Yo confieso que durante años he jugueteado con lo filial...
— ¡Oh Teo, esto no está bien! Definitivamente es muy inapropiado...
—No pasa nada Guille, mami te complacerá de otra forma verás cómo te gusta.
— ¡Qué pasa chicos! ¿Ya os habéis matado a pajas hoy? —dijo y soltó una carcajada la poco respetuosa panadera.
— ¿Tú te masturbas? —dijo Flori a bocajarro al joven.
Deseo su cuerpo, deseo acariciarla, besarla y tocarla, aunque me siento culpable por ello...
—¡Oye Guille!, no hemos quedado en que no está bien tocarle a mamá sus partes íntimas.
Al contacto con su intimidad siento como un calambre recorre todo mi cuerpo...
¡Oh Guille cuánto me está gustando esto!
Bueno mami, no sé que decir, tú me has complacido así que yo tampoco puedo negarme, ¿pero qué te parece si nos salimos del agua? Tengo frío.
¡Oh hijo! ¿Pero qué estabas haciendo? —pregunta ella cuando es obvio lo que hacía y me ha visto de sobra.
Ante mis ojos sudorosos ella se incorpora y se quita el bañador...
Bueno hijo, no te pienso regañar porque tengas una revista porno...
Ya de madrugada mi madre me despierta con un beso y me pide que me vaya levantando.
¡Qué vergüenza hijo, no lo sabía! – exclama mi madre ruborizándose...
¡Guille, no me estarás viendo las bragas! - exclama para mi vergüenza...
Ya de vuelta en el salón, pusieron una película y apagaron las luces, yo me puse frente a la tele, sentada en medio de ambos...
Sentí su lengua lamerme la tela, justo bajo mi coño, Frank estaba muy nervioso...
— ¡Oh mamá, nunca pensé que dieses este paso! —exclamó John en un momento de lucidez.
—No tengo hambre mamá, ¡sólo quiero follar! —exclamó mientras me miraba.
Clara se levantó y en la penumbra Alex contempló como la tela caía al suelo y su imponente silueta se adivinaba en la noche estrellada.
La escena era truculenta, un sexo femenino era atravesado por una gruesa verga en un plano muy cercano. Me quedé tan impactada que...
¡Pero René, te importaría ponerte algo más apropiado! —dije yo protestando por su inadecuada indumentaria...
Mis dedos entraban y salían de mí con fluidez, tremendamente lubricada terminé por quitarme las bragas y me entregué al goce y al disfrute,