Habia que ayudar a la hija de una prima mia, o sea a mi sobrina y vean como la ayude
Esta es la segunda vez que me cogi a mi cuñada y la segunda vez fue mucho mejor, asi me vengaba de mi hermano, quien se habia cogido a mi ex mujer cuando estabamos ecien casados.
Lo que pasaba en la casa era un cuento de nunca acabar, todos los días la veía andar con ropa ligera, siempre se sentaba en una silla o en la sala con las piernas abiertas cuando yo estaba presente, o me daba besos cuando me encontraba con ella en el pasillo o me abrazaba por atrás cuando no había razón, siempre vistiendo con ropa ligerita, que no me dejaba nada a la imaginación. Trataba de mantenerme ecuánime, a pesar de sentir que me hostigaba, no quería ver a mi hija con deseo.
Mi hermano hace mucho tiempo se cogio a mi mujer, hace poco me entere, estuve tentado a agarrarlo a madrazos, pero mejor me decidi vengarme de el, regresandole el mismo favor y sin que ella se diera cuenta la seduci
Estabamos los tres tomando y la situacion se dio para pasar un rato agradable y caliente
Cuando se es cazador de corazón y es un consumado cogedor de mujeres casadas, uno esta acostumbrado a aprovechar todas las oportunidades que se presenten, este es el caso. Por mi situación de militar, uno tiene cierta afinidad con otros militares, por esta situación, inicie una relación de compadrazgo con un marino, a quien le confirme a una hija, que después sin querer queriendo la desvirgue. Cuyo relato subí con anterioridad y se titula COMO DESVIRGUE A MI AHIJADA.
Después del primer encuentro con un negro, ella tenía la fantasía de tener un gruesa verga negra en su boca, esa fantasía se la cumplí, era bastante excitante ver como se tragaba esa gruesa verga negra.
Por andar de hablador, abrí la puerta para que un negro vergudo se cogiera mi vieja
Desde que tuve relaciones con una amiga de mi mama que se llamaba Teresa, yo le decía Teresita, me dio el gusto de tener relaciones con mujeres maduras. Cuando estudiaba en el Colegio Militar tuve varias aventuras con muchas de ellas, en un relato anterior conté una relación que tuve con la madre de un amigo del colegio, aquello, fue como dice la canción debut y despedida, ya que solo fue una vez.
Queríamos celebrar con algo especial nuestro aniversario de casados, la visita de un amigo se presto para que mi mujer y yo cumpliéramos una fantasía bastan caliente.
Lo que a continuación les contare, fue algo que me ocurrió cuando era muy, pero muy joven, era tan joven que no puedo decir mi edad, por obvias razones, después de aclarar lo anterior, permítanme que les diga, que en esa época y a pesar de que estaba mucho muy joven, su servidor estaba bastante mamadito para mi edad.
Cuando murió mi tía Julieta, la hermana menor de mi mama, que en paz descanse. Este hecho me puso triste y empecé a recordar, cómo ella había influido en mí, en mi despertar al sexo. No están ustedes para saberlo, ni yo para contárselos, pero mi vida sexual se inicio cuando era muy joven, con una amiga de mi mama.
Yo me crie entre mujeres, mi madre, mi tía y mi dos hermanas, debido a esto no hubo una relación mayor con mi padre y la verdad, no me importo para nada, y tal como dije antes, desde muy temprana edad comencé a experimentar una sensación extraña cuando observaba involuntariamente a mi madre o a mi hermana mayor en prendas menores, esa clase de espectáculos y aun cuando ellas no le daban mayor importancia a mi presencia, yo sentía una gran excitación al tener el espectáculo de sus cuerpos semidesnudos, sobretodo el de mi madre a quien adoraba.
Las cosas entre mi madre y mi padre no iban tan bien como yo creía. Mi padre a pesar de tener una muy buena mujer en su casa, le encantaba andar con muchas viejas, como buen militar que se aprecie de serlo, en una de esos lances, le cayó la verga con mi madre, cuando estaba con otra vieja.
Comienzo a relatar los antecedentes de mi relación con mi madre. Yo creo que la relación tuvo mucho que ver, que al dejarnos solos mi padre por el trabajo y porque andaba de cabron con otras viejas, me crie entre mujeres, mi madre, mi tía y mi dos hermanas, debido a esto no tuve relación mayor con mi padre y la verdad no guardo gratos recuerdos de él.
Después de mi último encuentro con mi madre, transcurrieron algunas semanas, como era un oficial nobel en el ejercito, andaba al pedo un día sí y el otro día también, a partir de la relación con mi madre, mi vida dio un giro enorme, pues a pesar de que yo ya tenía trabajo, jamás había sido responsable de nadie más, solo de mi, Todo lo que ganaba me lo gastaba echando desmadre. Pero a partir de nuestro encuentro sexual, mi madre dejo de trabajar, teniendo que cargar yo, con la responsabilidad del sustento de ella y de mis hermanas, de mis hermanos no, porque ellos ya se habían ido a vivir con mi papa a Puebla, desde que se separaron mis padres.
Esa noche mi madre perdio su virginidad por el ano, nada mas un piquetito le di
No se desde cuando me empezó a gustar las mujeres ajenas, pero desde la primera vez en que me cogí a una mujer casada, quede como los leones, bien cebado y cada vez que puedo lo hago. Tal vez sea una fijación mía por algo que me paso, bueno, pero no estamos aquí para descubrir mi lado oscuro, estamos para que les narre una de mis experiencias mas gratas en ese juego tan delicioso y prohibido que es conquistar y saborear la mujer ajena. He tenido muchas aventuras con mujeres casadas, pero hay una en especial que cuando la recuerdo, se me pone la carne de gallina y me recorre el cuerpo una sensación bien sabrosa.
Ella ya estaba hastiada del hombre que se acostaba a su lado, su vida no tenia ningun aliciente, hasta que llego aquel hombre que involuntariamente la saco de su letargo.
Ella es mi mejor amante y es deliciosa.