-la comida ya está lista- era cierto ya eran las 2:30-

Salí de mi cuarto y me la cruce, no pudimos evitar echarnos una mirada digna de un cuadro, lo decía todo, una mezcla entre satisfacción y desprecio. Llegamos a la mesa y comenzamos a comer un silencio sepulcral yacía entre nosotros la ausencia de burlas y comentarios despectivos era insólita pues algo había cambiado y se palpaba en el ambiente. Celia no tardo en romper ese silencio de forma abrupta

-¿qué hacías anoche con la luz encendida a las 4 de la mañana?, ¿no estarías en algún chat enseñando tu cosita?-

-no soy como tú, yo no voy por la calle medio desnuda ofreciendo mi cuerpo al primer musculitos con el que me encuentro-

-ya basta los dos, Fran no te pases y tu Celia desde que esta el aquí pareces una cría-

Sin duda nos habíamos pasado, pero eso disimulo las cosas e hizo que pudiésemos seguir comiendo sin preocuparnos del tema, pero algo no tardo en desconcertarme, mi padre y Clara llevaban todo el rato tonteando disimuladamente y yo no me había dado cuenta.

-bueno, chao volveré a las sobre las 9- dijo Celia saliendo por la puerta poco antes de que yo acabase, ¿adónde iba?, esta noche no salía de fiesta así que mañana no podía sorprenderla otra vez, aunque eso igual era bueno, porque mi soldadito andaba un poco cansado por culpa suya, tenía que hacerla pagar.

A eso de las 5:00 me quite los cascos la casa estaba tranquila, demasiado tranquila hasta que escuche unos pequeños ruiditos salí para ver que era, y allí estaba clara en el garaje, mientras mi padre lo cabalgada sobre el coche, aquella chiquilla gritaba como loca, no paraban y yo no conseguía apartar la mirada, finalmente pude evadirme de aquello y regresar a mi cuarto. Cuando subía las escaleras se escucharon los últimos gemidos acompañados de algún grito descontrolado.

Regrese a mis ocupaciones hasta las 8:50 que escuche llegar a Celia la cual dio un pequeño portazo a su puerta, pronto seria la hora de cenar y vería si la ocurría algo, así que no me preocupe y seguí a lo mío.

-la cena ya está, venga-

No había mucho que comentar de la cena todo paso muy rápido Celia tenia buena cara, pero ocultaba algo y la comida como siempre estaba bien pero no era nada de lo que enorgullecerse, aun así:

-la carne está muy bien casi en su punto-

Clara me dio las gracias y yo la sonreí. Aquella relación con mi padre no iba a ningún lado, la dejaría tirada en unos años, por que no aprovecharse de tenerla cerca.

Hay que admitirlo mi padre se casó con la medre de Celia a los 20 cuando ella tenía 18 y durante el embarazo la estuvo engañando con mi madre que acababa de entrar como secretaria, su mujer se enteró y se casó con mi madre para tenerme a mi esta relación duro más, pero solo porque mi madre quería pruebas para el juicio y tardo un poco, mi madre también se lo conto a la otra y él se quedó "solo", ahora esta con clara, ¿quién sabe cuánto duraran?, el caso es que yo intentare sacarle partido.

Me fui a la cama, estaba cansado pero no tenía sueño así que estuve con el teléfono un buen rato.

A la mañana siguiente algo se estaba restregando contra mi cara… ¡era Celia

-por fin despiertas dormilón- hija de puta me había atado las manos y los pies a la cama pero estaban cruzados

-¿qué haces aquí y que quieres?-

-nada, solo busco venganza y que borres todo lo que gravaste con el móvil, pero por ahora vamos con lo primero- ella me dio la vuelta y me coloco la poya hacia los pies

-estate quieta ¿qué vas a hacer?-

-yo, nada solo lo mismo que me hiciste ayer así que tranquilo te lo pasaras igual de bien que yo- dios que estaría tramando esta perra, la conozco bien y esto apuntaba muy mal

-para, desátame- y lejos de parar empecé a notar como dedo muy húmedo rondaba la boca de mi ano -no, para, enserio para-

-veo que no me das otra opción- dijo mientras me colocaba una esponja en la boca y un trapo para que no la escupiese a modo de mordaza.

-bueno creo que ahora podre seguir tranquila-

Entonces siguió con el dedito, ella decía que era el meñique, pero parecía el dedo gordo, yo no paraba de retorcerme e intentar soltarme mientras ella se reía.

-por cómo te mueves diría que quieres más- mientras comenzaba un lento movimiento de vaivén con el que comenzó a introducirme su dedo corazón sin mucha dificultad, estaba consiguiendo llegar cada vez más adentro cuando de repente sentí algo en mi interior que me hizo sufrir una contracción.

-premio, parece que esto te gusta ¿no hermanita?- la odiaba por eso, pero tenía razón aquello se sintió bien y no entendía porque después de llegar allí ella saco el dedo.

-llego la hora sin más dilación- -traído directamente desde Japón- -este supositorio vibrador-                      -que dejare alojado en el fondo de tu interior- esas palabras en forma de rima iban acompañadas de las acciones que describían aquel supositorio se sentía de maravilla pero ella se estaba cachondeando de mí y mis únicas opciones eran gritar y que llegasen mi padre a verme allí teniendo las imágenes de ayer aun en el móvil o dejar a Celia seguir usándome de juguete sexual,

-hermanita tengo algo que contarte- -esto que está pasando también lo está viendo mi móvil- fue en ese momento cuando todo mi cuerpo se tensó  apretando fuertemente el supositorio contra mi próstata y haciéndome sentir sus vibraciones a lo largo de todo el cuerpo hasta que finalmente mi cuerpo se soltó y pude disfrutarlas por completo,  un dedito volvía a rondar mi ano, se introdujo un poco y comenzó a dar vueltas en círculos forzando suavemente a que mi ano se abriera, ya no molestaba lo más mínimo al contrario se sentía bien.

Celia comenzó a introducir más dedos poco a poco, por el contrario yo había perdido ya la cuenta de cuantos dedos había en mi interior y solo pude sentir como los saco todos de golpe.

-veo que ya estás muy relajada, así iremos con el plato principal ¿no crees?

Esas palabras fueron sucedidas del sonido de un gemidito por parte de Celia y la sensación de algo inmenso intentando clavarse en mi interior

-vamos hermanita acabas de tenerlo mucho más abierto, no disimules y relájate- no sé como pero el empujón con el que fueron precedidas esas palabras introdujo completamente el consolador en mi interior llevando el supositorio que llevaba ahí todo el rato aún más adentro y forzando una pequeña cadena de contracciones espasmódicas en mi cuerpo, se sentía de vicio.

-hermanita algo raro le ocurre a tu cosita- dijo ella con voz burlona -no solo esta dura como una roca sino que además está babeando un líquido transparente cada vez que se contrae y yo aún no te la he tocado, lo estas disfrutando de verdad, no lo niegues, te gusta mucho-

Y comenzó a penetrarme con el dildo una y otra vez mientras yo no era capaz de evitar las contracciones de mi interior, poco a poco ella fue acelerando mientras yo trataba por todos los medios de evitar que aquellas sensaciones me provocaran una corrida, pero esa situación no duro mucho, pues mi hermanastra tras ver como mi poya no paraba quieta decidió darme un azote en el culo y otro en el glande provocando la chispa que faltaba, esa último acto indescriptible  que hace que todo tu cuerpo se desboque en un sinfín de contracciones y espasmos involuntarios hasta que ya no te quedan fuerzas para continuar y te rindes por completo a la situación llegando al punto de no importarte morir en ese instante, esas fueron las sensaciones que viví mientras mi Celia se divertía conmigo

-mira cómo se corre la cerda hay que ver que guarra es mi hermanita, niña mala no se escupe, no para- me decía mientras me seguía dando azotes hasta que el preservativo paro de llenarse.

Fran eres toda una guarra, por cierto te acuerdas de ayer, supuestamente me lo ibas a comer entero, pero no lo hiciste, así que- dijo ella dándome la media vuelta y quitándome la mordaza, su rostro y ese tono, lo decían todo, por otro lado yo ya había mirado algo sobre el cunnilingus y lo iba a probar.

 -creo que me lo voy a cobrar ahora, cuando acabes te desato- y me aplasto la boca con su coñito, estaba muy caliente, húmedo y tembloroso, mi boca no tardo en volver a humedecerse recubierta  por sus jugos, era hora de poner en práctica lo aprendido, coloque la lengua lo más abajo posible, situé mi labio superior a la altura de su clítoris y comencé a agitar la cabeza despacito mientras ella que ya estaba deseándolo no tardo en empezar jadear,  lo estaba disfrutando y pedía más, yo no iba a negárselo por lo que comencé a agitar la cabeza cada vez más rápido, aquello funcionaba ella estaba disfrutándolo, su respiración comenzó a ser arrítmica y su vientre que lo tenía justo enfrente,  no paraba de retorcerse como pez fuera del agua. 

Poco paso hasta que se tapó la boca con un cojín y comenzó a empotrarme sus partes contra la cara  sin parar, tenía que aprovechar el momento y en lugar de parar recoloque la cabeza y agite más y más rápido hasta que ella finalmente se me corrió en la cara soltando un montón de esos gemiditos que tantísimo me excitaban y dejándome perdido.

-bueno creo que ya cumpliste tu parte así que me voy- dijo soltándome

-alto ay-

-que pasa quieres que siga jugando ahí atrás-

-no cambies de tema, la grabación-

-las fotos y videos que me has hecho-

-las fotos de niños-

-esas jamás desaparecerán, tu elijes, o prefieres el video en tu insti, ya te imagino marginado y repudiado, condenado al grupo de los maricas y a una vida tragando rabos y dándote por culo, te gustaría verdad, a mi desde luego, así podríamos hablar de chicos juntos serias la hermanita que siempre quise como cuando éramos niños.

-vale pero lo borro yo- no podía dejarla la oportunidad de copiarlo

-si insistes, trae tu móvil- nos los cambiamos y me puse a buscar a ver si había copias pero me topé con una conversación que me dejo todo claro, había discutido con su novio por ponerle los cuernos con Erik ¿Quién era?

-que ya has acabado, por que menuda colección de fotos que me hiciste ni que llevases enamorado de mi toda la vida.

-tenía que aprovechar ya no tienes ese cuerpo de ballena que lucias antes-

-serás, bueno que dices: me voy y te haces una paja pensando en mi o me quedo un poco más jugando con ese agujerito tan travieso que tienes- lo cierto era que acababa de descubrir un nuevo mundo de sensaciones en la parte de atrás pero no podía permitir que mi hermanastra siguiese burlándose de mí.

-largo de aquí ahora mismo-

-adiós y no lo manches todo cerdita- susurro mientras cerraba la puerta

Continuara: