Algunos de ustedes ya me conocen y para los que son nuevos y aun no, mi nombre es Mirabel, soy casada con José, tengo 2 hijas una de 11 y otra de 20. Tengo 40 años, mi marido 56. Soy Venezolana pero he vivido en Mexico desde hace ya 20 años cuando me case con mi marido. Mi marido tiene negocio propio, es arquitecto yo soy profesora, actualmente supervisora escolar, y también soy ama de casa. Soy medio rubia pelo largo hasta la cadera, mido como 177, unos 58 kg, mis medidas son 91-60-98. Soy atractiva de cara, mis muslos redondos de gimnasio y lo mejor de mí son sin duda mis grandes, redondas y paraditas nalgas que se me marca en mi ropa y sé que más de uno en mi trabajo y en la calle no deja de mirarlas al usar faldas y pantalones.

Se llegaron las vacaciones de semana santa, así que habíamos planeado viajar al bello puerto de Acapulco con mi marido y mis dos hijas. Era jueves por la tarde y ya casi todo estaba planeado para salir el día viernes, así que esa noche estaba muy relajada, contenta y muy cachonda, la verdad es que mi marido no me había cogido desde hace un par de semanas, debido al trabajo así que pensé que esa era una buena noche para entregarle las nalgas al hombre que amo, pero debido a que llego cansado no se encontraba con ánimos de penétrame rico o de pasarla bien, me sentí un poco triste, ya que estaba muy caliente y deseosa de ser follada pero bueno que podía hacer, solo pensé, esperare a llegar Acapulco, creo que es un buen lugar para que me de las folladas que no me ha dado durante estos días.

Dormimos y al día siguiente resulta que de última hora él no podía ir con nosotras debido a su trabajo tenía que viajar. No saben la impotencia que sentí en esos momentos, la desesperación y el enojo que eso me causo.

MARIBEL: No inventes José ya habíamos planeado todo, no puedes dejar tu trabajo por unos días conmigo y tus hijas.

JOSE: Amor el trabajo es trabajo y debo atenderlo.

Pensé en esos momentos, a quien deberías atender mejor es a mí no a tu estúpido trabajo.

MARIBEL: No seas así como vamos a ir solas, es para pasarla bien en familia y conmigo, o mejor no vamos.

JOSE: No seas loca ustedes vayan, las habitaciones ya están pagadas así que vayan y disfruten si puedo llego después.

Me fui enojada, preparamos nuestras cosas y salimos rumbo Acapulco. En el camino iba muy molesta, pensando… de qué diablos sirvió traer tantas pinches tanguitas y lencería sexy si mi marido no viene, era el momento perfecto para pasarla muy bien después de tanto tiempo que me ha tenido muy abandonada. Mi molestia y enojo fue tanto que no me importo usar un mini short de esos que son bastante cortitos que casi enseñan parte de las nalgas, una blusa con escote sin sostén que dejaba ver gran parte de mis grandes, redondas y hermosas tetas.

Llegamos a un famoso hotel de Acapulco, entramos a la recepción, nos dieron nuestra habitación, mis hijas me comentan que están ansiosas por meterse al mar, que tienen mucho calor así que les dije que se adelantaran que en un rato las alcanzaba.

Subí me tome mi tiempo descansando y decidí ponerme mi bikini, saque todos los que había traído, uno en especial para lucirlo con mi marido, de esos que parecen tanguita, así que lo saque de la maleta y entre al baño, como estabas sola, no cerré la puerta pero se me olvido que una maleta se me había olvidado y faltaba equipaje solo subí  las maletas pequeñas con sus ropas intimas y bikinis, porque no me gusta que las lleven los de servicio.

El de servicio entra y no ve a nadie por lo que decide dejar las maletas, pero de pronto al acercarse al baño voltea y te me cambiándome, me estabas quitando mis short y mi blusa, ya me había puesto mi parte de abajo del bikini así que parecía como si solo estuviera con una me hacía ver muy sexy, mis nalgas se comieron la tanguita inmediatamente y esa debió ser una escena muy caliente para el joven.

El chico se quedó boquiabierto mirando esa escena debo decir que era un chico moren alto de muy buen ver de unos 28 años, se llamaba Juan.

Se quedó mirando no pudo evitar frotarse su entrepierna y apretando los dientes, con el pensamiento lleno de lujuria decía:

 JUAN: wow que buena esta la señora, está mucho mejor que sus hijas, no cabe duda que las maduras son las viejas más buenas y sabrosas.

Fue entonces cuando volteo y me doy cuenta de su presciencia.

MARIBEL: OYEE¡ qué haces aquí?

JUAN: perdón perdóneme señora, creí que no había nadie voy llegando con el resto de su equipaje.

En eso momento yo solo me tapaba mis tetas, ya que aún no me colocaba la parte de arriba de mi bikini solo tenía la parte de abajo que parecía una tanguita.

MARIBEL: Si pero debiste tocar, salga que me estoy cambiando.

(Mi ropa tirada en el suelo tapando mis tetas y mi diminuta tanga tirada en el piso que momentos antes me había bajado para ponerme el bikini)

JUAN: Si ahora salgo señora aquí tiene su equipaje, mire tome una toalla para que cubra sus…

Tome la toalla y le dije:

MARIBEL: Gracia solo sal que me estaba cambiando.

JUAN: Si perdone, no me vaya acusar señora de verdad es mi primer día de trabajo y pues perdóneme.

MARIBEL: No te preocupes, solo deberías tener más cuidado hay maridos que se podrían molestar mucho si te vieran entrar en situaciones así.

Dos cosas pasaban en ese momento, una, no sabía por qué rayos aún seguía charlando con el si yo estaba casi desnuda, y dos, podía notar una enorme erección en ese joven que empecé a sentirme nerviosa y los pensamientos de aquel joven solo eran: (wow que señora,  está que se cae de buena,  bien buena pero como que le gusta que la vean, porque le di la toalla y solo tapo sus tetas, dejándome ver si bikini y ese conchita que se marca muy bien.

JUAN: si señora disculpe, me retiro, señora gracias y discúlpeme

No sé qué me paso pero por más que trate, no pude evitar ver su enorme bulto, en ese momento el me volteo a ver y se dio cuenta de mi tonta mirada a su verga.

JUAN: Que pena, pero con ese cuerpo que tiene… oh rayos... perdón no quise decir eso.

(Sonreí muy coqueta y sorprendida)

MARIBEL: Ya solo vete no te preocupes jiji (Vaya erección y bulto de ese muchacho se nota una verga enorme, rayo que cosas estoy pensando, pero es que si es muy atractivo)

JUAN: Si ya me voy y disculpe mis ocurrencias, solo una pregunta… ¿viene con su marido?

La verdad no sé por qué rayos me pregunto eso, pero tampoco sé por qué rayos conteste a esa pregunta.

MARIBEL: Pues no, no pudo venir, solo traje a mis hijas a vacaciones.

JUAN: Vaya que mal, se perderá estas lindas vacaciones (ese chico solo pensaba: no trajo al marido, así que poder verte esas nalgotas estos días cuando estos en la alberca.

MARIBEL: Si se perderá todas estas cosas (me refería a mis nalgas).

JUAN: si es una lástima, y para compensar mi error voy a decirles en la alberca que ya me pago unas bebidas por adelantado, para que ya solo las pida y las disfrute.

MARIBEL: No amigo como crees, no es necesario.

JUAN: Acéptamela por favor es una forma de remediar mi error.

Para esos momentos los nervios se habían calmado y platicábamos como si estuviera en el jardín.

MARIBEL: Esta bien solo una hee… ijiji.

JUAN: Si señora lo que usted diga, y si no es mucha molestia me podría decir ¿cómo se llama?

MARIBEL: Mi nombre es Maribel.

No sabía por qué le había dicho mi nombre a un desconocido que casi me ve desnuda, él me dijo su nombre y nos saludamos… pero… estúpida, la charla era tan normal que olvide que sostenía la toalla en mis tetas, así que se resbalo hasta caer al suelo dejando mis tetas totalmente desudas a la vista de ese joven, el cual se quedó un rato mirando mis ricas tetas.

MARIBEL: Que vergüenza, perdón, será mejor que salgas.

JUAN: Si perdón señora no fue mi intención, aquí tiene la toalla.

Me gire para taparme las tetas, pero olvide que mi bikini parece mini tanguita y toda la vista de mi culo en tanga era para él.

JUAN: wow señora (que culote tiene esta señora)

Coqueta nerviosa sonreí y le pedí que saliera

JUAN: Si señora discúlpeme no pode evitar decir eso perdón es que tiene unas tremendas nal… usted sabe.

MARIBEL: No sé pero ya vete ándale antes de que te vean y piensen mal.

JUAN: Ahorita nadie bien señora.

Me dijo con una voz muy cachonda mientras se acercaba más a mí.

JUAN: ¿De verdad no sabe a qué me refiero señora?

Como estaba de espaldas me arrimo su pene bien erecto abultándose en el pantalón y me dijo:

JUAN: Pues lo que miro hace que esto se ponga así.

Sentí por primera vez su verga rosar con mis nalgas y fue algo que paralizo todo mi cuerpo.

MARIBEL: Solo sal por favor, debes salir.

JUAN: En verdad quiere que me vaya señora, me arrimo más su verga en mis nalguitas haciendo que se pusiera entre mi              s dos grandes nalgas, mientras sus manos tomaban mi cintura.

Yo pensaba que rayos estaba haciendo yo, por que no lo había corrido, está bien que sea guapo y todo pero no puede estar aquí y menos arrimándome su verga en mis nalgas.

MARIBEL: Sal por favor mis hijas pueden llegar y pueden pensar mal.

En eso me abrazo y sus manos agarraron mis tetas.

JUAN: Señora me gusto desde que la vi entrar al hotel y nunca me imaginé encontrarla así yo creo que ya estábamos destinados a compartir esto.

Decía mientras apretaba mis tetas y meneaba su cadera para acariciar mis nalgas con mi verga

MARIBEL: Estas loco no debes estar aquí y menos así, mmm soy una señora casada por favor salga de aquí.

Que caliente estaba en esos momentos, pero sabía que estaba haciendo mal, pero mi marido tenia parte de la culpa ya que me tenía sin verga varias semanas.

JUAN: ahorita me voy señora, solo déjeme acariciar un poco este rico cuerpo que tiene, estas nalgotas que te cargas y a muchos se les antojan mmm mamacita, siento como empiezas a mover tus nalgas solita, de alguna forma te gusta verdad.

MARIBEL: Eres tan guapo y tienes un paquetote pero ya es hora de que salgas por favor.

JUAN: Señora nadie se dará cuenta solo un poquito déjame sentir tu culote mmm siente como me pusiste la verga desde que llegaste al hotel.

Me tomo la mano y yo aun dándole la espalda sentí en mis manos una verga demasiado grande y muy gorda, lo cual me hizo mojar mucho.

JUAN: Déjese llevar, deme sus manos

La agarre y sin querer empecé a masturbarlo un poco muy suavemente.

JUAN: Que lidas manos tiene señora, wow se siente muy rico, usted esta buena hasta por las manos, que rico es tener mi verga en sus manos de señora madura y sexy.

MARIBEL: No me hagas esto sabes que no soy de piedra y también me excita esto mmmm

JUAN: Si señora es que usted tiene la culpa por tener estas tetotas y esas nalgotas.

Me empezó a besar las tetas como loco, las llenaba de saliva, succionaba mis pezones, era tan rico lo que me hacía.

MARIBEL: Que rico, que rico, pero ya sal por favor.

En ese momento me hizo agacharme hasta quedar su verga justamente enfrente de mi cara, pude verla de cerca y era realmente deliciosa muy dura, enorme, gorda.

JUAN: Señora por que no la pruebas y si no te gusta me voy.

MARIBEL: Estas loco como crees, no puedo hacer eso

Le decía mientras aun lo seguía masturbando con mi mano.

JUAN: Ándale solo un besito y ya

Sin pedirme permiso me tomo de la cabeza y puso su verga en mi boca y yo tan caliente no pude resistirme, la verdad tenía casi 2 meses sin mamársela a mi marido, solo habíamos tenido sexo pero no me dejaba mamársela.

JUAN: Rayos señora las maduras la maman bien rico y hoy lo comprobé.

 Se la mame como 2 minutos y en eso su celular sonó era su jefe y se tuvo que marchar.

JUAN: Estos hijos de puta a buena hora se les ocurre marcarme, debo irme señora, de verdad que es una diosa, su culo, sus tetas, su cara, sus piernas y esa boquita que mama delicioso no lo voy a olvidar.

Se fue y yo que quede muy pensativa en la cama, acostada meditando todo lo que había pasado, aun con un sabor rico de su verga en mi boca.

El muchacho en el elevador debió pensar: (wow que señora tan sabrosa, tiene unas tetas enormes, y sus nalgas son una delicia, mamacita, y que rico empezaba a chupármela, como que se veía que su marido no le cumple, estaba tan mojada).

                                          CONTINUARA…

Esta es la primera parte de mis vacaciones, hay tantas locuras que me pasaron que se las contare poco a poco, gracias a todos lo que leen mis relatos y a los que me escriben a mi correo, son bastantes y a veces no puedo contestarles, pero voy a tratar de subir relatos cada 7 días o cada 15 todos los fines de semana.

Les mando un saludo y sé que se quedaron con la verga bien dura y eso me excita saberlo.