miprimita.com

Mi secretaria. cara de niña y cuerpo de mujer 5

en Dominación

Había decidido que esa noche no pasara sin castigar la insolencia de Azucena. Por ello, dejé a María descansando y me acerqué al cuarto donde en teoría, su madre debía de estar durmiendo sin esperar mi llegada.

¿Dormida? ¡Mis huevos!

En cuanto crucé la puerta, supe que esa zorra sin escrúpulos estaba más que lista para recibir mi visita, al encontrármela en mitad de la habitación, atada a unas cadenas que colgaban del techo y con una venda que le tapaba sus ojos.

A pesar que debía saber que había llegado, la cuarentona no hizo ningún movimiento que la delatara sino que se mantuvo inmóvil, mientras con todo detenimiento me ponía a juzgar el tipo de hembra que la casualidad había querido que cayera entre mis manos.

«Hay que reconocer que sabe cómo poner bruto a un hombre», me dije al valorar la escena y no era para menos porque además de la postura en que la encontré, esa mujer se había puesto un camisón de encaje transparente que realzaba el erotismo de su indefensión.

Durante un par de minutos, me abstuve de hacer ruido mientras recreaba mi mirada en el estupendo culo con el que la naturaleza había dotado a esa puta.

«Tiene unas nalgas dignas de un mordisco», sentencié ya excitado y sin que nada ni nadie me lo impidiera, me agaché ante ese monumento y acercando mi boca, con mis dientes le hice saber que estaba en presencia de su amo.

Azucena ni siquiera se quejó al sentir el duro bocado con el que la regalé sino que luciendo una sonrisa de oreja a oreja, alzó su trasero dando muestra que estaba encantada con ese tratamiento.

La entereza de esa mujer me permitió mordisquear a placer los recios cachetes que formaban su trasero hasta que con mis ganas de venganza ya apaciguadas, renació en mí el dominante que llevaba oculto tantos años y es que las señales de mis dentelladas sobre su blanca piel aguijonearon mi lado perverso, haciéndome disfrutar como nunca de la sumisión de una mujer.

Más tranquilo, me puse a inspeccionar el artilugio al que voluntariamente se había atado. Fue entonces cuando me percaté que esas cadenas estaban unidas a una polea y que si hacía girar una manivela, la morena se vería suspendida en el aire.

El deseo se acumuló en su rostro en cuanto oyó que me acercaba a la pared y aun antes de notar que sus brazos se alzaban por efecto de ese aparato, sus pezones se contrajeron y se me mostraron listos para ser usados.

-Te gusta el juego duro, ¿verdad?- pregunté sin dejar de izar a mi sumisa.

Azucena, con total entrega y mientras sus pies dejaban de estar en contacto con el suelo, contestó:

-Mi amo informó a su puta que iba a castigarla y quise que supiera qué clase de juguetes tenía a su disposición en esta casa.

Su cara reflejaba una lujuria sin par y por ello, esperé a tenerla totalmente suspendida en el aire para examinar la  mercancía de la que era propietario. Haciéndola girar como una peonza, disfruté de su sorpresa y sin esperar a que dejara de balancearse, desgarré su picardías dejando a la vista las preciosas tetas que iba a torturar.

-Pareces una vaca lista para ser sacrificada- comenté al tiempo que pellizcaba con ambas manos sus rosados pezones.

La dureza de mis caricias la hicieron boquear pero en vez de quejarse y haciendo gala de un exquisito entrenamiento, replicó:

-Mi destino es servirle, el de usted usarme.

De esa sencilla pero inapelable forma, la morena entregó su vida en mis manos con una rotundidad que por mucho que le pusiera mil collares podía igualar. Alucinado pero satisfecho, la volví a hacer girar mientras revisaba a conciencia los diferentes artilugios que permanecía perfectamente ordenados sobre la cama para que hiciera uso de ellos.

Tras hacer un recuento, comprendí que había muchos cuya función desconocía y no queriendo preguntar para no parecer demasiado novato, elegí  entre otras una fusta que me pareció lo suficientemente elástica para estrenar con ella el culo de esa mujer.

Parándola nuevamente y sin dejarla que se habituara, descargué sobre su culo un par de duros zurriagazos que esta vez la hicieron gritar.

-¿Te duele?- pregunté casi arrepentido.

-Sí pero me gusta- respondió en voz baja.

Sus palabras avivaron el morbo que sentía y repitiendo ese doloroso castigo conseguí que su garganta enronqueciera de tantos gemidos que dio. Al revisar la adolorida piel de su trasero comprendí que me había pasado y recordando lo que me había hecho hacer con su hija, comencé a untar con crema las rojas señales que mi perversión había dejado sobre sus cachetes.

Ni siquiera había terminado de esparcirla cuando pegando un berrido, esa cuarentona se corrió ante mi incrédula mirada y tras asimilar esa información comprendí que había estado reteniendo su calentura para no hacerme saber que en su extraño modo de amar, cada latigazo era una muestra de cariño y que al dejar de atormentarla, no había podido aguantar dejando brotar su orgasmo.

«¡Es alucinante!», pensé sin conocer en profundidad las motivaciones de esa cuarentona pero entonces Azucena me sorprendió nuevamente al lanzarse sobre mi pene con una voracidad a la que no estaba habituado, diciendo:

-Necesito el pene de mi amo.

Tras lo cual, engulló mi extensión todavía morcillona. Ni que decir tiene que en pocos segundos y gracias a la experiencia de esa morena, una erección sin par creció entre sus labios y ella al notarlo, se  la incrustó hasta el fondo de su garganta mientras con sus manos masajeaba mis testículos.

Aunque la mamada era escandalosa, decidí darla por terminada y tumbándome en la cama, sonriendo, señalé:

-Quiero ver tu cara de puta mientras te empalas.

Azucena comprendió la orden y ronroneando se acercó a mí con la felicidad reflejada en su rostro. Todo en ella era dicha y recreándose en la satisfacción de su dueño, usó mi ariete para apuñalar su sexo mientras decía:

-¿Desea que su guarra se pellizque los pitones?- tras lo cual y sin esperar mi permiso, comenzó a mover sus caderas con mi pito en su interior al tiempo que cruelmente retorcía sus pezones.

Tal y como le había pedido, su rostro fue un caro reflejo de la excitación que sentía al usar mi verga como montura e imprimiendo una lenta cadencia a sus movimientos, martilleó sin pausa su vagina.

-¡Dios! ¡Cuánto necesitaba un amo!- gimió descompuesta al notar que su coño se anegaba.

Complacido con su obediencia, aguijoneé su amor propio al decirle muerto de risa:

-O aceleras o tendré que llamar a tu hija para que te enseñe como hacerlo.

Mi evidente escarnio cumplió su objetivo ya que incrementando la velocidad con la que su vulva era apuñalada por mi ariete, convirtió su suave trote en un galope desenfrenado.

-¿Así le gusta a mi amo?- chilló con la respiración entrecortada producto del esfuerzo y del placer que sentía.

No queriendo dar mi brazo a torcer, con rítmicos azotes sobre su pandero, azucé a esa morena a saltar una y otra vez sobre mi pene sin importarle que chocara dolorosamente contra la pared de su vagina.

-¡Más rápido!- insistí al adivinar que en breve Azucena no iba a poder soportar tanto castigo y que se iba a correr.

Tal y como había previsto, su cuerpo colapsó y derramando su placer sobre mis muslos, la madre de María aulló presa de la lujuria. Momento que aproveché para coger uno de sus pechos entre mis dientes y mientras su flujo empapaba las sábanas, con severidad lo mordisqueé.

Ese nuevo correctivo elevó su excitación a límites pocas veces experimentados y demostrando el gozo que la tenía subyugada, me rogó que me derramara dentro de ella. Su petición fue el incentivo que mi cuerpo necesitaba y abriendo la espita de mi propio placer sembré su cuerpo todavía fértil con mi simiente.

Azucena al sentir las detonaciones de mi verga en su interior, buscó aprovechar cada gota convirtiendo sus caderas en un torbellino de lujuria que sin pausa y mientras unía un climax con el siguiente, ordeñó mis huevos hasta dejarlos completamente vacíos.

Solo cuando se aseguró de haberlo conseguido, se dejó caer sobre mí, llorando de alegría. Si para entonces me creía vacunado a nuevas sorpresas, esa mujer me sacó de mi error al decirme mientras seguía convulsionando sobre mí:

-¿Puedo llamar a Maria para que sea testigo de mi entrega?

-No te entiendo- respondí al no saber a qué se refería.

Entonces, soltando una carcajada, abrió un cajón y sacó un collar igual al que esa misma noche había cerrado en torno al cuello de su hija y mostrándomelo, me soltó:

-Tengo reservado este para mí.

Descojonado, la besé y pegando un cariñoso azote en su trasero, acepté su sugerencia diciendo:

-Llámala… a ver si después, ¡me dejáis dormir en paz!

Irradiando alegría, salió en busca de Maria mientras en la comodidad de esa cama, me estiraba a mis anchas sabiendo que entre esas paredes ¡había encontrado el paraíso! 

 --------------------------------

---------------------------------

Después de años escribiendo en INTERNET y haber recibido casi 11.300.000 de visitas, HE PUBLICADO VARIAS COLECCIONES Y UNA NOVELA EN AMAZON si queréis descargaros alguna de ellas podéis hacerlo en el siguiente link:

Libros para descargar de GOLFO EN AMAZON

El último libro que he publicado está teniendo una gran aceptación entre los lectores. Con  más de 300 páginas de alto contenido erótico lo puedes encontrar en:

Herederas de Antiguos Imperios 

Y como siempre, os aconsejo revisar mi blog:

http://pornografoaficionado.com/

En él, encontrareis este y otros relatos ilustrados con fotos de las modelos que han inspirado mis relatos. En este caso, se trata de UNA AUTENTICA BELLEZA QUE PERMANECE VENDADA PARA VUESTRO DISFRUTE (solo por ella merece la pena entrar) llamada:

ZDENKA PODKAPOVA

 

Mas de golfo

Todo comenzó por una partida de póker

No son dos sino tres las putas con las que me casé

Mi mejor alumna se entregó al placer

Me llamo Rebeca. Soy una puta, casada e infiel.

Mi secretaria cara de niña y cuerpo de mujer 4

Mi secretaria tiene cara de niña y cuerpo de mujer

Mi secretaria tiene cara de niña, cuerpo de mujer2

Mi secretaria tiene cara de niña y cuerpo de mujer

¿Me darías un azote? Descubriendo a mi sumisa

Una nena indefensa fue mi perdición 4

Una nena indefensa fue mi perdición 3.

La puta de mi cuñada

Una nena indefensa fue mi perdición 2.

Una nena indefensa fue mi perdición

Yo, cazador

Mi prima preñada y su dinero, mis mejores afrodisi

Herederas de antiguos imperios

Mi prima preñada y su dinero, mis afrodisiacos 6

Mi prima preñada y su dinero, mis afrodisiacos 5

Mi prima preñada y su dinero, mis afrodisiacos 4

Mi prima preñada y su dinero, mis afrodisiacos 3

Mi prima preñada y su dinero, mis afrodisíacos 2

Descubrí a mi tía viendo una película porno 7 FIN

Mi prima preñada y su dinero, mis afrodisíacos

De loca a loca, me las tiro porque me tocan

Mi tímida e inocente amiga me entregó su culo

Me compré una bella esposa asiática por internet.

Mis enormes tetas fueron mi perdición.

La dulce e ingenua doctora que se volvió mi puta 2

Robando la leche de su madre al hijo de mi criada.

La dulce e ingenua doctora que se volvió mi puta

Descubrí a mi tía viendo una película porno 6

Descubrí a mi tía viendo una película porno 5

Mi prima mi amante, mi puta y ante todo mi mujer 2

Mi prima, mi amante, mi puta y ante todo mi mujer

Duelo de divas en la gran manzana.

Mi hermano me heredó a una diosa virgen

La huésped del hotel . Una ninfómana insaciable.

La huésped del hotel.Una tarde sin parar de follar

Mi cita a ciegas resultó muy puta 2.

Mi cita a ciegas resultó muy puta.

Descubrí a mi tía viendo una película porno 4.

Mi hermano me heredó a sus mujeres. (LIS)

Borracha y semidesnuda esperó mi jefa en el portal

Descubrí a mi tía viendo una película porno 3.

Las tortuosas vacaciones dela inocente jovencita 2

De la cama de mi esposa a la de mi cuñada (2 de 2)

De la cama de mi esposa a la de mi cuñada (1 de 2)

La suegra de mi hijo me entregó su culo.

Me comí el culo de mi abogada, una madura infiel.

Las tortuosas vacaciones de una inocente jovencita

La ingenua alumna que resultó muy puta

Mi nuera me preguntó si podía hacerme una mamada 2

La ex esposa de un amigo nos folló en un congreso.

Mi caliente vecina y yo nos follamos a mi mujer

Pillé a mi vecina recién divorciada muy caliente

La ex esposa de un amigo me abordó en un congreso.

Una diosa MUDA me salvó la vida en la montaña.

Descubrí a mi tía viendo una película porno 2

Mi nuera me preguntó si podía hacerme una mamada.

Descubrí a mi tía viendo una película porno

Dos gemelos me follaron en mitad de un parking

Una amiga me ayuda con el cabrón de mi vecino.

Enculando a la malcriada y a su amiga por zorras

Descubro que mi madre es tan puta como yo.

Mi esposa se compró dos mujercitas por error 2

Mi esposa se compró dos mujercitas por error.

Desvirgando a la super soldado

Me pone super cachonda el cabrón de mi vecino.

De super soldado asexuada a puta sin remedio.

Me follé a la enfermera de mi madre y a su gemela

Educando a una malcriada, la hija de un amigo

Preñé a mi madrastra durante una noche de verano.

Pillé a mi suegra con otro y por eso me la follé

Pillé a la puta de mi suegra con otro.

Mi prima venía a preñarse y la cedí a otra mujer

La enfermera de mi madre y su gemela.

La enfermera de mi madre resultó muy puta

El ídolo 5: Vendo a mi sumisa por dinero.

El ídolo 4: la hija del jefe resultó ser una diosa

El ídolo 3: la profesora y mi compañera, mis putas

El ídolo 2: Las nalgas de la profesora fueron mías

El ídolo 1: Mi compañera no es puta, es ninfómana.

Seducido por la niñera de mis hijos, una exmonja2

Seducido por la niñera de mis hijos, una ex-monja

Mi prima venía a preñarse y salió con el culo roto

Mi jefe me entrega a una jovencita como esclava

Aunque me costó: ¡Por fin me follo a mi mujer!

Mi tía y su amiga me mandan a tomar por culo.

Marina, una perroflauta con la que me casé

Mi tía me regala otra fantasía: una PONY GIRL

Mi tía, su transformación en puta y su amiga 2

Mi tía, su transformación en puta y su amiga

Las enormes tetas y el culo de mi tía, la policia

Las enormes tetas y el culo de mi Tía, la policía

Diario secreto de una suicide girl

Rubia teñida, gorda y obsesionada por el sexo

Sexo inesperado con una negrita en la playa.

Conseguí que mi marido me follara como a una puta.

Sustituí a un amigo con su madre y su esposa

De compañera de trabajo a novia sumisa en 1 noche

Pillé a la puta de mi esposa con otro.

Mi prima me folló gracias a Alonso, un prostituto.

Mi jefa es una hija de puta con su hermana también

La esposa del narco y su hermana. ¡Menudo par!

Mi jefa es una hija de puta con tetas.

La esposa de un narco y su hermana. LA HERMANDAD

La esposa de un narco y su hermana son mis vecinas

Al conocer a mi hija, recuerdo el amor de su madre

¿Me deja adiestrar a la puta? me rogó Susana

Di por culo a la puta de mi cuñada y a mi mujer 2

¿Aceptarías como sumisa a mi amiga? me rogó Susana

Di por culo a la puta de mi cuñada y a mi mujer

¿Me atarías a tu cama? me rogó Susana

¿Me darías un azote? me rogó Susana

La viuda de mi hijo y su madre son mis putas 2

La viuda de mi hijo y su madre son ahora mis putas

Di por culo a la puta de mi cuñada en una playa 3

Mamá descubre que mi tío y yo tenemos una sumisa.

Mi tío me entrega para mi placer a una sumisa.

Di por culo a la puta de mi cuñada en una playa 2

Para salvar a Johana, me follo a Ivanka Trump. 2

Para salvar a Johana, me follo a Ivanka Trump 1

Mi prima, mi criada y yo somos una extraña familia

Ayudo a la inquilina a follarse a mi puta esposa

Entre mi esposa y yo, nos follamos a la inquilina.

El culo de mi compañera de trabajo fue mi manzana

Consolando a mi vecina, madre joven y recién viuda

¿Te follarías a una embarazada? me soltó mi cuñada

¿Qué te parecen las nuevas tetas de tu secretaria?

¿Me romperías el culito? me dijó un día mi sobrina

¿Harías un trío con un par de putas como nosotras?

¿Te parecería una puta si te pido que me folles?

¿Te follarías a mi madre?: preguntó mi esposa

La cuñada de mi hijo resultó que no era tan puta

Puta, casada y culona era la hija de mi vecina

¡Qué culo tiene esa mujer! La entrego a una amiga

¡Qué culo tiene esa mujer!: acepta su sumisión

Historia de un político corrupto: Doña Leonor

¡Qué culo tiene esa mujer!: La esposa de un amigo

Sustituí a su esposa en la cama de mi tío.

El cambio de mi vida: De auditora a puta

La decente profesora es ahora nuestra puta esclava

Doce noches 4 mi prima y su amiga se emborrachan.

Su alumna pilla follando a la decente profesora

Mi profesora no era decente sino muy puta

Infiel a mi mujer con la hermana de mi amigo

Di por culo a la puta de mi cuñada en una playa

Caí entre las piernas de mi “ingenua” secretaria

La puta de mi mujer metió en mi cama a su amiga

Doce noches con mi prima y su amiga en una isla 3

Doce noches con mi prima y su amiga en una isla 2

Doce noches con mi prima y su amiga en una isla

Preñé a la hermana de mi mujer con su permiso

Prostituto Una clienta me confesó que era lesbiana

Seducido por ella, desvirgué a la amiga de mi hija

Fui infiel a mi marido con su padre, mi suegro

Prostituto 20 Correos obscenos de una puta preñada

Mi cuñada, además de princesa, resultó muy puta 2

Mi cuñada, además de princesa, resultó muy puta

Cómo conseguí convertirme en la esclava de mi jefe

Prostituto 19 Esther es mas puta que yo

Prostituto 18 Follando en el Central Park

Prostituto 17Un perro se folla a mi clienta virgen

Prostituto 16 La modelo obsesionada con la leche

Prostituto 15 Dina quiere ser violada

Prostituto 14 Mi novia me traiciona con un abuelo

Prostituto 13 La mulata se entrega a mí por placer

Prostituto 12 Ayudo a Zoe a vengarse de su gemela

Prostituto 11Una policía y su gemela me chantajean

Prostituto 10 Semental para una pareja de lesbiana

Secuestrado, atado y humillado por mi ex suegra.

Prostituto 9 La mamá contrata y su niña me folla

Prostituto 8 Yuko una japonesa insaciable me folla

La taxista, su amiga y un pintor. Trío inesperado

Prostituto 7: Bob, un marido cornudo y mirón

El diablo hecho mujer. Ilse, una morena cachonda

Prostituto 6: Carol, una flaca de enormes pezones.

Prostituto por error 5: Betty, una mamá lactante

Prostituto por error 4:Ann y su criada negra part2

Prostituto por error 4:Ann y su criada negra part1

Prostituto por error 3: La ejecutiva tetona

Prostituto por error 2:Helen, enculando a la gorda

Prostituto por error: Ángela, la azafata buenorra.

Soy la puta de don Fernando, mi nuevo jefe.

Mi obsesión por el culo de la profesora de mi hija

De discreta vecina a puta desorejada.

¡Un cura me obliga a casarme con dos hermanas! 2.

¡Un cura me obliga a casarme con dos hermanas!

Al ayudar a la novia de mi hijo, la hice mi mujer

Animando 2... mi prima embarazada me busca novia.

Animando a mi prima hermana, una hembra necesitada

La tara de mi familia 1

Cinco días con la perturbada viuda de mi amigo

Asediado por mi ahijada, la hija de mi mejor amigo

Acosado por mi jefa, la reina virgen.

Me follé a la puta de mi jefa y a su secretaria 1

Me follé a la puta de mi jefa y a su secretaria 2

Historia de ...6 (Soy promíscua)

Historia de...5 (mis amantes son unas zorras)

Historia de un verdadero amor 4

Historia de un verdadero amor 3

Historia de un verdadero amor 2

Historia de un verdadero amor 1

La noche que conocí a Sonia

Tengo miedo (Vudú )

¿Violación o deseo?. Luna

¿Quién es Ella?

Dos mujeres y La espada de Damocles

Adiestrando a las hijas de mi jefe (3)

Atraído por... 3, Mi negra me trae otra criada.

Atraído por... 2, Cadenas de sumisión

Atraído por mi nueva criada negra.

Ana, mi secretaria, está embarazada

Adiestrando a las hijas de mi jefe (2)

Adiestrando a las hijas de mi jefe (1)

Madre de alquiler o hembra hambrienta de sexo

La tara de mi familia 8: la dulce Wayan

La tara de mi familia 7: Inseminación forzada

La tara de mi familia 6: Sometiendo a Thule

La tara de mi familia 5: venciendo a Makeda

La tara de mi familia 4: Lucha por el dominio

La tara de mi familia 3: Dos hermanas chinas

La tara de mi familia 2: El sacrificio de mi...

La tara de mi familia 1: Mis primeras experiencias

Saqué a la puta que había en su interior (2)

Saqué a la puta que había en su interior

En mi finca de caza (4: Patricia se confiesa)

En mi finca de caza (3: Trio con iniciación anal)

En mi finca de caza (2: María consuela a Patricia)

En mi finca de caza (1: Con la ex de mi amigo)

Libertad es lo que perdí esa noche

Descubrí a mi secretaria en mi jardín.

Gracias al padre 5, con la hija y sus amigas

Gracias al padre 4, con la hija y sus amigas

Gracias al padre, estuve con la hija y la madre 3

Gracias al padre, estuve con la hija y la madre 2

Gracias al padre, estuve con la hija y la madre

Sentí sus manos recorrer mi cuerpo

Luna azul mejor que el viagra

Amanda (2: Bárbara, la castiga suavemente)

Amanda