Consuelo es una preciosa muchacha que vive en un pueblo llamado Monsefú y a quien conocí por casualidad. Sin embargo, ella ya me conocía gracias a estas publicaciones y acabó entregándose a mí el Día de San Valentín.
A Roxy la conocí mientras dictaba una conferncia y su culito me provocó desde el primer momento.
La ahijada de mi tía me regaló una tarde deliciosa que hoy comparto con ustedes.
Paolita tenía su novio; pero, él no la sabía entender ni atender; así que me eligió a mí para que la ayudase a calmar sus apetitos.
Esta historia pertenece a mi amigo Angel, disfrútenla como yo lo hice.
Daniela es una vecinita muy guapa que me entregó el virgo de su culito cuando pensó que podría perderme.
Una ex novia regresa sólo para que le desvirgue la colita.
Dos jóvenes inexpertos; pero, con muchas ganas de amar, me piden que sea su guía en su estreno sexual.
Ella de 18 añitos y yo de 41; pero, fue una experiencia inolvidable, pues, era la primera vez que una chica de su edad perdía su virginidad entre mis brazos.
Una adolescente, dueña de un delicioso par de piernas; me miente sobre su virginidad y acabamos follando en una excitante mañana de primavera en la que perderá su virginidad vaginal en medio de suplicas y lágrimas.
Midori fue mi alumna hace varios años y regresa convertida en una hermosa chyquilla para entregarme la virginidad de su culito y de su coño en una sola noche.
Mi hermosa chaca de 15 añitos me entregó su potito para que yo se lo desvirgara y ambos gozamos en una tarde de mucho placer.
Gabriela me entregó su culito virgen el día de mi cumpleaños para que hiciera con él todo lo que yo quisiera.
María Fernanda, es una jovencita que se hizo mi enamorada y me entrego su virginidad a pesar de sus 14 años, gracias a que se enamoró de mí a través de los relatos que publiqué en esta página.
La noche de Año Nuevo estrene la estrecha chuchita de mi sobrinita de 17 añitos.
Carolina, mi hermosa secretaria, se convirtió en la mimosa gatita que me entregó la virginidad de su precioso culito.
Jamás imagine que encontraría virgen el culito de una putita.
Denisse, una bella serranita, me dejó metérselo por delante y por detras cuando ella tenía 20 años.
Es el relato erótico más excitante jamás contado en donde se describe la desfloración de una chica virgen en su noche de bodas sin ocultar detalles y absolutamente real.
Una hermosa quinceañera me entregó su inocencia antes de desaparecer para siempre de mi vida.
Melissa tenía 19 añitos y una desbordante curiosidad que la llevó a entregarme su virginidad una noche de julio; pero, su impaciencia la llevarían a una desforación dolorosa y bastante excitante.
Mi bella secretaria me entregó el mejor regalo de mi vida.
Ella es cuatro años mayor que yo; sin embargo, decide que sea yo quien estrene su delicioso culito.
La irresistible compañera de mi facultad, las màs codiciada de las chicas y la nàs engreida de todas me entregò su pureza durante una madrugada llena de ternura y de placer.
La irresistible compañera de mi facultad, las màs codiciada de las chicas y la nàs engreida de todas me entregò su pureza durante una madrugada llena de ternura y de placer.