Prólogo

A continuación les presento un relato auto-conclusivo basado en la serie Detective Conan.

Como cuando inicié los relatos de Doremi, voy a hacer las presentaciones, y al igual que entonces, les aviso que usaré los nombres de los personajes tal y como se conocen en el manga español, ya que los nombres del anime son un asco...

Detective Conan es un manga de tema policial en el que se resuelven misterios, enigmas y sobre todo, casos de asesinatos y venganzas.

Su protagonista es un joven de 16 años llamado Shinichi Kudo. Al comienzo de la saga le vemos resolver un caso y nos deja a todos con la boca por el suelo.

Pero para su desgracia, unos "malvados hombres de negro" le dejan inconsciente y le administran un veneno experimental, nunca antes probado en humanos.

Este veneno encoge a Shinichi, convirtiéndole en él mismo, con 6 años. Pese al cambio físico, por dentro sigue siendo un adolescente de 16 años, conservando intacto su prodigioso cerebro.

Shinichi, bajo su aspecto de niño, decide ponerse unas gafas y llamarse Conan Edogawa, tomando el apellido de su ídolo de las novelas de investigación, Sir Arthur Conan Doyle, más conocido por ser el autor de Sherlock Holmes.

Entonces se muda a la casa de su amiga de toda la vida Ran, una chica de 16 años, que aunque él no lo admita, es lo más parecido a una novia para Shinichi. Practica karate, sabe defenderse y tiene temperamento, pero cuando tuvo que separarse de Shinichi, se le rompió el alma...

En esta casa vive también el señor Mouri, un detective malucho, que se hará famoso gracias a que Conan resolverá infinidad de casos por él.

Shinichi tiene un amigo, el profesor Agase, quien le fabricará multitud de inventos para hacerle la vida un pelín más fácil a Shinichi, mientras él intenta recuperar una muestra del veneno ese, para que Agase pueda analizarla y tratar de encontrar un remedio.

Entre otros inventos, Agase le dará a Conan unas zapatillas con las que será capaz de dar unos chuts increíbles, y una pajarita-micrófono, con la que podrá imitar cualquier voz.

Para colmo de males, se verá obligado a regresar a la escuela, a la clase de primero (imagínense, clases del tipo: "¿1+1? ¡¡dos!!"). Allí conocerá a tres chicos con los cuales entablará una buena amistad. Estos son:

-Ayumi. Niña. Algo miedosa, pero si Conan va con ella, nada puede asustarla. Acaba haciéndose una buena amiga de Conan, y al final de cierto volumen, le da un beso...

-Genta. Niño. Es gordote y algo presumido, pero buena persona en el fondo.

-Mitsuhiko. Niño. El típico marisabidillo que te entran ganas de darle un puñetazo, pero otro buen amigo de Conan.

Y condenado a vivir así, Conan (o sea, Shinichi) resolverá un montón de enigmas, unas veces asesinatos a sangre fría, otras casos de venganzas tras 15 años, y cosas peores.

Pues ya está, a continuación empieza el relato. Espero que guste a todos, especialmente a los aficionados a este manga, pues está escrito para ellos.

1º parte: Ayumi y Conan, amigos con derecho a roce

-"Amanece. Es viernes. Hay que ir al cole." Pensó Conan en su cama cuando un rayo de luz atravesó la estancia y llegó hasta su cara.

Miró a su alrededor. Ran y el señor Mouri aún estarían en casa.

El señor Mouri porque se oían sus escandalosos ronquidos como si fueran los rugidos de un oso en celo.

Ran porque aún no olía a pan tostado ni a café recién hecho.

Por esto, Conan pensó que sería muy pronto. El verano estaba al caer y los días eran cada vez más largos, amaneciendo más temprano.

Pero entonces miró un reloj-despertador que tenía en una mesita. ¡Marcaba casi las 8:45! ¡Iba a llegar tarde!

En la casa solo había ese despertador y si fallaba, como hoy, todos se quedaban en la cama...

Se levantó rápidamente, se vistió y agarró su pajarita, la puso a máximo volumen y chilló a trabes de ella para despertar a los otros dos.

Ran y Mouri dormían como troncos y sabía por otras veces que ni una estampida que pasara bajo su ventana sería capaz de despertarlos...

-"¡¡¡DDEESSPPEERRTTAAOOSS!!!" gritó Conan. El chillido salió con tanta fuerza que del techo cayeron unas motitas de polvo.

Pero Ran y Mouri se despertaron suavemente, como si nada pasara.

En cuanto Ran miró su reloj de muñeca, se levantó cual rayo y preparó el desayuno de todos.

Conan comió todo lo que le correspondía y decidió salir él solo:

-"Yo me voy ya, que si tengo que esperar q que te vistas para salir, Ran, no llego." Dijo Conan.

-"¿Pero sabrás ir tú solo? Le preguntó Ran, algo inquieta por la reacción del chico.

-"Si. Si he ido allí toda mi vida..."

-"¿Cómo que toda tu vida?"

Conan se dio cuenta de su error e intentó corregirlo añadiendo:

-"Es que tengo la sensación de haber estudiado allí desde siempre... ¡je, je, je!"

Y antes de que pudiera decirle nada más, Conan cogió su mochila y salió pitando de la casa.

Ya en la escuela, la profesora le preguntó que a qué se debía el retraso. Él dijo la verdad por una vez en su vida, ya que contestó que se habían dormido.

-"Bueno. Hoy te quedaras después de las clases con Ayumi, que también ha llegado tarde, y entre los dos limpiareis y ordenareis un poco la clase. Y procurad que no se vuelva a repetir." Dijo la profesora.

¡Vaya! Parece que Ayumi también se debió quedar dormida esa mañana...

Llegó la hora del recreo. En el patio, se juntaron los cuatro amigos, Conan, Ayumi, Genta y Mitsuhiko.

-"¿Pero que os ha pasado a los dos esta mañana?" Preguntó Genta.

-"Eso. No soleéis llegar tarde ningún día y hoy habéis coincidido los dos..." Añadió Mitsuhiko.

-"Yo es que ayer no puse el despertador y hoy no sonó, obviamente." Contestó Conan

-"Yo..." empezó a hablar Ayumi cuando Conan la cortó:

-"Ayer estuviste viendo por la noche una película y te acostaste tarde, ¿me equivoco?"

-"¡Si!¡Eso es! ¿Cómo lo has sabido?"

-"Tienes unas ojeras que son un síntoma claro de no haber dormido, y eso solo podía ser por quedarse viendo la tele hasta tarde; ó por no haber dormido bien y haber dado vueltas, pero en este último caso por lo menos se descansa, pero tú traes una cara de sueño..."

-"Pues si, me quedé ayer por la noche viendo una película con una prima mía que ha venido de visita y por la mañana tenía mucho sueño"

-"Yo también lo hubiera averiguado..." gruñó en voz baja Genta.

-"¡Oh, Conan! ¡Esto es una prueba de que el destino nos une!" Dijo Ayumi, lanzándose en los brazos de Conan, quien se sorprendió un poco.

Justo en ese instante sonó el timbre del colegio, indicando a los alumnos que debían volver a sus clases.

Llegó la hora de finalizar las clases y Conan se quedó con Ayumi tal y como la profe les mandó.

Fuera estaba atardeciendo, y el cielo se tornó de un color anaranjado.

-"Oye Conan, ya que eres tan listo, ¿a qué no sabes lo que estuve viendo por la tele ayer?" Ayumi se acercó más de la cuenta a Conan. Este se estaba poniendo nervioso...

-"Pues no..."

-"Mi prima no sabe nada, pero yo me escondí tras un sillón y vi toda la película. Era una película en la que salía la gente desnuda."

¡Su prima estaba viendo una peli porno y Ayumi la vio a escondidas!

-"Pero, Ayumi. ¡Nosotros no tenemos edad para ver esas cosas!"

Ayumi continuo sin hacer caso:

-"En la peli, un chico y una chica se ponían así de cerca" Ayumi se paró a unos 5 cm de Conan, "y se dieron un beso en la boca. Tú siempre me has gustado, Conan, Y si dos personas que se quieren hacen esas cosas, yo quiero probar contigo..."

Antes de que Conan pudiera decir no, Ayumi recorrió esos 5 cm y sus labios encontraron a los de Conan.

Aquellos tiernos niñitos se estaban dando su primer piquito, casi inocente, sin abrir sus bocas. Pero entonces Conan hizo fuerza con su lengua y consiguió abrir una ruta entre ellos.

Su lengua se encontró con la de Ayumi. A ella parecía asquearla al principio, pero se calmó, y dejó que ambas lenguas juguetearan libremente por un rato.

Pasado un tiempo, Ayumi los separó.

-"Después de darse eso beso, la chica se puso así" dijo Ayumi

-"Y el chico sacó su, cómo decirlo, cosita, ¡que era enorme! Y se la metió por aquí. Mi prima se estaba metiendo los dedos dentro, así que probé a hacerlo yo. ¡Y me gustó muchísimo! Pero me gustaría sentir dentro tu cosita"

Conan era un niño de 6 años. A esa edad era imposible que tuviera una erección. Pero por dentro seguía siendo un adolescente de 16 años, conservando su cerebro intacto. Y fue este cerebro el que segregó las hormonas necesarias para que la polla de Conan reaccionase...

Haciendo memoria, llevaba desde que encogió sin masturbarse, y ya iba siendo hora de hacerlo. ¡Pero que mejor que sexo real, y no una vulgar paja!

-"La cosita, como tu dices, la llamamos polla, y ahora vas a ver lo que es bueno" Dijo Conan, bajándose los pantalones y sacando al fresco su "cosita".

-"¡Hala! ¡Si es más grande que la de la peli!"

Pese a ser por fuera un pequeñajo, el cerebro de Conan segregó la cantidad necesaria para un adulto, por lo que su polla casi revienta.

Conan agarró a Ayumi por la cintura y colocó a las puertas del coñito de Ayumi su polla. La conchita de esta no tenía ningún tipo de pelo. Claro, no era más que una niña de 6 años...

Pero su "cosita" no entraba. Nada, por más que lo intentara no cabía. Pero Conan estaba demasiado acalorado como para irse de allí si descargar.

Separó su cuerpo del de Ayumi, sin soltarla de las caderas, y embistió con toda la fuerza que su cuerpo pudo darle.

La polla finalmente entró, si bien ambos sintieron un profundo dolor, especialmente Ayumi, quien hasta llegó a sangrar ligeramente, pero ese dolor pronto quedaría oculto por el placer...

-"¡¡HAAAAG!! ¡¡QUE DAÑO!! ¡¡HUMM!! ¡¡PERO QUE GUSTO!!"

-"¡¡OOOOGH!! ¡¡OOOOGH!! ¡¡QUE DURO LO TENÍAS!!

-"¡HUMM!, ¡Sigue así, no pares!"

Conan aguantó como todo un hombre, pero tras varias embestidas, su polla llenó el interior de Ayumi con un espeso semen.

Estaban rendidos. ¡Esto de follar consume mucha energía, y más si se es un niño!

Conan se dejó caer suavemente sobre Ayumi, y esta le correspondió con un abrazo. Conan levantó la cara y la miró a los ojos. Pudo ver que aquella niña había disfrutado, pues su expresión era de pura satisfacción.

Entonces Ayumi recortó la distancia entre ambos y buscó con los ojos cerrados la boca de Conan. Él hizo lo mismo y se dieron un largo y romántico beso...

Entonces les sacó de su estado de éxtasis el reloj de la clase. Estaba sonando la campana. Eran las 7. Debían acabar su tarea y regresar pronto a sus casas o sus respectivas familias pronto se extrañarían...

Ayumi le dijo a Conan que quería repetirlo más a menudo y que desde ese día serían amigos con derecho a roce...

Conan se sentía extraño. Estaba como mareado. Seguramente habría gastado mucha energía en tirarse a Ayumi y ahora le faltaban fuerzas. Veía como borroso y oía con ciertas dificultades. ¿No habrá contraído ninguna enfermedad, verdad?

Se marchó lo más rápido que pudo a casa y se acostó sin cenar. Para no preocupar a Ran, dijo que había picado en la escuela y que no podía más. Dijo también que el sueño le consumía y que deseaba acostarse.

Mouri leía el periódico pero se detuvo a escuchar. Tanto él como Ran se sorprendieron, pero lo dejaron estar.

2º parte: La casa en la playa

Al día siguiente Conan aun se encontraba un poco revuelto, pero nuevo en comparación con el día anterior.

Ran se reservaba una sorpresa:

-"¡Hoy es el día en que me voy a reunir con mis antiguos amigos! Hemos quedado en la casa de Kotaru, que tienen sus padres una finca cerca de la playa."

¿Cómo es que Ran no le había dicho nada? Los antiguos amigos de Ran eran también los de Shinichi...

Claro que ahora él era Conan, no Shinichi. Por eso no sabía nada. Pero no había ningún problema, ya que Ran le dijo:

-"¿Quieres venir tú también, Conan?"

Quedarse todo el día solo con Mouri, ó fingir su papel de niño ante sus antiguos amigos...

-"¡¡Si, yo también voy!!"

Se fue a su cuarto y preparó la ropa imprescindible para un fin de semana; una muda de recambio, algunas camisas y ya que esa casa estaba al lado de la costa, un bañador y toalla. Lo metió todo en una pequeña maleta que Ran le proporcionó, y salieron ambos de casa.

El pobre de Mouri, sin comerlo ni beberlo, se iba a quedar solo todo el fin de semana.

-"Genial" Pensó él "Así podré leer mis revistas porno en cualquier lado, y no metido en el baño, cual vulgar adolescente pajero..."

Antes de irse, Conan pasó un momentito por su casa (la vivienda de Shinichi) para recoger algo de ropa nueva. Al llegar miró el buzón, sacó unas cuantas cartas y las metió en su mochila. Ya las leería luego. Recogió esa ropa y se fue a la parada del bus.

Ran estaba esperándole. Sus amigos vivían en lugares distintos, ya que al acabar el anterior curso, todos se mudaron con sus respectivas familias.

-"Oye, Ran, ¿Y cuántos seremos?" Preguntó Conan

-"Pues seremos tu y yo, desde luego, y creo recordar que habíamos quedado con mi amiga Miyako, a parte del anfitrión, Kotaru, claro"

-"¿Y no estará Tanaka?"

-"¡Sí! No me acordaba de... ¿Y tú cómo conoces a Tanaka?"

Ups, había metido la pata.

-"¡Es que te oí el otro día hablar de él con tus amigas...! ¡Je, je, je, je!"

¿El otro día ? ¿Cuándo? Pensó para si Ran. En fin, qué importaba.

-"Tambien estaría Sinichi, si no estuviera resolviendo ese caso tan complicado en el que está metido..."

Pero si estoy aquí, pensó Conan, poniendo cara de póquer cuando Ran no miraba...

-"Kotaru me contó cuando quedé con él que en su casa de la playa solo vivía el mayordomo, un hombre mayor. Su esposa vivía con él, pero hace unos años que falleció. Me dijo que el mayordomo decía que él también se iba morir pronto, pues era muy viejo. Yo nunca le he visto, así que no sé cuan viejo será..."

Así que seremos seis. Kotaru, Tanaka, Miyako, Ran, el mayordomo y yo. Pensaba Conan mientras escuchaba a Ran

-"Además, esa casa está a las afueras y no hay más viviendas cerca. El mayordomo debe coger el coche todos los días para ir a comprar al pueblo más cercano, que está a 8 km."

Comentaba Ran.

Tras una serie de paradas en las que subía y bajaba todo tipo de gente, el autobús llegó a la altura del mar. Se bajaron y cogieron otro bus, el que les llevaría a la casa de Kotaru.

En este bus iban completamente solos. Esto extrañó a Conan, así que mientras Ran miraba el paisaje, él se acercó al conductor para preguntarle:

-"Oiga, ¿Con qué frecuencia pasa este bus?"

-"¿Este? Habéis tenido suerte de cogerlo a tiempo, chicos. Esta línea sólo funciona el sábado. Va desde donde lo tomasteis hasta el pueblo al otro lado de la montaña, y por la poca demanda que tiene la línea, solo pasa uno a la semana..."

-"¿Uno solo?"

-"Si, hijo, eso he dicho. Uno en este sentido, y otro en el otro. No deberíamos tardar en verlo... ¡Ahí lo tienes!" El conductor señaló un bus que venía por el carril contrario. En él no había un alma, solo estaba el conductor.

-"¡Conan! ¡No molestes a este señor y mira el paisaje!" Ran agarró a Conan por la oreja y le arrastró a su asiento.

Tras aproximadamente media hora de marcha, llegaron por fin al sendero que les conducía a la casa de Kotaru.

Era ya tarde, y estaba empezando a anochecer.

En la casa había alguien asomado a la ventana. En cuanto Conan y Ran se acercaron, la figura abrió la ventana y se mostró.

-"¡¡Ehh!! ¡Aquí! ¡Hola Ran!"

Era Miyako, la amiga de Ran.

-"¡Miyako! ¡Hola!"

Ran fue corriendo la distancia que la separaba de la casa. Su amiga bajó a recivirla. Ambas se dieron un abrazo y empezaron a hablar de sus cosas, que qué tal te va, que a qué te dedicas, lo típico cuando ves a un buen amigo que llevabas años sin ver.

Conan no se dio tanta prisa, pues aunque Miyako era también amiga suya, ahora, como Conan, no le reconocería.

Observó el lugar. La costa hacía acto de presencia mediante el clásico ruido de las olas al romper en la orilla. Un sonido embriagador que relaja al más nervioso.

Con la casa en frente, a la izquierda había un bosque, del que parecía que provenían unos ruidos raros, y a la derecha un acantilado bastante pronunciado. Un pequeño embarcadero de troncos se metía en el mar desde la costa, abajo del acantilado. Ese embarcadero tenía pinta de no haber sido usado en años, pues la madera estaba podrida y daba la impresión de que se iba a desplomar en cualquier momento.

La casa era de estilo occidental, con un balcón enfocado hacia el mar. Tenía toda la pinta de ser una antigua mansión, y por los restos de andamios que Conan observó en una esquina, parecía haber sido restaurada recientemente...

Bueno, ya tendría tiempo de explorar el lugar más a fondo. Ahora, para no parecer descortés, se acercó a la entrada y se presentó a sus antiguos amigos, quienes, claro, no le reconocieron.

-"Este es Conan, un amigo mío. Está viviendo conmigo en mi casa, ya que sus padres están de viaje y nos pidieron que le cuidáramos este tiempo" Les dijo Ran a Miyako y al anfitrión, Kotaru, que había salido de la casa.

Al oír Kotaru que ese tal Conan vivía con Ran puso una mueca poca tranquilizadora en el rostro...

Entraron en la casa. Era enorme, muy limpia y decorada con un gusto exquisito. Realmente debió ser una mansión antaño, ya que los muebles, de estilo victoriano, remarcaban su antigüedad...

Kotaru les presentó al mayordomo:

-"Este es Pedro, el mayordomo"

-"¿Pedro? Ese nombre es occidental, ¿verdad?" Comentó Ran

-"Así es, señorita. Mi madre era europea y siempre quiso que su hijo llevara el nombre de su padre. Yo lo porto con orgullo."

Era un hombre anciano. Lucía una espesa barba blanca que le terminaba en punta, acompañada de un bigote también espeso. Unas gruesas cejas ocultaban totalmente los ojos. Quitando esas matas de pelo, el hombre era totalmente calvo. Así, a ojo, tendría unos 70 años...

Tanaka, el que faltaba apareció al rato. Dijo que había estado cortando unos árboles para traer algo de leña para el fuego.

-"Eso explica los golpes que oí antes" Pensó Conan.

Era ya muy tarde. La noche había caído y todo estaba a oscuras, fuera no había ningún tipo de luz, pues no había farolas y la luna estaba oculta tras unas nubes.

Conan estaba rendido. No podía ni mantener erguida la cabeza.

-"Estarás cansado por el viaje. Aún eres muy pequeño para haberte dado este viaje tan largo..." Le dijo Ran "Quizás debieras haberte quedado en casa"

-"No, estoy bien, en cuanto cena me iré a dormir y mañana estaré nuevo" Dijo Conan

Cenaron y Conan se metió en la cama. Verle subir las escaleras era muy curioso. No andaba recto, iba haciendo eses, como si estuviera borracho, y tenía la mirada perdida. Realmente parecía agotado...

Los demás se reunieron en el salón, en la planta baja, mientras Conan se fue a su cuarto, en la primera planta. Oyeron un ruido seco, como el de una puerta cerrarse de golpe, ó como el de alguien que se deja caer en la cama y toda esta bota.

El mayordomo se fue a la cocina, a limpiar los cacharros de la cena, y dijo que después se iría a dormir, que habían sido demasiadas emociones un mismo día para sus viejos huesos...

Estuvieron hasta algo más de la una hablando, recordando tiempos mejores y comentando lo que pensaban hacer en la vida.

Cuando el sueño se adueñó de la conversación, Kotaru propuso irse a la cama, que ya hablarían mañana.

Todos asintieron, pero Tanaka dijo que él quería dar un paseo por la playa, que no tenía sueño.

Ran se fue a su cuarto, pero antes miró en el de Conan. Éste estaba durmiendo, pero su cara reflejaba algo parecido a dolor ó angustia. Estaría teniendo una pesadilla. Iba a despertarle cuando este se cambió de postura, se acomodó y pasó a reflejar serenidad en el rostro. Ante tal cambio, Ran le dejo dormir...

Ella se metió en el cuarto y se puso el pijama. Echó un último vistazo al mar, ya que desde su ventana se veía perfectamente.

La luna había aparecido y la costa estaba algo iluminada.

Allí vio algo parecido a una figura, pero por la oscuridad, no distinguió bien. Sería Tanaka. Entonces vio que la figura se separaba en dos. Había alguien con él...

¡Que más dá! El sueño no la dejaba pensar correctamente, quizás fuera una alucinación.

Se metió en la cama y se tapó.

El problema era que ya había alguien ahí.

-"¿Quién anda ahí?" Preguntó asustada

Pero nadie contestó. El interruptor quedaba demasiado lejos, había que levantarse para encenderlo, pero quien fuera, estaba sujetando a Ran por la cintura. Aquellas manos pronto subieron a los pechos, buscando los pezones. Estos no pudieron resistir el roce de una mano ajena, y se pusieron duros al instante...

Algo crecía entre las piernas de aquel pervertido. Una polla encontró como pudo en el culo de Ran. Esta dio unos gritos de dolor, y que llevaban la intención secundaria de ver si alguien los oía y acudía en su auxilio...

Pero nadie venía.

El tipo ese puso a Ran a cuatro patas y la agarró de los hombros.

Aquel desconocido estaba rompiéndola el culo, y además, ella era virgen, por lo que si se le ocurría pasar a hacerlo por delante, el dolor de ser desvirgada por ambos agujeros iba a ser espectacular...

Pero cómo le estaba gustando...

Sus piernas se abrieron movidas por unos instintos primarios, facilitándole al tipo la penetración. Ran gemía de placer esta vez.

El hombre estaba muy callado, no se le oía ni respirar, pero de vez en cuando, algún pequeño quejido se le escapaba.

Aquella voz le resultaba a Ran extrañamente familiar...

De pronto, el hombre misterioso tiró de ella hacia atrás con fuerza. Ran estaba en vilo, el único punto que la unía con el suelo era la polla que sus carnes albergaban...

Una de las manos del desconocido encontró el pecho izquierdo, apretándolo y amasándolo como si de una masa se tratara, mientras con la otra mano, abría el coño de Ran, Preparándolo para lo que le esperaba. Aquel agujero nunca lo había tenido tan abierto, y Ran no resistió dar otro grito de dolor, que pronto se transformo en gemido de gusto...

El violador seguía taladrando su culo, hasta tal punto, que su polla se perdió de vista, totalmente oculta en el interior de Ran.

¿Pero por qué no la oía nadie? Fácil, su habitación estaba en una punta de la casa, y la más próxima, la de Conan, en el otro extremo. La habitación de al lado era la de Tanaka, pero este estaba aún en el paseo marítimo, y la de Kotaru estaba en la planta baja, debajo de la de Conan. EL mayordomo estaría dormido y no oiría nada...

Cuando el hombre consideró que el culo ya estaba lo bastante desgastado, se puso enfrente de Ran y metió de un solo golpe su polla por el coño de la chica. Esta sintió que le recorrían el cuerpo millones de escalofríos, y después una invasión de calor que la hizo tener su primer orgasmo.

Tras una serie de embestidas, cuando el chico notó que casi se corría, sacó la polla del coño y se la metió en la boca, donde no tardó en explotar. Pero Ran parecía haber sido entrenada en este arte, ya que no derramó ni una sola gota, pese a que a ella le parecían litros de semen los que le entraban en la boca...

Con el culo roto, el coño destrozado, y la garganta llena de líquido mágico, Ran no podía ni moverse, y mucho menos chillar.

El desconocido salió por la puerta del cuarto y desapareció en la oscuridad de la noche.

Ella se quedó sin poder moverse en su cama, y llorando por la sensación de impotencia al no poder defenderse, pese a ser una experta en karate. Y así, se quedó dormida...

3º parte: Ran ha sido violada

Los primeros rayos del sol entraron por un hueco entre las cortinas. Conan se despertó. ¡Qué noche, Dios mío! Parecía como si no hubiera dormido nada, pues el cansancio aún estaba albergado en él. Se levantó y se vistió.

Se miró en un espejo que había al fondo del cuarto. Tenía mal aspecto. Unas profundas ojeras estaban clavadas en las cuencas de sus ojos. Los pelos los tenía completamente alborotados y en general, parecía cansado.

Intentó recordar. Tenía la vaga impresión de haber soñado algo. Algo malo, que no permitía descansar. Pero también tenía la sensación de haber estado deambulando por los pasillos. Él no era sonámbulo, que supiera...

En fin, cuando se arregló un poco, decidió salir de la estancia e ir a buscar a Ran.

La puerta estaba abierta, así que él se asomó ligeramente, no fuera que Ran estuviera vistiéndose y al verle se enfadara.

La cama albergaba a alguien. Sería Ran, pero estaba tapada hasta la cabeza. Se acercó para mirarla con cuidado. En su cara había restos de lágrimas, pues unos churretes resecos en las mejillas indicaban claramente que había llorado.

-"Ran, ¡Ran! ¿Te encuentras bien?"

Ran oyó su voz y suavemente abrió los ojos. Miró a Conan, y al verle, sus ojos se volvieron a llenar de lagrimas.

-"¡Conan!" Dijo ella, lanzándose a los brazos del niño, pues buscaba desesperadamente consuelo.

Ella estaba completamente desnuda, pues tras la violación, no tuvo tiempo ni ganas de vestirse.

Conan quería por un lado preguntar que qué la pasaba, pero por otro, el contacto de esos desarrollados pechos con su, en comparación, diminuto cuerpo, estaba excitándolo, hasta el punto de que estaba sangrando por la nariz.

Las palabras se atascaban en su boca, pero Ran se le adelantó y fue ella la que le contó lo que pasaba:

-"¡Conan! ¡Alguien entró ayer en mi cuarto y... , y... , ¡¡me violó!! !

Conan estaba confuso. La excitación no le dejaba pensar con claridad, pero por lo que creía haber oído, Ran había sido violada. Recobrando la compostura, formó estas palabras:

-"¿Violada? Pero, ¿quién? ¿Y como...?"

-"No lo sé. ¡¡Apagué las luces y al meterme en la cama, había un hombre en ella!!"

-"¿Un hombre?"

-"¡Si! ¡Conan, debemos investigar quién fue y hacer que lo pague!"

Valla, valla. De la manera que él menos pensaba, se vio metido en un nuevo caso.

Ran sabía que él era un chico muy listo que en innumerables ocasiones había ayudado a la policía a resolver casos, de manera más o menos directa, así que él era el único que podía ayudarla. Además, tras tanto tiempo viviendo juntos, él era el único en que Ran confiaba (a parte de que él no era más que un niño y el que la violó era un hombre, luego Conan estaba libre de sospecha...)

Conan salió del cuarto antes de ella se diera cuenta de estaba desnuda.

Más tarde, Ran convocó a todos los inquilinos de la casa y les contó lo ocurrido. Como suele ocurrir en estos casos, todos pusieron caras de asombro e incredulidad.

Miyako era una mujer, luego ella estaba fuera de toda sospecha, y Conan un niño, luego los sospechosos se reducían a:

Kotaru, Tanaka y Pedro.

Conan debía investigar el caso, pero ninguno de los presentes aceptaría responder a preguntas incriminatorias, sobre todo si estas venían de un crío, así que se le ocurrió plantearlas preguntas como si no fueran más que curiosidades de un niño. Así quizás le respondieran.

Lo primero que hizo fue preguntarle a Ran si le había contado todo lo que sabía. Los demás se fueron a sus quehaceres diarios. Pedro a preparar la comida, Kotaru a limpiar y Tanaka a por más leña.

-"Ran, ¿No hay nada que pudieras haber olvidado contarme?" Le preguntó Conan.

-"No. Creo que te lo conté todo... No. Espera. Hay algo que quizás no sea nada, pero te lo contaré. Ayer por la noche, al acabar de hablar, Tanaka dijo que se iba a dar un paseo por la playa porque aún no tenía sueño. Todos los demás dijeron que se iban a la cama, pero desde mi cuarto, antes de acostarme, vi en la playa una figura que identifiqué como Tanaka, pero de pronto se separó en dos, como si hubiera alguien más con él..."

-"¿Eso es todo?"

-"Si"

Bien. Ese dato demuestra que Tanaka estaba despierto en la hora del crimen, y lo más probable es que hubiera alguien más con él...

Por otro lado, si estaba en la costa cuando Ran le vio desde su cuarto, él no pudo ser el violador, ya que sería imposible que hubiera subido a la casa tan rápido.

Pensando en esto, Conan se acercó a una ventana. Desde ella se veía el bosque al que Tanaka había ido a cortar leña. Entonces Miyako apareció en escena, Estaba mirando a todos los lados, como para asegurarse de que no la siguieran, y cuando estuvo segura de estar sola, se echó a correr por el sendero, hasta perderse de vista, dentro del bosque...

Que extraño, pensó Conan, ¿Por qué tantas prisas y esa fijación en que nadie la observe?

Definitivamente Miyako ocultaba algo.

Bueno, eso ya lo averiguaría luego. Ahora iba a interrogar al mayordomo.

Estaba en la cocina, cocinando.

Se acercó con cuidado a él y le preguntó, mintiéndole un poquito:

-"Señor Pedro, ayer por la noche tuve hambre por no haber cenado y salí a buscarle para ver si podía prepararme algo, pero no supe encontrar su habitación..."

-"No me extraña que no la encontraras, chico, mira, está por aquella puerta" dijo señalando a una puerta medio escondida detrás de la nevera "Aunque si la hubieras encontrado, no creo que te hubiera podido ayudar mucho, pues por la noche desconecto mi audífono y estoy completamente sordo. Además, tengo un sueño muy profundo y te hubiera costado varias horas despertarme, ¡Je, je, je!"

Vale. Otro sospechoso fuera. El bueno de Pedro estaba completamente sordo por haberse quitado el audífono y si lo que decía era cierto, no habría estado despierto cuando el crimen ocurrió. Además, Pedro era un anciano, y seguramente no tendría fuerzas para soportar el sexo, y según le dijo Ran, el hombre era lo bastante fuerte para de la impresión, no haberse podido defender. Si hubiera sido Pedro, lo más probable es que le hubiera tumbado de un golpe...

Solo quedaba un sospechoso, Kotaru. Y también había que aclarar quien era esa otra persona que vio Ran.

Pero esta última tarea fue más fácil de resolver de lo que Conan pensaba.

Al ir hacia el salón para interrogar a Kotaru y tratar de encontrar algún tipo de prueba incriminatoria, se tropezó con Miyako y con Tanaka, que volvían del bosque. Nadie dijo nada, pero Conan observó que Tanaka llevaba carmín en los labios y en la cara, que curiosamente coincidía con el color que Miyako llevaba en los labios. Por último, ambos iban más bien mal vestidos, como si se hubieran vestido deprisa y corriendo.

Estaba más que claro.

Conan prosiguió se investigación y buscó a Kotaru. Este estaba en una sala de estar, limpiando, pero lo que limpiaba no era precisamente un mueble. Estaba con la polla al aire y haciéndose una paja. Él estaba de espaldas a la puerta en la que se encontraba Conan, así que este no vio el instrumento de Kotaru. Menos mal, porque de haberlo visto, lo más probable es que vomitara...

Se escondió detrás de la puerta, asomando solo lo justo para poder oír lo que decía. Las palabras de Kotaru cortaron la respiración a Conan:

-"¡Si!¡¡SI!!¡Conan! ¡Déjame metertela por ese tierno culito que tienes! ¡Así, eso es!"

¡¡Kotaru se estaba masturbando pensando en él!!. La boca se le llenó de ácidos intestinales y salió corriendo al baño, para vomitar a gusto.

Cuando se tranquilizó, trató de recordar. Kotaru resultó ser marica, y además de eso, era un pederasta, ¡Cómo podía estar imaginándose esas cosas con un niño!¡¡QUÉ ASCO!!

Un nuevo vomito le vino.

Pasado un rato, trató de hacer una síntesis de la información obtenida.

Sorprendente. Todos los sospechosos estaban libres de sospecha. ¿Quién fue entonces? De pronto cayó en la cuenta de que había alguien que se le había olvidado. Shinichi Kudo.

4º parte: El violador es...

Llegada la noche, se reunieron todos en el salón. La ocasión para revelar quién fue el culpable se había presentado.

Estaban todos sentados, así que Conan aprovechó para escabullirse detrás de Pedro sin que le vieran. Él era el mejor para el teatro que tenía preparado.

Se situó detrás de él, le paralizó con un dispositivo especial de su reloj, regalo del profesor Agase, ajustó su pajarita para imitar la voz del anciano, y comenzó su discurso:

-"Creo que ha llegado el momento de revelaros mis investigaciones. Sé a ciencia cierta, quién es el violador"

Todos se quedaron atónitos. Ninguno esperaba que Pedro resolviera el caso, incluso algunos dudaban de la veracidad de sus palabras.

-"Iré explicando por qué cada uno de ustedes no es el culpable para al final desvelar el misterio."

-"Usted, señor Tanaka no es el violador porque tenemos un testigo que le vio en las afueras de la casa instantes antes de que el crimen aconteciera, siendo imposible que se presentara en el cuarto de la señorita Ran en tan poco tiempo. Además, creo que usted no estuvo solo esa noche, ¿me equivoco?"

-"No. No se equivoca. Esa noche no estuve solo. Me acompañaba..."

-"La señorita Miyako" Dijo Conan a trabes de la pajarita. "No se piensen que mis viejos ojos son ciegos. Pese a tenerlos ocultos tras esta mata de pelo que tengo en las cejas, esta mañana los vi a ambos regresar del bosque, con claros síntomas de que se habían estado besando. O quizás incluso, haciendo algo más, ¿no es así?"

-"Si" Dijo Miyako. "Tanaka y yo somos novios desde hace varios años, pero no se lo dijimos a nadie porque sabíamos que ustedes se sorprenderían, ya que en el colegio estábamos siempre peleándonos, y no queríamos ser los hazme-reír de la reunión..."

-"Del odio al amor hay solo un paso, señorita" Comentó Conan. " obviamente, usted, al ser mujer, no pudo violar a Ran, luego ambos son inocentes."

-"Usted, Señorito Kotaru, tampoco es el violador. Llevo con usted demasiados años como para no haberme dado cuenta antes. Usted es homosexual, ¿cierto?"

Todos giraron las cabezas mirando asombrados a Kotaru, quien no pudo evitar ponerse rojo cual tomate.

-"Usted no pudo ser el violador pese a ser hombre porque no hubiera obtenido ningún placer por hacerlo" Prosiguió Conan.

-"En cuanto a mí, llevo años sin tener erecciones y me hubiera sido totalmente imposible haber violado a una señorita tan fuerte como Ran. Entenderán que por mi edad me era imposible haber sido yo, ¿verdad?"

Los oyentes analizaron la situación y comprendieron que a un anciano le hubiera sido imposible poder con Ran.

-"Pero entonces, todos los hombres de la casa están limpios, según usted, solo queda el joven Conan" Comentó Miyako

-"Calma, mi querida niña, es usted muy impaciente. Conan no creo que haya podido violar a Ran por varios motivos. El primero y más evidente es que es un niño, no puede tener deseos carnales tan joven. El segundo, Ran dijo que el violador era de complexión fuerte. Comprenderán que un niño no encaja en tal descripción. Además, Conan es más bien pequeño, luego a nada que Ran hubiera palpado un poco, habría adivinado en seguida que era un niño..." Esto último le dolió decirlo, pero era la verdad.

-"Pues diga ya de una vez quien fue" Ordenó Ran

-"Yo les envié las invitaciones a cada uno de ustedes, y al llegar aquí me las devolvieron, pero hay una persona a quien envié invitación y no está entre los presentes"

-"¿¡QUIEN?!" Se estaban impacientando.

-"El violador es... Shinichi Kudo"

-"¡¡Qué??, ¡Viejo estúpido, Shinichi no está aquí! ¡Se encuentra resolviendo un caso dificilísimo!"

Ahí Conan hizo algo de trampa para explicar por qué era él el violador. (recordemos que Conan y Shinichi son la misma persona)

-"Pues si el señor Kudo no estuvo aquí, ¿cómo me explican ustedes que yo tenga en mi poder su invitación? Vean el resguardo de correos que prueba que envié dicha carta"

Conan movía los brazos de Pedro desde detrás del sillón. En una mano estaban el resguardo de correos y en la otra una invitación abierta. Naturalmente, la invitación estaba entre las cartas que recogió del buzón de su casa la mañana que vinieron a esta casa...

-"Shinichi llegó la noche en cuestión y venía algo borracho. Me dijo que se iba a dormir y que mañana se encontraría con el resto. Pero yo creo que fue él el violador. Entró en la habitación de Ran, quizás por error, y al encontrarse con una mujer en la cama, obedeció a sus instintos primarios."

-"Otra prueba contra él es que esta mañana, al levantarme temprano, el tal Shinichi se estaba yendo de la casa, a toda prisa, muy asustado, como si ahora fuera consciente de lo que había hecho"

Ya estaba hecho.

Todos los presentes parecían convencidos. Ran estaba furiosa y refunfuñaba por lo bajo que cuando volviera a ver a Shinichi, le iba a matar...

Esto ocurrió por la noche, pero por la tarde del mismo día, Conan sintetizó todos los datos. Recordó que, en cierta ocasión, estando en los primeros compases de un catarro, le dieron a beber alcohol, y se cuerpo reaccionó anulando momentáneamente los efectos del veneno que le había encogido. Se lo contó a Agase y él le dijo que había pasado aquello porque su cuerpo de niño nunca antes había experimentado el ingerir alcohol, y que por eso el cambio. Pero tras la primera vez, por mucho alcohol que bebiera, el efecto no volvía a aparecer. Era porque ya se había adaptado al licor.

Entonces recordó que el día anterior a venir de viaje, Ayumi y él habían tenido relaciones sexuales. Igual que ante el licor, su cuerpo reaccionó devolviéndolo a su forma original, la de adulto. Pero la diferencia estaba en que esa noche no fue capaz de controlar sus instintos, y guiado por su polla, viola a la primera mujer que encontró. Ran.

No cabía otra explicación posible, así tras inventarse un par de cosillas, decidió revelar sus descubrimientos a los demás, tal y como acabáis de leer.

A la mañana siguiente, esta vez, tras una noche de dormir bien y a pata suelta, se fuero al pueblo en el coche de Pedro. El pobre no recordaba nada de lo sucedido (Conan le había paralizado)

Una vez allí, se despidieron. Kotaru se quedó en su casa, y Miyako y Tanaka, esta vez, agarrados por los hombros, cual buena pareja de enamorados, sin la necesidad de ocultar su amor, se marcharon juntos, mientras Ran y Conan volvían a su casa.

Por el camino, Ran parecía furiosa, como enfadada con el hombre al que amaba. Pero por el camino, a Conan le pareció oírla decir algo así como:

-"Shinichi, vuelve pronto. Estoy deseando hacerlo de nuevo."

FIN

Agradecimientos:

Este relato no habría sido escrito si mi buen amigo V. (ha querido permanecer en el anonimato) no me hubiera introducido en el mundo del manga Detective Conan. Él es el culpable de que escribiera este relato inspirado en esos personajes.

También le debo dar las gracias a Remmzugo, (otra vez) ya que las imágenes con las que he adornado el relato fueron mi fuente de inspiración. Gracias

La siguiente persona sin cuya participación este relato no hubiera cuajado, es mi querida hermana. Ella es la que inventó el final de la trama y la que me ayudó a enlazarlo todo.

Por último, quiero dar las gracias a todos los que se molestaron en leer este texto. Gracias a todos.