Seguimos preparando el regalo para Emi, me hacía mucha ilusión y quería sorprenderla, mi tía era mi cómplice. Valió la pena
Los preparativos para el fin cumpleaños nos ocuparon todo el día, mi madre estaba impaciente por saber, no se esperaba el afecto que le teníamos, empezamos el fin de semana en el hotel.
El cumpleaños de Emi me cogió de sorpresa, menos mal que mi tía Ana me ayudó a comprarle un regalo especial.
Un viaje de compras a la ciudad con Alba preparando el fin de semana, de paso visité a mi tía Ana, un día perfecto.
Mi tía Julia y Ricardo tuvieron un mal entendido, por fortuna se aclaró todo y yo empecé a preparar el cumpleaños de mi madre.
Los proyectos de mis tíos me orientaban hacia los negocios, un mundo nuevo para mí, por suerte la familia me apoyaba. Visitando la tienda de mi tía.
Los proyectos de mis tíos me orientaban hacia los negocios, un mundo nuevo para mí, por suerte la familia me apoyaba. Visité la tienda de mi tío.
Yo suelo cumplir mis promesas y me propuse ayudar a Carmina y a Carol, Ricardo me ayudó como siempre.
El tío Culebra, que así le llamaban era desconocido para todos, cuando lo conocí me quitó el miedo por los reptiles, también me quitó otra cosa.
El tío Culebra, así le llamaban era desconocido para todos, pero fue quien me desvirgó, también lo había hecho a mi abuela.
Yo suelo cumplir mis promesas y me propuse ayudar a Carmina y a Carol, Ricardo me ayudó como siempre.
Las gemelas me dieron una tarde fabulosa y de camino a casa me entretuve con el móvil, sin sospechar las consecuencias.
A mi vida monótona de jubilado Disney le dio un giro inesperado, encontré una princesa, pero una de verdad.
El cumpleaños fue un éxito, luego tuve que solucionar un tema técnico a la mujer del farmacéutico y algún otro más, pero todo quedó correcto.
Después de una noche tórrida, mis tíos sufrieron mis bromas, luego recibí mi premio y devolví lo que no era mío.
Soy un viejo pastor de verdad, de los que cuidan ovejas, no tengo ninguna descarriada, bueno alguna sí. Pero una tormenta me devolvió a la vida.
Con mi tía y Emi tenía una gran complicidad y me lo demostraron, me decidí ayudar a mi prima y su amiga con más líos. Mis tíos estrenaron juguetes nuevos.
Preparando los regalos para el cumpleaños de Alba, quiero que sea memorable, cuento con ayuda. Las clientas provocadoras por fin consiguen lo que querían, una fiestecita. El cumpleaños un éxito total.
Voy conociendo a la familia, me han acogido con todo cariño, sobre todo la madre y la hija.
Preparando los regalos para el cumpleaños de Alba, quiero que sea memorable, cuento con ayuda. Las clientas provocadoras por fin consiguen lo que querían, una fiestecita.
Dicen que una de las cosas buenas que tiene llegar a mayor es que puedes recordar y que recordar es revivir, yo no estoy del todo de acuerdo, hay que vivir primero.
Nos han invitado al cumpleaños de Alba, me encargo de los regalos es una buena celebración, de paso visito a mi tía Ana, está triste.
Dos clientas me regalaron un poder informático, me aproveche bien de él, además ayudé a mi tía con unos problemas administrativos.
La camarera Encarna me puso al día y el policía podía presumir de familia.
Tuvimos que hacer los honores a la rica del pueblo al invitarnos a merendar. También curamos a la alcaldesa.