LA PRISION
19ª PARTE
A la mañana siguiente volvió muy sonriente el director del penal. Después de saludar a su gente, se metió en su despacho. Cinco minutos más tarde, parecía haber estallado una bomba en la cárcel. Llamo a las jefas de la guardia, les comunico de las notas y vimos salir en tropel a todas las jefas, en distintas direcciones. El director llamo a un fiscal y en dos horas entraron en la prisión dos coches particulares, varios patrulleros, un camión hidrante, uno de trasporte de tropas y uno de presos.
Del camión de tropas bajaron una docena de tipos armados con armas largas y se distribuyeron en lugares estratégicos. De los coches bajaron, supongo, gente del juzgado.
Yo estaba con Martina mirando desde una ventana que daba al patio.
LETI: guardaron bien las facas, las púas y cuerdas.
MARTINA: si no te preocupes, todas nosotras estamos limpias.
LETI: estos van a hacer una requisa hasta de nosotras. Ves hay varias agentes femeninas que bajan de los patrulleros.
MARTINA: ojala me toque una linda, así me caliento un poco, me gustan las uniformadas.
LETI: que loca eres, me haces reír aun en estos momentos.
MARTINA: sabes lo que siento por vos Leti y me pone feliz si sonríes. Respeto lo que decidas, pero seguiré esperándote.
LETI: gracias Martina, pero no puedo olvidar a Oki. Mira entran acá.
Efectivamente precedido por 4 agentes de asalto, entro el fiscal. Acompañado por varios del juzgado. Fueron directamente a ver al director. Este sudaba de nervioso, maldiciendo haber terminados las vacaciones justo ahora. La otra parte de la tropa especial empezó a requisar las celdas, previa salida de las presas a un lugar cerrado.
Cuando requisaron las celdas de las orientales zorras tomaron gran cantidad de armas blancas, púas, manoplas, drogas, jeringas, etc.
Vinieron a nuestro pabellón e hicieron lo mismo, pero con resultados negativos. No llevaron a un recinto cerrado con tres de las seis agentes femeninas, nos hicieron desnudas. Revisaron la ropa primero a ver si había algo. Luego nos revisaron con guantes de látex todas nuestras conchas en profundidad. Luego ponernos en cuatro para meter en nuestros culos. Cuando una de las agentes revisaba a Martina, esta nos hizo reír a todas.
MARTINA: hay nena que divino, déjamela un rato adentro
Una vez revisadas nos hicieron volver a las celdas y se cerraron automáticamente.
En tanto en las orientales, encontraron más elementos, como drogas y los requisaron. Con una guardia de la prisión, separaron del grupo ala Ronca, Risitas, Caléndulas. Roysi y la jefa Zaina, las llevaron a el camión transporte de presas.
La Roncacuando paso a mi lado me miro con odio, pero no dijo nada, en tantola Zainacon sus dedos índices en cruz sobre su boca prometiendo venganza.
Con esa acción se desarticulo la cúpula de mando de las orientales, por ahora. En minutos tal cual habían llegado se fueron.
El director me mando a llamar.
DIRECTOR: Leticia, se detrás de todo eso estas vos algunas amigas.
LETI: no señor, no sabemos nada y no tenemos armas. Además no somos tan entupidas de atacar a las orientales desarmadas.
DIRECTOR: entonces quien fue. Deben allegadas a vos, por la nota decía del caso Oki, y vos eras la mujer de ella.
LETI: si era la mujer de Oki, hasta que la mataron. A lo mejor como no se esclareció el caso, tomaron esta decisión de mandar a requisar y por lo que veo sacaron cualquier cosa.
DIRECTOR: no te creo Leti, algo tendrás que ver. Te voy a hacer vigilar.
LETI: no hay problemas sr director, no tengo nada que ocultar.
Pasaron dos o tres y de las orientales ni noticias. Un día vino el fiscal, con tres o cuatro guardias de civil. Llegaron en helicóptero que bajo en el patio general nuestro. Para eso habían cortado el paso al patio luego del almuerzo. Me citaron a mi y dos o tres chicas entre ellas Martina,
Las interrogaron y las dejaron. Luego me llamaron a mí.
FISCAL: tu eres Leticia….la mujer de Oki, la occisa
LETI: si soy la esposa legítima de Oki.
FISCAL: sabes como murió
LETI: casi en mis brazos, en las duchas apuñalada. Cuando llegue a las duchas recién había muerto.
FISCAL: que notaste
LETI: en que sentido? Oki tirada con son ojos bien abiertos, yo se los cerré, tirada bajo la lluvia de ducha y toda ensangrentada.
Vacile un poco
LETI: disculpe Dr. pero recordar todo eso me causa daño. Amaba a Oki.
FISCAL: esta bien no te preocupes. Debes saber que iras a declarar en el juicio y tendras que responder esas y otras preguntas que se te hagan.
LETI: si dr., por la memoria de Oki lo haré.
FISCAL: que sabes de las orientales
LETI: grupo peligroso, siempre armado que amenaza a las demás. A Oki la tenían en la mira, porque me querían llevar a mí de esclava y OK, no me vendía. Creo que ellas están metidas en su asesinato.
FISCAL: hay una testigo, que no de ese clan, que dice que a vos te agarraron en los baños a solas para amenazarte.
LETI: es cierto, sin darme cuenta echaron a las demás y cuando quedaron solas me atacaron a mí, que me daban plazo hasta que llegara el director. Le tenía que pedir que me pase al grupo de ellas. Sino lo hacia no se que me iban hacer
FISCAL: con el director de hablaste.
LETI: no porque el día que llego de vaciones, yo iba a ir a verlo y sucedió lo que sabemos.
FISCAL: sabes que firmaron una confesión que ellas mataron a Oki y a otras.
LETI: no lo sabia, pero lo presentía.
FISCAL: conoces la Ronca
LETI: si la Ronca, Risitas, Caléndula y esa Roisi o algo así son la que me agarraron en el baño
FISCAL: a Zaina, la conoces
LETI: nunca hable con ella, solo la vi en el patio dirigiendo a las otras.
FISCAL: bien terminamos por ahora. Sabes que tendrás que ir a declarar sobre todo esto
LETI: si lo se, señor
FISCAL: mantendrás lo que me dijiste a mí
LETI: si mas ahora que se que mataron a Oki. En memoria de ella lo haré, sin importarme lo que me pase.
Se marcho y yo fui a mi celda, en el camino encontré al director.
DIRECTOR: yo creo que vos sabes más de lo que decís, pero no puedo probarlo. Tengo la cereza que tenes algo que ver con esas cartas.
LETI: no para nada director. Si fuera asi, un día vuelven y yo soy boleta como OKI
DIRECTOR: me animaría a decirte que eres materia gris de todo esto. Ve a tu celda.
Vinieron días tranquilos para. A las cabecillas de las orientales las trasladaron a otra cárcel de máxima seguridad. Las que quedaron, no tenían ni fuerza ni quien las dirija y se estaban disgregando solas.
Nuestro grupo estaba más fuerte que nunca, había algunas nuevas, a quienes estudiábamos antes de ingresarlas. Se vivía una época de paz en la prisión. El último domingo pedí de ir al cementerio y me acompaño Martina. En el camino cortamos algunas flores y las puse en la tumba de Oki
LETI: ahora si descansa en paz Oki
Volvimos a la prisión a hacer nuestra vida pero mas tranquilas. El juicio a las orientales se demoraba, pero según sabíamos estaba bien encaminado. Pronto tendrían la fecha del juicio oral.
Con Martina nos hicimos grandes amigas, tanto que hoy es mi amante. Soy feliz con ella, me hace reír y cambiar mi carácter cuando estoy mal y ella dice que siempre estuvo enamorada de mí. Ahora, con permiso de la nueva directora, al otro lo echaron por la cantidad de irregularidades que encontraron, vivimos juntas en una misma celda y cama.
Un día llego por medio de la directora la noticia del juicio oral. La directora era una buena persona y termino con muchos abusos hacia nosotras. Vino la directora a mi celda, estaba con Martina conversando cuando apareció.
DIRECTORA: el mes que viene tendrán que declarar en el juicio. Además tengo sorpresas para Uds.
Leticia el Sr. Fiscal me informo que Risitas en un estado depresivo y tratando de sacar provecho a la situación contó que ella fue quien mato a aquella mujer por la que te culparon a vos. Lo relato con lujos de detalles.
LETI: no lo puedo creer, gracias Dios mío
DIRECTORA: espera hay mas. La persona que mataron, la eligieron al voleo, solo para involucrarte a vos, Leticia. La que ordeno eso fue Zaina y el motivo para involucrarte era para que no salgas cuando cumplas la condena anterior, porque Zaina te quería para ella. Y si tenía que volver a matar, para seguir teniendo culpándote a vos lo haría
LETI: no lo puedo creer, después de tanto tiempo
Me puse a llorar a mares y Martina me abrazaba.
DIRECTORA: para ti Martina, quiero que sepas que estudie tu caso y tu conducta dentro del penal y acabo de solicitar, para ti, la libertad condicional. Tendrás que tener cuidado de no involucrarte en nada malo por 3 años para lograr la definitiva. La de Leticia es definitiva. Creo que en menos de un mes quedaran en libertad.
AMBAS: (llorando y abrazando a la directora) gracias Sra. directora, al fin hay alguien en la cárcel que se ocupa de la chicas
DIRECTORA: además el año que viene comienza en la cárcel primaria y secundaria para las reclusas. (Con una sonrisa burlona) a propósito no conocen alguna profesora de matemáticas, es un sueldo mas o menos que alcanza para vivir.
LETI: yo Sra. Puedo ser la profesora de matemáticas.
DIRECTORA: sabia que no e ibas a defraudar Leti. Leí en tu prontuario que tenías excelentes calificaciones en la materia.
Se retiro en medio de nuestros agradecimientos. Cuando quedamos solas, comenzamos a planear nuestra vida fuera de prisión. Si, lógicamente juntas.
El sábado por la mañana vino el fiscal a la prisión y se reunió con la directora. Luego nos hicieron llamar a Martina y a mí. Cuando estábamos presentes dijo
FISCAL: bueno no habrá juicio con el grupo orientales, porque por un trato abreviado confesaron todas las atrocidades a cambio de 30 años de condena, en lugar de cadena perpetua sin salida. Cuando salga de acá no podrán joder a nadie más. En cuanto a Uds. acá tienen el sobre por el cual el lunes próximo estarán en libertad. Quiero agradecerles la valentía que mostraron para deshacer esa red.
AMBAS: a dúo, muchas gracias Sr.