La gran Orgía. Vuelvo a citarme con un amigo del chat, cuya herramienta me impresionó, y aparecen dos hombres más en escena. Bueno, había que aprovecharlo
El violador. Empezó como un juego erótico por Internet, accedí a vernos, y el juego acabó transformándose en algo muy real. Me di cuenta de que era una exhibicionista, que me gustaba mostrarme y jugar y pronto eso no fue suficiente.
Un poco de humor suave, apenas erótico; algo breve para romper con tanta descripción de sexos enormes y folladas tremendas.
Continúa el silencio cómplice entre mi tía y yo, y la cosa mejora bastante, aprendiendo cosas que nunca imaginé.
Mi tía y yo tenemos un pacto en silencio. Ella me la chupa por las mañanas y yo me la follo por las noches.
Historia de una obsesión por mi cuñada. Ya habían ocurrido tantas cosas que la siguiente, una casi orgía de cuatro, apenas me sorprendió.
Ese culito... Historia de una obsesión por mi cuñada. ¿Tú me lo harías por el culo, Vicente? ¿De verdad había oído esa pregunta o era producto de mi imaginación y deseo?
Historia de una obsesión por mi cuñada, pero ahora es mi mujer la que descubre el placer fuera del matrimonio por culpa de su hermana
Historia de una obsesión por mi cuñada, pero ahora con mi mujer delante, vuelvo a acostarme con su hermana.
Lucia. Historia de una obsesión por mi cuñada y como conseguí follármela por fin.
Conchita. Historia de una obsesión por mi cuñada y su desenlace.
Mi hermano me vigila, me acosa, nunca pensé que quisiera acostarse conmigo hasta que una noche se metió en mi cama y llegó un día en que las dos nos vimos con él
Mi hermano me vigila, me acosa, nunca pensé que quisiera acostarse conmigo hasta que una noche se metió en mi cama pero un dia descubrió los encantos de mi hija y
Mi hermano me vigila, me acosa, nunca pensé que quisiera acostarse conmigo hasta que una noche se metió en mi cama y lo cogió por costumbre.
Mi hermano me vigila, me acosa, nunca pensé que quisiera acostarse conmigo hasta que una noche se metió en mi cama
Alfredo, arrobado, pensó que su mujer estaba guapísima. Que bien hecha estaba, que bien moldeadas tenía la cintura y las caderas la condenada ¡ Y vaya par de tetas ¡
Alfredo le había terminado de bajar las bragas y le quitó el sujetador y ahora estaba como Dios la trajo al mundo, enseñándoles todos sus tesoros ocultos, revelándoles todo su cuerpo
Apenas se hicieron las tinieblas, la mano del joven barbudo, muy dueña de si misma y del coño de Manuela, volvió a las andadas, haciendo esfuerzos denodados por quitarle las bragas
Manuela tuvo que rendirse del todo a la evidencia una buena tarde del mes de mayo en que apretaba el calor sobre Madrid. Bueno tuvo que rendirse a las evidencia y a unas cuantas cosas más.
Voy a relatarles una maravillosa experiencia que he vivido recientemente y que, la verdad, no sé hasta cuándo durará.
Una vez casada, transcurrieron varios años en una tranquila y sosegada paz matrimonial, en la que la vida de matrimonio se hacía cada vez más monótona y sosa, como consecuencia del temperamento tranquilo de mi marido
Al rozar la piel con mi mano comprendí que no se trataba del cuerpo de mi hermano, sino del de mi cuñada.
No quise precipitarme en mis deseos aunque sentía que ella me deseaba sin que hubiera oposición de parte de su marido. Poco después se realizaron todos nuestros deseos eróticos hasta el máximo.
Una mujer de 40 años se ve sorprendida imprevistamente, por una aventura de la que emerge con dos amantes
¿Hasta qué punto una experiencia antigua incide en la vida de una pareja? ¿Qué es lo normal? Una joven pareja se hace constantemente todo este tipo de preguntas, luego de haber vivido juntos una experiencia que les ha resultado gratificante