miprimita.com

Mi madre (3)

en Amor filial

Mi cabeza no paraba de dar vueltas, era la primera vez que follaba y había sido con mi madre y lo peor o mejor que me gustaba y empezaba a ver algo normal en ello, me gustaba dominarla y por lo que parecía ella ser dominada.

Me estaba sintiendo como dueño del mundo, parecía que sería capaz de cualquier cosa, con ella no tenia más que chascar los dedos para que se pusiera a mis ordenes y se dejara hacer lo que yo quisiera, por primera vez estaba disfrutando de una hembra me hacia sentir su dueño y seño, sabia que cuando llegara mi padre se acabaría así que trataba de disfrutar lo máximo que podía en todos los momentos que eran muchos ya que mi juventud me lo permitía.

No paraba ni un momento de tocarla, acariciaba sus nalgas, le besaba le iba por detrás y suavemente le besaba el cuello mientras mis manos estrujaban las tetas y la acariciaba hasta llegar a su pubis, ella se dejaba no decía nada, sentía la misma sensación de cuando era un niño y por reyes tenia un montón de juguetes era tanto el nerviosismo que no sabía a cual atender e iba de uno a otro como un poseso y no los dejaba solos ni por un momento.

Termino de hacer la comida no sin dejar de verla y tocarla en todo momento, paraba solamente para corresponderme con su lengua dentro de mi boca, nos sonreíamos y se volvía para seguir haciendo la comida, parecíamos dos enamorados alocados

Puso la comida en la mesa y sin pensármelo dos veces le dije: - desnúdate quiero que estés comiendo con migo desnuda, - pero mira que no paras, ¿ no te cansas nunca, ni de mí?- no, desnúdate anda delante mía, se quito la blusita quedando sus pechos al descubierto, las manos se fueron hacia atrás para desabrochar el botón y la cremallera de su falda la dejo caer al suelo como no llevaba ropa interior quedo por completo desnuda delante de mí con su mirada amenazante en mis ojos esperando a que le dijese algo más o me abalanzara sobre ella, su lengua recorría la comisura de sus labios mojándolos, sus brazos caídos a lo largo del cuerpo mostrándome todo su esplendor, su cuerpo su mirada me estaba diciendo " a que esperas ya me tienes como querías,¿ que me vas hacer?"- acaríciate los pechos, al principio se quedo un poco parada ya que no lo esperaba pero sin decir nada su mano se fue hacia una de sus tetas y las empezó acariciar la derecha mientras no me quitaba la vista de encima, - síguete acariciando, quiero ver como lo haces, una de sus manos iba hacía su pubis,- no cariño, sigue con las tetas por favor, sus manos seguían acariciándose cada vez con más ganas, estaba de pie frente de mí, tenia ganas de follármela de nuevo pero también quería verla como se tocaba eso me estaba excitando al máximo.

Se fue soltando poco a poco y acariciándose con mas ternura y disfrute seguía tocándose sus pechos su lengua también los acariciaba majándolas ¡ que espectáculo! mi madre delate mía acariciándose y disfrutando con sus propias manos y yo como único espectador,- que buena esta, eres preciosa y me traes loco, le dije mientras ella continuaba. – tócate el coñito ahora, quiero ver como lo haces. Su mano bajo hacía su sexo mientras con la otra no dejaba de acariciar sus tetas y su cuerpo, llego al pubis lo acaricio despacito,- ábrete las piernas un poco, y métele un dedito, las abrió y con ellas su rajita sonrosada se despego dejando un surco mayor; un chocho gordito se separo en dos del cual se veía asomar algún pliegue de sus labios , se llevo un dedo a su boca lo metió despacio lo chupo para llevárselo a su coño, su mano no dejaba de acariciarse por todo el cuerpo cada vez más rápido, su boca un poco abierta dejaba salir la punta de su lengua y acariciaba los dientes los ojos entreabiertos llenos de pasión no dejaban de mirarme y estudiar mi reacción en todo momento, - pajéate un poco, quiero ver como lo haces, estando yo delante tuya y viéndote.

No se si me gustaba más el espectáculo o que me cumpliera las ordenes que le daba, yo era el que mandaba y ella había asumido el papel por completo sin protestar.

Sus dedos empezaron a moverse por su sexo, la respiración por momentos se le entrecortaba, cuando daba con algun punto sensible la hacía estremecerse sus caderas se movían hacía delante su dedo corazón entraba y salía de su coño- uuuf uuuuf aaaaah aaaaah, cariñoooo aaaah, decía sin dejar de verme, de vez en cuando cerraba los ojos para sentir mejor, la comida ya estaba fría pero ninguno de los dos sentía hambre – mete los dos dedos dentro, el índice y el anular entraron y salían cada vez más rápidos,- aaah cariño aaaah estoy muy caliente, fóllame por favor, te necesito, métemela dentro rómpele el coñito a tu mamita anda cielo.

Yo no decía nada seguía viendo y disfrutando cada vez más fuera de sí me estaba pidiendo que la montase, estuve a punto de levantarme y clavarla hasta el fondo de su alma , pero me contuve, quería ver más estaba disfrutando con ello como una hembra se pajeaba a mis ordenes,- quiero verlo mejor, ponte un pie encima de la silla, la levantar la pierna me vino a la mente, la primera vez que la había visto salir de la ducha y la había encontrado con la pierna levantada y saliendo de la bañera todo su coñito rapado.

Lo tenia completamente mojado sus dedos y su sexo brillaban por su secreción, como si supiera ya de antemano lo que quería con una mano separo sus labios para enseñar por completo su precioso coño mostrándomelo enteramente, mientras que con la otra un dedo empezó a recorrer su coño de arriba abajo, lo mojaba en su boca lo saboreaba y volvía a su coño nuevamente, me estaba dando todo un recital, no podía se esa mi madre decía para mi era como una perra en celo puesta a mis ordenes y para mi disfrute, pero como dije a ella también le gustaba recibir mis ordenes sin rechistar y sentirse inferior delante de un macho dominante que era su hijo.

aah mi vida, que me estas haciendo, nunca me sentí así por nadie estoy loquita dejándome hacer lo que quieras, pero no soy capaz de decirte que no dime lo que quieres de mí cariño lo que quieras aaaah uuuf soy completamente tuya, te pertenezco, lo decía susurrando mientras se pajeaba cada vez con más ganas.

Estaba a punto del orgasmo,- deja no sigas baja la pierna,- noo nooo me hagas eso por favor lo necesito uuuuuf uuuuf, me va dar algo si no me corro.

Retiro la mano y quedo mirándome sofocada su cuerpo parecía que se convulsionaba, sus pechos subían y bajaban con la fuerza de su respiración, estaba jadeando delante de mí, por su boca bajaba un reguerillo de baba y sus ojos como saliéndose de sus orbitas, de pie delante mía apretaba su sexo contra sus piernas, sus muslo subían y bajaban apara sentir su caricia y oprimirle su sexo desbocado, su cuerpo estaba fuera de sí se sujetaba a la silla para no caer sus piernas no paraban y le temblaban,- fóllame por favor te lo pido hazme correr, o me vuelvo loca aquí mismo, no puedo más.

Yo tampoco podía aguantar más, la tenia completamente fuera de sí y eso que la había follado no hacia mucho, me levante me fui hacia ella su cara estaba convulsionada completamente roja,- ven, ven mi vida hazme tuya, te necesito más que a nada en el mundo. Me quite los pantalones ella me hecho la mano a la polla parecía como si estuviera enganchada a una droga y lo necesitaba más que nada en el mundo no pudiendo esperar ya más.- ponte de rodillas, le dije, quise hacerla sufrir aún más eso también me tenia enganchado, le metí la polla en su boca se la metió hasta el fondo como si quisiera tragársela entera empezó a chupármela como una loca, su boca se lleno de saliva que salía por sus labios mojándose la cara y sus pechos. Casi estaba apunto de correrme retire la polla de su boca,-¿quieres que te folle, como a una perrita? – siii cielo lo necesito sería capaz de cualquier cosa, -¿serias capaz de que te follara otro tío, estando yo delante?- lo que quieras lo que quieras mi corazón. Le di la vuelta retire los platos y la puse encima de la mesa, le clave la polla por detrás, entro sin ningún esfuerzo, empecé a bombear con toda la fuerza que era capaz, la mesa se movía sus caderas y sus nalgas no paraban.-aaaaa aaah así asiiii dale dale, folla a tu perrita uuuuf uuuuf.

Nos corrimos los dos al mismo tiempo, su coño quedo lleno de mi leche, cuando me retire aún se quedo tumbada en la mesa le acaricie la espalda y le bese a lo largo de su columna, tardo unos segundo en recuperarse.

Se me abrazo apretando su cuerpo desnudo dándome un morreo en toda la boca, uf cariño jamás me había sentido así no se que me esta pasando pero me tienes loca y fuera de mí y me da vergüenza, por dentro siento que eres mi hijo pero no puedo dejar de sentir esto y la verdad cuando me pides que haga esto o lo otro siento como un escalofrió que me recorre el cuerpo y tengo que hacerlo quedo sin voluntad.

No te preocupes mámi, mientras no lo sepa nadie, a nadie hacemos daño, y además cuando venga papa y mi hermana esto se acaba.

kgatopardo@hotmail.com