Hola me llamo Irene y me encuentro en la necesidad de escribir lo ocurrido en mis últimos 4 años de vida.

Todo sucedió cuando yo termine el instituto con 18 años mi vida hasta entonces se podía resumir en estudio constante y deporte, para poder trabajar en los mejores centro de rendimiento deportivo necesitaba sacar buenas notas y por eso las pocas horas que no entrenaba las usaba para estudiar así que salir de marcha y demás era algo que no solía hacer.

Cuando estaba a final de temporada empecé a tener problemas físicos y una vez visitados los especialistas me dijeron que tendría que dejar la alta competición si no quería tener problemas mas graves en las rodillas, con todo el dolor de mi alma lo deje y volví a la cuidad con mis padres los cuales aunque estaban apenados por tener que renunciar a mis sueños, por otro lados estaban bien contentos de que volviera a casa para quedarme después de tanto tiempo.

El verano empezó y en mi comenzaron a surgir preguntas, como que carrera estudiar o ahora que disponía de mas tiempo, podría empezar a  salir con mis amigas y amigos y también buscarme un novio porque no.

Cuando empecé a salir con mis amigas casi todas tenían novio y todas habían tenido alguna experiencia sexual cosa que yo aun no, y no seria por pretendientes pero las obligaciones no me dejaron prestarle mucha atención hasta entonces.

Mi primer objetivo fue buscar un chico majo y fuerte si podía ser , y ese verano fue el que marco el cambio perdí mi virginidad con un chico ,no fue como esperaba ya que era mi primera vez y andaba un poco perdida a la vez que me dolió no mucho pero me dolió ,note que había hecho un poco el imbecil ya que el chico se fue un poco decepcionado así que me propuse mejorar para ello me vi un par de películas xxx ,claro de lo que vi a lo que yo había heco no había color ,pero bueno el tiempo me haría mejorar .

En los dos últimos meses de verano estuve de vacaciones en mi casa de la playa allí me desfogue por completo fueron unos meses en el que fui como una zorra me acosté con una docena de chicos repitiendo mas de una vez  con todos, allí fue la primera vez que escuche, QUE BIEN FOLLAS, a mi me encantaba oírlo las cosas como son.

A mi vuelta a mi ciudad todo seguía igual a excepción de mi, de la chica estudiosa y atlética me había convertido en una vividora de experiencias sexuales, cosa que me gustaba me hacia sentir bien y descubrí un mundo que desconocía.

En septiembre empecé con un chico, se llamaba Mario  era de mi edad muy bien físicamente divertido y algo chulito, nos lo pasábamos muy bien y en la cama era perfecto disfrutábamos mucho de nuestras relaciones.

Todo nos iba perfecto hasta que un día después de cuatro o cinco meses me pregunto si alguna vez me habían llamado la atención las mujeres , mi respuesta fue muy ambigua pero en realidad era un si ,aquellas chicas de buenas tetas siempre me habían gustado y cuando iba al gimnasio y las veía duchándose siempre me excitaba .

Mario me lo preguntaba porque a el siempre le habría gustado hacer un trío y pensó que a mi no me importaría el me dijo de un par de chicas que el sabia que no les importaría hacerlo, con la excitación del momento le dije que estaría bien aunque yo nunca había hecho nada así.

Me enseño cuatro chicas de las cuales yo elegí una, el se rió y yo no sabia porque entonces le pregunte que le producía tanta gracia, el me dijo que era su exnovia Sandra una chica un año mas mayor que yo, debían de tener buena relación y debían de saber mucho lo que le gustaba al uno del otro, acepte y hable con Sandra en la universidad quedamos en un pub un viernes por la noche.

Allí nos presentamos Mario y yo y al rato vino ella, la verdad es que ganaba en persona era muy guapa buen cuerpo y buen pecho aunque según me contó Mario y luego pude descubrir yo no era muy lista.

Una vez tomo asiento la contábamos lo que buscábamos ella no dudo en aceptar y nos pregunto que porque ella, nosotros la respondimos que nos parecía guapa y encajaba bien. La cosa se estaba calentando las palabras calientes volaban en el ambiente , llego un momento que de dos cervezas que llevaba tuve que ir al baño ,cuando estaba sentada oí que Sandra me llamaba desde el otro lado ,cuando termine abrí y antes de que pudiera salir ella me empujo y se metió conmigo, me asusto bastante creía que me iba a pegar o nose ,pero en décimas de segundo me agarro y me empezó a besar , era mi primera experiencia con una mujer y me estaba gustando nos porreamos durante unos minutos y de los calientes que estábamos la empecé a lamer las tetas que delicia como me gusto a la vez ella se tocaba su coño y soltaba unos gemiditos , estábamos tan cachondas que casi nos desnudamos allí mismo ,pero tiramos de voluntad nos pusimos bien la ropa y salimos del servicio, la sensación fue de 10 me sentía fenomenal y esto aun no había acabado, esto prometía.

Salimos del bar y fuimos a la casa de ella vivía sola  y estábamos muy cerca de su casa ,cuando entramos la casa era pequeño pero acogedora , nos llevo a su cuarto de  la mano y nos tiro en su cama ,Mario y yo nos dejamos hacer y no pusimos impedimento , primero se fue desnudando lentamente hasta quedar completamente desnuda luego fue a por Mario cuando termino de desvestirlo fue a por su polla que estaba empinada como un mástil la cogio con ganas se veía que la chupaba bien y sobre todo lo que mas me sorprendió se la podía meter entera .

Después de acabar con el empezó conmigo empezó a jugar con mis tetas las lamió con mucho amor se notaba que sabia lo que le gusta a una mujer, después bajo a mi coño y allí fue impresionante en menos de 2 minutos me corrí grite como si la vida se me fuera en ello era muy buena trabajando abajo.

Una vez desnudos todos Mario nos empezó a penetrar con ganas, mientras Mario nos la metía, Sandra y yo nos comíamos a besos o el coño dependiendo como se diera me estaba encantando era una lluvia de jugos por todos lados era súper excitante.

Antes de que Mario se corriera nosotras se la chupamos a dúo nuestras lenguas se entrelazaban con su polla y nuestra saliva fluía por su mástil, al poco Mario se corrió en nuestro pecho, mientras nosotras nos chupamos Mario se tumbo en la cama como agotado nosotras seguimos  queriéndonos.

Cuando dimos por terminada la sesión fuimos a ducharnos Sandra y yo, yen la ducha pasó lo que tenía que pasar, allí seguimos besándonos como si no hubiese mañana y luego nos corrimos comiéndonos la una a la otra.

Una vez duchadas Mario  yo nos fuimos no sin antes despedirnos de Sandra. Cuando salíamos yo sabia que mi vida había cambiado me gustaba demasiado el sexo y no sabía si llegaría ser un problema en mis  estudios.

Gracias por leerme necesitaba contarlo me quitado un peso de encima seguire contandos mi vida hasta el día de hoy, muchas gracias y besitos