EL SECUESTRO DE MI ESCLAVO - ESPAÑA

(Leer mi perfil y a disfrutar de mis relatos)

Aquella mañana conocí al que sería uno de mis esclavos preferidos.

Llevaba media vida deseando encontrar un sumiso para amoldarlo a mí, después de intentos fallidos y anuncios infructuosos, pero sin perder la esperanza, recibí un mensaje: -“Señora puedo satisfacer todos su deseos, soy sumiso deseando estar a su disposición y a sus pies”.

Después de pensar durante una hora y no queriendo encontrarme con un petardo malviviente, sin ideas claras o aprendices buscando polvo, (aunque eso nunca fue ni ha sido un problema para mí, poner a un hombre en su lugar, bien con diplomacia o mejor aún con desprecio e indiferencia y mi lindo tono de voz despectivo, es muy sencillo).  

-Finalmente le envié un mensaje al gato que me escribió, y le dije llámame para escucharte, después de hablar y dejarle claro lo que buscaba y de decirme que tenía 52 años, que estaba cuidado “vamos, que le falto maullarme que estaba de buen ver”.

Ese, el Sumiso, que se unió a mí no solamente por su gusto por el Bdsm, sino por otro tipo de sentimiento más complejo y noble.

Después de varios meses, de encuentros y conversaciones de horas y horas dedicadas a nuestros gustos y preferencias, aunque también hablábamos de nuestra vida personal, el, Jose Miguel, solo deseaba ser mi Esclavo y ser de mi propiedad en mente, cuerpo y alma.

Estuve planeando algo para él, mi esclavo, quería una actividad con un poco de emoción y así darme un gustillo.

Todo él era mío, sus pensamientos y suspiros. Y yo para él, su Ama, su niña, su deseo alocado y fogoso que recorre su cuerpo. Deseo y enamoramiento, perdido y olvidado que no esperó encontrar.

Una tarde al salir Jose Miguel de su trabajo, estábamos hablando por teléfono.

-Y le dije: te tengo una sorpresa.

-Cuéntame Mi Ama Amor, ¿qué sorpresa es? -Me contestó.

-Ya te enteraras. –Le dije.

En ese momento tres hombres, se acercan le agarran, quitándole el teléfono le ponen una capucha y le introducen rápidamente en un coche que parte con rumbo desconocido.

-El Esclavo, preguntaba: ¿quiénes sois?, ¿qué queréis de mí? – No obtuvo repuesta, en el coche iba la música puesta, ¿A dónde me lleváis?. Desgraciadamente había sido secuestrado.

Y en ese momento ya por órdenes superiores le habían quitado la capucha y le habían cubierto los ojos y la boca con cinta adhesiva.

Después de una hora de viaje, llegaron a su destino… no sabía dónde estaba ni distinguía ningún olor.

Lo bajaron del coche dos hombres y lo llevaron agarrado de cada brazo, con las muñecas atadas a la espalda, subió unos escalones entre jadeos y forcejeos.

Inmediatamente entrar a la casa, le pusieron de rodillas, le quitaron la cinta adhesiva de la boca.

–Ah, ¿quiénes sois? Consiguió gritar.

-Calla le dijo una voz varonil que no reconoció mientras que por encima de la cabeza en la espalda recibía el que sería su primer y único latigazo de su secuestro.

Estando de rodillas Jose Miguel, sabía que había una persona frente a él, pero no reconocía quien era, ni su olor, no sabía si era hombre o mujer.

Mientras tanto su móvil no paraba de sonar.

-Dijo la voz varonil: una llamada de MI AMOR.

-Por favor permítanme contestar. -Pidió el secuestrado.

-Calla le grito la voz varonil,  mientras que empujaron su cabeza contra el cuerpo que estaba frente a él, el esclavo trato de retirarse pero los dos hombres le obligaron a meter la cabeza entre ese culo.

Dejadme. –Dijo Jose Miguel.

-Lame le dijo la voz varonil, mientras empujaban con más fuerza su cabeza.

El culo que estaba lamiendo, Jose Miguel no lo sabía, porque continuaba los ojos cubiertos y las manos atadas a la espalda, llevaba un liguero con medias hasta el muslo, con un corpiño con las tetas al descubierto, sin bragas el coño y el culo libre, perfecto para un buen Facesitting.

Mientras era obligado a lamer el culo a disgusto. Le retiraron un poco del agujero que estaba lamiendo, mientras que se giraba aquella persona.

Ahora chupa dijo la voz varonil, el Esclavo pensó que era una polla y no se equivocaba, era una polla que llevaba puesto un preservativo, era suave y se la introducían en la boca mientras los dos chicos le empujaban la cabeza hacia ella, el forcejeaba tratando de alejarse, pero se lo impedían.

-¡Chupa! grito nuevamente la voz varonil, que resonaba en algún lugar de ese espacio. Lo único que consiguieron fue que la polla entrara y saliera de su boca, ya ensalivada por las arcadas que le producían, el entrar por la fuerza.

Después de eso, lo llevaron hasta una ducha, le cortaron con unas tijeras la camisa y los vaqueros, hasta desnudarlo totalmente, le han duchado el cuerpo, mientras continuaba de rodillas, le lavaron la polla, los huevos y el culo.

Lo llevaron a un cepo de hierro y lo inmovilizaron a cuatro patas, cabeza, muñecas y tobillos, con las piernas abiertas y sujeto también de las rodillas.

-¿Qué me vais a hacer? -preguntaba el Esclavo con insistencia, ¿Quiénes sois? En ese momento le cubrieron la boca con cinta adhesiva.

Y la voz le dijo: -ojala disfrutes.

En ese momento notó que le caía lubricante en el culo y después sintió que era penetrado por una polla, una buena polla gorda y larga…Jose Miguel, solo jadeaba de dolor con movimientos impedidos por el cepo. Gritos silenciados por la cinta adhesiva. Mientras que tenía su polla flácida, pero de la que colgaba líquido, una baba seminal…es normal, un reflejo fisiológico.

Después de ser follado y sodomizado una y otra vez durante horas, le dejaron descansar un momento.

-Y la voz varonil le dijo, ahora se te va a soltar del cepo, no pongas resistencia, mientras escuchaba su teléfono sonar.

-Nuevamente te llama MI AMOR, dijo la voz varonil. - ¿La Quieres? Contesta le dijo la voz, mientras le retiraban la cinta de la boca, el Esclavo no podía pronunciar palabra.

-Contesta ¿La Quieres?. Si, contesto Jose Miguel.

-¿Si, qué? Grito la voz. Si, la Quiero con locura. No quiero a nadie que no sea ella.

-¿Y su nombre? Pregunto la voz.

-¿Para qué quieres saberlo? Contestó el Esclavo.

-¿Cómo se llama, esa que tú dices Amar? Solo estamos hablando, no le pasará nada.

-Maria, Maria es su nombre, contesto Jose Miguel.

-¡Anda ya, que tiene nombre de virgen! –Dijo la voz varonil.

-Ahora te soltaremos del cepo, te repito no pongas resistencia, porque la pasaras mal. ¿Te queda claro?.

– Si, contesto el esclavo.

Le pusieron un collar negro de perro, le dieron de beber un vaso de agua y le encerraron en una jaula para que pasara la noche, con los ojos cubiertos con la cinta, sintió que le ponían un cinturón de castidad con un anillo que le apretaba bastante. El pobre no podía caminar del dolor de su agujero perforado y follado indiscriminadamente.

Horas después, dijo que necesitaba mear, pasado un tiempo, abrieron la jaula, lo llevaron al baño, donde meó sentado y regreso nuevamente a descansar en la jaula, como el perro que era, sobre un felpudo.

Mientras pensaba en mil cosas, en su retención…

-¿Dónde estaba?  -¿Por qué el?  -¿quiénes eran esos hombres? -¿Le estarían buscando después de tantas horas?,… el día siguiente era sábado.

Recordaba que en la mañana antes de irse a trabajar Maria lo había despertado, acariciándolo y ya medio despierto, ella le había puesto su hermoso culo en la cara para refregarse en el, mientras ella abría su agujerito y el introducía su lengua. Después ella, había ubicado su agujero en la nariz mientras su boca y lengua saboreaba y comía su coño peludo, Maria iba sobre su cara en un vaivén mientras chupaba su polla, hasta que se puso dura y apretando un poco los huevos, mientras Jose Miguel bebía su corrida, (todos los fluidos de Maria era y son un manjar para él). Perfectamente  sabe que Maria no es de tener un solo orgasmo, después de correrse en su cara, ella se sienta sobre su polla y lo cabalga un rato, para terminar en cuatro patas, ella ofreciéndole su bonito y gran culo, que Jose Miguel adora.

Estaba feliz esa mañana antes de irse a trabajar, tenía ilusiones y esperaba ese fin de semana para descansar… y ahora estaba ahí, encerrado en una jaula, con el culo dolorido, follado, con los ojos vendados y con un cinturón de castidad.

-¡Que triste eres Jose Miguel! Se dijo a sí mismo. Y se durmió.

En la mañana temprano, lo despertaron, lo hicieron acostar sobre un plástico.

-Tienes suerte de no habernos visto, así no podrás reconocernos, dijo la voz varonil.

El móvil de Jose Miguel, volvió a sonar.

-Es Maria dijo la voz, es Maria tu Amor. Ya tendrás una buena explicación para darla, cuando os veáis.

Jose Miguel dió por hecho que se iría de allí.

-Pero; mientras os veis, a continuar con tus deberes.

-Mis Deberes, pensó Jose Miguel.

Acostado sobre el plástico, con el cinturón de castidad puesto y atado con cadenas de muñecas y tobillos como si estuviese en la cruz de San Andrés, sintió cuando un culo se acercó a su cara y descargo su peso sobre él, que no hacía más que mover la cabeza de un lado a otro tratando de respirar, lo que le daba placer a la mujer que tenía encima de su cara, por un momento El Esclavo, sintió ese sabor del fluido de ese coño, pensó que era Maria, su Maria.

Esa mujer levantó un poco su culo, no para terminar el Facesitting, sino para que el Esclavo Jose Miguel tomara aire y sentarse nuevamente sobre él… pasó su lengua sobre ese coño suave y  depilado, quería pensar que era Maria y así comerlo con gusto.

Mientras que la mujer se corría sobre su boca sin pronunciar palabra, el sabor de ese coño le gustaba, el llevaba el cinturón de castidad, que no le permitia levantar la polla.

Después ella se levantó y la voz varonil le pregunto:

-¿Tienes sed?

-A lo que Jose Miguel, contesto, sí.

-Se te dará de beber. -Dijo la voz.

La mujer se le acercó a la boca y meó a chorro, bebió lo que pudo, hasta casi atragantarse. Y después acercó su coño a la boca para que lo lamiera y secara.

Aprovecho que estaba allí, sobre el plástico y en cuclillas, para cagar encima de él, Jose Miguel pudo sentir las heces calientes sobre su cuerpo, mientras seguía encadenado, la mujer acerco su agujerito a la boca del Esclavo para obligarlo a lamerla y limpiarla.

El intento negarse, pero, ella con sus manos abrió las nalgas y posó directamente el agujerito del culo en su boca, para que lamiera y chupara lo que quedaba.

No podía respirar, pero; jadeando se dio a entender y la mujer levantó su culo de la cara del que era su Esclavo de Facesitting, el mismo esclavo que se bebió su lluvia dorada y saboreó su bombón de chocolate.

Después la mujer se levantó desnuda, fue a la ducha, se vistió y marchó, a lo lejos se escuchó el motor de coche en marcha.

A Jose Miguel le quitaron las cadenas de muñecas y tobillos, limpiaron el bombón de chocolate que tenía encima de su pecho y los dos hombres le acompañaron a la ducha, con los ojos cubiertos aun… le hicieron duchar bien, para quitarse el olor al scat, le hicieron cepillarse la boca y enjuagársela, le quitaron el collar de perro que llevaba puesto y le dieron ropa nueva para vestirse.

Nuevamente le ataron las manos atrás y le hicieron beber un chupito de aguardiente.

Lo subieron en el coche e iniciaron una hora de camino de regreso, después de horas difíciles, que se le hicieron eternas… su móvil volvió a timbrar.

-Es tu Amor. -Dijo la voz varonil, seguramente te está esperando.

Llegaron hasta el edificio donde vivían con Maria, entraron por el garaje, lo bajaron del coche.

Te dejaremos junto a tu Amor, a Tu Maria –le dijeron, los dos hombres que subieron en el ascensor con él, hasta su planta, aún era temprano, los vecinos descansaban.

Le habían desatado las manos y al salir del ascensor le quitaron la cinta de los ojos, la cual llevaba puesta más de 12 horas y no podía ver, hasta acostumbrase a la luz.

Le entregaron su móvil, las llaves y su billetera con los documentos, no obstante timbraron en la puerta y le dejaron allí.

-Hasta otro día Jose Miguel, le dijo uno de los hombres.

Cuando abrí la puerta, inmediatamente me dijo ¡MARIA!.

Y le veo parado allí, cuan largo es, con los ojos entrecerrados y con cara de sufrimiento.

-¡HOLA! Me dijo, entrando a casa.

-¿Dónde estabas? ¿Por qué llegas a esta hora? Te he llamado docenas de veces… le dije.

Aún no había subido las persianas del piso.

Yo estaba vestida y había preparado café…cuando entró ya tenía servidas 2 tazas, la suya y la mía.

-Me dijo: -Tengo que contarte lo que me ha pasado…

-¿Vienes con camisa y vaquero nuevos? Buen gusto – le dije. ¿Qué te ha pasado?

María ayer mientras hablábamos me han secuestrado, no sé dónde me llevaron, ni quiénes eran, no sé nada, me han sodomizado, enjaulado, encadenado y por último que una mujer le había puesto el coño encima de su cara, le meó y le cagó encima…

-No es posible que te haya ocurrido eso. Le contesté.

-Tengo el culo dolorido de la follada, era una polla grande, no sé si fue un hombre o una mujer con arnés. –Me decía Jose Miguel.

-No estés triste cariño, ¿Y la mujer como tenía el coño?, -le pregunté.

-No quería ni probarlo, pero me lo refregó y lo tenía depilado.

-¿Te gusto sentir ese coño en la boca? –le pregunté.

-Lo siento mi Amor, por un momento estando allí encadenado, pensé que era el tuyo, tenía tu sabor. –Me contestó.

Lo siento, sabes que yo no quiero otro coño que no sea el tuyo, no quiero otro culo que no sea el tuyo, no quiero besar otros labios que no sean los tuyos, ni otro cuerpo ni otra cabecita que no sea la tuya.

-¿Mi sabor? No me gusta que pretendas equipararme con nadie ni que te imagines que soy yo, para disfrutar. –Le contesté.

-Soy tuyo, completamente tuyo Maria, te pertenezco. –Me contestó.

Vamos a la habitación mi gatito esclavo, es temprano aún… Te consentiré un rato.

Se desnudó, estaba duchado, le hice tumbarse boca bajo, para revisarle su culito del que habían abusado,… le puse un poco de crema anestésica e introduje 2 deditos en el para acariciarle, mientras con la otra mano por debajo le acariciaba la polla. Le bese y le acaricie.

Después se tumbó boca arriba y me acosté a su lado, me dijo te deseo con locura Mi Dueña y necesito de tu sabor y olor, bajo hasta introducir su lengua en mi ombligo, necesito estar de cabeza entre tus piernas y así estuvo comiéndome el coño, al rato me tumbe boca abajo y le dije. –metete entre mi culo y con una mano le agarre la cabeza y se la metí entre mis nalgas, mete la lengua,… después me puse a 4 patas y le dije, mejor así….cómeme el culo, mete la lengua bien dentro y saborea, después quiero que metas un dedo dentro y vas pasando la lengua y saboreando…

Y como el Facesitting es mi preferido, le hice tumbarse boca arriba y me senté en su cara durante horas para satisfacerme y haciendo fuerza con mi agujerito en su boca.

Mi Esclavo era feliz, porque nuevamente tenía mi culo puesto sobre él...

Después de descansar toda la mañana, salimos a tomarnos una cerveza y a comer… Yo con mi Esclavo y el con su Ama (El con su Amor y yo… yo con el).

-Ya bebiéndonos la cerveza y entre risas. -Me dijo: Te Depilaste.

-Le dije: Jose Miguel, cumple con tus deberes cariño. Tú eres mío y solo yo puedo hacer contigo lo que quiera, yo te follo, te meo y te cago.

¡Vaya arnés tan grande que te ha follado y vaya sorpresa que te has llevado!

-Mirándome a los ojos, me dijo: Maria, das vida a mi vida.

Mari Femdom