Segunda parte: Desde ese día había imaginado a Liz en todas las posiciones posibles, llegando a una curiosa conclusión: Más que el sexo con ellos, disfrutaba de la imagen de alguien cogiéndose a Liz.
I. Tengo un secreto. Pero necesito contárselo a alguien porque me está volviendo loca.
Dos hermanos teniendo sexo. Era demasiado.