Resumen De los capitulos Anteriores

Raúl, siendo el personaje principal, trabajador de una empresa publicitaria, siendo el contador y encargado de las finanzas. El señor vicepresidente de la empresa se le acerco con una propuesta de hacer un fraude al a empresa, de una manera que nadie lo notaria, el señor Raúl sin más acepto, ya que ocupaba un poco el dinero, con el tiempo el vicepresidente llamado pedro, se presentó un año después con el plan de un segundo fraude, y Raúl con la intención de no volver a hacer esto nunca más, acepto una última vez para poder emprender su propio negocio, se asoció con alguien para poder sacar una franquicia de restaurantes de comida china, pero con el tiempo se enteró que hacían investigaciones de las finanzas de la empresa, unas investigaciones que hacia el dueño (señor Rodríguez) cada dos años, por desconfianza, ya que el señor nunca a confiado en nadie por la dura vida que le toco vivir, se decía que el señor tenia negocios turbios y era de pocas palabras al saldar sus cuentas, desde prostituciones, venta de drogas, hasta homicidios.

En el mismo momento que Raúl se entera de eso, se entera de que pedro (el vicepresidente y su asociado para los robos) renuncia y se va de la ciudad. él se pone nervioso y decide renunciar, poniendo como escusa a su familia, que quiere pasar más tiempo con ellos, y dedicar más al éxito de las franquicias que ya andaban trabajando, se retiró pero al poco tiempo el señor Rodríguez encontró a Raúl, lo espero a que lléguese a su casa y después lo invito a subir al auto, ahí le expuso la situación, que quería el pago de todo, incluyendo lo de Pedro, ya que él no estaba más para pagarle, el señor Rodríguez había mandado a matar a pedro, así mismo lo torturo antes y le saco toda la información, al darse cuenta que pedro no podía pagarle porque lo había gastado todo, y en un intento de ser perdonado Pedro le cuenta de su cómplice Raúl, entonces es como el señor Rodríguez busca a Raúl, así que él tendría que pagar todo, Raúl le ofreció todo lo que tenía pero aun así no sumaba más que la mitad de todo el dinero robado, así que el señor Rodríguez le dio un mes para juntar el dinero. paso el mes y Raúl no pudo conseguir dicho dinero, al día final el señor Rodríguez lo esperaba como la primera vez, fuera de su casa, pero esta vez esperando el pago, el señor Rodríguez le dio un poco más de tiempo y Raúl se dispuso a pedir un préstamo al banco, pero el banco le dijo que una suma tan grande solo podía ser expedida en dos semanas, al marcar al señor Rodríguez, el expuso su decepción por él y dijo que él nunca perdía en nada, que no lo dañaría ya que no habría quien le pagaría, pero que el nunca perdía en ningún trato de ninguna manera. Así fue, unos días después el Raúl fue emboscado por un carro y secuestrado, al llegar su destino, perdió el conocimiento por una sustancia que le pusieron, al despertar se dio cuenta de que se encontraba atado a una silla y con la cara tapada con un saco.

Al abrir los ojos, se dio cuenta que ahí estaba el señor Rodríguez, alegando que cobraría intereses y además que dejaría en claro lo que podría pasar, por así decirlo dejando un aviso de escarmiento por si se le ocurría una estupidez, a su espalda había una pared de vidrio grande, donde solo ellos iban a poder ver hacia dentro y desde adentro no se vería hacia afuera, prenden las luces y ahí hay una habitación que da toda la finta de ser de una niña de 5 años, con una cama en el medio, a lado derecho una puerta con un cuadro grande bonito de decoración de infante, y al lado izquierdo una silla, a lado de la silla un juguetero de lleno de puros muñecas, la cama con una sábana con decoración infantil y con un par de muñecos de peluche, los señores que estaban en la habitación donde estaba Raúl, se disponen a salir de la habitación, solo dejando a Raúl y el señor Rodríguez. inmediatamente en la habitación de infante de enfrente entra un hombre cargando una joven, la joven es aventada a la cama y se da cuenta que de sus hijas, es Raquel (una joven de 17 años, cabello café castaño lacio, un cuerpo muy suculento, buen culo y con unas tetas de buen calibre, con una piel clara, con el uniforme de la escuela, ya que así había sido secuestrada en camino al colegio) seguidamente meten a otra mujer al cuarto y esta es colocada en la silla de la habitación inconsciente al igual que la primera, se trata de María, la mejor amiga de Raquel, está siendo una mujer muy buenos dotes, casi igual al de Raquel pero morena clara, de cabello oscuro y largo, con una mirada sexy y una actitud más atrevida

En unos instantes a Raúl le tapan la boca para no escuchar estupideces y dos hombres entran a la habitación, despiertan a las chicas y comienza a asustarlas, los tipos abren una pequeña caja fuerte que estaba detrás del cuadro de la habitación y al final resulta ser una pequeña bodeguita dónde sacan juguetes para usar en el show que planean dar, en un comienzo uno de ellos llega con María que ahora después del susto se cambia de lugar a la cama y la comienza a acariciar por encima de su ropa interior, mientras que el otro comienza a ultrajar y asustar a Raquel, le esposa las manos por detrás de ella y la habiente al suelo, quedando Raquel en el suelo es esposada a una vara en forma de U que no deja escapar la cadena de las esposas, así quedando obligada a estar sentada en el suelo y esposada por detrás sus manos. El hombre que ata a Raquel se dispone a ir a la bodega y sacar ahora unas jeringas que son inyectadas en cada una de las chicas. En el caos de maría, es volteada a la fuerza boca abajo y bajan sus pantys rosas un poco para después ser inyectada por ese líquido blanco, mientras que a Raquel va el hombre con la otra jeringa después de inyectar a María, y le pide de buena manera que ella misma doble su cuerpo de lado dejando su trasero descubierto para poder inyectar, de hacerlo nadie le hará daño, Raquel asustada buscando no ser dañada acepta. Se inclina y bajan un poco su pantys blancos con franjas gruesas de color azul para ser inyectada en su nalga, al poco tiempo se levanta el hombre y dice que las ha inyectado con el famoso “Calienta Vacas” que es una sustancia que usan para poner en celo al ganado de granja, al usarse con un cuerpo menos robusto, suele elevar el efecto y aun por más tiempo.

Fue la primera víctima María en ser con quien jueguen primero, el tipo le dio órdenes estrictas donde había 3 reglas a respetar. La numero 1 es que las chicas no hablaran, en ningún momento hablaran ninguna palabra, la numero 2 que las chicas todas las ordenes que den las acataran, no importa que tan absurdas sean y que tan desagradables sean, la numero 3 es que siempre deben buscar las chicas el placer de sus opresores primero y luego el de ellas. Si una chica desobedece una de estas reglas, inmediatamente son amarradas e inmovilizadas para no poder recibir ningún tipo de placer ni de ellas mismas, y así poder torturarlas con su propia calentura, sin ser tocadas ni tratadas por nadie.

Rojo fue quien tomo cartas sobre el asunto y comenzó con María, la torturo un poco al desobedecer pero con el tiempo María comprendió que tiene que obedecer si placer es lo que quiere, ya que con la sustancia del mentado “Calienta Vacas” no puede controlarse ni un poco, no mide ni piensa lo que tiene o debe ser correcto, solo quieren placer sexual sin pensar en nada. Después de que María comprende todo, el show da marcha y rojo se dispone a comenzar con María (Rojo siendo el único dentro de la habitación) comienza a seducir a María, al final le dice y comenta que haga diferentes posiciones para él, ella obedece sin ningún reproche, pero ella busca darse placer y no obedece, comienza con sus dedos a darse placer, pero rojo le quita la mano de su sexo y es un poco comprensivo ya que es nueva en eso, le da un poco de comprensión, pero al mismo tiempo es severo y le quita su pantaleta y la hace bola e introduce en todo su sexo hasta el fondo, de modo que no se vea nada de la pantaleta salir de su sexo.

Rojo le pide a María que se voltee (Rojo sentado en la cama y María parado frente a él, ambos en el lado derecho de la cama) María al voltearse, le pide rojo a ella que se meta la verga de el en su culo y se coja ella misma con su Pene grande y gordo, María no puede introducir algo tan grande y piensa una y otra vez introducirla, dos intentos solo logra perforar con la cabeza únicamente, rojo intenta en ambas motivarla y ayudándola metiendo los dedos y ensalivando el hoyo de ella, pero no fue posible, en su tercer intento la mujer lo hace con más dedicación pero no lo puede lograr y rojo la jala con fuerza para que entre, la jala con sus grandes y fuertes brazos, le atraviesa el ano completamente, entra totalmente su verga sin dejar ni un pedazo fuera, la continua ultrajando a la mujer y al final de todo acto sexual, Rojo la siente y la pone con su culo en dirección hacia el vidrio para que todos puedan ver su orgulloso paisaje de la mujer.

Parte 3

Rojo comienza poniendo a María en la cama, pero ella inmediatamente va sobre su verga y la quiere comenzar a mamar, para así motivar a rojo a tomarla por su sexo como ella quiere, pero inmediatamente rojo la detiene y le dice a la mujer –No, que haces niña, te dije con anterioridad que no hicieras nada que no te ordenara, vuelves a desobedecer y ya lo has hecho muchas veces niña. –en eso María inclina su cabeza sabiendo que lo estropeado de nuevo. –Pero el castigo hoy será diferente, pero es la última que te perdono niña, la última! –Rojo así mismo toma a María y la pone en posición de perrito y le pide que se quede quieta así, sin moverse, va en dirección hacia la bodega pequeña y saca de ahí un gran masturbador femenino en forma de pene, con grandes granitos en la superficie, aunque también vuelve a meter la mano y saca un látigo de esos que se usan para los caballos, se acerca a María y le dice

Rojo: quédate en esa posición niña no te muevas –a lo que obedece María y voltea su cara hacia abajo en dirección hacia la cama –Ahora quiero que voltees hacia mí –a lo cual María obedece y en ese instante rojo le da el consolador que saco de la caja a lo cual agrega –quiero que mames ese masturbador como si fuese mi pene, y quiero disfrutarlo mucho porque ya sabes cuál será tu recompensa mija, pero quiero que te voltees en dirección hacia el otro lado, quiero que nuestros espectadores vean tu técnica para mamar vergas.

Inmediatamente María cambia de posición ahora con la cara en dirección del vidrio que separa la habitación de los espectadores, mientras que rojo se coloca detrás de ella en la cama con el látigo en su mano derecha –Comienza a mamar el grande y rico pene que te di mija, y recuerda que debes imaginar que es mi verga, así que trátala muy bien. -Acto seguido María comenzó a mamar el masturbador apasionadamente de una manera muy provocadora, casi al verla podía imaginar que lo que hacía era darnos una invitación a nosotros los espectadores a entrar a la fiesta, aunque en realidad ella no tiene ni idea quien está detrás de ese vidrio, porque recuerdo claramente que no hay manera de ver atrases de ese vidrio de adentro hacia afuera, solo de afuera hacia dentro. Inmediatamente Rojo comenzó a latiguear el trasero de María con mucha fuerza y con placer al torturar más a la chica, a lo que María veía como el primer impacto provocó en ella un dolor fuerte y dejo el frenesí que le daba a ese masturbador para hacer un gemido pequeño de dolor –Aaaahhhmmm. –pero aun así ella sabía cuál era su trabajo y siguió mamando ese masturbador con mucha pasión, cada latigazo que le propinaba rojo en su trasero la hacía estremecer, pero ella no dejaba de mamar, en un principio en cada golpe se escuchaba a María haciendo lo mismo, sus gemidos de dolor, pero no dejaba de mamar, solo serraba un poco los ojos y continuaba mamando.

Ya después de propinarle unos 10 latigazos con mucha fuerza, María había comenzado a verlo diferente y ahora solo entrecerraba unos ojos en vez de gemir como en un principio. Una y otra vez sin parar rojo le propinaba latigazos de una forma brusca y violenta, pero rojo se dispuso a decir –Tienes todo el culo rojo ya mija, en cualquier momento te saldrán sangre de los golpes que te arremato niña, pero soy muy bueno y dirigiré mis últimos golpes a otro lugar niña, variare las áreas para no dejarte sin nalgas, aunque claro mi idea es que ya no te puedas sentar en años.

Rojo comenzó como dijo a variar sus golpes, ahora era en su espalda desnuda, pero este si estremeció a María fuertemente, pero aun así no paro su tarea de seguir mamando ese masturbador, a lo cual siguió rojo y no paro, en su intención de variar los golpes, rojo dirigió su latigazo a toda su ralla entre las nalgas, abarcando desde su ano, hasta su vagina. Le propino un fuerte golpe que en ese mismo instante María callo su cara a la cama y grito fuertemente –AAHHHHHHH!!! Mmmmmmmm. –Pero ella sabía que no podía hablar ni cambiar su manera de hacer las cosas, todo tenía que seguir progresando como rojo lo indico. – ¿Que mamacita? Te dolió mucho, es tu puto castigo por desobedecer niña –Inmediatamente le propino otro latigazo en el mismo lugar a lo cual María agrego su fuerte voz de dolor. –AAAAHHAHHH!! Mmmmmm. –Que putita, te duele, pues no pares de mamar pendeja, no recuerdo haberte dado esa orden y sigue mamando –Le dijo rojo con un poco de furia por la excitación y la emoción de la escena misma a María.

Ya al pasar un tiempo de ese horrible castigo que le propinaba rojo a María, por fin paro rojo y se bajó de la cama a lo cual agrego –Ya niña deja de mamar eso, ahora mamaras otra cosa mija. –Bajo rojo de ahí y se dirigió a Raquel, mi linda hija, el hijo de puta se dirigió a mi hija, inmediatamente comencé a forcejear pero fue en vano, no logre nada, ni moverme ni ser escuchado.

Rodríguez: ¿qué pasa señor Raúl, tiene algún inconveniente con nuestra siguiente participante en la obra? Será una buena intervención. Lo disfrutara créame, yo confió mucho en mis hombres –Con una sonrisa en su rostro agrego el señor mientras yo no podía moverme y con rabia escuchaba.

Rojo se acercó a Raquel y dijo –Hola nena, ¿has estado mucho tiempo aquí solita olvidada verdad? Pobre ¿estás muy excitada verdad cariño? –Agrego rojo a Raquel dirigiéndose a ella de una forma cariñosa, a lo cual Raquel ascendió y subió su cabeza, afirmando un “si” a la pregunta.

Rojo: me imagino. niña ahora mira, escuchaste bien las 3 reglas que hay que respetar aquí con nosotros me imagino –A lo cual volvió a hacer lo mismo con su cabezas otra vez Raquel afirmando el “Si” a la pregunta que le hacía Rojo.

Rojo: bueno cariño, quiero que habrás tus piernas niña, quiere que me muestres esa panochita tuya toda mojada, porque es un hecho que así ha de estar, abre tus piernas nena y déjame verlo –Raquel abrió sus piernas lentamente al mismo tiempo que cerraba sus ojos de vergüenza de que le vieran su paisaje así de mojado, siendo mi hija, fue buen educada y sabe comportarse y respetarse, para ella esto debió de ser lo más bajo que pudo haber caído, todo en contra de sus principios de mujer que le inculcamos. –O! valla, estas bien caliente verdad. –Dijo rojo al ver la pantaleta de Raquel toda mojada, no era solamente el área del sexo, llevaba tanto ahí mojada sin poder hacerse nada, que ella había mojado el área de las nalgas y un poco el suelo, Rojo se acercó a ella y comenzó a oler su vagina por encima de al pantaleta, al terminar se paró y rio, a lo cual agrego. –Mira puta –Dirigiendo su cara hacia María –Ven aquí y quiero que mames toda su panocha de esta niña por encima del calzón, solo por encima del mismo, y quiero que la hagas sentir bien mija, pero no quiero que por ninguna circunstancia pares, pase lo que te pase a ti no quiero que sedas el ritmo.

María inmediatamente se colocó en posición de perrito, y comenzó a mamar el sexo de María por encima de su pantaleta, primero comenzó dando unos pequeños lengüetazos como perro, de arriba hacia abajo, a lo cual después comenzó a hacerlo más rápido, daba lengüetazos de arriba hacia abajo, pero después dirigió los lengüetazos para abarcar menos área y más intensidad en un solo punto mientras Raquel tenía un orgasmo frente a todos con sus gemidos de placer –Ahhh AHHHHAA ahhhh. –Rojo se acercó a la acción y un poco disgustado por el ruido de Raquel dijo. –Si vieras como me molesta que hagas tanto ruido niña, ahora veras lo que hare al respecto, tengo una muy buena idea. –Rojo se dirigió al trasero de María y le dio un pequeño lengüetazo a la vagina de María, rápidamente María se agregó al ruido de gemidos de la habitación y comenzó a mover su trasero de un lado a otro, lentamente movía su trasero muy coquetamente, meneando sus nalgas lindamente, rojo siguió lengüeteando pero ese no era su objetivo y después de darle unos 10 lengüetazos en total se hace hacia atrás y mira que María esta toda mojada, tiene mojada incluso los inicios de sus piernas, están un pequeño rio de humedad de su dulce miel de mujer, rojo mete sus dedos en la vagina de María y a lo que María sigue meneando su trasero coquetamente y siente un placer a la introducción de los dedos de rojo, en unos instantes rojo saca la pantaleta desde lo más profundo del vientre de María toda mojada y con olor a ella –No te preocupes niña, ahorita vengo a arreglarme de ti, solo deja resuelve ese problema que mencione. –Rojo se paró y dirigió a Raquel con la pantaleta de María y le dijo a Raquel. –Mira niña, ¿te gusta lo que sientes verdad? –Pregunto a Raquel, a lo cual una vez más ascendió la cabeza igual que las veces anteriores. –Pues quiero que abras tu boquita niña y metas esta pantaleta mojada de tu amiga, y la presiones fuertemente con tu quijada para que no salga ningún ruido de tu placer. –Raquel voltio a ver a Rojo con un poco de cara de inseguridad pero no tenía ninguna opción y abre su boquita lentamente, rojo dirige la mano hacia su boca y comienza a introducir la pantaleta a lo que agrega. –Eso es niña! Trágatela todo, todo el calzón mojado, eres una sucia perra verdad ¿Que nomás quiere ser cogida por esos haces todas estas pendejadas no? niña sucia. –Raquel introdujo toda la pantaleta de María en su boca, y ahora solo se escuchaba un pequeño gemido entre los calzones en la boca de Raquel. –mmmmMmmmm. –Siguió progresando el acto, y rojo detuvo a María de su acto con la mano poniéndola en su mejilla. –Ahora nena, para un poco. –Rojo acerco sus manos a la pantaleta de Raquel y la quito lentamente de su cuerpo. Al quitarlo pudo ver una vagina toda rasurada, mi hija ya se rasuraba ahí abajo, eso me demuestra que ya no es un niña completamente, al quitarle toda la pantaleta, sus siguientes ordenes fueron. –Comienza a mamar esa panocha rasurada niña con todo lo que tengas. –Ahora rojo se dirigió a Raquel y pregunto. – ¿Eres virgen niña verdad? –Raquel dio un si con sus gestos de nuevo.

Mi hija es virgen y estos hijos de puta se aprovecharan de ella, esto no es justo, nadie se merece este tipo de cosas, nadie en absoluto, algo es cierto, juro que si después salgo de esta, matare a estos tipos, juro por dios que los matare!!.

Rojo: entonces niña, quiero que seas muy delicada con ella, todo por encima, nada de introducir lengua, solo dale placer por encima, que yo me encargare de ti niña. –Rojo dio la vuelta a María y se colocó en su trasero, de tanto acto ya no era un problema para rojo, su pene estaba que apuntaba al cielo como un misil a la luna a punto de despegar. Mientras María siguió mamando la vagina de mi hija, Rojo se acomodó detrás de María, María comenzó a mover su trasero coquetamente otra vez lentamente, rojo solo veía como esas nalgas y esa vagina se movían lentamente, se meneaban de una forma sexy, rojo solo dijo. –Aaaaa! Maldita puta, me encanta ver tu culo menear así, te quiero coger con mi verga hasta desgarrarte la panocha también. –Rojo coloco su pene en las puertas de la vagina de María y comenzó a empujar lentamente su pene, la penetración fue inminente, comenzó a entrar y sacar una y otra vez en esa vagina sedienta de sexo y carne, solo se podía ver a María gemir por ello, tanto que paro el placer a Raquel de lo que le estaba gustando lo que le hacían, pero a rojo no le pareció ni un poco. –No pares de darle placer a la niña estúpida o yo parare. –Raquel solo veía asustado a rojo, lo imponente que hablaba y agresivo, para María era algo normal, lo había tratado por un rato ya ese mal humor que se carga, pero para Raquel era nuevo, María siguió su mamada a la vagina de mi hija. Rojo prosiguió con su mete y saca de María, se podía ver como los tres estaban disfrutando de esa escena, que aun que estuviera mi hija podía decirse que me estaba excitando de nuevo, rojo siguió rápidamente con sus embestidas pero rojo quiso aumentar el juego y voltio a los lados y vio el masturbador tirado, lo agarro y lo clavo con fuerza rápidamente por el ano de María.

Maria: aahhhahhahahhmmmmmm mmmm. –María solo gimió de dolor, ya que su ano se había cerrado un poco y aún estaba herido su aro de ligamento interno, pero no paro, siguió con su tarea de mamar, a rojo le pareció divertido meter y sacar ese masturbador del ano de la niña, la metía y sacaba al mismo tiempo que su pene de la vagina, imagino que del placer que sentía María no le prestaba atención al dolor, o más bien dicho el dolor mismo también la estimulaba la excitación, por ser tratada de esa manera, como un objeto sexual de un hombre que hace lo que quiera con ella, además, llevaba mucho tiempo esperando esto. Solo podía escucharse el gemido de ambas, era un coro excitante, aun que el de Raquel solo era pequeño por la mordaza que tenía en su boca.

Se veía como rojo para un poco para no terminar y poder seguir, tomaba un poco de aire y acto seguido, le daba con más fuerza a María, solo se podía escuchar un rico gemido de parte de esa niña. Rojo la sacaba y metía toda, con una mano sujetaba a María de la cintura y la embestía contra su verga y con la otra metía y sacaba el masturbador del Ano de María. No fue a un tiempo que paso lo inevitable, Rojo termino dentro de María. Rojo una vez más pudimos ver su cara de satisfacción al venirse, era obvio que fue algo increíblemente rico al tirarse a esa chica tan rica y deliciosa. Se paró y dijo –Para niña, deja de mamársela, yo ya tuve suficiente de ustedes dos. –Inmediatamente María dejo de mamar la vagina de Raquel se arrodillo erectamente volteando a ver a rojo. – ¿Aun quieres seguir siendo cogida verdad niña? –María rápidamente dio un si en su cara al moverla de arriba abajo. –Pues te informo que aún no acaba la diversión con ustedes dos, solo que yo ya estoy exhausto, ahora seguirá de manera diferente, con otros juegos pero con las mismas reglas. –Rojo se dispuso a salir de la habitación.

Rodríguez: Mira Raúl, el espectáculo aún no termina, solo que ahora las cosas serán más bonitas, veras quiero decirte algo más, todo esto me está dando ya ganancias, en las esquinas hay cámaras, muy discretas que graban todo el espectáculo, y en realidad hay más de 20 cámaras en ese cuarto, todo el espectáculo se transmite en vivo, desde hace mucho que estoy obteniendo ganancias. –Me decía todo esto mientras fumaba un cigarrillo, con una sonrisa en su rostro de estar feliz de lo que me está haciendo.

Ahora todo tenía sentido, de aquí obtenía las ganancias, de todo los problemas que le había causado, de aquí se los había adquirido. –Mira Raúl, tú y tu hija puede que salgan de aquí sanos y salvos, pero en cuanto a la perrita esa amiga de tu hija, no saldrá de aquí, ella se quedara en mis brudel de otra ciudad, si se te hace un problema o ustedes van y dicen algo a las autoridades, en primero no me dirán nada, yo controlo a todas las autoridades. –Dijo Rodríguez mientras reía al explicarme. –No hay manera, pero valla que me enterare de ello, y tu familia, absolutamente toda tu familia que por cierto está formado de puras damas, serán un  buen ganado, nunca he visto a tu esposa, pero al menos tus hijas si, serán material disfrutable. Espero hayas entendido que conmigo no se juega hijo. –El muy hijo de puta en verdad hablaba enserio, de verdad todas sus amenazas podrían llegar a ser ciertas, por lo que vi que le hicieron a mi compañero de fraude Pedro.

Rápidamente entro alguien a la habitación, pero llevaba una bolsa en su mano, se trataba de una chica muy sexy, con unos mini shorts y una blusa de tirantes muy trasparente, se podía apreciar su brasier de color blanco por debajo de la blusa y unos grandes melones, al igual que su gran trasero, unas piernas largas y hermosas, de tono de piel muy claro, al igual que su cabello, de color rubio muy amarillo. se acercó a ambas chicas. Primero a María, saco de su bolsa unos trapos, después los extendió y me pude dar cuenta que era ropa, ropa sexy para María, le dijo que se la pusiera. María obedeció sin más y comenzó a ponerse la ropa misma, primero eran unos ligueros blancos, y después se colocó una pantaleta que tenía un gran orificio por debajo de su entrepierna, abarcando su vagina y Ano, después un brasier de color blanco con negro, del mismo color que la pantaleta, haciendo una buena combinación, después de unos segundos, extendió otra prenda, parecía el vestido, era de una sirvienta de hogar, María se lo puso, se veía despampanante, una mujer súper sexy con un vestido súper corto y escotado, podía verse casi todo el volumen de sus pechos, solo alcanzaba a tapar un poco la areola del pezón, a lo cual agrego la mujer que le ayudaba. –Mira niña, no te sientas incomoda, lo siguiente que debes hacer es comportarte lo más apropiadamente, como una niña tímida y virgen, una niña muy seria, debes de fingir, o aguantar mucho las ganas de tener sexo niña, ahora recuéstate en la cama, siéntate y recárgate en la cabecera por mientras las cosas prosiguen.

Se acercó a Raquel, saco una llave y la libero de la atadura que tenía en el suelo, al pararse, le quito la ropa rápidamente, la despojo de su ropa de una manera muy hábil, después de terminar, tomo la bolsa de nuevo y saco más lencería, pero esta vez se trataban de un trapo de una pieza, que contenía un pequeño hoyo por detrás, en las nalgas, al ponérselo, le cubría casi todo su cuerpo, a diferencia que la pieza no tenía cubierto todo el cuerpo, solo los pechos y la parte total inferior, unidos con un unos pedazos de tela que pasan por enfrente de su vientre y por detrás, el traje era algo peludo, de color negro. A lo que después saco unos ligeros de igual manera que el traje de una pieza, peludo, llegaba hasta 10 dedos arriba de su rodilla, después le dio unos guantes, de esos que llegan hasta el codo mismo, ella se los coloco en cada brazo, le agarro el cabello, de una manera que dejo suelto un poco el pelo de la parte de enfrente cayendo por ambos lados del rostro de la bella niña y la parte trasera del cabello lo agarro con una pinza, al mismo tiempo le coloco una diadema en forma de orejas de gato, ya sé a dónde iba todo esto, estaban vistiendo a mi hija y a María de fetiches masculinos, para subir de nivel la actuación y que las cosas sean más placenteras para los espectadores. A lo que prosiguió la mujer a Raquel y le dijo. –Mira niña ahora colócate en la cama. –Raquel se fue y coloco en la cama, se sentó y después la mujer prosiguió diciendo. –Ahora quiero que te pongas en posición de perrito, quiero que muestres al vidrio tus atributos. –La niña se puso en la posición que le fue indicado, a lo que la mujer ya en esa posición, pasó los dedos por encima de su calzón y con solo pasarlos rapido, todos sus dedos quedaron empapados. La mujer al ver sus dedos, le pidió a María que se acercara para decir. –Ven perra, mama mis dedos y límpiame de la miel de tu amiga. –María se acercó y chupo los dedos de la mujer como si fuera un caramelo rico al cual chupar, después la mujer le indico nuevas cosas a María. –Ahora quiero que pases tu lengua por encima de la vagina de tu amiga y la limpies niña, quiero que la dejes limpia, no meterás tu lengua, solo límpiala. –María comenzó a limpiar la vagina de Raquel, toco con la punta de su lengua el comienzo de la vagina, y comenzó a subir lentamente suavemente por todo el canal vaginal exterior, comenzó a lengüetear una y otra vez. pasaba su lengua, solo se comenzó a escuchar por la voz de la niña Raquel por la habitación haciendo sus pequeños gemidos de placer. –AAAaahhhhh mmm AHHHHAa. –Era claro que lo estaba disfrutando, María siguió pero quiso pasar el juego un poco mejor, y acercó su lengua al ano de Raquel, comenzó a acariciarlo por encima de su aro Anal, con la lengua y perforaba un poco, lo poco que podía hacer con su lengua, después paso por la vagina de nuevo hasta dejarla libre de su miel de mujer. La acompañante de ella en la habitación dio una nueva orden. –Ahora quiero que  te quites de ahí María. –María obedeció y se quitó sin decir más, para quedarse sentada en el suelo hincada a espera de nuevas órdenes. –Ahora tú acércate. –Saco un antifaz de esos que se usan para tapar los ojos de las personas al dormir para no recibir ningún rayo de luz, dirigiéndose a Raquel. La niña se acercó a ella y la mujer le coloco el antifaz en la cara. Ahora la niña no podía ver, pero ella le acomodo una correa en su cuello, a lo cual le dijo que lo acompañara fuera de la habitación, mi hija estaba saliendo de la habitación a un lugar que no sé a dónde iría. –Mira señor Raúl, las cosas serán mejor, como puedo ver, usted al igual que yo queremos divertirnos un poco, pues el espectáculo pasara a nosotros. –Dijo el señor Rodríguez a mí con su rostro lleno de confianza. –Ahora lo que pasara es que quiero ver que tan cuerdo es y cuánto tiempo puede aguantar sin tener relaciones con la niña esa que ha estado viendo desde hace un tiempo, se llama María según tengo entendido, veremos qué tan cuerdo es, digámoslo de esta manera, si usted llega a hacerle algo a esa niña, yo le aseguro que le pasara algo a su hija, de usted no hacerle nada a la niña María, nosotros no le haremos nada a la niña de usted, así serán las cosas. Pero la mejor manera de sentir cada instante en su cuerpo y cada cosa que pase, es despojándolo de dos de sus sentidos, el oído y la vista, para solo centrarse en el sentir de usted, será una gran provocación. –Agrego eso el señor.

Colocaron unas orejeras en mis oídos, al tiempo vi como entraba la niña esta María por la puerta, al mismo tiempo entro al cuarto Raquel, pero ella no podía reconocerme porque estaba tapada con el antifaz, tampoco escucharme porque estaba con mi boca aun tapada para no decir ni una palabra de lo que ocurría, vi como el señor Rodríguez abandono el cuarto y al hacerlo entraron unos tipos con cámaras. El espectáculo seguiría pero ahora en esta habitación, los tipos eran Rojo y Azul, ahora serían los que filmarían la acción del lugar.

En el cuarto solo quedamos, María, Raquel, La mujer Sexy rubia y yo (Aparte de Rojo y Azul) atado a esa tormentosa silla sin poder hacer nada solo estar de espectador ante las cosas. Entonces la mujer se le acerco a María le dijo algo a su oído, en lo que María al verme se dio cuenta de quién era, me reconoció por detrás de este trapo, esta mordaza que no me dejaba hablar y tapaba medio rostro mío. Pero al estar sorprendida, se quedó perpleja de vergüenza, pero la mujer la ínsito a moverse más rápido dándole una nalgada, diciéndole a interpretación “Muévete niña”. Por lo que seguí viendo, María se puso frente a mí y me dio un beso en el cachete, ahora ella se dirigió a mí y se sentó encima de mí, comenzó a desabrochar la camisa mía, de botón por botón, a lo que siguió haciendo lo mismo hasta llegar al último, aventó mi camiseta hasta lo más atrás de mis brazos, ya que no podía sacármela porque tenía los brazos atados a la silla, así que comenzó a besar mi pecho, se fue yendo lentamente hasta llegar a mi pantalón, desabrocho el botón y bajo el cierre muy hábilmente, después de eso voltio a mi cara y me vio y pude leer claramente en sus labios lo que me dijo, porque lo hizo de una manera lenta, lo que pude entender mientras estaba sentada encima de mi con los rostros frente a frente “Usted siempre me ha gustado, desde hace mucho tiempo. es lo único que disfrutare de todo esto, usted aquí y yo con tantas ganas, es una fantasía” no podía creer lo que había visto en mi mente, sus labios habían dicho que esta chamaca me veía igual que yo la veía, cuantas veces en el pasado me volvía loco solo tener una probada de esta carne y ahora mismo la tenía frente a mí, pero no había que tocarla, ello llevaría a la perdición a mi hija, por más caliente que me pudiera poner no debía hacer nada.

La chiquilla comenzó a mover su cintura estando sentada encima de mí, raspaba su sexo con mi bóxer, en mi pene, sentía como me pelaba abajo y arriba mi pene con su movimiento, era un placer exquisito que nunca pensé pudiera ser provocado por una niña y mucho menos esta niña.

Prosiguió con su cuerpo de un lado a otro encima de mí, después de ello, se bajó de mí y se arrodillo, y me vio a la cara, a poco después bajo su mirada a mi entrepierna y lo cual se acercó mi bóxer y lo comenzó a frotar suavemente como lo hizo anterior mente con rojo, lengüeteo por encima de mi bóxer la cabeza de mi pene, y después con su misma lengua lo coloco más cómodamente para introducir una parte en su boca, comenzó a meterlo en su boca lentamente, al tener el bóxer no podía sentir ni el 50 por ciento de lo que tenía que sentir, pero aun así era increíble, entendí que era lo que querían, querían provocarme con la niña para poder caer, y valla niña que usaron para hacerlo, con la droga encima, María no se iba a detener de sus acciones hasta lograr que le introduzca mi pene completo. Era riquísimo lo que sentía, como su boquita entraba y salía por encima de mi ropa, en unos instantes volvió a ser lo mismo, se mojó el bóxer y por los orificios que contienen, se le facilito sacar mi pene, ya que la ropa ya estaba húmeda, al salir mi verga, pude por fin sentir alivio que chuparía mi verga de una manera deliciosa, ella al verla, pude ver que se voltio a mí cara y leí en sus labios “Es grande como lo esperaba” y a cierto punto era cierto, nunca me trajo problemas, mi esposa siempre me dio elogios de lo mismo, tenía un buen tamaño de pene para mis parejas pasadas antes de casarme, o incluso después de ello, aquellas mujeres con las que había tenido relaciones, aunque no soy un mujeriego, una que otra vez al año alguna oportunidad se presenta en la vida de un hombre. Al verlo, ella siguió con su trabajo y bajo a mi tronco, pero no toco mi cabeza, ni se acercó, solo lambio mis bolas y el comienzo de mi tronco con su lengua, lo hizo una y otra vez de una manera placentera, pero yo moría por tener mi verga en su boca. Al alzarse un poco con su lengua, antes de llegar a la cabeza quito la lengua, puso la punta de su lengua en la punta de mi pene, apenas y podía sentir el tocar de su lengua en la punta de mi verga, era riquísimo, tocaba y lengüeteaba lentamente mi pene, solo en la punta, donde está el hoyito para orinar, me lengüeteaba de una manera exquisita, prosiguió de esa manera por unos segundos más. Se alejó de mí y se paró, me dio la espalda y camino dos pasos en dirección contraria a mi posición, se hinco, a lo seguido se puse en posición de perrito y mostro todo su gloria como mujer, levanto lentamente su falda del vestido, puedo ver todo su sexo y trasero, era una visión preciosa del lugar, la vista es hermosa, pero ahora ella comenzó a menear su trasero de un lugar a otro, por dios quería excitarme y lo logro, ni mi esposa en mis mejores días había logrado esto, ella comenzó a menear su trasero de un lugar a otro, tomo un látigo que tenía a lado y comenzó a nalguearse ella misma con ese látigo, podía ver como se marcaba un poco el latigazo en sus nalgas, se paró después de unos segundos de hacerme esa provocación y se colocó encima de mí de nuevo, comenzó a quitarse un poco el escote, solo abriéndolo un poco, eran unas curvas perfectas con un poco de sudor que solo hacían brillar sus curvas esféricamente perfectas. Se abrió por completo el escote, dejando sus pechos solo cubiertos por el brasier, pero era un brasier chico, podía ver casi todos sus pechos, apenas cabían en ese trapo, se veían forzados sus pechos, parecía que el sujetador estaba por reventar, coloco esos melones en mi cara y comenzó a agitarlos. En su rostro había una sonrisa, le encantaba lo que me hacía, después de todo era algo que ella quería, tener a este hombre a su merced sexual.

Después de eso se  levantó y se quedó frente a mí, ahora se voltio de espalda y bajo su pantaleta completa, a lo seguido se comenzó a nalguear mientras volteaba de lado de su hombre y me veía, lo estaba disfrutando mucho, me volvía loco, quería destrozar ese culo con mi verga. Después así de espaldas prosiguió a quitarse la ropa que llevaba puesta, se quitó el vestido, dejando a mi mirada todo su trasero y espalda desnuda, es sumamente hermosa, ver sus caderas y cintura desnuda, todo su cuerpo refleja un brillo excitante, por el pequeño sudor que lleva en su cuerpo. Es suculento todo lo que veo, es una mujer y una dama realmente hermosa, Es un gran paisaje lo que puedo ver. La mujer de alado se acercó y me destapo un oído, y dijo. –Es tiempo que nos pasemos a que tú disfrutes y tú sentir, que sientas todo lo que te hacen. –Después de eso, la mujer tapo mi oído de nuevo. Ahora me coloco un antifaz en mi cara, ahora no podía ver absolutamente nada, volvió a acercarse alguien a mi oído y por la voz pude ver que se trataba de la misma mujer. –Si te soltamos las manos, no harás nada, no te quitaras por ningún motivo el antifaz, si tu mano se acerca quizás a tu cara, no! Es más, si se acerca a tu cuello, tu hija será abusada y vendida en el burdel y tu serás asesinado, aremos que ella nos pague todo lo que tú nos debes hasta que ella quede fea, Vieja y arrugada, será entonces cuando descanse. –Estos tipejos hablaban enserio, ya que para ellos era importante seguir el juego, ya que era un pago por evento, donde vendían un producto, no podía quitarme eso. La verdad que las cosas no eran difíciles, solo tenía no tener que follarme a la niña y ni quitarme el antifaz.

Sentí como María se acercó a mí y comenzó a mover sus nalgas por encima de mi pene, podía sentir todo su trasero en mi pene, se movía y meneaba como usualmente lo hacía, tambaleaba de un lugar a otro, todo eso lo resentía en la punta de mi verga. Raspaba su culo con la punta de mi verga, una y otra vez lo meneaba, podía sentir como sus manos se apoyaban en la silla, para poder hacer esas cosas, siguió una y otra vez. En unos instantes pude sentir como me desataron una mano totalmente, a lo que agrego mi desatador. –Si haces algo, recuerda que tenemos a tu hija, solo ayúdanos con el espectáculo, de cómo un hombre resiste hacerle el amor a una niña. –Pude sentir que esas palabras venían de la misma mujer que me hablo con anterioridad. Las órdenes eran claras, no hacer ningún movimiento fuera de lo que debía ser, lo cual obedecería, no quería a mi hija herida.

Continuaron jugando con mi verga, pero ahora pude sentir como alguien tomo mi mano, e imagino fue la mujer y me la puse en la cadera de la niña de 17 años, pude sentir esa rica y sexy cintura, menearse de un lado a otro, se meneaba de una manera muy exquisita, era grande como se siente al tocar algo así, eh imagino que también era por perder la vista y el oído. Así que continúe tocando, pero ahora hice algo más, pase mi mano por todo su vientre, y ahora la coloque en toda su espalda, deslice lentamente hacia abajo y llegue a su ano, pude sentirlo, chiquito, ya se había cerrado un poco desde la acción anterior, al poner mi dedo por encima, pude sentir como ella hizo fuerza en dirección a mi dedo para poder incitar la introducción de mi dedo, pero no debía hacer eso, no debía ultrajar a la niña o todo se echaría a perder, así que bajo lentamente por su ano, hasta llegar a su vagina (Todo esto mientras seguía meneando su trasero y raspando su vagina con la punta de mi pene) y pude sentir más claramente, la niña estaba muy mojada, mis dedos quedaron empapados al solo tocar el inicio de la vagina, pero no debía hacer nada, pero estaba súper excitado y comencé a alejarme del placer y deslice mi mano por toda su espalda. pero poco a poco pude sentir como mi mente se nublaba, comencé a pensar lujuriosamente sin pensar las cosas y me dirigí a la parte trasera de su sujetador, lo desabroche, pude sentir como el sujetador callo rápidamente hacia enfrente, y se liberaron sus pechos, al hacer eso, ella se voltio rápidamente y pude sentir sus movimientos de que parecían quitarse el sujetador de su cuerpo, ahora quedando desnuda solo con sus ligueros en sus piernas y sus zapatillas, se colocó frente a mi como lo hizo con anterioridad, pero esta vez sin caer su sexo en mi pene, un poco levantadita, y puso uno de sus pechos en mi cara, obvio me sumergí un poco en la lujuria y comencé a mover mi cabeza entre sus pechos, mientras que con la mano acariciaba el otro pecho, eran grandes y riquísimas, seguí con mi procedimiento, pero me daba cuenta que perdía el control más rápido a como avanzaba esto, ella siguió una y otra vez, meneando ahora su vagina con la punta de mi pene. Sentir como raspaba esa vagina una y otra vez, me moría de ganas de levantar mi pelvis y perforarla, o con mis brazos bajar su cuerpo para introducir mi pene en toda su vagina pero no debía, comencé a sentir como salían unas pequeñas gotas de semen de mi cabeza del pene, era por la excitación, de la necesidad de perforar.

Pasó lo inevitable, liberaron mi otra mano pero al mismo tiempo me quitaron mi trapo de la boca, con la advertencia que no hiciera ruidos. Puse rápidamente la mano en su cintura, y la otra en su pecho, comencé a sentir sus pechos, acariciar sus pechos. pero fue cuestión de tiempo que ella estando frente a mí se arrastró un poco hacia enfrente y pude sentir la entrada de su ano, ella hizo un poco de fuerza en esa posición y pude sentir como la mitad de mi cabeza entraba en ese orificio, lo sacaba y metía, pero lo hacia una vez y paraba, a los segundos volvía a hacer lo mismo, todo era un plan, me hacía sentir algo riquísimo y luego me lo quitaba, lo hacía con la intención de provocarme, volvió a meter poco la cabeza y sacaba para no tocar nada en segundos y volvió a hacer lo mismo, era un torturo y un placer de los mil dioses, la niña se acercó a mi oído y quito un poco la orejera que me privaba del sonido del lugar, dijo a mi oído “Quiero que me cojas Raul mmmmhhhhh” –Podía escuchar sus gemidos pequeños de placer al mismo tiempo que seguía moviéndose y diciendo de nuevo “Cajeme Raúl, mmhhhh aahhhmm quiero que me metas la verga, lo necesito Raúl…. Te deseo” esas palabras fueron un éxtasis sin control para mi cuerpo para finalizar con “Deseo tenerte dentro ahhhmm ahhmmm dame, cógeme” fue en ese momento que ella provoco algo en mí que me haría perder el control, pero ella se levantó de encima de mí y volvió a decirme algo al oído “Pusieron unas mantas en el suelo, para poder usarlas como salvajes, ven conmigo” me sujeto de la mano, ella sabía que ya me tenía, la seguí y con sus manos me inclino en la cama, me recosté, sentía que mi verga reventaría de sangre, estaba dura como un bate metálico de béisbol. Al sentarme, pude otra vez sentir a María como se sentaba encima de mí, la mujer se me acerco de nuevo al oído y me levanto una de las orejeras  a lo cual agrego. –Ya sabes que pasara si hablas, no queremos ningún tipo de ruido, ni que intentes algo, solo disfrútala. –No iba a pensarlo dos veces, la disfrutaría destrozándola, no pasó mucho que en cuanto se quitó la tipa de mi oído, tome a María de la cintura y la senté en mi verga, estaba muy estrecho, la hija de puta tenía la panocha muy estrecha.

Podía sentir como sus paredes vaginales me apretaron, pero batalle un poco al introducirlo, claro que fue tan fuerte que el batallar es exagerar, quería destrozarla a María, así que fuera rápido la introducción en esa vagina estrecha, fue algo raro, ya que por el acto sexual anterior no debió ser así, pero no quería pensar, solo quería cogérmela, le di con fuerza, duro, con toda mi alma, la envestía una y otra vez, levantando mi pelvis del suelo, ya que estaba sentada encima de mí, pero ahora la avente con fuerza y coloque de perrito, bruscamente fue todo esto ya que mi cuerpo ya no reaccionaba, solo quería cogérmela y destrozarla, al tener los ojos vendados, era como dijeron, el placer estaba por encima de lo que pensé que tendría, ni en mi juventud, nunca había tenido un placer tan rico al igual que un deseo tan grande como este.

Al darle por su vagina, me volví un lujurioso, y la tome del cabello y la jale con fuerza, así levantando su cuerpo pero sin mover de posición su trasero, al llegar arriba con una mano le agarre y sostuve, pero de un pecho, ahora podía cogérmela mientras le cogía un pecho, se lo mallugaba con toda mi fuerza, eran riquísimos, fue cuestión de tiempo a todo este acto sexual que la mujer me quito las orejeras, al hacerlo escuche de parte de ella “Disfrútalo”. Y fue así, escuche rápidamente los gemidos de maría, eran fuertes y grandes “AAAhhhhhhhhh AAAAAHHHHHHHH siii AHHHHHMMMMMmmmm” todo eso era riquísimo, era música para mis oídos, la voltee de nuevo y senté encima de mí, para tener sus gemidos mas cerca, comencé a mamar sus pechos de nuevo, eran tan ricos, una mano la tenía en la cintura y la otra en su trasero, comencé a deslizar una de las manos por la nalga, hasta llegar a su ano, mientras la tenía brincando en mi verga, introduje un dedo en su orificio, sentí como ella dio un pequeño salto, pero aun así no se detuvo, fuera como si le doliera mi dedo, lo cual no tiene sentido, quizás fue porque aun esta adolorida de la acción anterior, pero que va, eso a mí no me interesa, metí dos dedos fuertemente y dio un salto más fuerte, pero no dejo de moverse ni, entonces introduje 3 con mucha dificultad, pero ella callo su cabeza en mi hombre y me abrazo, dejo de moverse, le dolía pero a mí no me importaba, quería destrozarla, comencé a besar su cuello y mover mis dedos y mi pelvis, no le di tregua a la niña, ella comenzó a mover su traserito, lo meneaba como acostumbraba, una y otra vez lo hacía, podía sentir como le encantaba moverse, sentir mi verga en su vientre moviendo su vagina, meneando ese culo, movía mis dedos dentro de ella, parecía ya agradarle mejor, entonces quise seguir más, así sentado, me hinque, y la puse de perrito de nuevo, mientras me la cogía salvajemente por su panocha y con otra mano la sujetaba de la cintura, comencé a acariciar con la otra mano su hoyo anal, me encantaba hacerla sentir mía por todos lados al mismo tiempo, la mano que tenía en su cintura paso a hacer lo mismo, jalarla del cabello para levantarla, al levantarse, la tome de un pecho, le di fuertemente, sin dejar de darle, mientras con una mano tomaba su pecho, con la otra perforaba su ano, pero era algo exhausto tener la mano ahí mientras le daba, quite mi mano y me deje inclinar hacia atrás, me senté sobre mis rodillas (Como se sientan los japoneses para comer, encima de sus piernas, con las rodillas dobladas) y la senté encima de mí, con su trasero en mi verga y sus pechos en dirección hacia enfrente, teniendo su espalda en mi pecho, le comencé a dar así, su cabello olía muy bien, era una mujer bella y fértil, su juventud la hacía un manjar. Yo por nada del mundo parare, en verdad no parare. Pero la mujer se acercó a mí y me quito la venda de los ojos, pude ver a mi compañera por fin, y no era más ni menos que mi Hija Raquel.

Raúl: Raquel, hija mía eres tú. –Pregunte rápidamente a mi hija.

Ella rápidamente se quitó el antifaz y voltio a verme. –Papa, eres tú ¿pero que hemos estado haciendo? –Pregunto ella muy confundida. En ese instante la mujer se metió a nuestra conversación. –oye niña, te dijeron claramente que no hablaras nada… bueno a estos instantes ya no importa, hagan lo que quieran. –Para mí era sorprendente, mi hija quiso levantarse de la posición donde la tenía, pero mis brazos no quisieron soltarla. –Papa suéltame, no hay por qué hacer estas cosas. –La escuchaba, pero a decir verdad mi hija tenía un buen cuerpo y me la quería coger, quería terminar mi acto sexual, no podía dejarla ir. –Papa suéltame!! –Puso sus manos en mi vientre para empujarse, pero yo no la dejaría ir, y comencé a moverme, sentía igual de rico que antes de saber, en realidad en esos instantes me importaba poco, comencé a moverme poco a poco, tratando de convencerla, igual y estaba bajo la droga aun, pero no era estúpida. –Papa ¿Qué haces, suéltame? –Subía su voz al mismo tiempo que me aventaba con sus manos. –No te voy a soltar mija. –Le dije con la voz muy alta y molesto. –Papa no por favor. –Seguía aventándome, pero yo seguía moviéndome, así que le dije. –Te voy a coger hija!!!. Al mismo instante la avente colocándola como debe ser de perrito y le di una envestida muy fuerte, la verdad no estaba pensando bien, quería cogérmela, mi hija está muy rica, comencé a darle fuertemente una y otra vez, la envestía de una manera abusiva pero pues ya era una mujer, tenía 17 años, podía con mi verga mi hija. –Paaa paaaa! Porfavor aahhh mmm papa! Ahhhha AAAaahhhmmmmm. –Ella tambine estaba con el placer encima, tenía la droga además encima de ella, le seguí dando y comenzó de dejarme de empujar, a lo cual continúe dándole aun fuertemente, la tome de la cintura, le di con todo mi ser. –Papaaaaa Noooooo!!!! Aahahhhhaaaaa aaaahhhhhh AAHHHHHHaa mmmm que rico mmmmmaaaahhh. –Raquel no estaba pensando bien, estaba en la droga, quería reaccionar pero no podía, entonces la mujer se dispuso a hablar. –valla espectáculo que dieron papa e Hija. –Pare para escuchar un poco. –Tenemos muchos espectadores en línea, es una fortuna la que nos hacen ganar, saben que es lo bueno de esto, mira hacia la habitación. –Voltee a la habitación como dijo la mujer y vi a Maria ahí dentro, estaba con otros hombres que no había visto, le estaban dando todos al mismo tiempo, eran 3 hombres en total. –Ella y ustedes dos me hacen ganar mucho dinero, ella fue quien te calentó desde un principio, era la idea, si tu perdías el control, como dijimos, no le pasaría nada a tu hija si no lo perdías, pero lo perdiste, y la idea desde un principio era que tú mismo te la cogerías, tú mismo nos harías ganar dinero, no tus hijas. No pudiste aguantar y tú mismo te cogiste a tu hija, tú le quitaste la virginidad a tu hija. –Fue en ese instante que entendí por qué le dolió la metida de dedos en su ano y por qué su vagina era tan estrecha, porque era mi hija desde un principio, pero me equivoque en algo, no era desde un principio ya que la tipa agrego. –En un principio era María, pero cuando te jalo a las cobijas tendidas, le ordenamos a tu hija que si quería ser cogida, tendría que coger con alguien como nunca, sin destaparse los ojos, para que no te viera a ti, ni tu a ella, pero la decisión de cogértela fuera tuya, tu fallaste, al no aguantarte Raúl, no fuimos nosotros, fuiste tú quien ultrajo a tu hija, y cuando eso paso nos llevamos a María al cuarto ese, fue fácil mira, los que ya habían pagado por el evento, se les corto en ese instante y paso la señal al cuarto donde estaba María, pero los que querían ver cómo te cogías a tu hija, les pedimos pagos extras. –Los muy infelices ganaban dinero con nosotros, pero mi hija no se detuvo y comenzó a menearse en mi verga en la posición que tenía. –Papa, Cógeme, sé que está mal, pero Cógeme, tengo ganas de ti  y tu verga. –Comenzó a moverse más rápido en mi verga mi hija, una y otra vez, se colocó en posición de rana y comenzó a darse sentones hincada en mi verga, le da con mucha fuerza, una y otra vez, no fue mucho cuando deje de pensar y me uní al juego, me levante y la empuje poniéndola de perrito, al hacerlo pude ver que mi hija Raquel tenía un poco de sangre en su sexo, su vagina estaba un poco lastimada por mi trato, pero qué más da, ya estábamos en esto y no me importaba a estos alturas.

Metí mi verga de nuevo en ella, ella solo pude escuchar fuertemente. –Ahhhh, papi… mmmm. –Seguí metiendo mi verga en su panocha una y otra vez, me gustaba, no podía creer, me gustaba metérsela a mi hija la más pequeña, le daba una y otra vez, coloque mis manos en su cintura y seguí dándole, me detuve un poco y saque mi verga para admirar el paisaje, pude ver su ano y su vagina, una vista hermosa, mi niña hermosa comenzó a mover su culito y menearlo. –Papi métemela, por favor no pares, espero mucho por esto. –al escuchar esto solo me prendí mas, me acerque a ella pero yo ya no quería su vagina, quería su ano, puse un dedo encima de su ano e inmediatamente ella paro la cabeza y voltio a verme, al ver eso no me importo y coloque mi dedo en la boca, llene de saliva y metí mis dedos, mi hija increíblemente me dio paso, levanto un poco el culo y acercó su ano más a mi dedo, la niña me había dado paso a metérsela, la verdad no lo haría como a su mama, tratando el ano para buscar que no se arrepienta del acto sexual, con ella no pasaría eso, nunca se retractaría no importa que tanto le duela, así que no me detuve y ni hice muchos masajes, solo escupí su culo y ella levanto más su culo, era obvio que quería mi verga, la coloque encima y lo metí lentamente, solo pude escuchar un poco de su parte de. –Mmmmm Papi me duele. –Pero no voy a parar, seguí metiendo la verga un poco más y mi hija no pudo y metió su mano y la puse hacia atrás, tratando de empujarme. –Papi dame un poco de tiempo, me duele mucho!! –No dejare que me quite, la atravesare con toda mi fuerza, le metí la verga ahora con más fuerza. –Aahhhh papa!! –Resignada, tiro su cabeza al suelo, y apretó la cobija con fuerza en sus manos, empuñando todo con fuerza. Comencé a moverme lentamente una y otra vez, pero ella lo resentía y trato de moverse un poco hacia enfrente para poder sacársela un poco, no la deje, la tome de la cintura y la empuje con más fuerza hacia atrás, para que se ensartara en mi verga aún más

Raquel: papa, me duele nooo, por favor…

Raúl: que pasa puta, ahora entiende que te meteré la verga hasta quedar totalmente a gusto. –Le dije a mi hija con una voz de enojado, por estarme negando lo que en ese momento pienso por le excitación es mío.

Ella al escucharme así, se resignó y comenzó a mover su culito hacia afuera, entonces pensé que quería escaparse de nuevo, justo antes de jalarla, ella misma se balanceo hacia atrás, mi hija estaba cogiéndose por el culo. –Ahhhhmmm me duele pero que rico, me gusta que me cojan. –Rápidamente comencé a seguirle una y otra vez, la tome de la cintura y le di fuertemente una y otra vez, era un manjar mi propia hija, a ella le gustaba mucho, comenzó a decir aún más “dame, mmmhhhhh me gusta” eso me exitaba, pero llegue a mis limites, termine, termine en el culo de mi hija. –Ahhhhhhh que rico hija. –Y termine, entonces mi hija se quedó en perrito, y yo me deje caer hacia atrás, podía ver su vagina derrochando miel y su culo todo lleno de mi semen, se fruncía de adentro hacia afuera. Yo la seguí usando al tiempo que recupere mi condición a mi hija, me la cogí un sinfín de veces, pero al final entro Rodríguez al cuarto

Rodríguez: dado señor Raúl al dinero que me han hecho ganar, fue mucho sabe, le planteare las cosas, sabe que a mí no me gusta la violencia, los dejare aquí, que siga acabándose a su hija, pero sin cámaras, ustedes dos solos, pero para ello le diré mi nuevo trato. –Puse toda mi atención a lo que diría, bueno al menos yo, mi hija siguió moviéndose encima de mí, estaba sentado en la cobija y mi hija encima de mí. Le respondí al señor. –Tiene mi atención totalmente. –Le dije al señor Rodríguez

Rodríguez: veras, tienes un contrato con alguien, mira tú parte, la que a ti te corresponde, me darás la mitad de esas ganancias, así tu familia no se quedara en la calle, será solamente la mitad, seremos 3 socios en el negocio, pero yo no invertiré, solo nos repartiremos los que te toca, así yo gano y tú, en cuanto a lo demás, me lo cobrare con esa niña llamada María, y la otra con lo que ganamos con esta transmisión, ya no sabrás mas de mí, más que para los negocios, mandare a un contador, uno honrado supongo, bueno, espero. –No podía creer lo que escuchaba, era libre y mi hija igual, claro que esto quedaría en nuestros recuerdos, pero solo sería un recuerdo de nosotros, nadie más sabría. Al poco tiempo acepte la propuesta, seguí follándome a mi hija hasta cansarme, paro la droga de mi hija y quedamos en que no hablaríamos nunca más de esto. Y así fue, nunca más pasó esto de nuevo, tuvimos que hacer sacrificios, con el tiempo soltó a María, ella decidió seguir trabajando por voluntad propia en el negocio. Aprendí mi lección, nunca más hacer ese tipo de fraudes y nuestro negocio creció demasiado que pudimos tener una vida buena sin problemas.

Todo lo que sucedió fue una experiencia mala, pero al a vez tuvo sus ventajas, lo de mi hija y yo lo hemos olvidado, el tema no se toca y mi hija parece estar bien

Esto fue lo que paso por hacer fraude, aprendí mi lección, todo esto nunca más pasara, mi historia de mi deuda con Rodríguez.

Fin de este capítulo de la saga “la deuda a Rodríguez”