DOBLE VIDA
2ª parte
Llegue al hotel en taxi, baje y me apersone en conserjería. Indique a quien venia a ver y llamaron, previamente por teléfono, y luego me indicaron que subiera. Tome el ascensor hasta el 3º piso, bajo la mirada provocadora del ascensorista. Ubique rápidamente la habitación. Me pare frente a ella, respire profundo y golpee la puerta. A los pocos segundos apareció un alemanote grandote y robusto.
PAULA: Frank? Soy Paula.
FRANK: hola, pasa por favor y siéntate. Quieres tomar algo. Yo tomo whisky
PAULA: (solo para darme un poco de valor por ser mi primera vez en eso) bueno, pero media medida, solo para no despreciarte.
Me sirvió y solo tome un poco, más que nada de nerviosa que estaba. Quería hacer las cosas bien porque luego le dirían al conserje y este me hacia mas propaganda. Si se quejaban seguro me dejarían de lado.
PAULA: (decidida y ansiosa, como sacándome un peso de encima) bien Frank, tu dirás que es lo que quieres.
FRANK: la verdad eres hermosa y quería todo de vos
PAULA: gracias.
FRANK: pero viendo las fotos me entusiasme con la colita. Me la das y luego te vas. Cuanto?
PAULA: (pensándolo) si es eso y nada mas 3.000 dólares.
FRANK: con algunos besitos
PAULA: besos en la boca no.
FRANK: no a la pija.
PAULA: esta bien, paso a la toilette y salgo enseguida.
FRANK: si adelante.
Entre al baño puteando, justo mi primer cliente y quería la cola. Me la lave y menos mal tenia vaselina, así que unte bien el culo con ella. Salí solo con sostén y tanga.
FRANK: (tirado en la cama, con su voluminoso abdomen y en calzoncillos) vaya que si, eres hermosa, las fotos no mienten
Me acerque y tire mis tetas sobre la cara de él. Saco mi sostén y comenzó a morder y lamer mis pezones. Yo trataba de no involucrarme, ya que sabia de mis propias debilidades. Tire de su calzoncillo y logre sacarlo, quedando al desnudo un respetable miembro envuelto en una pelambre de pelos. El entretanto saco mi tanga y vio mi depilada concha y la beso, mientras sus dedos trataban de penetrarme en el culo. Trataba de ser mecánica pero no podía o no sabia, mejor dicho y comencé a mojarme. Me puse en cuatro patas tratando de que no diera cuenta de mi mojadura y me penetrara de una vez por todas. Él se puso detrás mío, a coloco en la puerta de mi culo y empujo. Yo trate de abrirme lo más posible, pero igual me dolió. Entro a moverse dentro de mí y yo acompañaba su ir y venir, hasta que por fin lleno mi culo de leche. Cuando acabo estaba jadeante. Lo bese en la mejilla y fui al toilette a lavarme. Salí me dio el dinero y me fui.
Cuando llegue a planta baja, respire tranquila pensando que ya debute en este oficio de servicio de hotel. Guarde los tres mil en mi sostén y pedí un taxi. Fui al departamentito, tire el dinero sobre la cama y lo levantaba y besaba. Luego me desnude y me metí en la ducha recontenta. Cuando terminaba de bañarme sonó el celular especial y atendí presurosa. Me indicaron de un cliente ya en otro hotel. Me vestí y fui. En el taxi pensé en lo fácil que era hacer dinero. Mire y reloj y eran las dos de la madrugada, había tiempo todavía. Llegue al hotel y me indicaron habitación 420. Hice lo mismo que antes subí por el ascensor y frente a la puerta 420, me detuve y golpee. Se abrió la puerta y tuve que bajar la mirada, pues el hombre no media más de 1,20 creo. Un enano
PAULA: (en ingles) hola, eres Ernest, soy Paula la chica que esperabas.
ERNEST: (En español entendible) hablo tu idioma bastante, pasa y siéntate.
Entre y me senté en el sillón grande, cruzándome de piernas a fin que me observara. Él se sentó en sillón mas chico. Sus pies no llegaban al piso, colgaban como los de un chico.
PAULA: bien tú dirás que quieres hacer?
ERNEST: mira, viéndote quiero hacerte de todo, pero hay mas
PAULA: (me quede extrañada, mire a mi alrededor a ver cuantos eran) explícame lo que quieres y que es eso de “hay mas”
Pensé se me vendría con una troupe de enanos al mismo precio. La verdad era para salir corriendo.
ERNEST: desde que mire tus fotos pensé “esta es”. Quiero cogerte de la forma que se me ocurra en el momento. Todo lo que resta de la noche hasta la 10 de la mañana. Soy muy activo ya lo veras.
PAULA: pero tu solo, no más tipos?
ERNEST: seguro, yo solito.
PAULA: bueno te va a salir un poco salado. Digamos unos….
Con su mano extendida detuvo mi respuesta
ERNEST: espera no te apure, hay más
PAULA: mas? A que te refieres?
ERNEST: a las 9 o 10 saldremos del hotel y te llevare a una boutique de marca. Ahí comprare para ti un hermoso vestido y media negras caladas. Luego en una zapatería unos zapatos con tacos agujas y volvemos.
Pensé, me toco un loco, me quiere vestir de princesa para volverme a coger.
ERNEST: luego nos vestiremos e iremos a una convención que tengo. Tú vendrás como mi concubina, entiendes ahora.
PAULA: adonde es? (mi temor era ir a un lugar lleno de abogados y alguno me conozca)
ERNEST: en una mansión a 50 km de acá.
PAULA: como estoy segura que no es una trampa y no vuelvo más
ERNEST: puedes preguntar al conserje, siempre que vengo a este país hago eso y todas regresaron conmigo.
PAULA: bueno, luego le preguntare, pero esto es re salado
ERNEST: perdona, el precio lo pongo yo. Te llevaras el vestido, las medias y zapatos y unos 7.000 dólares, esta?
Me quede helada y solo atine a asentir con mi cabeza. Ropa, zapatos y siete mil verdes no eran para dudar. Tome el teléfono y llame al conserje, a quien conocía pues era mi contacto. Y me informo que era un tipo de fiar y pagador. Que fuera tranquila.
PAULA: esta bien, hecho pero deposita el dinero en recepción a mi nombre en un sobre.
ERNEST: esta bien, eres desconfiada. Ya veras que querrás salir conmigo otra vez por lo generoso que soy
PAULA: tengo que asegurarme, disculpa si te ofendo.
ERNEST: estas en tu derecho, pero vamos a nuestro
PAULA: si, voy a la toilette y vengo enseguida.
Fui y lave en el bidet, me saque toda la ropa, tome de mi bolsón un baby doll negro tranparente, sin sostén pero como me puse la tanga blanca. Pensé en lo extraño que era el enano al contratar así mis servicios. Luego pensé que nunca había sido cogida por un enano y eso aumento mi calentura. No podía dominarme, era inútil estaba condenada a acabar como una perra con cualquiera que sea. Me arregle un poco el maquillaje y me eche un poco de perfume en las tetas, cabello y mi cuello y salí lista a recibir al cliente.
Cuando entre al dormitorio, este estaba dándome la espalda y desnudo. Parecía un niño y cuando se dio vuelta al sentir la puerta del baño, me di cuenta que de niño no tenia nada. Tenía una pija larga y gruesa que seria la envidia de cualquiera. Me acerque. Al estar frente a él me hizo arrodillar para estar más o menos a su altura y oliéndome me despojo de mi baby doll. Me abrazo y beso mi cuello, mordiendo el lóbulo de mi oreja. Me hizo reclinar sobre la alfombra hasta ponerme horizontal y me saco la tanga, quedando totalmente desnuda a su disposición. Se tiro sobre mí, con su pija a la altura de mi concha, mientras su cabeza apenas pasaba mis tetas. Yo estaba toda mojada. El al darse cuenta de ello se rio y metió cómodamente su pija en mi concha. Empezó a ir y venir y yo no aguante más y enseguida un orgasmo invadió mi cuerpo. El al notarlo se rio de ello, siguiendo con tranquilidad su ir y venir, mientras yo desesperada me abrazaba a él, buscando saciar mi deseo. Acabe a lo loca, mientras él seguía entrando y saliendo de mi concha. Me empecé a desesperar nuevamente y trate de apurarlo y acabar juntos. Cruce mis piernas a su espalda y apreté su cuerpo al mío. El besaba y mordía mis tetas y yo entre en la desesperación de hacerlo acabar, mientras mordía mis labios tratando de retener mi orgasmo. Al final el envaro su cuerpo llego a fondo y acabo al tiempo que yo deje que viniera uno de los mejores orgasmos de mi vida. La saco y me hizo sacar el profiláctico de su pija. Lo lleve al baño y lo tire en un cesto que había ahí. Cuando volví él sonreía
ERNEST: veo que no solo eres puta por el cobro, sino que también te gusta para gozar no creo que sea por mí, lo debes hacer con todos no?
PAULA: si, con todos. No se porque me pasa eso. Las prostitutas gozan cuando ellas quieren, pero yo no puedo contenerme y exploto y la verdad no se porque.
ERNEST: (se levanto del suelo y dándome la mano me hizo parar) bien vamos a la cama.
Una vez en la cama, saco otro profiláctico e hizo que se lo pusiera. A medida que lo ponía, su pija crecía, mientras él daba chirlos a mis nalgas. Me hizo poner en cuatro patas y se paro detrás de mí. Yo espere con mis nalgas bien abiertas la entrada en mi culo de su pija. Entro y pegue un grito contenido. Soporte todos sus embates, siendo golpear sus testículos en mis nalgas. Me dolía como la puta madre, pero no podía quejarme. El pasó sus manos por delante de mí y tomando mis tetas, empujaba más. Luego su mano izquierda pellizcaba mi pezón, mientras la derecha fue a mi concha y ahí si me encendí yo. Con sus dedos pellizcando mis labios vaginales y tomando mi clítoris paseandero entre a acalorarme con la mala suerte que el ya acababa en mi culo. La saco y se tiro al lado, mientras yo estaba a mil de caliente. Él al darse cuenta me dijo que me masturbara para él. Con la poca vergüenza que me quedaba acabe con dedos como una perra, mientras él sacaba fotos del momento. Me tire a su lado jadeante. Y nos quedamos dormidos ahí.
A las 8 de la mañana golpearon a la puerta y yo tape con la sabana mis desnudeces, mientras él, poniéndose una bata, abría la puerta. Entro un camarero, me miro al tiempo que yo tapaba mi cara. Dejo el desayuno sobre la mesa y se marcho. Nos sentamos a desayunar. Luego nos bañamos y mientras nos vestíamos para ir de compras programadas, él pidió un taxi. Fuimos a una boutique y e hizo probar algunos vestidos, pero no lo conformaban. Cuando nos retirábamos laencargada trajo uno de hermosos colores. Ernest me ordeno que lo probara. Era un vestido de varios colores en franja, con la espalda al descubierto y escotado por delante. Bien ceñido al cuerpo hasta la cintura. Ahí la tela se hacia como un vestido de bailarina clásica, tapando solo mi culo y concha, pero para ello no debía agacharme o sentarme, sino dejaba al desnudo mis órganos sexuales. Le encanto y lo compro, junto con unas media negras caladas. La franja de mis pechos era de color claro, cremita y se notaban el volumen de mis tetas y remarcaban mis pezones. Luego fuimos a una zapatería donde compro unos zapatos aguja, para luego volver al hotel. En mi mano llevaba las dos bolsas compradas e iba pensando donde me llevaría con ese atrevido vestido y semejantes zapatos.
Entramos al hotel, pido el almuerzo para dos, mientras me indico que me bañara. Luego almorzamos los dos. Al rato me hizo vestir para salir, eran las 13 horas. Rogaba no encontrar a ningún conocido al salir del hotel que me viera con semejante atuendo, para colmo sin sostén y tanga. Pidió un taxi y esperamos en la entrada.
Yo trate de moverme lo menos posible para no mostrarle al ascensorista y a los de recepción mis atributos, porque ya bastante veían mis pechos apretados y mis pezones en punta.
Subimos al taxi y dio una dirección.