SACANDOME LA RESACA
FINAL DE FIN DE SEMANA DEL TERROR
Con Pedro tuvimos que ir en pareja a una sicóloga, para tratar de mitigar nuestros problemas, según Pedro. A mi no me convencía eso de ir contar lo vivido, pero lo acompañe. Las cosas con mi marido empezaron a funcionar mal y decidimos separarnos. Por ahora era solo separación y veríamos de solucionar nuestros problemas. El visitaba ala Maríados veces a la semana en casa y sábado y domingo por medio la llevaba a donde estaba viviendo, la casa de sus padres.
Yo a veces por las noche, me despertaba sobresaltada ver alguien en la casa u oyendo ruidos inexistentes.
Mientras tanto me propuse buscar al jefe, porque sospechaba que no era de lejos. Un domingo a la noche lo vi, entrando a un boliche bailable y haciéndome la simpática con el portero le pregunte. Era un asiduo concurrente de los sábados y domingo.
En casa, sola en mi habitación planeaba como encontrarlo ahí adentro o afuera del boliche.
Deje de concurrir a la sicóloga y no comente a nadie que había visto al jefe. Ya habían pasado más de 2 años del hecho.
Llego el sábado y Pedro vino a buscar a la nena por la mañana y eso me dio tiempo para prepararme para ir a su encuentro.
Me corte el pelo cortito en la peluquería y en casa los teñí de negro. Compre un vestido acorde a esos bailes, más provocativo y también cambie la lencería que iba a ponerme.
Eso sábado a la noche me mire al espejo y me dije que parecía una autentica puta. Llevaba un sostén ajustado y una tanga roja con un corazón flechado. Medias caladas negras y vestido negro escotado y la espalda al aire. Me pinte los labios de rojo furioso y delinee mis cejas y pinte mis parpados. Una vez satisfecha de mi misma, salí a la calle y tome un taxi hasta el boliche. Entre y mire a ver si estaba. Un pesado quería bailar y aproveche eso para observar todo.
Pude zafar del tipo y me di vuelta y lo apoyado en la barra, charlando con una mujer. Mi corazón parecía saltar de mi pecho y mis piernas se aflojaron. Ahí estaba el jefe. Me acerque de atrás despacio con mi pequeño bolso encima y simule llevarlo por delante.
JAZMIN: disculpe mi torpeza
JEFE: (mirándome de arriba abajo) la torpeza fue mía hermosa.
Seguí caminando y se vino atrás. Me puse en la barra y pedí una bebida y él se acerco y pidió otra.
JEFE: tenemos que festejar este encuentro, pago yo le indico al barman. Bailamos morocha, aun no se tu nombre
JAZMIN: mi nombre es Maribel, mentí y el tuyo
JEFE: hermoso nombre, a mi todos me conocen por el jefe.
No me reconoció para nada. Me saco a bailar y estuvimos mucho tiempo haciéndolo, cada vez mas apretados, hasta que por fin dijo
JEFE: que parece si vamos a un lugar menos concurrido Maribel
Lo dijo dándome un beso prolongado en los labios y que yo acepte.
JAZMIN: adonde me queres llevar.
JEFE: elige vos, tu casa o la mía.
JAZMIN: uf que apurado estas.
JEFE: es que cuando veo una mujer hermosa, no quiero perderla.
Me apretó más y me beso intensamente. Lo deje hacer
JEFE: y Maribel decide tú
JAZMIN: vives solo, adonde?
JEFE: si solo, a 10 minutos de coche. Tienes miedo a ir a mi casa que preguntas si vivo solo.
JAZMIN: no quiero sorpresas, no es la primera vez que vas algún lado y hay otros y terminas violada por todos.
JEFE: no soy tan entupido como para compartirte, te quiero para mi solito. Vamos?
JAZMIN: esta bien vamos
Salimos y subimos a su coche. Puso en marcha y recline en su hombro. Cuando llegamos a la puerta de su casa, tuvimos un prologo con besos y toques.
Entramos a la casa, era una departamento chico con una habitación, baño y cocina Kichner. Enseguida que entramos se vino al humote besaba y tocaba y yo hacia igual. Desabrocho me vestido que cayo al suelo y quede solo con sostén y tanga.
Lo ayude a desvestirse y el me saco el sostén y luego la tanga. Nos tiramos sobre la cama y me cogio fingiendo yo que acaba con él. Después de rato lo hicimos de nuevo. Yo quería ganarme su confianza y el ni siquiera me reconoció como esa mujer que violaron un fin de semana. Vi que tenía unas esposas y le comente me gustaría jugar con eso. Estuve de acuerdo, pero primero los esposaría a él y estuvo de acuerdo. Le dije que luego lo dejaría hacerme lo que quisiera.
Lo espose a la cabecera de la cama y le dije que iba unos minutos al baño, tomando solamente mi bolso.
Volví y estaba impaciente, yo me había sacado las medias de nylon y las llevaba en mis manos. En un descuido de él le ate una pierna con una media mía y a la cama.
JEFE: que haces loca? Soltame
JAZMIN: así es mejor es más maso
JEFE: esta bien, espero cumplí vos después
JAZMIN: si lo haré me encanta(al tiempo que ataba su otra pierna)
Una vez inmovilizado saque de mi bolso una navaja filosa
JEFE: que vas a hacer loca, cuidado con eso.
JAZMIN: no te acuerdas de mí?
JEFE: no, quien eres y que mierda quieres
JAZMIN: a ver, recuerdas hace casi tres años vos y dos mas entraron en una casa de un matrimonio con una bebe recién nacida.
JEFE; quien eres puta?
JAZMIN: que pocos recuerdos tienes, en cambio yo recuerdo todos. Tres días vos y dos más me violaron constantemente y encima violaron a mi marido. Tres años de sicóloga me costaron y aun tengo pesadillas. Destruiste mi matrimonio, ahora es hora de pagar, hijo de puta.
JEFE: tu! si te gustaba lo que hicimos.
JAZMIN: tuve que fingir, como hoy, para sobrevivir
JEFE: que vas hacerme puta
JAZMIN: primero ponerte esta mordacita. (Le puse una cinta adhesiva ancha y gruesa que cubrió su boca. Después te cortare la pija y me la llevare y tirare a los perros
JEFE: mmm, no mm
JAZMIN: no te entiendo amor
Estaba desesperado, sudaba como nunca en su vida. Acerque la navaja y temblaba y lloraba.
JAZMIN; mira valiente jefe, llorando y pidiendo perdón. Pero no hay perdón para ti, vaya a saber a cuantas le hiciste lo que a mi. Ella no se atrevieron pero yo si y ahora las vengare a todas.
Me vestí rápidamente y él pareció tener la ilusión que no iba a hacerle nada. Una vez vestida tome la navaja y la acerque a su pija. Lloraba, debajo de su mordaza suplicaba y traspiraba litros de sudor.
Lo agarre con mi mano izquierda, le di un beso de despedida. Puse la navaja en la base de la pija, cerré los ojos y la corte, quedándome con el miembro completo en mi mano.
No se como no se desmayo, lloraba, parecía y seguro era así le dolía a mares.
Tome una bolsa de polietileno y la guarde ahí. Salí, dándole un beso en la frente. Camine unas cuadras y había unos perros, saque la pija del jefe y se las tire. Se la devoraron inmediatamente. Seguí mi camino y llame al 911 para informar que había sentido unos gritos en su dirección.
Tire al río el teléfono celular, que era de él y entre en mi casa. Me bañe y fui a dormir. Hacia mucho no conciliaba mi sueño como esa noche.
A los dos días leí en el diario que la policía había encontrados a un hombre atado en su cama con el pene cortado y desaparecido.
Se había vuelto loco y no sabia quien lo había hecho. Feliz por mi venganza lleve al parque a mi hija a pasear