Tontamente, espero por ti… aun sabiendo que estas con alguien, q otra mujer tomo mi lugar… yo espero por ti.

Tu voz, tu esencia, tu ser, tus jadeos… porque, porque PORQUE no puedo estar sin ellos?

Te imagino desnudo, parado frente a la ventana, viendo hacia el cielo, como tu dices, hacia las nubes… ella en la cama, desnuda también, boca abajo, cubierto medio cuerpo con una sabana, su cabello regado sobre su rostro, la mano bajo la almohada… la respiración lenta y pausada de quien duerme… tu viéndola de reojo mientras sostienes el celular en tu mano. La pantalla brilla con un mensaje… un mensaje mio

"Me gusta tu cinismo, me gusta saber lo que haces. Que piensas en mi estando con alguien más. Me gusta que lo hagas… Tal como yo pienso en ti cuando estoy en la cama de alguien más"

En este momento la aborrezco… la aborrezco cada vez que deslizas tu dedo por su piel, tu lengua por su cuello, cada vez que robas su esencia respirando sobre ella, cada vez que pruebas su saliva

No la conozco y aun así, la visualizo: pelirroja, de piel blanca, suave, labios rojos, pecas en la espalda, piernas largas, torneadas, senos voluptuosos… madre de dos? Enérgica, hasta atemorizante, tal vez. En este momento descansando de la actividad sexual que acaban de tener… extenuante, apasionada… un tanto salvaje… y tienes el cinismo de decirme, de contarme, de describirlo…

Su sexo no te supo a nada… el mio que sabor tiene para ti? En que piensas, en que te hundes? Mis piernas abiertas, permitiendo que tu cabeza se coloque entre ellas, tu mano sobre mi cadera, evitando que huya, aun asi le permites moverse unos cuantos centímetros hacia arriba mientras me retuerzo entre gemidos y gritos ahogados. Una mano sobre tu cabeza, la otra en mi boca.

Mi piel se eriza, mi vagina se humedece, tu lengua se divierte con mi clítoris… tu nombre entre cortado sale por mis labios, mis ojos cerrados, mi voz jadeante, el sudor frio q recorre mi cuerpo, bajando por mi cuello hasta mi pecho

Lento… muy lento… todo comenzó tan suave, entre las sombras. Uno a uno los botones se separan. Tus manos deslizándose sobre mis hombros, descubriendo la blusa. Un beso en la base del cuello, mientras una mano suelta mi cabello. Cierro los ojos y me dejo llevar… tu voz se desliza en mis oídos, con tantas cosas que quisieras hacerme. Inclino mi cabeza hacia un lado… tus labios se desplaza sobre mi piel, bajando sobre la curva de mi pecho.

Suavemente, se detienen sobre el borde de mi ropa, reposando un beso entre el encaje y la tibia superficie. Sonrio. Tu mano continua deslizando mi ropa hasta que por fin cae al suelo y tu sigues bajando por mi cuerpo

Saltas hasta el abdomen, en donde sigues colocando ligeros y delicados besos sobre mi piel. Me estremece. Cada roce de tu piel con la mía significa para mi que ésta se erice más. Lo que tu provocas en mi cuerpo es casi indescriptible

Ya estas sobre la línea del pantalón. Lentamente desabrochas el botón y lo abres, dejando a la vista encaje rojo que cubre el monte. Dulcemente posas un beso ahí, mientras me vas liberando del pantalón. Al bajarlo por mis piernas acaricias mis muslos y bajas a mis pantorrillas, siguiendo el contorno

Incado frente a mi, levantas la vista y me observas de arriba abajo, lentamente, una sola ocasión. Susurras "bruja". Apartas lo que queda cubriendo mi sexo y deslizas tu lengua entre él. Aguanto la respiración y abro un poco más el compás. Disfruto sintiendo la tibieza de tu lengua entre mis piernas. Acaricio tu rostro, tu nariz, tu frente…

Termino sobre la cama, sobre el borde de la cama. Tu sigues frente a mi pero yo veo hacia el techo… De tiempo en tiempo cierro los ojos, a punto de explotar. Mi sabor en tu boca, mi esencia en tu boca, mi alma en tus labios… como si una nube de humo me cubriera y no me dejara ver nada, solo sentir, solo probar, solo desear…

Subes a la cama a mi lado, colocando tu brazo junto a mi cabeza, cubriendo mi rostro con el tuyo, mirándome a los ojos y besándome, dejándome compartir el sabor que tú ya habías disfrutado antes. Deslizo mi lengua entre tus labios, empujo tu cabeza hacia mi. No quiero dejarte ir.

Ahora soy yo quien desabotona la camisa, dejando a la vista tu pecho. Deslizo mis manos por tus pectorales, los rasguño suavemente. Tomo la cadena que cuelga de tu cuello sin fijarme mucho en ella, y solo continúo por la línea exterior. Muevo mis manos a tu espalda y te aprieto contra mi. Quiero volver a besarte… un beso profundo, suave, tranquilo pero a la vez con pasión, fuerza, con el que seas capaz de sentir lo que encuentro en ti

Me liberas del sostén y la tanga. Vuelves a posar tus ojos sobre mi, sin decir nada en esta ocasión. Solo entre abres los labios y yo coloco un dedo sobre ellos, no quiero que digas nada. Solo quiero me observes, me disfrutes, me devores y sentir tu mirada es un placer para mi

Conozco esa mirada, y se lo que significa. Lentamente mi mano derecha baja sobre mi abdomen y se coloca sobre mi sexo. El dedo índice se posa sobre mi clítoris, comenzando un leve movimiento circular que va aumentando poco a poco. Mientras tanto, tu solo me observas. Disfrutas viendo como me masturbo… Yo trato de observarte, conectamos miradas. La tuya esta cambiando, tu lujuria, tu perversión, tu deseo se asoman sobre mi… Estoy a punto de llegar

Bruscamente, quitas mi mano de mi vagina "Aun no", me dices. Con una mano, giras mi cuerpo sobre la cama y me colocas boca abajo. Ya se que viene ahora… una embestida brutal que en un principio me va a lastimar, pero que por nada del mundo quiero que detengas.

En un santiamén ya me estas penetrando por detrás. Me golpeas con todas tus fuerzas, nuestros cuerpos chocan por la cadera. Una de tus manos me toma de la cadera y la otra se posa sobre mi culo. Un dedo se coloca sobre mi higo. Lentamente comienza a realizar movimientos circulares y se va dilatando poco a poco.

Yo no he dejado de gemir desde que me colocaste en la cama, pero cada vez con mas fuerza. En cierta manera me da miedo lo que pretendes hacer, pero también quiero sentirte completo entrando por mi culo.

Me colocas sobre las rodillas y manos. Una de tus manos esta sobre mi cabeza, agachándola y lista para que puedas penetrarme por detrás

Pareciera que tomas velocidad y de repente, lo siento entrando por atrás de mi. No me queda mas que morder la almohada por la fuerza que utilizas. Una lagrima se derrama por la esquina de mi ojo, pero el martirio prontamente se convierte en placer y yo no tengo objeción

Una y otra vez, embistes mi pequeño cuerpo con el tuyo. En este momento, soy tu esclava, tu propiedad… Me gusta saberme tu musa, que soy capaz de sacar lo más perverso de ti. Sonrió con malicia mientras estiro mi cuello, con los ojos cerrados, al mismo tiempo que tu continuas con tu brusco vaivén. Me deleita.

Ahora eres tu quién esta a punto de llegar… y soy quien te interrumpe. Logro zafarme de ti y me alejo unos cuantos centímetros sobre la cama. Giro sobre mi eje, una pierna doblada sobre la cama, la otra en escuadra. Recargo el mentón sobre mi rodilla, abrazo mi pierna y te observo

"Acuestate" te digo… tu haces como te pido. Tu erección es tan agradable a mi vista. Me recuesto a tu lado, acaricio tu cabello, tu nariz, tus labios… bajando por el cuello, el pecho… Me siento a horcajadas sobre tu cintura. Puedo sentir tu verga parada contra mis nalgas. Me inclino para besarte y al hacerlo, acerco mas mi culo a tu sexo erecto… me relamo los labios pensando en q quiero tenerlo dentro… Respiro profundo y levanto mi cadera para poder bajar un poco mas. Ahora estoy sobre tus rodillas y mi boca se coloca directamente sobre tu pene.

Primero la punta… la mojo en mi saliva mientras mis manos se deslizan sobre tus ingles, lento, suave… comienzo a ejercer un poco de presión sobre ellas. Tu cuerpo se estremece, puedo sentir como un escalofrío te recorre de pies a cabeza… me gusta sentirte bajo mi control... me llenas, me satisfaces, me completas… todo mi cuerpo es tuyo, mi mente, mi esencia empapada de ti… solo tú puedes hacerme sentir así

Continuo, disfruto cada segundo de tu sabor en mi lengua… cremoso, salado, excitante… quiero que termines en mi boca, tragar cada gota de ti… siento sobre mi lengua contracciones de tus músculos, tu voz susurrante, entrecortada; tu respiración acelerada. Levanto la vista, tu rostro cruzando por el éxtasis total, me encanta observarte, tenerte así… siento estas a punto de explotar… "Princesa" una sola palabra, alargada, deslizada sobre la oscuridad de la noche, revelando todo tu orgasmo sobre mis labios.

Una gota perlada que cuelga de la comisura, la limpias con tu dedo mientras me encaramo sobre ti. Sonríes con ternura. Tus manos me toman por la cintura y me colocan sobre la tuya. Aun mantienes una erección. Me penetras lentamente. Llevas el ritmo. Tu mano en mi espalda esparce el sudor que por ella bajaba. Sigue el movimiento, siento mi cuerpo lleno por ti… y deslizas tu dedo sobre mi clítoris. Es una sensación indescriptible, de la que tu eres dueño y señor, tu me controlas ahora. Decides cuando parar, cuando bajar o aumentar la velocidad. Yo estoy a tu merced.

Ahora no solo son gemidos, mis gritos de placer se ahogan en la noche, tu cara de lujuria es gobernada por una sonrisa infernal. Tu también cierras los ojos. Al igual que yo estas apunto de explotar… Juntos descendemos por la deliciosa barranca de la pequeña muerte…

…te odio…

Abro los ojos… una vez más, constato que solo tengo el celular como compañía, brillando la luz de la pantalla que indica una llamada tuya… cierro los ojos mientras suspiro con resignación mientras acepto la comunicación. Escucho como decides penetrarla para mi… ironias de la vida… en un movimiento, se corta la llamada… Suspiro… el mundo vuelve a su normalidad una vez más. Giro la cabeza hacia el tocador, entre las sombras puedo ver una rosa… del color del vino tinto.