Estaba claro que Nelly, buscaba algo, pero que era, temía que la aptitud de dominio que ejercio Nuria, mi mujer, echara para tras sus todavía para mí,  desconocidos planes.

Pero estaba claro, que buscaba algo, una mejor vida, tal vez, desligarse de su corrompida familia, su forma de enfocarlo no había sido la mejor, creo.

Pasarón algunos días, Nuria, se había tranquilizado y Nelly no había vuelto a llamar, yo tampoco la llame, no quería forzar ninguna situación, y entendí, que podía estar

incomoda por el trato que tuvo Nuría, con ella.

Una mañana, sono el movil, mi corazón, me dio un vuelco, era Nelly. conteste a la llamada, me saludo, yo quise disculparme por la actitud de Nuría, me dijo, que no

pasaba nada, que tal ves se lo busco.  Me llamaba para saludarme, y para decirme, que por favor, su situación, no había cambiado mucho, y que la llamará si había algún

trabajo que ella pudiera hacer.

 La comente que el tema domestico lo llevaba Nuria, y que no se si ella querría volver a verla, aunque se que en el fondo,  a Nuría, la gusto la situación.

 Nelly, me comento, que como sabía ella no había sido sumisa de nadie, pero que entendio que fue el pago a au osadia. De todas maneras, me dijo Nelly, que le gustaría

volver a verme, aunque sea tomando un café en la ciudad. Así quedamos. Nuría, llevaba unos días enfrascada en temas laborales muy importantes. Llegaba a casa reven-

tada, y no tenía ganas de fiesta. Cenamos, y me durante la cena me digo que si había vuelto a ver a la guarra de Nelly. Yo la dige que no, Nuria me comento que la gusto

la situación, pero que estaba claro, que buscaba algo. Yo la comente, que pensaba lo mismo. Nuría, me comento que tenía verdadera curiosidad de saber lo que buscaba.

Y que me permitía verla y hablar con ella, para sonsacarla lo que buscaba. Que la forma de hacerlo, yo mismo, pero que quería estar al corriente, y que si había algo más

quería fotos o videos de todo.

Con el conocimiento de mi mujer en el asunto, y su buena disposición, un día, me atreví a llamar a Nelly. La comente, era verdad, que tenía el día libre en mi trabajo, y

que Nuría, estaría fuera de Madrid, también era verdad, por asustos laborales.

Nelly parecio alegrarse, me digo que estaba terminándo un trabajo, atendiendo a una anciana, y que después iria a su casa a arreglarse un poco y después me llamaría

para quedar a vernos.

Efectivamente, a primera hora de la tarde, me llamo, yo llame también a Nuría, para decirle lo de mi cita. Me digo que estupendo, que la mantubiera informada de todo.

Me digo que se quedaría en Barcelona, a terminar el trabajo, y que estuviera tranquila que estaba con au compañera y amiga, que no estaría sola. Yo la dige que estu-

pendo que buen fin del asunto y buenos polvos. Mi mujer se sonrio y mandandome un beso colgo el movil.

Sin palabras, me daba el campo libre la tarde y tal vez la noche, para estar con Nelly, pero yo no se lo diría, para que no hiciera ningún tipo de plan, dejaría que los acon-

tecimiento, se precipitasen solos.

Me dirigí, a donde habiamos quedado, una cafetería del centro de la ciudad. Hablamos y reimos, largo rato, la pregunte por su madre y hermana, su cara se entristecio,

me dijo que su madre, continuaba igual, con su adipción sexual a la sumisión, y que lo peor que había arrastrado a mi hermana pequeña también, me comento que con

ella  no pudo, pero que lo intento, Nelly, me digo que no hacía ascos a la sumisión, pero tendría que ser con quien ella quisiera y le gustara.

Quedamos en cenar juntos, Nelly, no me dijo nada ni pregunto por Nuría. La dije que si nos haciamos un cine, mientras llegaba la hora de cenar. Le parecio fenomenal,

hacía mucho que no iba. Nelly, estaba radiante, guapa, maquillada y bien vestida, la ropa no era de gran calidad, pero tenía estilo para ponersela..

Entramos en el cine, vimos una pelí que eligio ella. Me cogio de la mano, yo no la retire. Era un poco de suspense, y de vez en cuando, se estremecia con las escenas,

por lo que me apretaba la mano y se arimaba mucho a mí. En el cine, no había mucha gente, al ser un día laboral. De echo seríamos como quince personas esparcidas

por la sala. Yo la puso la mano en su pierna, por encima de su falda. subio su pierna a mi pierna, y así estuvimos hasta el final de la película. Cuando termíno, y antes

de encenderse las luces, me dío un beso en mis labios. Yo me deje hacer, Salimos del cine, en silencio.

Fuimos andando al lugar que elegimos para cenar, ibamos de la mano, como cualquier pareja. Pero no eramos pareja. Continuamos todo el camino en silencio, cojimos

un taxi, hasta el restaurante, cenamos, reimos, hablamos, sin hacer mencíon, a lo del cine. Confieso que me lo estaba pasando muy bien. Nelly parecía tener una edu-

cación y cultura bastante amplia. Le pregunte, que si tenía algún tipo de formación, me comento que en su país, empezo empresariales, pero que lo dejo todo, para ve-

nirse a España. Reconoce que se equivoco. Aunque nunca penso, los problemas que sus padres la darían. La pregunte que si había pensado en alguna solución al proble-

ma de su familia. Me comento, que era dificil, ingresarla a a su madre por su adipción, estaba fuera de sus posibilidades económicas. Lo de su hermana, lo veía más fa-

cil, pero que no sabia como enfocarlo.

Terminada la cena, la dije, que si quería irse  a su casa, o que tomaramos una copa, acepto encantada. Comento que quería estar lo menos posible en su casa, dada

la situación.

Estuvimos en varios sitios, bebiendo y riendo. La verdad que Nelly, era fantastica, pero estoy enamorado de Nuría, así que solo había posibilidad de una aventura, nada

más. Al acabar se planteo que hacer, me digo que sería perfecto acabar haciendo el amor conmigo, pero que entendería que no quisiera, por lo de mi mujer..

La comente a Nelly, que Nuría estaba en Barcelona, que estaba sola, me contesto, pues entonces, soy toda tuya.

Ese comentario, me encendio, y me la lleve a casa. Nada más llegar, nos besamos, nos desnudamos, nos comimos, mordimos, follamos, la penetre por todos sus

agujeros, La subcione los pechos, los pezones, me comi su vagina, totalmente depilada, me la folle analmente, es decir, de todo. Nos quedamos dormidos, abrazados,

yo puse el despertador, pués tenía que trabajar al día siguiente. Ella estaba dormida, hice las fotos a Nelly desnuda y abierta, que le prometí a Nuría, desperte a Nelly,

nos duchamos y nos fuimos cada uno a nuestros quehaceres.

Nelly, me llamo al movil, me digo que había sido el día más rico de su vida, que era fantastico y muy respeuoso intimamente. Penso que me haría su sumisa, pero que

la encanto. Yo, de todas maneras, seguía sintiendo algo, como si esto no fuera solo lo que buscaba Nelly, era más lista que lo que aparentaba.

Llego Nuría, de Barcelona, contenta, con todo resuelto, me comento que follo mucho con su amiga Veronica, me enseño fotos de ella, de las dos. Yo la conte todo, lo que

paso, la enseñe las fotos, que miro con mucho interés, como un depredador sexual, pero la comente, que sentía la sensación, de que Nelly buscaba algo, no se si de no-

sotros, o algo más, no se. Acordamos que la llamara, y que intentará sacarla sus intenciones, de una vez por todas, utilizando todas las formas posibles.

Así lo hice, llame para saludarla, y comentarla, que me gustaría volver a vernos y repetir. Pero, que yo seguia queriendo a mi mujer, que no imaginara expectativss.

Me comento, que tranquilo, que lo comprendía, en su tierra, era normal que los hombres estuvieran casados, y tuvieran sus amantes, amigas, exclavas o sumisas.

La comente, que quedaríamos después del trabajo, que la llamaría.

La llame a media tarde, me digo que estaba preparada, que estaba esperando mi llamada. Quedamos donde la otra vez. Hablamos, reimos, me digo que estaba mejor,

que iba teniendo trabajos y que además era feliz, aunque no tuviera ninguna espectativa conmigo. La comente que como seguía conmigo, sabía que no ibamos a lle-

gar  a más. Me digo que de momento, estaba comoda conmigo y estaba seguro que mi mujer lo sabía todo, que se lo habría contado. Yo le confirme que efectivamente,

que yo la contaba todo, que teniamos confianza y libertad mutua, para todo.

Que conmigo se sentía protegida, comoda e incluso dominada emocionalmente. Que ningún hombre, aunque tenía poca experiencia, me había echo estar tan bién. La dije

que era  normal, que ella habría estado con muchachos de su edad, y yo era un hombre maduro y asentado. Me digo, que sería por eso y porque se estaba enamorando

de mí. La dige a Nelly, que no lo hiciera, pués si algún día no nos vieramos más, sería muy duro para ella.  Me comenta que contra los sentimientos, no se puede luchar.

Nelly, me digo, que quería volver a ser mía, que quería volver a sentir mi polla metida en su vagina y en su culo. La propuse llevarla a un lugar que la gustaría, me digo

que conmigo iria al fin del mundo, si se lo pidiera, que haría cualquier cosa que quiera o se me ocurra. Se me estaba ofreciendo una mujer con 21 años, con toda su vi-

da por delante, con una sumisión que me asustaba. Entendí que era el momento, para sacarla definitivamente lo que buscaba. que no era solo yo, que quería algo más.

Fuimos al lugar convenido, un pub de parejas, pero que tenía otro tipo de cosas como jacuzzi, pista de baile, salas de sadomaso y salas para gays y lesbianas. Era muy

completo. Estuvimos tomando copas, en el lugar de las parejas, todos estaban desnudos, semidesnudos o con toallas. Nelly la divertía el sitio, que habia oido hablar de

estos lugares, que estabán bien, para dar rienda suelta a nuestros sentidos.

Nos cambiamos, nos quedamos en toalla, y recorrimos las instalaciones. No estaba comoda con la toalla, me digo que si me importaba que se quedase desnuda, le dije

que si a ella no la importaba quedarse desnuda, que ella misma.

 Algunos hombres y alguna mujer la miraban, era muy joven y tenía un cuerpazo.  Había una mujer y una pareja, que no nos quitaban el ojo. Se lo comente a Nelly, se

sonrio. Llegamos  a las salas de sadomaso, dijo que entraramos, que quería verlas y ver a las personas que frecuentaban esos ambientes, quería, seguro comprender a

su madre y a su hermana.

Vimos a una mujer atada a un potro de tortura, atada y ofrecida, otra atada  a la cruz de San Carlos, dos palos cruzados, en forma de aspa. Igualmente ofrecida.

Había un hombre atado, con su miembro sujeto por arneses a un poste, etc..... Nelly, alucinaba, veía todo con sumo interés y a la vez pena, de pensar que sus familiares

pasarian por esto alguna vez. La propuse probar algo, lo que eligiera. Me digo que si, si yo era su amo,que nadia la tocara, que la vieran, pero que no la tocasen, al me-

nos por esta vez. Me propuso un poste con cuatro argollas, y con su fusta correspondiente. La ate las manos y las piernas, y empece el ritual. Yo tenía cierta experiencia,

pues Nuría y yo tuvimos una asistenta española, que se convirtio en  nuestro juguete sexual, hasta que se marcho de  nuestras vidas. La golpeé con la fusta al princi-

pio, flojo, después más fuerte, al final muy fuerte, despues la cambie de postura y con su culo y espalda, hice la misma operación, a Nelly parecía gustarle, o por lo me-

nos finjia gustarle. Habia ojos masculinos y femeninos, mirando su dolorido cuerpo con complaciencia. Una vez me canse, la desate, nos sentamos en un reservado. La

pregunte que que tal,me digo que estaba cansada y dolorida, pero que la gusto muchisimo. Que se sentía pequeña, entregada, desamparada y además, deseada por tan-

tos ojos, que casi se corre de gusto. Como última experiencia de aquél día, entramos en la sala oscura, hay las parejas se entremezclan, y se tocan, soban e incluso  --

follan las parejas unas con otras.  Nelly, estaba excitada, se dejo hacer, la tocarón varios hombres, e incluso con una mujer, muy bella, se comierón, tocarón, besarón y

se follarón con los dedos, en fin de todo. Después nos fuimos, a vestir, pasamos por los aseos, primero ella, en ese intervalo, aparecio la mujer con la que estuvo Nelly,

me acerco un papel, con el número de un movil, y me digo llamame.

 Salimos del lugar, la acompañe a su casa, y después me fuí a la mía. Nuría, me estaba esperando espectante, la comente algo, no todo, por que era muy tarde, queda-

mos que se le contaría  al día siguiente. Me beso y me hizo una felacción, que me dejo cansado y dormido.

Tal como la prometí, le conte todo a Nuría, esta me digo, que más o menos, empezaba a saber lo que quería Nelly, seguro que será así las mujeres son más intuitivas

y más listas en estas cosas que los hombres. A Nuría, no la desagradaba la idea de tener una sumisa a nuestro servicio, además con lo hermosa y joven que era, la expe-

riencia que tuvimos en el pasado, la gusto. Pero intuia, que habría que haber una contraprestación, por nuestra parte, penso que Nelly, lo que buscaba siendo nuestra su-

misa era seguridad para ella y protección para su madre y hermana, eso a Nuria, no la convencia demasiado, a mí, tampoco.

Pasarón algunos días, no había novedades con Nelly,  nosotros seguimos con nuestra vida normal. Me acorde del número de movil que me dio esa desconocida, mi curio-

sidad y mi morbo, me hizo llamarla. Me identifique,me comento que no podía hablarme en ese momento, que estaba reunida, pero dijo de vernos en un café del centro

sobre las seis de la tarde. una vez me dio las señas, me acerque. LLevaba allí un buen rato, pense que me habían tomado el pelo, pero  aparecio por la puerta, la re-

conocí, aunque iba muy elegante. Nos saludamos, tomamos unas consumiciones, y por fin la pregunte, que buscaba con esta cita. La mujer, Begoña, me digo que se

llamaba, yo me identifique como Francisco, me digo que le había gustado mucho la morenita, que sabía que era su sumisa, por las marcas de su cuerpo, y que estaba

dispuesta a comprarla, si me la vendia, o por lo menos alquilarla cuando ella quisiera. Que por dinero, no habría problemas, que lo que pidiera. Yo la dije, que mi rela-

ción con ella, era muy especial, y que no quería perderla. Vale, pues alquilamela, cuanto, me digo. Se me había ocurrido una idea, la dige a Begoña, que la llamaría.

me puso en contacto con Nelly, le comente todo, ella me contesto, que estaba en sus manos, que haría lo que la mandase, pero que no la gusta la ídea. La pregunte

que cuál era la situación de su familia, ella me digo que la misma, con respecto a su madre, con unos y con otros, cada vez más degradada, y que su hermana iba

camino de ello, pero que era recuperable. La conte que se había ocurrido una idea, presentaríamos a su madre y hermana, al ama, si las aceptaba, la pagaría a ella.

Que Nelly, vendría a vivir conmigo y con Nuria, y así no estarían desamparadas ninguna. A Nelly, no le parecio ni bien ni mal. Sabía del estado de deterioro de su ma-

dre, y que no sabía si esa ama, de perfil esquisito, la aceptaría, con su hermana, no tendría problema, siendo tan joven, la educaría a su gusto.

Hable con Nuría a ver que la parecía, le parecio una aberración, que se compraran personas humanas para exclavas, a pesar de la adipción de la madre de Nelly, pero

que si ellas, aceptan, no tenía nada que decir. En cuanto a que Nelly, viviera con nosotros, tenía que quedar claro, que la señora de la casa era ella, y que Nelly sería

personal domestico, exclava sumisa y complemento sexual a nuestro livido. Todos conocedores del asunto, empezamos a atar cabos. Programamos una cena en nuestra

casa, con Nelly, su madre, su hermana, nosotros y Begoña, para no dejar ningún cabo suelto. Begoña, digo que en principio, le parecía bien, ese dos por una, pero que

solo pagaría por la jovencita, que su madre, estaba muy deteriorada sexual y emocionalmente, pero que la recogería como completo sexual a sus juegos de sadomaso

y humillación. Todas aceptarón. Begoña,pidio un anticipo, exigio que la madre y la hermana se desnudarán delante de todos, y que se pusierán en posición de ofrecimien-

to y adoración a su ama y amigos. Así lo hicieron, se quedarón completamente desnudas, estaban resuradas completamente. Pasaarón por cada una de nosotros, cuando

llego a su hermana, ella declino tocarlas, pero la nueva ama, con mi consentimiento, la exigio que las tocara, así lo hizo, con un poco de desaprobación por su parte. El

resto de la velada, permanecieron desnudas. Nuria, me pidio permiso para exigir a Nelly, que también se desnurada del todo, e hiciera lo mismo que sus familiares, yo

mire a Nelly, al no ver desaprobación, por su parte, lo autorice. Hizo lo mismo, se desnudo por completo, ofrecida, paso por todos nosotros, con la diferiencia, que su ma-

dre y su hermana, no pusierón ningún remilgo a tocarla. Nuría, estaba echida de orgullo,había demostrado quién mandaba, para conmigo. Begoña, fué la maestra de ce-

remonias, la que se encargo de dominarlas, exclavizarlas y emputecerlas. De Nelly, me encargue yo.

Pero algo cambio el curso de los acontecimientos, Begoña, se acerco a Nuría, y la digo que era también muy bella, y que hubierá pagado lo que fuera para hacerla suya.

Nuría digo, que ella no estaba en venta, que era una señora, y que  no era para nada sumisa, que en todo caso era dominante. Begoña, la miro desafiante, ato  a las

sumisas de pies y manos, incluido a Nelly, por autorización mía. Con un movimiento directo inmovilizo y dejo innotizada a Nuria. Yo me quede sorprendido, y traumati-

zado. Begoña me dice que ahora, vera esa perra, que quién mandaba aquí. La arranco la ropa, la quito el sujetador y el tanga, y la sobo, mordío, comio y follo a modo

durante un buen rato. Yo estaba inmovil, petrificado. Begoña dirigiéndose a mí, me digo, te la compro también, es una buena perra. Yo dije que no que para nada, que

ella era mi mujer. Begoña, me digo que la que mandaba, aquí era ella y su socia, que no no era otra que..... Nelly. la desato, y esta, dirigiéndose a mí, me dijo asi

estan las cosas. Que todo fué ídea de la compañera y amiga de mi mujer, encargada de un negocio de trata de mujeres sumisas o no, para recovertirlas, y alquilarlas

o venderlas a poderosos/as personas a precios muy altos. Habián entrado en contacto con Nelly, a causa de su madre y hermana. La convencimos que nos ayudara con

vosotros. Pues nuestra jefa se había encaprichado con que Nuria, fuese su sirvienta y exclava sumisa para siempre. Lo que no contabamos es que Nelly, se enamorara

de tí, lo ha estado apunto de hechar todo a perder. Solo la amenaza de que lo que pudiera hacer a su familia,la hizo cambiar de opinión, Yo me quede petrificado, alu-

cinado, confundido, rabioso, engañado, etc.  Nelly, que se había que tenido que comer su orgullo, con Nuría, la cogio, como estaba la tiro de los pelos, la obofeteo, la co-

mio, la chupo, la masturbo y se la follo por el culo con un arnes y vaginalmente con sus dedos, dejando a Nuría sin voluntad y completamente vencida. Una vez consuma-

do, todo aparecio la compañera de mi mujer, la ideologa de la trama, me beso en la boca, me digo que sentía verme de nuevo en esas circustancias, que el poder y el di-

nero es lo que mueve la vida de las personas, que nosotros somos marionetas. Que ha estado siempre encaprichada de Nuría, que la quería como mujer, amante, pero

sobre todo como su exclava sumisa, que el resto fué sencillo. Yo estaba como ido, asi que casí no me di cuenta, que me bajo la braqueta, me hizo una felacción y se sento

encima de mi a orcagadas, y me follo. Una vez se corrio, se dirigio a Nelly, todo tuyo, casate con él o haz lo que quieras. Nosotras ya tenemos el premio, yo a Nuría, y Be-

goña, una sumisa para adiestrar y domar, y a una exclava declarada para humillar. Las vistierón a todas, sin ropa interior, y se las llevarón, nos digo que ya mandarían

a alguien a  por las ropas y objetos personales dre Nuría. y que no se molestase en buscarnos, no nos encontrara. Nelly, a solas ya, intento consolarme, pero yo no podía

olvidar que había sido, una complice del secuestro de mi Nuría, y que no creo que se lo pudiera perdonar. Ella se ofrecio como mi exclava sumisa, que obedecería en todo

a su amo, que viviria por el y para él, para siempre. que su juventud, su cuerpo, su voluntad y su persona, sería para su absoluto disfrute. Que estaría siempre desnuda

y ofrecida como cualquier mascota, que haría todo, absolutamente todo, lo que pidiera, por mi aberrante y humillante que eso fuera.

Yo reaccione, al rato, la dije a Nelly, que de acuerdo, pero que su vida no sería ni muy comoda ni placentera para ella, a partir de ahora. Nelly, con la cabeza baja, acepto,

incluso lo ratifico por escrito y ante notario esta compra y propiedad mía. Nelly, pasaba a ser en mi vida, socialmente mi mujer, en la intimidad, era mi mascota, exclava

sumisa y perra, sin ningún derecho. Era su castigo a su traición, me tendría, pero sería de mi propiedad para siempre.