Mi amigo y su compañero de trabajo me follarón
Yo un desastre y mi marido esta hasta los cojones de mi. Aquí empiezo a contar o que pasa
Desear a mi amiga me llevó a desear también a su novio. El a su vez se sintió muy atraído por mí. En una casita en la montaña me ofrecí a mi amiga para salvar su relación. Al final fui usada por los dos para liberar sus deseos sexuales, me gustó.
Al día siguiente vinieron a casa a buscarme Luisa y su madre, para ir de compras al centro comercial. Yo no me había olvidado de la promesa de la madre y estaba dispuesto a hacer que cumpliese su palabra...
Un chico triste y dos novios que intentan animarlo a través de una noche caliente
Esa pendeja no podía andar por la vida sin probar una buena pija. lo que no sabía es que, mi compañera iba a ser la gestora de la idea. cómo se mojaba la nena! dedicado a Sebas Navegante, con cariño!
Estaba disfrutando unas semanas en casa de un amigo con él y con su hermana, cuando una mañana sin mi amigo descubrí la bisexualidad de su hermana con su mejor amiga y conmigo.
Regalo especial de cumpleaños para mi novio, con la mejor amiga de ambos.
Segundo día del encuentro con mi amo y su esposa, la zorrita
He encontrado a mi Amo, primer encuentro entre el, su zorrita y yo
En la tercera noche todo sucede de una manera sorpresiva, era una excusa para estar juntos acorde mi mujer me lo había pedido antojada del rico palo de su otro macho!
Aquella era la sugerencia que todo marido desearía oír salir de los labios de una esposa que tuviera una amiga que estaba tan tremendamente buena.
Un bajo de un bloque de pisos, dos chicas y yo. Miriam y Laura reforzarán su amistad en esta húmeda noche de sexo y locuras.
¡La madre de Luisa se enteró de lo que había hecho con su hija! Ahora amenaza con decírselo a mi madre, no sé qué hacer, así que huyo de casa avergonzado y paso la noche fuera... Ya por la mañana regreso a casa, ¡mi madre me abraza y llora! ¡No sabe nada! Me pregunto por qué no se lo habrá dicho...
La venganza es un plato que se sirve... ¿Bien caliente? No, el dicho no era así, pero Linda tiene un medio infalible de lograr sus objetivos.
Así termina mi noche de lobas...luego de cantar a la luna el más puro amor lésbico todo queda en silencio y tan solo mi vestido de bodas es el complice perfecto que guardará para siempre el secreto íntimo de mi despedida de soltera.
Mi noche prohibida continúa...acá continúo yo...aprendiendo a disfrutar del sexo entre mujeres, gozando de la más dulce lujuria que solo mis dos princesas pueden darme...
Cuando andás caliente, con la concha prendida fuego y tu familia siempre hace las mismas pavadas de noche buena, hay que agudizar el ingenio. o, tal vez, bajar un poco la adrenalina con un buen rato de sexo!
Cada vez, la noche se pone más caliente. Estoy totalmente dispuesta a la pasión lésbica. Entre sexo oral, besos negros y corridas muy húmedas, continúa mi noche perfecta. El sueño hecho realidad.
Disfrazados de policias salvan a una pobre gatita de su monotonia en un arbol
Empieza sin tapujos mi noche de fantasía lésbica. Mi despedida de soltera se dá por todo lo alto, perdida entre los cuerpos sensuales de mis amantes de turno, llego a los primeros orgasmos de muchos que vendrán esta noche descarada.
Antes de mi boda la curiosidad lésbica floreció en mí, así que decidí regalarme una despedida de soltera única...un delicioso trio con dos mujeres de ensueño. Sucedió en mi cuarto, con mi vestido de novia observándolo todo como el único espectador de mi locura...
Cuando tienes gente que te quiere bien, ¡qué placer es el sexo!. Se puede hacer todo.
Vero había alquilado una casa rural a las afueras de Madrid, uno de esos sitios situado en un pueblito precioso, con encanto, que solo te imaginas en postales. Ella ya había ido con su ex marido y conocía a la pareja dueña de la casa. Nuestra amiga del chat, Sofía, vendría esa misma tarde, ya que por motivos de trabajo saldría unas horas después que nosotros.
Un fin de semana en Amsterdam da para mucho, espacios públicos, trío, interracial, un desenfreno de sexo en varias partes que vivimos a través de las palabras mi pareja y yo.