Un tío, una fiesta, la policía... y un rescate que termina convirtiéndome en una estadística más...
Recibí un correo con éstas palabras escritas: “Una noche contigo”. Aquello me llevó por rumbos que no anticipé…
Continuemos con el entrenamiento de esta perra silvestre ¡Basta de ser blandos y cariñosos! Las perras y sus agujeros solo son útiles para una cosa : Brindar placer.
...La estaba enloqueciendo. Hizo una pausa para recostarse él sobre la cama. - Ven y colócame ese coño tuyo sobre la cara....
Conducido por el calor del momento y sacando a flote mis más primitivos instintos, hice jirones su ropa jalando de ésta con tal fuerza que provoqué que ella cayera. - ¡No te levantes princesa que aún no termino! - grité - . Por asombro o miedo, no sabría decir, ella permaneció ahí.
Hoy fue noche de cena con las amigas y después de habernos puesto al día en lo que sucede dentro de la vida de cada quién, reír mucho y disfrutar en grande, dimos por terminada la velada. Solo que yo, aún tenía ganas de un poquito más… un poco de diversión con el toque necesario de perversión.
Veía como su rostro se esforzaba al sentir dolor pero al mismo tiempo aguantaba... aguantaba para complacerme y también lograr meter aquello en su mojado coño.
El sonido de los golpes de su mano desnuda sobre mi piel, comenzaron a llenar el ambiente. Aquel delicioso dolor comenzaba a excitarme.
Comencé a sentir que mi piel se desgarraba pues se concentró en la parte interior de los muslos, donde hacía algunas horas, mi piel había probado la fusta.
Sentí las manos de todos ellos sobre mi cuerpo, sobre mis senos, pezones, algunas pequeñas mordidas y sus manos recorrer cada centímetro de mi piel.
En cuestión de nada llegamos a su casa, el viaje en aquel animal de acero y su vibración me puso a mil yo estaba mojadísima y lista para ser penetrada. Cuando encendió las luces, pude ver todo con claridad y entonces mi sonrisa y cualquier pensamiento que hubiese tenido se esfumaron.
Sabía que ella tenía deudas, por lo que utilicé esa información a mi favor para forzarla… Yo le daría el dinero para pagar sus deudas a cambio de que pasara conmigo un fin de semana. Ella piensa que solo es sexo… pero se llevará una gran sorpresa.