miprimita.com

Soy tu putita y te voy a follar..

en Hetero: General

Jose Antonio va a viajar a España, ya lleva varios meses en Paraguay, será un viaje corto pero nos vamos a dedicar un día para nosotros.

Nuestras conversaciones si ya de por sí, son subiditas de tono ahora que se acerca la fecha de su viaje ¡estamos que nos agarramos a las cortinas!

Le mande unas fotos muy sensuales y sugerentes diciéndole que ese vestido seria lo único que llevaría ese día.

Es un vestido negro  tipo años cincuenta, un poco pin up, con unos lacitos en cada lado de los pechos en la parte de arriba. La tela es fina y se amolda a la piel, me lo probé con el sujetador abierto y se marcan perfectamente los pezones, los senos se ven bien redondos, es más que sugerente.

 La parte de la falda no me gusta tanto es tipo campana. Pero nadie mirara la falda con ese par de tetas que pongo por delante.

Lo bueno que tiene a parte de marcar incluso las aureolas es que apartando un poco la tela puedes destapar los pechos.

¡Por eso lo compre!

En mi conversación con el le sugerí que podríamos empezar el magreo en el ascensor nada más vernos.

Ya que conversaciones hemos tenido muchas…

Esta tarde hablando por teléfono me dijo tantas cosas que me dejo en una nube.

- quiero sacar el chico malote que llevas dentro

- Podemos hacer todo lo que nos guste y se nos ocurra siempre que estemos de acuerdo los dos, imaginación me sobra y a ti también.

-         Me he pasado la mañana con ganas de ti

-         Ya pienso en meterte mano en el ascensor,

-         Podemos ser unos amantes tremendos, sin miedos, sin tabúes, solo disfrutar el uno del otro, dando rienda suelta a nuestras fantasías ¿te apuntas?

-         ¡Claro que me apunto!

Vas a ser mi putita…con clase, eso sí.

Y siempre con respeto, en cuanto llegue te voy a follar bien follada…

-         Me he puesto el vestido, me estoy acariciando mientras me hablas…

-         Mmm me va a encantar apretar tus nalgas mientras me cabalgas…

-         hazme lo que tú quieras

-         lo que yo quiero es echarte unos buenos polvos y que disfrutemos mucho

-         mmm siiiiiii lo estoy deseando…

-         eres una mujer para tratarla como una reina, follarla como una puta y tenerla cachonda siempre, en la mente y en la cama…hay que ser muy tonto para no darse cuenta…

Estoy deseando ponerte cachonda en todos los sentidos…que tu vida sea una jodida y maravillosa aventura de conocimiento, sexo, experiencias, amor, risas, una verdadera experiencia de vida…

Cada vez que pienso en ti, no me cuesta nada empalmarme, espero poder disfrutar ese cuerpo que tienes porque a mí me ponen las mujeres con curvas y tu además tienes clase…

Te tengo muchas ganas, la próxima vez que nos veamos me voy a dedicar a disfrutar cada centímetro de tu piel…te voy a comer el coño como si me estuviese comiendo una fruta madura y jugosa, voy a pasar mis dedos por cada centímetro de tu cuerpo.

Me voy a dejar llevar hasta donde me lleve la imaginación…Goya tenia su maja, yo tengo la mía, y esa eres tú…

Te voy a disfrutar a tope.

-         Me encanta todo lo que me acabas de decir me tienes loca por ti y desesperada esperando que llegue el día…

-         Podremos ducharnos juntos, me sentare en la ducha y te comeré el coño, podremos follar al lado de la ventana…

Quiero follarte a cuatro patas, quiero atarte para que no puedas tocarme y pasarte la polla por los labios, por el clítoris, por las tetas, agarrarlas con mis manos y hacerme una cubana y que no puedas tocarme…

Y cuando tengas mi polla dentro soltarte para que aprietes mi culo y la sientas bien dentro de ti… quiero bajarte las bragas lentamente mientras huelo tu coño mojado…

Quiero que me mires a los ojos mientras me comes la polla con lujuria…

Quiero azotarte el culo con la polla dura…antes de metértela y follarte como una perra…

-         No sigas… me he corrido, estoy empapada solo con oír todo eso me pones tan caliente, mi mente se excita tanto como mi coño, mi pezones me duelen de tanto maltratarlos. cuento las horas para poder disfrutarte…

-         Estoy deseando que llegue por fin el dia…

   Me ducho me perfumo, me visto, calzo mis tacones, cojo mi coche y me dirijo a su piso.

Estoy nerviosísima, aparco el coche dos calles antes, me quedo ahí sentada unos minutos respirando tranquilamente.

 Una cosa es ir borracha por ahí y echar un polvo sin pensarlo, otra es quedar con él, precisamente para follar. Han pasado varios meses con conversaciones muy calientes las expectativas son muy grandes.

 ¿Y si no estamos a la altura?

Cuando me dijo que iba a ser su putita, nunca lo habría imaginado, pero me gusto me calentó más todavía, e incluso follando con Paco lo he pensado, en plena faena pensaba soy tu puta y me vas a follar…

Lo llamo desde su portal para que baje a abrirme…

Me abre la puerta y me da un pico en los labios, estoy temblando, el también.

Le sigo, subimos al ascensor, se cierra la puerta…

Se acerca y me da un morreo apasionado, sus manos ya han bajado mi escote soltando mis pechos de su prisión de tela, me acaricia, sus labios van de mis pezones a mis labios.

Le acaricio la nuca, la espalda debajo su camisa.

En unos pocos minutos el deseo ha vuelto, me tapa los pechos cruzamos el pasillo y entramos en su piso.

Me vuelve a bajar el escote, amasa y besa mis senos.  Nos quitamos la ropa, entre besos caricias y despeloteo llegamos a su habitación. Pongo mi bolso sobre una cómoda, saco unos fulares que en casa había preparado.

-         Soy tu puta y te voy a hacer disfrutar…

-         Yo me dejo, me contesta con malicia.

Le ato las manos en el cabezal de la cama

-soy tu puta, y eso me excita

Me pongo al lado suyo, mis senos se apoyan contra su pecho, con una mano voy acariciando su pene erecto, mis dedos se deslizan hasta sus huevos, están apretaditos como a mí me gusta, con la yema de mis dedos acaricio su perineo, mis uñas con  manicura perfecta rozan su piel,  mi mano abierta, sube y baja sobre sus genitales, su respiración se hace más rápida, sigo con mis caricias estimulándolo, mis labios besan su torso…

 Me posiciono entre sus piernas, mis pezones erectos le acarician las piernas, los huevos, la polla, su vientre y pecho. Le beso la boca muy suavemente, introduzco mi lengua en su boca, subo un poco más, el estira su cuello para alcanzar lamer mi teta, lo dejo juguetear un poco con mis pezones.

 Vuelvo a bajar lamiendo su cuerpo, evito a propósito su pene, doy pequeños lengüetazos por sus ingles, ahora le estoy lamiendo los huevos, a cada movimiento de mi lengua levanta su pelvis, su respiración se hace más rápida.

Poco a poco voy subiendo por el tronco de su polla, lo relamo como si de un helado se tratara, mi lengua juega alrededor de su glande, vuelvo a sus ingles y huevos…

-chúpamela por favor…

Me rio y vuelvo a lamerle el tronco poco a poco, está bien salivada y resbala dentro de mi boca…

Suelta un suspiro y gime de placer, juego con mi lengua sobre su glande mientras mis labios suben y bajan sobre su rica polla. Le hago la mamada  de su vida, mis pechos aprisionan sus huevos, mis manos acarician su cuerpo, el disfruta moviendo su pelvis al compas. Lo miro a los ojos mientras le hago la felación, excitándole más todavía.

La saliva resbala desde su glande hasta sus huevos. Mi mano mojada lo masturba, solo se oyen el ruido de mi boca con su polla entrando y saliendo de ella y sus gemidos…

Estamos a mil los dos, me subo encima de él, mi coño acaricia su pene, a la vez que me estimula el clítoris, muevo las caderas lentamente hasta introducir su fallo en mí, me clavo entera, mis labios vaginales atrapan su polla, mi útero se contrae sobre ella.

El intenta atrapar mi pecho con su boca…

-         Suéltame, quiero tocarte…

-         Lo que tú quieras cariño…

Tirando de los nudos lo libero, sus manos en seguida van a mi cuerpo, me acaricia la espalda, las nalgas, una coge un pecho y lo dirige a su boca, mientras la otra me está apretando la nalga al ritmo del vaivén…

Gimo fuertemente, el placer es intenso para los dos.

Me agarro al cabezal de la cama y poseída por la lujuria muevo mi pelvis cada vez más fuerte, introduciéndome su miembro tieso entero. Sus testículos rozan mi ano, su mano me acaricia la zona, me clava sin piedad dos dedos de golpe, se me escapan los siiiiiies junto a los suspiros y gemidos…

 Me clavo más fuerte en sus dedos, el dolor se mezcla con el placer…

Tanto placer solo puede llevar al nirvana, nos corremos como bestias, sigo moviéndome para que toda su leche se descargue dentro de mí.

Caigo rendida al lado suyo, nos quedamos un rato abrazados y besándonos para recuperarnos.

Pasamos el día follando, en la ducha, en el sofá, de pie apoyada a la mesa, incluso recibimos el repartidor de comida china, desnudos, el pobre no sabía dónde mirar. Ya de noche lo hicimos con las luces encendidas sin bajar las persianas. El nunca lo había hecho así, fue su primera vez de ``exhibicionista`` y le gusto el morbo de poder ser pillado por algún vecino.

Todas las formas de hacer el amor que habíamos comentado, las pusimos en práctica. También hablamos de nuestras cosas.

_ Cuéntame la primera vez que te exhibiste.

-         Pues yo ya hacia top less en la playa pero no es exhibición.

Me gustaba la idea de mostrarme en un sitio público, no en una playa y no me atrevía. Los relatos eróticos me daban cada vez más ganas de hacerlo pero no sabía cómo lanzarme.

Poniendo comentarios en un relato de voyerismo, empezamos a comunicarnos por mails el autor y yo,  casualmente vivía a unos 200km. Le comente mis ganas de exhibirme y mi inexperiencia en el tema.

El sí que lo había practicado con mujeres, a él le gustaba exhibir a sus compañeras de sexo. También viajaba por trabajo y quedamos que si un día coincidíamos en la misma cuidad lo íbamos a poner en práctica. Unos meses después llego la coincidencia. Hicimos nuestras tareas y quedamos sobre las 16h en un hotel.

 Me estaba esperando en el parking, se subió en el lado del pasajero y me iba indicando el camino cuando llegamos a un semáforo, en una carretera de varios carriles, me desabrocho los botones de la blusa y apartando el sujetador dejo mi teta fuera, el sol me daba justo en el pecho iluminándolo.

El  chofer del coche de al lado se percato en seguida y me miraba el pezón erecto que acariciaba mi acompañante.

Me excite muchísimo, era una sensación nueva para mi, el cosquilleo que sentí era tremendamente placentero. Me hizo conducir así por buena parte de la cuidad. Veíamos los conductores encantados por el espectáculo. Y yo disfrutando y aficionándome por segundos a ese nuevo juego. Volvimos al hotel, el había reservado ya la habitación, sabiendo que después de esta experiencia íbamos a follar con ganas.

A penas nos metimos en el ascensor que me abrió por completo la blusa y saco mis pechos del sujetador, se posiciono detrás de mí y me magreo a su antojo, salimos así al pasillo hasta llegar a la habitación me excitaba cruzarme con alguien y que me viera.

Follamos con las cortinas totalmente abiertas y seguramente alguien del edificio de enfrente nos vio.

-         ¿Y tu coño como fue la primera vez que lo enseñaste, te ayudaron también?

-         No, iba yo sola en mi coche venia de la playa, llevaba un vestido palabra de honor con elásticos arriba del pecho para sujetarlo. Era un pelín transparente. quería comprarme un refresco, me dirigí hacia una era de descanso con cafetería.

Cuando entre en el aparcamiento vi un hombre de unos 35 o 40 años sentado a la sombra justo al lado donde había un sitio libre. Sin pensarlo más aparque ahí. Baje del coche, mi bolso estaba en el asiento de atrás así que abrí  la puerta de atrás y me agache intentando llegar al bolso que se había deslizado hacia la otra punta de la banqueta.

Haciendo eso la tela del vestido se tenso y el hombre que estaba a unos veinte centímetros de mi pompis, lo vio perfectamente a través de la tela.

Con la  mala o buena suerte, según se mire, mi bolso se había vaciado al suelo. Viendo el interés de hombre en mirar a través de la tela no cerré la puerta y me fui hacia el otro lado del coche para poder acceder más fácilmente para recoger las cosas de mi bolso, sus ojos no se despegaban de mi escote, aproveche para que sin querer con la rodilla enganchada a la tela, se me bajara el escote dejando mis pechos fuera, y con la excitación se me vieran los pezones duros.

 Fui guardando todo en el bolso con mis tetas colgando a la vista del señor, cuando acabe lo mire con una sonrisa picara en la cara subiéndome el vestido. Cerré las puertas casi rozándole con mi culo.

 Fui a comprarme un bote de refresco y a la vuelta el hombre seguía ahí. Me senté dejando mi puerta abierta apoye mi pie en bolsillo de la puerta tenía las piernas bien abiertas. Subí mi vestido lo bastante para que se viera mi coño,  me pinte los labios mirándome en el retrovisor, haciéndome la despistada.

El sabiendo que iba desnuda debajo del vestido se posiciono frente a mi coche, desde la acera tenia de la vista perfecta de mi coño mojado por la excitación.

-         ¿Te gusto mostrarte?

-         Estaba muy nerviosa me temblaban las manos pero mantuve el tipo y las piernas abiertas.

-         ¿Te dijo algo el chico?

-         No solo disfrutaba

-         Es que es el sueño de todo hombre ver una mujer que le enseñe sus pechos o coño en un sitio público. Es de lo más excitante. Me atrajeron tus medias por la raja de tu falda y sin pensarlo te seguí. ¡te observe en el probador y me volví loco!

¿Follaste con él?  

Escuchándome Ángel tiene otra erección y me acaricia el coño cada vez mas mojado…

-         No, cuando acabe mi bebida, salí del coche a tirar el bote a la basura. El cambio de sitio y se fue otra vez donde estaba antes pero quedándose de pie.

Hice mi maniobra para salir del parking al pasar al lado suyo me pare y por la ventanilla le pregunte si le había gustado el espectáculo. Me sonrió de oreja a oreja y marcando con su mano su polla erecta en el pantalón me contesto que ¡mucho!

Y me fui. Desde esas primeras veces soy exhibicionista.

También he decidido hacer realidad mis fantasías sexuales. Llevo varios meses en ello y me encanta, solemos ponernos barreras, por el qué dirán o porque está mal, y excusas de ese tipo, pero vivir es lo más importante, no hago daño a nadie y antes de que se me pase el arroz aprovecho y recupero el tiempo perdido.

Carpediem es mi nuevo lema.

-ahora vas a ser mi putita, te voy a atar a la cama y te voy a hacer disfrutar sin que me puedas tocar, te retorcerás de placer con mi lengua en tu chochito y todas las cosas que voy a hacerte…

-si cariño soy tu puta y me vas a follar…