miprimita.com

Jugando al doctor con mí primita

en Amor filial

JUGANDO AL DOCTOR CON MÍ PRIMITA

Hola mi nombre es Oscar, lo que relato a continuación, tiene un gran porcentaje de realidad, he modificado algunos nombres y lugares, pero todo ocurrió de la manera que lo cuento.

Esto ocurrió hace muchísimos años, en la que jugábamos mas entre los chicos por que no había tanta computadoras.

Yo vivía en la ciudad de Miramar, es un lugar turístico, pero durante el invierno hay muy poca actividad, y quedamos solamente los residentes.

Tengo una prima llamada Gaby, que es muy bonita, tanto en esa época como en la actualidad, con la que jugábamos bastante.

Por lo general lo hacíamos en mi casa, aunque también en la de ella.

En esa época yo tendría alrededor de 12 años y era bastante inocente mientras que Gaby estaba por cumplir los 11, esa diferencia de edad hacia que ella determinara los juegos, (además de ser bastante autoritaria), a los que por lo general concedía,

Un día me dice

Porque no jugamos al doctor?

Bueno - le respondí.

Eso es común que se juega entre los chicos, (inconsciente o no, supongo que gran parte de los lectores lo habrán practicado), era de alguna manera ir descubriendo el sexo, o por lo menos para ver las partes “prohibidas" de nuestros cuerpos.

La mayoría de las veces que yo era el enfermo, me hacia quedar en calzoncillos, empezaba a revisarme, me tocaba por todos lados, principalmente en la zona de mi pequeñito órgano, me hacia dar vuelta , me metía un lápiz o algo similar por el culo, me pellizcaba mis glúteos, cosas que me excitaban bastante, aunque yo conocía muy poco sobre el sexo, pero lógicamente me encantaba hacerlo..

Cada tanto repetíamos este juego, pero solamente en su casa porque sus padres trabajaban y permanecíamos solos mucho tiempo.

Por supuesto estos jueguitos se fueron incrementando con el tiempo.

Un día me dice –

Hoy te tendrás que desnudar, porque tengo que revisarte a fondo.

Tímidamente y con un dejo de vergüenza, empecé a hacer lo que ordenaba mi prima,. Una vez desnudo, me tire boca abajo, sobre una mesita baja que usábamos de "camilla" donde hacíamos los "exámenes".

Comenzó a "revisarme", a pellizcar mis glúteos para terminar introduciendo ese lápiz por mi ano, tengo que confesar que en ese momento tuve una extraña sensación, sentí que mi pequeñín se paraba, una especie de revolución en mi zona genital, era evidente que me excitaba .

En un momento me dio vuelta, y vio que mi pitito estaba erguido (por supuesto que sería de un tamaño de 5 o 6 cm,), sin mucho esperar lo comenzó a tocar y agitar, le dio una serie de besos, hasta acabar en unas cortas succiones, por supuesto que la situación me encantaba, pero las cosas no llegaron a mayores.

Cuando me tocaba hacer de doctor repetía, con mi prima lo mismo que ella hacia conmigo, a lo que aceptaba gustosa

Por lo general, solamente lograba levantar su vestido, y hacia las cosas a través de él, o de su bombachita.

Un día, decidí tomar yo la iniciativa así que le dije

Hoy la tengo que revisar a fondo, por lo tanto debe desnudarse.

Muy bien pero la bombachita no me la saco. Me contesta

De acuerdo le digo

Se quita su vestidito, los zapatos y se tiro sobre la camilla, boca abajo y comencé mi labor, cuando empecé con la operación "lápiz", al cabo de un rato notaba que exhalaba como una exclamación una especie de aaaaaaaaaaaaaaaaoooooooohhhhh, y unos suaves movimientos, por supuesto que no entendía bien, que le pasaba, me detuve en lo que hacía y la hice dar vuelta.

En ese momento me percate de sus pechitos, que comenzaban a formarse y a asomar unas atractivas tetillas. Continué "revisando a la paciente", empecé a tocar sus tetitas, que me habían intrigado bastante, bajando mis manos de a poco, hasta llegar a su sexo que empecé a tocar,( pero admito que me gustaba más cuando le metía el lápiz a través de su prenda intima). Así estuve un rato, acariciándola, hasta que le comento

Ya está la revisación, levántese.

Me contesta

Hay no doctor, me duele mucho entre las piernas, vea que tengo.

Comienzo a tocar las partes que me pide, y empezar a pasar mi mano entre sus piernas, cuando oigo unos suaves gemidos y una entrecortada voz, que me dice

Siga, siga doctor que se me pasa.

Seguí, hasta que en momento notaba su prenda húmeda, pensé que se le habría salido unas gotas de pis, mientras no paraba de exclamar.

Siga doctor, siga,

En determinado momento, pego unos grititos, como un aaaayyyyyyyyy., contrayendo sus piernas y apretando su mano contra la mía, en la zona de la "revisada", mientras arqueaba su cuerpo, levantando su pelvis. Sentí como una excitación, sin comprender que estaba sucediendo, (cosa que con el pasar de los años determine, que había sido su primer orgasmo.), mientras sus piernas apretaban mi mano, que estaba pegada a su sexo. Bajé un poco su bombacha, aprovechando la situación, durante breves segundos, vi parte de su vagina, cosa que me provocó, la baje un poco más con la intensión de quitársela, pero cometí el error de preguntarle si estaba bien.

Si, si.-contesto., mientras se subía su prenda, apresuradamente.

La encontraba distinta, su aptitud había cambiado, se vistió rápidamente, y me dijo que me fuera que tenía que hacer los deberes para el colegio.

A partir de ese momento jamás volvimos a jugar al "doctor".

Si bien continuamos viendo, con el tiempo fuimos cambiando, la diferencia de edad, los amigos, los estudios todo eso hizo que no nos viésemos con tanta frecuencia.

Pasaron unos cuantos años, yo ya contaba con unos 23 años, tenia mi novia y mi prima estaba comprometida, cerca de casarse. Es de acotar que Gaby con los años se había puesto muy buena

Por lo general nos veíamos poco, ella estudiaba en la facultad, en Mar del Plata, muy cerca de mi ciudad, y yo trabajaba, nos encontrábamos en alguna reunión familiar.

Un día tuve una fiesta en casa de un amigo en Mar del Plata, concurrí solo, por que mi novia se reunía con sus amigas.

Estábamos en la fiesta, cuando veo llegar a Gaby con su novio, nos saludamos estuvimos charlando un rato.

Cuando termino la reunión, le pregunte a su novio, para donde iban, me contesta que iba a llevar a Gaby a Miramar,

Para que llevarla si yo voy para ese lado, que venga conmigo y te ahorras el viaje, conteste

Buena idea dijo mi prima.

Se despidió de su novio subió al auto y partimos.

En el trayecto, note a Gaby bastante alegre, posiblemente había tomado algo de mas, pero no le di mayor importancia.

Hablamos bastante, recordando cosas de nuestra infancia y así continuamos hasta llegar a su casa.

Baja y nos tomamos una cervecita- dijo mi prima

Bueno OK- conteste

Entramos a la casa, estábamos solos porque sus padres (o sea, mis tíos), regresaban a la mañana siguiente de una fiesta que tenían en una ciudad cercana.

Nos sentamos en un sillón, mientras tomábamos la cerveza, retornado la conversación al tema de nuestra infancia.

En un momento le comento

Uh ¡¡¡¡¡ esta es la mesa que usábamos de camilla para jugar al doctor.

Si –me contesto

En ese momento, viaje en el tiempo y recordé la última vez que jugamos (que con los años, cuando la recordaba realmente me excitaba, y además entendía la situación que habíamos pasado)

Le comento

Porque no recordamos esos tiempos y jugamos al doctor ahora?

Estás loco ¡¡¡¡¡¡ contesto, con un esbozo de sonrisa en sus labios.

Me cambio de conversación rápidamente. Después de un rato, retome el tema nuevamente

No me digas que no te gustaría repetir, lo que hacíamos cuando éramos chicos. Le digo

No sé, en esa época sí. – Respondió

Probemos, total que puede pasar?- le digo

Para loco, que pretendes de tu querida prima¡¡¡¡¡  Exclama.

No contesto nada, pero noté en su expresión como un dejo de curiosidad o de lujuria, como algo tácito, en ese dialogo deliberado, mientras baja la cabeza, como dando sobreentendido que es lo que sigue. A esta altura de los acontecimientos, notaba que estaba empezando bastante excitada. Por un lado pensaba, que es mi prima pero por otro que era una mujer y estaba muy buena.

Volví a insistir, parecía un poco más convencida, pero no cedía.

No me digas que antes te gustaba y ahora no - le digo

Lo que pasa que en esa época no era tan peligroso.

Que tiene de peligroso ahora –le contesto.

Vos sabes, no te hagas el pelotudo- me dice

Si bien notaba, que estaba interesada en hacerlo, tenía que hacerla cruzar ese límite, entendía que ella tenía sus motivos, a punto de casarse, así que le digo

 

Hagamos una cosa, yo me desnudo, como la ultima vez y vos me revisas, que te parece?

Con una sonrisa me dice,

Lo que pasa que esta mesa ya es chica

Busquemos una más grande -le digo

Eres un hijo de puta, me contesta. Riéndose

Como diciendo, me convenciste, se quedo un rato pensativa y dice

Está bien, vamos al dormitorio, pero yo no voy a hacer nada, estamos?

No digo nada y me encamino a la habitación, empecé a desnudarme, mientras Gaby, observaba curiosamente, en el instante que se percata de mi erección.

Creo que al ver mi aparato en ese estado, su excitación iba en aumento, aunque se contenía bastante.

Acuéstese boca abajo me ordena.

Rápidamente, como tratando de evitar lo que había visto. Comenzando a frotarme la espalda, hasta que de a poco llego a mis glúteos, apretándolos y pellizcando, yo me iba calentando cada vez mas, mis pensamientos se adelantaban a lo que llegaría a suceder.

Mi prima continuaba con los masajes, hasta que comenzó a meter su dedo en mi ano, y jugar con mis testículos, me excito como loco. Siguió jugando, y en un momento me dio vuelta, notando que mi pija estaba totalmente erguida.

Comenta

Parece que el paciente esta calentito.

Al tiempo que me empieza a besar las tetillas, bajando lentamente hasta mi pija, para iniciar una serie de besos en la zona, y unas suaves y deliciosas chupadas, que de haberse prolongado acababa en su boca, trate de relajarme y evitar venirme.

En un momento se frena y dice

Bueno ya esta ¡¡¡¡

¿Cómo que ya está?, le digo

Por supuesto, que quieres, que siga toda la noche? Ahora es mi turno.

Sin decir nada mas, comienza a sacarse el vestido y los zapatos, quedando en prendas menores, y se tira boca abajo en la cama.

Un momento, así no vale, tienes que desnudarte, como yo -le digo

Está bien, haremos como aquella vez, pero la bombachita, queda puesta - me responde.

Se quitó su sostén y nuevamente, se puso boca abajo, no pudiendo ver sus tetas, pero si su atractivo culo, apenas cubierto por esa diminuta tanga, que prácticamente no cubría nada.

Comencé a "examinarla”, primero su espalda, hombros, para bajar hasta sus pies, volviendo a subir por esas piernas, hasta llegar a sus muslos, lentamente acerco mis manos a sus glúteos, continuo, meto mis dedos, a través de su braga y los deslizo por su zanja hasta llegar al ano, donde comienzo a introducirlo muy suave, noto unas exclamaciones de placer, continuo con mi "revisada "cada vez más exhaustiva y profunda.

En un momento mi prima dice

Necesito doctor que me revise por adelante.

Dándose vuelta, mostrando esas tetas, bien formadas y duras con sus pezones rosados con sus puntas bien erguidas, mientras que sus braguitas dejaban aflorar unos pelos de su pubis,

Comencé a tocarle sus hombros, fui bajando mis manos hasta llegar a sus tetas, que estaban bastantes duras y sus erguidos pezones, que prendí con mi boca, como bebé con hambre

Cuando dice

Doctor que me haaaaceeee ¡¡¡¡¡¡¡¡¡ seguí succionándolas y baje mi mano hasta introducirlas en su braga metiendo mis dedos en su raja, que emanaba ese juguito vaginal, tan especial, ella abrió mas sus piernas, permitiéndome  un mayor acceso, se notaba que estaba muy fogosa y gozaba como loca, yo continué y continué.

En un momento mi prima empezó a agitarse esquizofrénicamente, hasta que largo unos grititos de placer y me pedía que no pare, yo no soportaba mucho más en cualquier momento eyaculaba.

Continué así, hasta que mi prima se vino y tuvo un salvaje orgasmo.

Le baje sus tanga a mitad de su entrepierna, sin parar de masturbándola, para no cortar su orgasmo e intentar producirle otro, sin parar, continúe con mi intensión, quitándole su ultima prenda. Su sexo brillaba por la humedad, que se producía por la emanación de sus flujos. Abrí mas sus piernas, separando los labios de su vagina, para lamer y mamar de ese néctar sexual, llevándola a un éxtasis total. Me monté sobre ella para penetrarla, cuando me corta con un rotundo

Noooooooo¡¡¡-

Estoy recaliente, no me vas a dejar en este estadio- le rogué,

Está bien querido primito, no te preocupes -dijo, mientras se daba vuelta, quedando boca abajo

Pero no uses el lápiz esta vez. Me decía

Así que tome mi aparato y lo empecé a introducir por ese hermoso culito bien redondito y parado, no fue fácil meterlo, por su estreches además se quejaba un poco, así que lo humedecí con saliva y parte de su juguito, mientras mi dedo iba entrando, hasta que su ano se dilato, le fui introduciendo la cabeza y de a poco, muy lentamente, logre meter el resto, de mi pija, notando su goce y sus exclamaciones de dolor, ante cada uno de mis movimientos.

Se notaba que le gustaba, porque cada vez se agitaba más y me pedía que siguiera.

Lamentablemente no permanecí demasiado tiempo con mi pija en su culo, porque con la exaltación que tenía en unas pocas envestidas, eyacule mi leche rápidamente., mientras Gaby gritaba de placer ante la llegada de otro orgasmo

Nos quedamos un rato así, nos dimos unos besos, nos levantamos de la cama para dirigirnos al baño a ducharnos juntos.

Lo que aconteció después, será motivo de un próximo relato.