Marta se entrega también a su compañero Roberto, que la somete sin contemplaciones, aprovechándose de la oportunidad que le había ofrecido sin querer la propia Marta
Marta se enfrenta de nuevo al Portero, ahora en su propio despacho, sabiendo que todavía tendrá que enfrentarse a su compañero
El origen de la degradación de Marta. Después de entregarse al portero, otro hombre consigue chantajearla.
El origen de la degradación de Marta. El portero la humilla en la calle
El origen de la degradación de Marta. Por fin, se entrega al portero, pero no dónde hubiera imaginado.
El origen del desastre de Marta
El origen de la degradación de Marta
El origen de la degradación de Marta
Claudia se entrega al jovenzuelo por dinero
Claudia se entrega al vagabundo, después de ser vejada por un jovenzuelo
La cliente de Marta le cuenta cómo se vio obligada a perder su dignidad
Marta recibe una clienta que también se sometió a un desalmado
Claudia, la clienta, se enfrenta al vagabundo en la pensión
Marta se entrega por segunda vez al joven desconocido
Marta se entrega por primera vez al joven desconocido
Marta tiene que comportarse como una fulana, y aparece otro hombre en escena, para su sorpresa
Marta tiene que soportar que la traten como a una fulana, y termina agradecida de que la traten así
Marta se ve obligada a hacerle una felación a un desconocido en un bar inmersa en una situación arriesgada e insólita
Marta se deja chantajear por preservar su posición social y, sin apenas darse cuenta, se ve sometida a nuevos chantajes que apenas puede controlar, en una sucesión de coincidencias que la dejan al borde del abismo