Relato minimalista (esquina inferior derecha).
¿Sabéis el del tipo que entra en un bar...?
Putas con cargo a la Seguridad Social. Se discute el proyecto de ley.
¿Sueñas con hadas?...cuidado.
O el extraño caso del autor reconocido. Un asunto kafkiano, si no fuera de risa
Clases de natación con Elena y otras consideraciones sobre el servicio doméstico.
En un futuro no muy lejano. En cierto lugar muy, muy cercano.
Apasionada defensa del pajillero ilustrado.
2ª Edición corregida y aumentada. Nuevas entradas en negrita, espero. ¿Por qué en sadomaso?...ya veréis.
La suegra, la boda, los colegas. Algunas bodas resultan, otras...resultan un circo de tres pistas)
¡Carino, estoy preñada!. O de cómo se defiende un libertino acosado.
Diccionario de uso recomendado para enterarse de qué van algunos relatos, especialmente los míos. ¿Por qué en autosatisfacción?...por el gustazo que me he dado.
Si no fuera tan descuidado, estaría confortablemente acompañado, disfrutando del calor de pecho ajeno, procurando llevarme toda la manta y dejarla con el culito al aire, según me cuentan esas brujas que suelo hacer. ¡Infundios y mucha mala leche!, me pueden creer.
Cuando un golpe de estado se complica con un lío con la vecina del 5º... ¿o era la revés?
El método. Ana y otras cuestiones sobre el ritmo.
O de cómo pasar de ácrata libertario a libertino a secas.
El culebrón del tanga llega a su clímax.
Segunda entrega de las memorias libertinas. Bajo voltaje erótico...eso queda para la tercera entrega.
Primera entrega de las memorias de un libertino confeso.