miprimita.com

Convertida en puta para salvar a mi familia 1

en No Consentido

CAPÍTULO 1

 

Mi familia tenía una tienda en el pueblo, desde ella accedíamos a nuestra casa que estaba en el piso superior. En un pueblo pequeño era la única tienda en que se podía comprar un poco de todo, desde comida, pan, leche, fruta, productos de limpieza, de aseo, licores, cpmo un mini supermercado. Eramos muy felices, yo acababa de terminar la carrera de administración de empresas, y empecé a llevar la contabilidad del negocio familiar.

Mi padre se llama Aurelio, mi madre Mercedes y mi hermano pequeño de 12 años se llama Lucas.

Por cierto mi nombre es Andrea. Soy una chica rubia con el pelo rizado y largo, tengo los ojos azules, mido 1,75 y estoy delgada, siempre me han dicho que soy muy guapa y en varias ocasiones me han elegido Miss en las fiestas del pueblo.

Tenía también a mi prometido Javier, queríamos casarnos, formar una familia, irnos a una ciudad grande para abrir nuestro propio negocio. El es ingeniero informático y queríamos montar una asesoría contable y tambien algo relacionado con los ordenadores, no lo teníamos muy claro pero teníamos muchas ganas de emprender nuestro propio camino.

Pero esos sueños no durarían mucho tiempo.

Un día, estaba yo sola en la tienda, entró en la tienda un hombre, de unos 40 años, moreno con algunas canas, muy atractivo, alto, parecía un modelo de lo guapo que era, llevaba unas gafas negras, se acercó al mostrador donde estaba yo, se quitó las gafas, y me miró de arriba abajo, parecía que me desnudaba con la mirada, me sonrió y me pidió una botella de coñac.

Cuando se la vendí, me dio las gracias, se quedó un rato callado y yo le dije:

- ¿Desea algo más señor?

- Si

- ¿Y que quiere?

- Acercate y te lo diré al oido.

- ¿Disculpe?

- Ya veo...

En ese momento, pasó dentro del mostrador, se me acerco y me dijo al oido...

- Eres una chica muy guapa

- ¡Salga del mostrador señor!

- Lo haré, pero antes (dijo acercandose más,hasta llegar a mi oido) te diré, que si por mi fuera ahora mismo te follaría como a una perra.

- ¡Suelteme! (grité al sentir que me tocaba el culo, luego le di una buena bofetada) ¡marchesé o llamaré a la policía!

- Ya me voy, pero te advierto que esa bofetada te va a salir muy cara.

El hombre se marchó, yo me quedé destrás del mostrador no sabía como reaccionar, trate de calmarme bebiendo un poco de agua, luego entró Javier,  y eso me tranquilizó.

Decidí dejarlo pasar y no contarselo a nadie.

Pasaron varios meses de aquello y ya se me había olvidado por completo, Javier y yo estabamos a punto de irnos  Madrid a vivir, lo teníamos todo preparado, incluso estabamos a punto de dar una señal para alquilar un piso.

Una noche estabamos a punto de cerrar la tienda, mis padres estaban abajo terminando de colocar y limpiar todo. Javier, mi hermano y yo estabamos arriba en casa viendo la televisión.

Cuando mi padre estaba a punto de echar el cierre, 4 hombres entraron en la tienda, mi padre les advitiró que estaba cerrado, pero no le hicieron caso y entraron.

Los cuatro sacaron una pistola, y le dijeron a mi padre que cerrara la tienda. Mi padre les dijo...

- Por favor, llevense lo que quieran, pero marchensé.

- Eso vamos a hacer y si se portan bien nadie saldrá herido. - respondió uno de ellos.

- ¿Que es lo que quieren? - preguntó mi madre.

- ¿Estan ustedes solos?- preguntó otro hombre

- Si, estamos solos (dijo mi padre para tratar de protegernos) no hay nadie más.

- Zeto y Soria ¡Comprobadlo! - Ordenó el que parecía ser el jefe.

Los hombres, revisaron la tienda y uno de ellos se percató de la puerta que conducía a la parte de arriba, dos de ellos subieron y llegaron hasta donde estabamos nosotros.

Nos levantamos, y puse a mi hermano detrás de mi, aquellos hombres sin pensarlo, nos apuntaron con la pistola y nos ordenaron bajar a la tienda. Estabamos muy asustados, no sabíamos lo que iba a pasar.

Cuando estabamos abajo, uno de los hombres me cogió del brazo, me llevó hasta su jefe y dijo..

- ¿Es esta la chica Marcelo? -

- Espera que saco la foto Barrios - respondió Marcelo, el jefe, sacó de la cazadora una foto y en ella aparecía yo - si, esta es.

En ese momento Marcelo sacó el movil y llamo...

- Señor, ya tenemos a la chica ¿que hacemos con ella?

Marcelo puso el manos libres..

- Darle un escarmiento y después me la traeis - respondió el que estaba al otro lado del teléfono, cuya voz me resultaba familiar aunque no recordaba de que.

- ¿Que narices estais haciendo?- Preguntó mi padre - ¿Que le vais a hacer a mi hija?

- ¡Soltadla ahora mismo cabrones! - gritó Javier al ver que dos de ellos me cogían de los brazos y me llevaban al piso de arriba.

Marcelo apuntó a mi padre con la pistola y le golpeo..

- ¡No!- grité - ¡Papá!

- ¡Vamos subidla arriba! Zeto luego bajas y subo yo y te quedas aquí con Barrios para que el resto no nos molesten.

Me subieron arriba, buscaron el dormitorio de mis padres y luego Zeto bajó y se quedó conmigo Soria que no dejaba de apuntarme con la pistola y al poco rato subió Marcelo.

- Bueno preciosa, te vamos a dar dos opciones, la primera os matamos a todos - dijo Marcelo

- ¡No por favor!- supliqué

- ¡Callate! la segunda opción es que hagas todo lo que te pidamos sin rechistar, si lo haces tu familia vivirá. ¿De acuerdo?

- ¿Pero que tengo que hacer?

- Ahora lo veras, y recuerda que si te niegas a algo empezaremos a matar a tu familia-

Los que estaban abajo ataron y amordazaron a mi familia y a Javier, y les amenzaron con matarme si se les ocurria internar cualquier cosa.

Subieron, y ya entonces estaban los 4 en la habitación.

- Venga, ¡quitate la ropa!

- ¿Que?

- Zeto parece que no quiere hacerlo, ve a matar a alguno

- ¡No! ¡no! esta bien, me la quito ¡ pero no mateis a nadie!

- Bien, buana chica.

Me desnude, y despues esos cabrones se desnudaron también. Empezaron a tocarme las tetas con fuerza, me besaban, me metían la lengua en la boca, y empezaron a meterme mano por el coño y también por el culo, mientras unos hacían eso los otros me tocaban las tetas y me metían la lengua en la boca, me masturbaban con mucha fuerza, aunque por un lado me asqueaba lo que me hacian, no podía evitar excitarme, y cuanto más gritaba más excitados se ponían, me hicieron ponerme de rodillas y me obligaron a chupar sus pollas, me agarraban fuerte del cuello y me cogían fuerte del pelo y me forzaban a que se las chupara más deprisa, luego Marcelo me puso de pié, y mientras dos me obligaban a pajearles, otro me metía la polla en la boca y Marcelo empezó a meterme su gran polla por detrás por el coño, me hacía incluso daño y cada vez me la metía más deprisa.

- ¡ Uff que coño más jugoso tienes perra!- gritaba mientras me la metía fuertemente

Empezó también a meterme un dedo por el ano

- Que cerradito lo tienes ¿nunca te la han metido por el culo eh?

En ese momento se me empezaron a saltar las lágrimas, y eso les excitaba más

- ¡Que bien puta voy a estrenar tu culito!

Sin contemplación me la metió por el culo, sentí un dolor muy grande, no me lo había preparado ni nada, incluso empece a sangrar y eso le puso tan cachondo que empezó a metermela con mucha intensidad.

Luego paró y me la volvió a meter por el ooño

- Me voy a correr dentro de ti perra para que me sientas bien.

Empezó a meterla cada vez más fuerte y rápido y se corrió en mi coño, y luego los otros se turnaron y empezaron a metermela por el coño y por el culo, y mientras seguían turnandose para que les pajeara y se la chupara, finalmente empezaron a correrse, uno de ellos dentro de mi culo y los otros dentro de mi boca y me obligaron a tragarme el semen y a que se las limpiara.

- Bueno puta nos has hecho pasar un rato estupendo

- ¡Hijos de puta!

- Ja Ja Ja ¡esto no es nada en comparación con lo que te espera!

- ¿Que? ¿Que me vais a hacer?

- Nosotros ya nada preciosa, venga duchate y visteté te vienes con nosotros

- ¿Que? ¿a donde?

- ¡No hagas preguntas perra, te vas a venir con nosotros sin rechistar o si no mataremos a tu familia! ¿Entendido?

- ¿Por qué me haceis esto?

- ¡Te he dicho que no hagar preguntas! ¡Obedece! o ¿prefieres que empecemos a matar?

- ¡no por favor! obedeceré pero no hagais nada a mi familia

- Buena chica. Te esperamos abajo, no cojas nada, no te va a hacer falta.

No me quedó otra que obedecer, me duché, me vestí, todo en presencia de ellos que no me dejaban sola ni un segundo, luego bajamos abajo y tuve que despedirme de mi familia.

Ellos les amenazaron con matarme si se les ocurria llamar a la policiía o intentar algo, les desataron y me agarraron de los brazos y ni siguiera me dejaron darles un ultimo abrazo, les dijeron que no me volvería a ver nunca más y que les estarían vigilando para comprobar que no contactaban con nadie par intentar rescatarme.

Empezaba para mi un infierno de vida, yo no sabía lo que iban a hacerme, ni donde me iban a llevar, lo que si sabía es que era la última vez que vería a mi familia.

Continuara...

 

En el próximo capítulo a Andrea la convierten en puta en contra de su voluntad.

 

Espero que os haya gustado este primer capítulo...

 

Saludos...