- ¿Oiga señor lobo, puede salir a jugar? - Caperucita saludó así al Lobo como hacía casi todos los días desde que se encontraron por primera vez en el bosque.
-Tus tareas para hoy. -Susurro en tu oído aprovechando la cercanía. Con una sonrisa tan pícara como indiscreta devoras las líneas ahí mismo. Tu cara es un poema de excitación y vergüenza pero sonríes confiada.
Como única indumentaria lucias unos vertiginosos tacones negros que interprete como sutil indicación del rol que deseabas tomar este día. Con tus gestos, palabras, o directamente con tu pie desnudo bajo la mesa y sobre mi sexo, mantuviste mi excitación mientras desayunábamos rápidamente
Como siempre tu me esperas despierta pero esta vez no te arrojas sobre mi aprovechando mi momentánea indefensión al cruzar el umbral cargando con las maletas.
-Toda la semana ignorando mis peticiones sutiles o explicitas y ahora pretendes obtener sexo disfrazando tu cuerpo y actitud. -Piensa la parte mas frustrada de mi, mientras mi cuerpo lucha contra el cansancio acumulado e intenta responder a sus sensuales preparativos.
Lo que pudiera pensar ante esta escena un vecino bajando la escalera se filtro con una lentitud increíble en mi consciencia. Y pudo pasar un largo minuto hasta que reaccione cerrando la puerta tras de mi, pero ella permaneció en la misma postura durante todo ese tiempo.
Saber que todavía faltaban días para nuestro reencuentro no aliviaba su excitación. Inconscientemente busco inspiración para su alivio en la red que su móvil le acercaba. El aviso de un correo no leído la sacudió como un chispazo que partiendo de su entrepierna recorrió todo su sudoroso cuerpo.
-Los lunes son para que explores tus intereses. Pero sobre todo para que satisfagas tus necesidades. Lo que necesitas hoy es entregarte, no pensar en nada. ¿No fue eso lo que me dijiste? Ahora haz lo que te he ordenado.
- Esa foto es para mi Profesor? - Pregunto Soledad.
-Imagina que supieras que tu sobrino de doce años al salir del partido esta tarde se vera envuelto en una pelea de hinchas y morirá con la cabeza aplastada contra un bordillo. Imagina que la única forma de impedirlo fuese que colocases ahora mismo tus bragas sobre esta mesa...
A veces el trabajo te quema en otras ocasiones solo te calienta. La historia queda abierta intencionalmente, espero recibir sugerencias sobre como continuarla.
No es un gran relato solo un buen recuerdo. La amante cruza la puerta entre sus besos. Las manos del que esperaba dejan de hacerlo y se deslizan con lujuria y ternura por su cuerpo. El saludo ha sido sin palabras, el no necesitaba hablar, necesitaba sentirla.
Su aspecto cabizbajo la atrajo inmediatamente. La bonita falda de cuadros y la ligera blusa blanca estaban descolocadas y arrugadas... Estamos pensando en ilustrarlos con fotos amateur si hay alguna voluntaria la esperamos en el segundo circulo de http://ilinferno.forumcommunity.net/
Un suave gemido me saca de mi sueño. Por un segundo pienso en preguntarte sí estas bien. Después me pregunto si no seguiré durmiendo. A escasos centímetros de mí estas acariciando tu hermoso cuerpo, recorriendo con tus manos las secretas sendas que tantas veces he ansiado explorar yo. Mordiendo tu labio buscando aquello que durante demasiado tiempo te has negado.
Nervioso intento no derramar la infusión mientras ella me deja admirar su garganta mientras bebe la roja Coke.
Mientras era guiada por la joven doncella a trabes de la mansión tuvo la impresión de que sus cometidos iban a exceder el simple secretariado. Quizás fuera el repicar de los agudos tacones de la doncella, o lo escueto de su uniforme.
Hace unos instantes llenabas mi cama como yo llenaba tu cuerpo. Lo recuerdo entre las brumas del sueño, tal como lo viví.
El sudor se acumulaba incómodamente entre ella y el asiento...
Saltó del coche impaciente como una fiera que hubiera permanecido demasiado tiempo encerrada. El viento jugo con su pelo prisionero hasta que ella lo libero. Mientras yo la observaba derrochar esa energía que no podía dejar de admirar, corriendo de un lado a otro. Abría sus brazos y dejaba que el viento, como un amante invisible, bailara con ella.
Elevo su mirada y observo a Johan y su Katana.
Mantuvo en ella su severa mirada durante todo el examen impidiéndola consultar las notas que había ocultado bajo la falda de su uniforme. Cuando, al acabar la clase, le pidió que la levantara ya lo esperaba.
Entro en la oscura habitación solo la luna ilumina una mujer que adivino observándome. Su silueta marca un bello cuerpo desnudo. Y su cabello castaño y rizo, le cae por los hombros.
Cuando la veo entrar en la garita temo haberme dormido y estar soñando. Lleva un chándal y tiene aspecto cansado. Su beso me descubre que ella también me ha echado de menos. Es un beso eterno que no me atrevo a acabar. Se sienta muy cerca de mí mientras me cuenta, excitada, su viaje. Cuando sus padres la llaman pone su mano en mi paquete y, al oído, me pide quedarse.
No era una tarde normal. Me había levantado agobiado por un sentimiento indefinible. Solo tenia claro que el remedio a mi angustia estaba en ti. Verte fue casi suficiente para aliviarme. Pero aun así te pedí que te escaparas esa tarde conmigo. Daba igual lo que hiciéramos, solo quería estar a tu lado. Así que te propuse ir a mi casa para ver esa película que hacia tiempo te esperaba en mi ordenador.
Cuando publique este en ilinferno.forumcommunity.net añadi una larga advertencia sobre lo desagradable que podia resultar. En este caso, y a pesar de ser lo mas fuerte que he escrito, no creo que haga falta.