vida me daría un giro tan brusco como este…ahora entendía porque la conexión tan intensa que teníamos al momento de coger como animales…tome la mano de mi madre y le dije:
-Bueno, no hay que lamentarse del pasado, sabiendo esto veré como encaro la situación y lo soluciono, tú no te preocupes por nada…
Una leve sonrisa dibujo la cara de mi madre y ambas salimos al patio con total normalidad a seguir compartiendo…pero en mis pensamientos había algo que no dejaba de atormentarme…desde que me dijo que era mi padre, la curiosidad, la morbosidad y el incesto eran lo único que pasaban por mi cabeza, me sentía caliente y deseosa cada vez más…el morbo del padre y la hija, el semen que sentía de él, la conexión…todo me volvía loca….así que en ese momento tome una decisión…iba a continuar un poco más con esta relación, después de todo, nadie tenía que saber…solo yo debía disfrutar de ser penetrada por él y sentir su semen…
Al volver a mi departamento pasamos una noche realmente inolvidable, toda la noche cogiendo como locos, mi cuerpo estaba lleno de semen, mis tetas, mi vagina, mi cara, mi boca…me relamía y tragaba todo lo que podía…mi cara de perversidad y lujuria dejaban notar mis próximas intenciones en los días que iban a llegar…
Continuara…