MI HIJA (3)

La relación con mi hija, se estaba convirtiendo en un juego peligroso, pero ese mismo peligro alimentaba la relación por el morbo que nos provocaba.

Cada día era más atrevida y cuando estaba en casa, no paraba de buscar la ocasión de poner a prueba cual podía ser el límite.

Si se cruzaba conmigo, siempre intentaba tener algún roce, arrimaba sus tetas para que tocaran con alguna parte de mi cuerpo, algunos sitios para ella siempre eran estrechos y su culo se pegaba a mi cuerpo para que no olvidara mi deseo por ella.

Había tomado la costumbre de que cuando venia con falda a casa, nunca se ponía bragas, se situaba frente a mí y poco a poco con mucho descaro, comenzaba a abrir las piernas mirándome directamente a los ojos para ver mi reacción, de sobra sabía ella cual iba a ser mi reacción/erección ante la visión de su delicioso coño, mi polla blincaba como un potro desbocado y mi corazón se ponía a tope, a veces metía su mano entre las piernas y comenzaba a pasar sus dedos de arriba  abajo por la raja de su coño que inmediatamente empezaba a destilar  jugos , metía los dedos  en el interior de su coño y los chupaba  mirándome fijamente después con cara de autentico vicio, podéis  imaginaros que no solo era ella la que se mojaba y soltaba líquidos, la cara de gusto que ponía era inimaginable, nunca habría podido llegar a pensar, que mi hija fuera tan viciosa y tan caliente, cada día que pasaba, las sorpresas se sucedían sin solución de continuidad, y cada una de ellas más atrevida.

Un día mi teléfono me aviso de la entrada de un mensaje de mi hija, con un video agregado, como conocía como se las gastaba últimamente, espere a estar solo para poder visionarlo.

Resultó ser una grabación que se había hecho a si misma en su casa, antes de poner la grabación había añadido una frase que ella sabia se iba a cumplir sin ninguna duda.

¡! Papá cuando termines de ver este video, no te abras dado cuenta de cómo no has podido controlar la inmensa corrida que mancha tus pantalones.

Con este inicio de mensaje, podéis imaginaros que yo tenía la certeza de que algo gordo me había mandado y no tarde en abrirlo para ver que era.

Al comienzo de la grabación se la veía encima de su cama, totalmente desnuda y con la imagen centrada en el triangulo de su coño, demarcado por sus piernas abiertas y el final de su monte de Venus.

Comenzó a darse un masaje suave con un poco de crema que extendió en su raja y que centraba sobre todo en su clítoris, recorría con estudiada lentitud toda la extensión de su raja, presionando puntualmente cuando llegaba a su clítoris, provocando ligeros sobresaltos en su cuerpo, a medida que su calentón subía, su jadeo se oía más y más, comenzó a meter el dedo corazón en su coño poco a poco, lo deslizaba de arriba abajo de su raja y luego lo metía hasta el fondo, después de un tiempo comenzó a meter dos dedos que incrustaba en su coño cada vez más rápido, produciendo un sonido se chapoteo producto de los líquidos que su coño estaba soltando, su cuerpo se arqueaba sintiendo  el placer máximo que esta penetración le proporcionaba.

Cuando sacaba sus dedos  impregnados de los jugos que producía la calentura de su coño, se los llevaba a la boca para chuparlos con placer y lujuria desde la punta de los dedos que metía en su boca, después deslizaba su lengua hacia abajo llegando hasta casi la muñeca de su mano donde habían llegado estos jugos.

Era evidente que si los planos de la grabación se modificaban dependiendo de lo que ella hiciera, más cerrado o más abierto, más cerca o más lejos, alguien estaba con ella haciendo la grabación, como podéis imaginar, esto si cabe incremento mi calentón mucho más, esperando ver quien estaba con ella grabándolo todo y encima a sabiendas de que mi hija me lo iba a mandar a mí una vez terminada la grabación.

Yo seguía disfrutando de la paja que mi hija se estaba haciendo con la mirada fija en la pantalla del teléfono sin poder ni pestañear, el campo de visión se amplió y vi como cogía un frasco de aceite que comenzó a regar en la practica totalidad de su cuerpo en su parte delantera.

Sus manos comenzaron a recorrer su cuerpo masajeándolo con toda la sensualidad que os podéis imaginar, recorría el contorno de sus tetas aplastándolas plácidamente hasta llegar a sus pezones, los pellizcaba, reaccionando estos con un endurecimiento inmediato, sus manos seguían recorriendo en caída libre hacia la parte baja de su vientre, haciendo una ligera presión en el momento que llegaba al comienzo de su monte de Venus.

Su cuerpo seguía reaccionando con ligeros espasmos a estos momentos de sumo placer, continuo su recorrido llegando hasta los labios rosados de su delicioso coño, donde abrió con ambas manos los pétalos de esa flor rosada de olor y placer, donde la cámara pareció quedar prendada de una imagen que a mi me estaba volviendo loco de deseo.

Yo no podía seguir soportando la presión de mi polla en el interior de mis pantalones y tuve que abrirlos para liberarla, saliendo esta al exterior como el naufrago que hundido en el agua, le va la vida en tomar el aire de la superficie.

Mi polla quedo inhiesta en dirección al techo y con el capullo en su tensión máxima, seguro que ella había imaginado esta situación sabiendo que de seguir así, no aguantaría mucho.

Comenzó de nuevo a meter sus dedos arqueandolos con los labios exteriores de su coño cada vez con más rapidez, el ritmo de metida se volvió trepidante y comenzó a decir lo bien que se lo estaba pasando.

Me voy a correr, aaaahhh, me voy a correr, ooooohhh que gusto, estoy pensando en tu polla papa, imagino que mis dedos son tu pollón y que me lo metes hasta dentro, y entonces me pongo más cachonda aún, vas a ver como me corro papa, no pierdas de vista como se corre la guarra de tu hija, me corrroooooo, me corrrooooo, aaaahhhhhh, su cuerpo se arqueo  en una postura difícil de aguantar mucho tiempo, mientras no dejaba de meter y meter sus dedos hasta lo más profundo de su coño.

Entonces dejo caer su cuerpo en todo su peso en la cama, quedando inmóvil pero con la respiración agitada que demostraba cuanto había disfrutado de esa corrida, sacó los dedos del interior de su vagina impregnados de los líquidos de su inmensa corrida y los chupó hasta dejarlos limpios del todo, no dejando de mirar con ojos de vicio directamente al objetivo de la cámara.

Yo tenía mi polla a punto de reventar y cuando empezaba a machacármela para soltar toda mi leche, vi como la cámara empezaba a desplazarse hacia la cama donde estaba mi hija y ella alargaba su manos para cogerla y ser ella quien grabara a partir de ese momento, cuando vi esta maniobra, mi expectación para comprobar por fin quien estaba con ella se disparo, deje de machacar mi polla y centre toda mi atención en quién seria la persona que había manejado la cámara hasta ese momento.

De pronto vi la cara de Susana con una sonrisa espléndida, ella es una amiga de mi hija de la infancia, con un cuerpo imponente más por tamaño, mide más de 1’80 mt, que por belleza, y que está bastante fuerte.

Entonces mi hija comenzó a bajar la imagen desde la cara de Susana , empecé a recorrer con mi vista lo que la grabación me ofrecía, las tetas son realmente generosas, más incluso que las de mi hija, pero cuando vi lo que venía a continuación, me quede sin respiración, al llegar la imagen a la altura de sus caderas, tenía puesto un arnés con un aparato impresionante, no podía llegar a imaginarme como eso iba a poder entrar en el coño de mi hija.

Susana se agacho poniendo su cara a la altura del coño de mi hija y su boca y su lengua empezaron a comérselo, daba pequeños mordiscos por encima de su clítoris y su lengua recorría toda la dimensión de la raja del coño de mi hija, esta a duras penas conseguía mantener la cámara grabando sin que esta se moviera más de lo necesario por el gusto que la estaba proporcionando, sus jadeos se hacían cada vez más fuertes y grababa como su amiga metía su lengua en el interior de su cueva y chupaba y chupaba su clítoris consiguiendo que mi hija empezara a gritar, me gusta como me lo comes, y me gusta que mi papa vea cuanto disfruto contigo, cada vez estaba más excitada y viendo que esto la iba  a llevar a un orgasmo un tanto prematuro, con una de sus manos empujo suavemente hacia atrás la cabeza de su amiga.

De nuevo erguida frente a ella, Susana cogió el frasco de aceite que mi hija había utilizado para magrearse el cuerpo y embadurno generosamente el falo del arnés para poder meterlo en el coño de mi hija, también vertió un buen chorro en el coño esparciéndolo y metiendo un poco con los dedos en su interior.

Vamos cariño métemelo todo dentro para que mi padre vea como follas a la guarra de su hija, Susana apunto el enorme capullo en la entrada y poco a poco ejerció presión para que entrara, al principio solo entraba unos centímetros y lo volvía  a sacar, hasta que la dilatación del coño de mi hija permitió que poco a poco se lo metiera entero, vamos cariño la decía, rómpeme el coño, follame hasta que me corra, Susana excitada por estos comentarios empezó a cabalgar a mi hija cada vez con más ímpetu dándola una follada de campeonato, su ritmo comenzó a ser frenético, tenia una fuerza descomunal y mi hija no parecía que pudiera aguantar más, pero cuando más cerca del orgasmo se encontraba, saco el inmenso pollón y levantando las piernas de mi hija por encima de sus hombros, chorreo con aceite el agujero del culo que tanto me había impresionado cuando me lo enseño en su casa al abrir las piernas de espaldas a mí y sin muchos miramientos empujó la cabeza de la polla forzando contra la entrada del culo,  pese a que en un principio mi hija se quejaba del daño que le estaba haciendo, Susana hizo oídos sordos de esta queja y consiguió meterla toda entera, mi hija gritaba sin control por el daño y el placer que al mismo tiempo sentía, soltando insultos a medida que se acercaba el momento de su orgasmo,

¡! hija de puta me estas rompiendo el culo, pero me encanta como me follas, vas a conseguir correrme sin sacarla de ahí, dame fuerte, más fuerte, le decía, el ritmo se incrementó aún más y era difícil por los pollazos que Susana le daba que la imagen grabada no estuviera movida, pero el sonido era perfecto de lo que estaba disfrutando, de pronto llego el momento de la explosión y fue bestial

¡! Me corrrooooooo joder, me corrroooooo, me estas matando de placer, como me corrroooooo, Dios que corridaaaaaaa, papa me corrrroooooo, me corrroooooo.

Ante esto, como mi hija había vaticinado, mis huevos reventaron y mi corrida salpico todo el entorno donde me encontraba y parecía que nunca tendría fin, fue una corrida sin haberme tocado en ningún momento de las que hacen historia, inigualable.

Epilogo: Susana sacó el pollón del culo de mi hija que quedo abierto y palpitante,  bebió y chupo los jugos que mi hija había producido en su coño con su orgasmo y esta volviendo la cámara hacia su cara me dio el último mensaje:

Siempre lo conseguiré, junto contigo o en la distancia con otros, soy capaz de hacerte disfrutar al máximo, aunque no lo quieras reconocer, eres mio y cuando te pida algo, lo que sea, no tendrás ninguna fuerza que te ayude a negarte.

Gracias Papa.