NACI ESCLAVA
6ª PARTE
Yo miraba por un hueco del establo, la llegada de los esclavos que venían de otras plantaciones. Todos eran del Amo, no se cuantos tendría, pero era muchísimos entre los que ya estábamos ahí y los de otras lugares, mas lo llegaban hoy de trabajar en otra plantación. Mire, pero como no sabia quien era mi nuevo macho, vi que habia muchos jóvenes, estaba en incertidumbre. Creo que las edades eran entre 16 y 40 o 45 años. A medida que iban llegando salían de sus casas las hembras a recibirlos con sus vástagos. Ahí se redujo la cantidad que quedaban pero seguían siendo muchos. Los hicieron parar frente a la casa principal. Luego nos llamaron a nosotras las hembras, tanto solteras como viudas frente a ellos a una distancia de15 metros. Las viudas, tuvieran o no hijos pero en condiciones de preñar estaban ahí, aun cuando su macho anterior hubiera fallecido recientemente. Yo me ubique en una tercera fila con Nadia en brazos amamantándola. Salio el Amo
AMO: quiero felicitar a todos por la cosecha y como han trabajado en ella, para llegar a ser una de la mejores de los últimos años. Ahora muchos de Uds. van a tener su premio y otros deberán esperar para tenerlos.
Empezó a nombrar. Primero una hembra y luego al macho.
La primera nombrada era una mujer de unos 30 años, viuda con tres hijos y preñada y le fue entregada a un macho de no más de 20 años. Este la tomo del brazo y fue para la choca destinada a ellos. Y así sucesivamente. No alcanzaban la cantidad de hembras que habia. Siguió nombrando hasta que al final me nombro a mí.
AMO: Perla será la hembra de Jonás.
Parada con Nadia en brazos miraba el movimiento a ver quien era Jonás. De la última fila, vi un movimiento de alguien que se abría paso. Era alto, flaquísimo, huesudo y sonriente se paro al frente a la orden del Amo. Le faltaba un diente y se notaba al sonreír. Tenía, después me entere, 36 años, el doble que yo.
AMO: Jonás ahí tienes tu premio, una hembra de 18 años, recientemente madre. Llévala
Lo mire con temor. Me agarro del brazo y tiro de mí, hacia la choza destinada para nosotros. Me dije que comenzaba ahí mi vida nueva. Entramos a la choza y solo habia paja en el suelo para usar como camas. Me saco de los brazos a Nadia y la apoyo en el suelo, mientras me hacia acostar y el al lado mío. Estrujo con fuertes y callosas manos mis tetas haciéndome doler. Luego mordió y chupo mis pezones y así sin mas subió sobre mi cuerpo buscando con su pija mi concha. Tuve obligada a abrir las piernas, sin queja alguna, la metió se movió a la loco dentro de mi y termino acabando. La saco y se tiro a mi lado a dormir.
Si bien el tipo no me gustaba, tenia que satisfacer todos sus deseos sean sexuales o no. Luego del Amo era como si fuera un amo. Sabía que yo no tenía derechos a nada y me sentía como un animal, cuando decían hembra-macho. La palabra mujer-hombre no existía en el idioma que hablaba. Yo tenia mis necesidades sexuales pero en la forma de Jonás. El era de satisfacerse él y su hembra que se joda, por lo que vi en esta primera vez.
Tarde un rato en dormirme y cuando lo pude hacer, sentí a Jonás de nuevo arriba mío, para satisfacer sus instintos. Abrí mis piernas e hizo lo mismo que antes, dejándome igual o peor.
Luego se durmió. Me lavarte en silencio y salí de la choza. Me recosté sobre un árbol y observando no ser mirada me masturbe.
Volví a la choza y seguía durmiendo, al igual que Nadia.
Cuando amaneció estaba dormida y sentí un tirón de pelo en mi cabeza. Era él que me despertaba.
JONAS: levántate, debemos ir a trabajar.
Me levante a los apurones, más porque Nadia lloraba. La tome en mis brazos y le di de mamar. Tenía hambre. Luego con ella fui a mi trabajo en la aldea. Estaba también ahí la viuda embarazada, entregada a un chico joven. Estaba alegre y entre las hembras confeso haber pasado una noche de sexo total y sublime.
La mira con un poco, bastante, de envidia y empecé mi labor. Con Nadia colgando en mi espalda, empecé a triturar el maíz que otras nos traían. Lo hacíamos con una piedra golpeando sobre una cosa lisa. Cuando termine trajeron ramas para eliminar las hojas y luego alisarlas con una especie de cuchilla. A medida que la dejábamos bien peladas y lisas las dejábamos al lado y venían otras para llevarlas. Eran para que los macho hicieran flecha con las ramas mas finas y lanzas con los palos mas gruesos. Termine cuando caía el sol. Antes de salir le di de mamar a Nadia y fui hacia mi choza. En el camino recogí alguna raíces para, digamos hervir, y tomar el agua esa y comer las raíces.
Cuando llegue a la choza, deje a Nadia y se acerco Jonás. Me pego una trompada así de una, sin saber yo el porque.
JONAS: he llegado y no esta mi comida. Tienes que tenerla preparada para cuando llegue.
PERLA: esta bien, pero recién llego de las tareas.
JONAS: (tomando de mi cabello y acercando mi oreja a su boca.) no importa, primero me atiendes a mi y luego Uds.
PERLA: esta bien Jonás.
Esa noche me volvió a tomar de la misma forma dos veces. Trate de calentarme y mojarme pero era imposible saber en que momento me tomaba y terminaba al lado del árbol como el día anterior. A la mañana me desperté con Nadia llorando de hambre, y le di la teta. El se fue a la plantación y yo cargando en mi espalda a Nadia a hacer mis tareas como el día anterior. Tenia que soportar a la viuda contando lo bien que le iba con el muchacho que era su macho.
Cuando termine fui corriendo antes que llegue él y lo logre. Terminaba de prepararla cena y tuve que servirlo, con Nadia a los gritos llorando de hambre. Una vez lo atendí a él, dime de mamara Nadia, que se durmió enseguida y me dispuse a comer lo que quedaba de la comida de él. Nos acostamos y volvió la rutina de siempre. Llegue a odiar a Jonás. Pasaron los años y venían los hijos. Creo que cumplía ya 25 años y tenia cuatro hijos con él más Nadia cinco. Al Amo no se lo veía, pero estaba informado seguramente de todos sus esclavos. Un día llamaron a Jonás y otros machos a presentarse frente al Amo. Nadie sabía el motivo de ese llamado. Jonás fue y volvió un rato después. Lo enviaban solo a otra plantación por un tiempo. Recogió algunas cosas, llevándose comida que yo iba almacenando para los chicos y se fue.
Quede sola con mis hijos a quienes tenía que mantener sola. Pero era mejor así no lo veía ni aguantaba a Jonás. Ya habia llegado a pegarme por pegarme nada más, para mostrar quien era el macho nada más. Además, nunca en el tiempo que estuvo conmigo pude tener un orgasmo. Los orgasmos los tenia sola, masturbándome junto al árbol.
A los dos días de su partida, vinieron dos esclavos y pidieron hablar con el Amo. El Amo los atendió, escucho y se marcharon nuevamente. Me mando a buscar a mí y a otras dos esclavas.
AMO: perla debo decirte que Jonás ha muerto en un accidente en la plantación.
La verdad no sentí nada, era tal mi odio con él, pese a ser el padre de mis hijos que no lo sentí.
El Amo ordeno a una de la hembra citada a que tuviera a su cargo a mis hijos por tres días, tiempo que duraba el duelo. Y a la que se encargara y acompañara en mi duelo.
Estuvimos tres días. En esos tres días tuve que llorar, cantar y rezar por el espíritu de Jonás. Tres días que no podía ni comer ni beber nada. Era una costumbre de ellos, inculcada por el Amo. Quiero hacerles saber que si quedaba una hembra viuda como dije antes una vez terminado el duelo era entregada a otro macho, pero si en lugar de morir el macho la repudiaba a la hembra con el Amo, era severamente castigas de distintas formas que no quería ni saber. Aunque no hubiera motivos.
Terminados los tres días pude ver y tener a mis hijos. El Amo me llamo y acudí en su presencia fuera de la mansión. Después de mi primer día ahí, nunca más me hicieron entrar en ella. Cuando llegue habia unos diez machos reunidos al costado. Las edades de más o menos15 a40 años calculo.
Frente a mi habia todos machos, por la vida llevada no habia gordos. Eso era propiedad de algunas hembras y por los embarazos continuos.
AMO: (con una carpeta abierta en mano) tengo acá una hembra de 26 años (26 ya, creí que eran 25, pero con esta vida no se sabe) y necesito un macho que la satisfaga y preñe. A ver…
Yo miraba expectante a los machos tratante de ver quien seria el elegido por el Amo.
AMO: a ver… (Miro y pareció no encontrar a quien quería) Joel adonde esta?
El segundo de él le comento que Joel estaba castigado.
AMO: tráiganlo ya, será el macho de esta hembra.
Me quería morir, después de tanto aguantar a Jonás me tocaba un castigado no se porque. Pero nada bueno seria por estar castigado.
Mientras esperábamos el Amo comento.
AMO: Joel se pone mal y es castigado porque le falta una hembra. Como es joven y ve que los demás tienen y él no, se pone mal. Solo tiene 15 años y es hora que sea un macho más.
Quince años, virgen y violento era para mí una calamidad. Hubiera preferido que Jonás no se muriera.
Apareció traído por dos guardias y lo pusieron frente a mí. Aparentemente, aunque estaba sucio seguro por el encierro, era buen mozo. Pero tenía una mirada que taladraba. Miraba mis tetas y mi entrepierna codiciosamente.
AM0: Joel te he hecho sacar del encierro que tenías. Ya tienes 15 años y es hora que tengas tu primera hembra (al escuchar al Amo, cambio se cara a ser feliz. Por fin iba a tener una hembra, para él solo) espero la disfrutes y me des a mi tu Amo, muchos esclavos
JOEL: si Amo, puedo llevarla ya?
AMO: (sonriendo) los hijos los dejaremos con la hembra anterior por unos días, hasta calmar tu euforia.
Volvió la esclava que tuvo mis hijos por tres días y se los llevo, en medio de sus llantos.
AMO: les daré 10 días, hasta que se adapten uno al otro, luego volverán los hijos. Disfrútala Joel, llévala ya
De un salto estuvo a mi lado y me tomo de un brazo tirando hacia la choza, medio a rastras. No quería pensar lo que me esperaba con ese salvaje, a medida que nos alejábamos del Amo, escuchábamos las risas de todos.