miprimita.com

Sexo por webcam

en Sexo Virtual

El siguiente texto no es ningún relato que me haya sucedido. Es solo un historia contada en tiempo presente que se que a muchos quizás si les ha pasado. Espero les guste.

Es interesante saber que tú, en frente de una pantalla que ilumina tu cara y te deja leer mis palabras me estés deseando tanto como yo a ti.

Veo tu rostro, intento tocarlo, acariciarlo… quisiera besar tus labios dulces y carnosos. Pero de repente… me topo con la fría pantalla de mi computador.

En mi cara se dibuja la amargura de no tenerte y el deseo de verte personalmente. Mientras tanto tu me miras por medio de ese pequeño artefacto llamado WebCam y me pides que modele para ti ese babydoll blanco casi transparente del que te hablé hace algunos días; Ese mismo que dije que usaría si algún día te conocía.

No se como ni porque, pero automáticamente mis manos desabrochan mi camisa y dejan ante tu pantalla mis senos que en este momento carecen de brasier.

Por tus gestos puedo notar la excitación y la lujuria que te causa verme así, esto me da fuerzas para continuar con mi ciber strip-tease. Acomodo la WebCam de tal modo que se enfoque en mi pubis y con movimientos lentos meneo mi cadera para deleitarte un poco.

Lentamente mis manos se encargan de desabrochar mi pantalón y después bajan pícaramente mis tanguitas negras. Es increíble la excitación que estoy viviendo, no puedo creer aún que este frente de una estupida máquina desnudándome y ahora… masturbándome.

Mis dedos hacen movimientos de arriba hacia abajo provocando que mi vagina se humedezca. Uno de ellos se incorpora dentro de mi rajita lubricada y es en ese momento cuando de mi boca se escapa un leve gemido.

¿Qué sucedió con el babydoll? ¿Por qué no me lo he puesto? La verdad… no se y no me interesa. ¿Quién necesita un babydoll? Me tienes en tu pantalla masturbándome, completamente desnuda y deseosa de ti.

oooohhh… uummm… -

por mi mente pasan gran cantidad de deliciosas fantasias; siento que mis dedos se transforman, y ya no son mis dedos, ya no pertenecen a mis manos, ahora pertenecen a tu cuerpo, y para ser mas explicita ahora siento que dentro de mi esta tu pene; ¡Si! Tu pene, con sus ricos movimientos de mete y saca que me vuelven loca.

Abro mis ojos y con mis pupilas igual de dilatadas a mi coño veo tu rostro perplejo y lleno de ganas hacia mi cuerpo. Te imagino sobre mí, haciendo mis fantasías realidad, pero como eso es imposible solo me queda decirte:

¿Qué carajo haces ahí sentado viendo como me masturbo? Yo también quiero disfrutar. Simplemente párate y enséñame tu cuerpo, el cuerpo que tanto deseo –

No respondes con esas palabras tecleadas; me respondes poniéndote de pie y dejando en mi pantalla una verga deliciosa, totalmente erecta y ardiente. Como quisiera tenerla dentro… dentro de mi boca, dentro de mi coño, dentro de mi culo… en medio de mis senos.

¡¡Basta!! No es suficiente con mis delgados dedos, ellos no me complacen como lo harías tú.

Me pongo de rodillas sobre la cama y me voy gateando hasta la mesita de noche, cerciorándome de que la WebCam capte perfectamente mis nalgas moviéndose de lado a lado. Abro el cajón de la mesita y saco un vibrador.

De nuevo, mi coñito aparece en la ventana de tu Messenger; pero esta vez tiene un vibrador haciendo movimientos dentro de el, y provocándole el placer que tú le harías sentir también, aunque con una pequeña excepción: mi vibrador no incluye caricias, besos y otras de las tantas cosas que tu si podrías regalarme.

Tu mano recorre todo tu pene con fuerza haciendo que este se levante cada vez más.

Lo mejor sería romper las pantallas y hacer que mi vagina y tu pene se encuentren y se unan convirtiéndose en uno solo. Pero… ¡¡Por Dios… eso es más fantasioso que soñar que mis dedos o mi vibrador son tu verga!!

Ahora me encargo de alternar las penetraciones de mi vibrador entre mi ano y mi coño, y a ti te gusta. Estamos unos 15 minutos masturbándonos juntos frente a nuestras máquinas para luego tener un orgasmo casi al mismo tiempo.

ups… al parecer un poco de tu lechita ensució la cam. Como me gustaría lamerla, sería fantástico probarla y saborearla –

¡¡Oye!! Querido contacto de MSN. Estuvo demasiado rico. No pensé excitarme así frente a un tonto computador, pero lo hice. Y solo espero conocerte pronto para hacer tantos sueños realidad y que en lugar de tener dentro de mí mi frío y viejo consolador, tener tu ardiente y bello pene.

 

GRACIAS