Doce centímetros de tacón de aguja soportaban ese impresionante y escultural cuerpo.
Unas larguísimas piernas, perfectas, definidas, femeninas, cubiertas con unos pantys de rejilla negra, hacían las delicias de quien las miraba.
Una minúscula falda de cuero negro, se ajustaba milimétricamente a sus caderas,.
Bajo el top rojo pasión se adivinaba un vientre plano y dejaban adivinar sin pudor unos enormes pechos turgentes, cubiertos por un sujetador de encaje negro que asomaba descaradamente por encima de la corta camiseta.
Era pelirroja, de melena abundante y ondulada, de tez nívea y ojos almendrados.
-"¿cómo te llamas?.-preguntó él.
-"como desees"_contestó ella.
Todos miraban.
No era mujer que pasara desapercibida. Pese a su atuendo no resultaba ordinaria, si no, sexi tentadora vestía como cualquier joven de 23 años.
Llevaba practicando la prostitucion al menos desde hacía seis años.
-"yo me llamo Gonzalo".
Ella se limitó a sonreír.
De su diminuto bolso de piel, sacó una pitillera dorada, cogió un cigarrillo y esperó paciente a que Gonzalo le ofreciera fuego.
Una vez encendido el pitillo, exhaló varias veces, mientras observaba a ese hombre.
Cincuentón, de pelo cano, ojos de un azul intenso, sonrisa franca, dentadura perfecta, modales refinados y elegancia innata.
Sin duda, tenía clase y dinero. Se olía.
-"¿?tomas algo?¿ _preguntó al ver que el camarero se acercaba a su mesa.
_"un Martini blanco, gracias".
_"para mi un whisky"_ dijo con seguridad al camarero.
Hubo un silencio un tanto espeso para el.
Ella, simplemente, esperaba.
-"eres preciosa"_ se escuchó decir_"realmente bonita, pero aun no sé como llamarte".
-"tu pagas ._dijo con esa voz tan seductora_ por tanto tu decides llámame como te plazca con el nombre de tu madre o de tu hermana, de la primera novia o de tu mujer, eso me da lo mismo"
Gonzalo la miró realmente interesado.
Los gestos de la chica eran cándidos,, estudiados, manteniendo la compostura pero sin llegar a un acercamiento.
Estaba claro que en la relación de una prostituta y un cliente no iba a encontrar complicidad o naturalidad, pero era casi cómico ver como una jovencita intentaba mantenerse impasible mientras comercializaba con su cuerpo y su tiempo.
_"Sandra" "te llamaré Sandra quieres saber por qué?."
Se arrepintió de la pregunta antes de finalizarla.
Sabía que a ella le daría igual
El silencio de la muchacha se lo confirmó.
A el le hubiera gustado explicarle, que Sandra le parecía un nombre muy femenino, muy sensual y que lo que veía en ella era sensualidad y feminidad.
Algo azorado, preguntó si deseaba otra bebida, lo que ella rechazó amablemente.
-"en ese caso será mejor que nos marchemos ya ".
Gonzalo pagó la cuenta e invitó a Sandra a levantarse y seguirle hasta el coche.
No pudo evitar observar como a su paso, los hombres se fijaban en ella.
Hicieron un corto trayecto hasta el pisito que Gonzalo usaba para sus escarceos sexuales, fuera del ámbito familiar.
El apartamento era muy masculino; ordenado, discreto, impoluto.
Le ofreció una bebida y ella rechazó la oferta mientras miraba como el se servía otro whisky.
Observó también como se desprendía de la americana y se aflojaba la corbata.
-"Sandra...me gustaría ver como te duchas "
Le sorprendió la petición. Lo de la ducha era algo nuevo.
-"quiero ver como el agua resbala por tu cuerpo".
Ella se fue despojando lentamente de sus prendas, sabiendo que Gonzalo no desviaba sus ojos del cuerpo que iba desprendiéndose de la ropa.
Primero se quitó el top rojo, dejando a la vista un precioso sujetador negro de encaje transparente; bajo la insinuante tela, se podían adivinar un par de generosos pechos.
Después, muy despacio, se desprendió de la minúscula falda de cuero. Al hacerlo, movía la cadera haciéndola bailar insinuantemente hasta que cayó a la altura de los tobillos.
Ante el, quedó una escultural belleza de blanca piel, en ropa interior negra, con unas medias de rejilla que la hacían más sexi si cabe.
Le llegaban hasta el muslo, y eran del mismo negro que el triangulo semitransparente que cubría su pubis.
-"quiero que te metas en la ducha tal como estas, incluido los zapatos, no te preocupes, te los pagaré también".
Dijo esto mientras la guiaba hasta el enorme baño del que disponía el apartamento.
Abrió el grifo de la ducha mientras el se acomodaba frente a ella.
El asombroso bulto que asomaba bajo el pantalón, delataba una incipiente erección bajo ellos.
Sandra se colocó bajo la alcachofa de la ducha dejando caer el chorro de agua por su cabello y su cuerpo .
Sentía como la telilla del sujetador se pegaba a sus pechos y marcaban, descarada, sus pezones.
Sabiéndose observada, acariciaba sus pechos con sensualidad y lujuria mientras los enjabonaba.
Hizo lo mismo también con el tanga, jugando con los dedos por encima de la tela, sabiendo que su raja se marcaba bajo la tela.
Gonzalo disfrutaba del espectáculo sin perder detalle.
Su excitación era evidente, y acariciaba su bulto sin recato frente a la muchacha.
-"cierra el grifo, preciosa voy a enjabonarte".
Se acercaba a ella mientras volcaba jabón líquido en la palma de su mano.
Con ella, comenzó a acariciar el cuerpo mojado de su puta; lo hacía sin prisa, con dedicación plena y con deleite.
Comenzó por su melena..Introducía los dedos entre el rojizo cabello de la muchacha masajeaba el cuello cabelludo hasta formar una densa espuma bajó a los hombros en un dulce baile de dedos, frotó su espalda con la palma abierta.
Llegó a su trasero, que acariciaba por encima de la tela, recorrió sus larguísimas piernas y la giró después para comenzar nuevamente.
Enjabonó sus pechos, los amasaba dulcemente, los masajeaba y acariciaba los erectos pezones suaves, acarició igualmente su vientre, bajó hasta su pubis, comenzó a masajearlo por encima de la tela, ella abrió las piernas instintivamente.
Ese hombre sabía hacerla gozar
Introdujo sus enjabonados dedos para acariciar directamente su raja encontró su clítoris endurecido y comienzo a masajearlo mientras introducía un par de dedos de la otra mano
Ella se mordía los labios, no quería dejar escapar ningún gemido no deseaba correrse ,pero no pudo evitarlo ..la ternura y delicadeza con la que era acariciada ,la encendió y la excitó.
Pero los espasmos llegaron sin poder contenerlos ..se puso rígida unos segundos y tuvo una tremenda corrida mientras los dedos de Gonzalo la estaban follando.
El se dio cuenta y sonrió satisfecho; pocas putas disfrutaban trabajando!.
-"sal de la ducha y quítate todo. Quiero que me hagas disfrutar y que disfrutes aun que te pague por ello".
Ambos se dirigieron al salón, donde el se recostó en un butacón individual de cuero y ordenó:
-"desnúdame y mámamela".
Ella hizo lo que pedía.
Humildemente le despojó de sus zapatos, desabrochó su pantalón y le quitó los pantalones ..
Después se deshizo del boxer, dejando a la vista una gruesa polla, no excesivamente grande, pero tremendamente erecta.
Comenzó a lamer con dulzura el glande, pasaba su lengua con destreza, sin prisa, dedicándole toda la atención a modo de agradecimiento por el orgasmo que poco antes le había proporcionado.
-"hummm....... _se le oía decir a el_ asiiiiiiii .voy a follarte la boca, putilla ."
Agarró su melena mojada y empujó con fuerza su cabeza, para que se introdujera todo su falo ..
Así lo hizo, para deleite de Gonzalo.
Mamaba con experiencia, y la saliva resbalaba por todo el tronco.
Después, con sensualidad recogía la baba y recorría de nuevo el tronco y se introducía la polla en la boca, mientras jugaba con la lengua con ella dentro.
-"para, preciosa para o me correré en tu boca".
Ella levantó la cabeza sonriente, por el cumplido.
-"dime, amor qué deseas ahora?"-preguntó ella, sumisa.
-"méame en la cara".
La cara de sorpresa de ella debió ser muy cómica, por que el rió nervioso y algo cortado ante la petición.
Gonzalo se tumbó en el suelo y abrió la boca esperando el líquido dorado de la puta
Ella se colocó en cuclillas ante su original orinal y tras unos segundos comenzó a llenarle la boca de orina que el dejaba desbordar por la comisura de los labios
Sus ojos dejaban adivinar que estaba al borde del orgasmo .frotaba su pecho con el caliente líquido mientras gemía de placer.
Sentir el cálido liquido en su boca, tener semejante cochito de oro tan cerca le estaba volviendo loco!!!.
Cuando ella terminó su meada, el quiso pasarle la lengua por su pelirrojo chochete para exprimir hasta la ultima gota .
-"muy buena meada, zorrilla ahora quiero que te la claves dentro".
Ella se sentó encima de el .jamás en el tiempo que ejercía de puta nadie le había pedido semejante cosa y la verdad es que estaba por igual, sorprendida y excitada!
Clavó su estaca hasta lo más profundo de su coño .
Estaba excitada, desconcertada .pero sobre todo, muy, muy caliente.
Lo estaba montando sin apenas contacto físico y estaba a punto de tener otro descomunal orgasmo.
-"eso es, perrilla, cabalga así, clávatela ."- decía el mientras la ayudaba agarrando sus caderas y empujándola hacia abajo!.
La muy puta sabía moverse
-"córrete guarra, quiero pagarte por ver como te corres".
En dos furiosas embestidas más, Sandra comenzó a sentir como un orgasmo tremendo se apoderaba de su cuerpo.
Se estremecía todo su cuerpo en una descarga electrica placentera.
-¡ahhhhhhhh.siiiiii me cooooooooooooorrrrrrrrrrrroooooooooooo"._atinó a decir de nuevo la chica
El la levantó en volandas para desacoplarla y tumbarla bajo el
Gonzalo comenzó a orinar entre sus tetazas, para correrse seguidamente en su cara.
La corrida fue descomunal, tremenda la llenó de leche que ella recibía golosamente.
-"ohhhhh. siiiiiii"_ decía el entre jadeos _" siiiiiiii, toma ..puta toma me corrooooooooo".
Después, se dejó caer sobre ella, mientras frotaba su cuerpo entre la piel de ella y su propia orina, y lamia su corrida de la cara de la muchacha, como si de un dulce de leche se tratara.
Mientras lo hacía, volvía a empalmarse como un quinceañero
Levantó las piernas de la chiquilla y las colocó en sus hombros para encularla sin miramientos!.
Introdujo su gruesa polla de una sola embestida, y mientras comenzaba el mete saca; amasaba las tetas de Andrea como si la vida le fuese en ello!!!
La montaba por el culo sin mucho miramiento, pero ella gemía como loca
-"siiiiiiii ..gonzalito , me matas amorrrr"
En dos minutos, sintió que el culo se le llenaba de un cálido liquido y supo que su cliente se había corrido dentro de el
Gonzalo comenzó a golpear con sutileza, pero delicadamente el clítoris de ella, lo que hizo que el orgasmo comenzara casi al unísono que el suyo
Exhausto y reventado, agotado y sudoroso, se dejó caer al lado de la muchacha .
-"niña, eres un cochito de lujo ."-atinó a decir el.
-"gracias guapo .clientes como tu, merecen la pena por que ser puta, no significa no disfrutar del oficio!"